Llego con este nuevo SpaBel, que lo quería escribir hace mucho tiempo, pero debía descifrar la letra (y todos dicen que es la letra más erótica del disco correspondiente). Ojalá les guste :3

Advertencias: Los personajes de este fanfic pertenecen a Hidekaz Himaruya. Está inspirado (el fic) en la canción de Miguel Bosé Morena Mía. Lenguaje subido de tono (?), por lo que se podría considerar mi primer Lime :o ; por lo cual catalogado T .

Es Nyo!talia, por si acaso.


.w.

Morena

Mía

.w.

—Dime 10 cosas que te gustan sobre mí —me dijo mi esposa, Isabel, cuando estábamos haciendo el amo

—Mmm... ¿Sólo 10? —pregunté, sonriendo

Isabel me miraba seria.

Bufé —Me gusta como el sol te resalta el cuerpo y tu personalidad. También me gustan tus piernas, me enloquecen —dije

Sonrió pícaramente —Sigue —pidió

—Tenemos una maravillosa pequeña hija, y ojalá que tengamos otra u otro —Se rió —Me encantan tus continentes, si sabes a lo que me refiero, y me encanta cuando hacemos el amor. Tal vez hemos cometido los 7 pecados haciendo esto, ¿no crees? —me río

—Entonces tú eres mi 8 pecado —dijo, lamiéndose los labios

—Entonces sumemos uno —digo, al empezar a movernos más fuerte

—¡10 es un número de la suerte! —dice, carcajeando

—También me gusta regalarte cosas. Darte cosas porque tu también me das cosas, muy buenas —digo

—Mmm... Me encanta cuando eres entre tierno y pervertido —dice —¿Dije que te adoro? —

—¡Aún no termino, torera! Me encantan tus labios, cuando te los lames y cuando lames los míos, cuando me besas, ¡hasta cuando me muerdes! Oh, mi Isabel, no sabes lo que me provocas —digo, apurando los movimientos

—Creo que lo sé muy bien —ríe

—¿Y a mi me dices pervertido? —preguntó, con falso enojo

Pero eso pasa al llegar al clímax y descansamos unos largos momentos.

—¿En qué ibas? —pregunta

—Me encanta cuando me muerdes y me destrozas mis labios, mi lengua, ¡todo de mi! —y empezamos otra ronda —Me encanta que me hagas café, y sabes que nunca me ha gustado mucho el café... Excepto el que preparas tú — digo —Ah ... Muévete ... Bien, bien —

—Ahh... —

—... T-También me gusta que me hagas feliz, eres una de mis mayores felicidades... Junto con mi hija, obviamente~ —sigo diciendo —Y si nadie cree que esto es felicidad...

—¡Dios! —grita y me interrumpe, al subir de velocidad

—¡Al menos es gloria! —gritó, alcanzando nuestro segundo orgasmo de la noche

Se acurruca en mi pecho y me besa.

—También... Me gusta cuando copias mi sonrisa, pareces una pequeña y tierna gatita —digo, acariciándole los morenos cabellos

Ella, al parecer un poco adormilada, sube y baja sus manos por mi espalda, dándome algunas sensaciones de placer.

—Qué encantador eres —me ronronea

—Lo sé —digo, mientras beso sus maravillosos labios —¿Tercera ronda? —

Se ríe —Pero obvio —

—Me matas con tus ojos, y me matas con tu sonrisa, me matas y rematas con tu gran personalidad y tu belleza. Podría ir al infierno por tener una pareja tan endemoniadamente bella, pero no importaría si me acompañases...

—Más ... Suave... Ah... Bien, bien —dice

—Y me encantan,—nos movemos más rápido — aunque ya lo haya dicho, tus hermosas cualidades de... Ah... Que eres la única que me sabe hacer ca-café... ¡Y que adoro tus labios~! —después de un rato, ambos llegamos al tercer orgasmo

Cierro los ojos y al abrirlos, han pasado unos 40 minutos. Isabel, al parecer, se despertó un poco antes que yo, porque está removiendo las lagañas de sus ojos.

—Mmm... Por eso me casé contigo ... Te amo —me dice, dándome un casto beso

—Yo también te amo —y le respondo el beso

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—¿Vamos con nuestra cuarta y última ronda? —

—Mmm... No creo que sea la última ronda si queremos al cuarto miembro de la familia~ —