Disclaimer: Robotech pertenece a su creador, Carl Macek, aunque el dueño de derechos actualmente es Warner Bros.
Este fic participa del fandom "Robotech/Macross" en el Reto: "Sentimientos" del foro La Revolución de los Fandoms.
World: Robotech
Ubicación: Robotech: The Masters
Personaje: Rolf Emerson
Sentimiento: Decepción
Culpable
Había criado a aquel chico desde su más tierna infancia. No era de su sangre y carne, pero en su mente lo trataba como si lo fuera. Bowie había sido como el hijo que nunca tuvo.
Todo hasta que comenzó a ausentarse de la academia. Cada vez con más frecuencia y sin tenerse conocimiento de hacía donde iba. Era su responsabilidad, así que los informes llegaban directamente a él. Este no era el Bowie que él había visto crecer, el siempre responsable Bowie Grant, que no quería que le vieran por nada más de lo que era y no por quienes eran su familia.
En medio de la noche, el transporte oscuro del general Emerson era guiado por las calles de Ciudad Monumental, llegando hasta el centro mismo de los clubs nocturnos. Los ojos del general se abrieron en desconcierto; Bowie jamás habría arriesgado su reputación por asistir a los clubs nocturnos.
El chico había ingresado por la parte trasera, así que tuvieron que buscar la delantera para pasar desapercibidos. Al entrar, Emerson se percató de que era un lugar con música suave y ambiente tranquilo, nada que podría haber imaginado. De pronto, la voz del presentador cortó la música grabada.
—Y como todos esperábamos, esta noche, Bowie Grant nos presentará su última composición —algunas exclamaciones de apoyo para el músico sonaban en el ambiente, mientras las luces apuntaban a un lugar específico del escenario del que no se había dado cuenta.
El pelo oscuro del joven brillaba en la noche, con un traje que probablemente había sido suministrado por el club para sus presentaciones. Emerson se sintió aliviado, Bowie seguía siendo aquel niño dulce que le decía que cuando creciera iba a ser un músico. Pero también sintió la decepción; porque él había querido que fuera militar, que su nombre resonara dentro de las fuerzas Robotech. En una pequeña parte de su corazón admitió que era culpable de la infelicidad de su ahijado, porque eso no era lo que aquel niño pequeño que lloraba por la partida de sus padres quería ser.
