Bueno, empiezo con algo suave, una escena alternativa de "Red John" de la sexta temporada. A ver que pasa...

Salió de su casa y fue directamente al CBI. Probablemente ya habrían vaciado el edificio pero tenía que ir, al menos una última vez. Y efectivamente, al llegar simplemente se encontró con las paredes de ladrillo rojo y los grandes ventanales por donde pasaba la luz. "Siempre han estado así de sucios?", se preguntó. Recorrió la sala lentamente, intentando recordar la posición de cada escritorio, de cada armario, del sillón de Jane, de la pizarra blanca, reconstruyendo poco a poco lo que una vez fue como su segundo hogar. Se metió las manos en los bolsillos y suspiró lenta y profundamente, cerrando brevemente los ojos. Al abrirlos, una tierna sonrisa se depositó en su rostro.

- ¿Dónde está?- una voz apareció de la nada obligando a Lisbon a girarse. El agente especial al mando, Dennis Abott acababa de entrar por la puerta.

- Si me preguntas por Jane, no lo sé. ¿Has mirado arriba?- Lisbon preguntó esto último con una sonrisa en la cara, como si fuera la cosa menos evidente del mundo. Sentía que iba a vomitar, de verdad que no sabía dónde se encontraba.

- Sí, lo he hecho. Tal vez no lo hayas oído pero hace una hora, Gale Bertram asesinó a un policía en una estación de servicio.

- Lo he oído.

- Y has oído qué es lo que Bertram hacía ahí?

- No.- esto se estaba poniendo difícil.

- Estaba usando una cabina telefónica. Adivina a quién llamaba.

- Supongo que a Jane.- le estaba costando un mundo mantener la compostura y no derrumbarse en el suelo.

- Ah, sí.- suspiró Abott.- Entonces, ¿dónde está?

- No lo sé.

- Yo creo que sí.

- No puedo evitar que pienses eso.- el jueguecito se estaba alargando demasiado, y temía las consecuencias que eso pudiera tener.

- Yo creo- empezó de nuevo haciendo una pausa- que tu novio está colaborando con un fugitivo peligroso. Creo, que está metido en esa locura de la Asociación Blake, y probablemente tú también.

- Pues no. Y él tampoco. Jane puede controlar sus llamadas y no es mi novio.

- Es una pena, Teresa. Eras una buena policía.

- Lo sigo siendo.

Y con esto se alejó con una sonrisa fingida y el estómago revuelto. Abott la miró alejarse, también sonriendo. "Os pillaremos", pensó.

Lisbon salió del edificio y se apoyó contra la pared, disfrutando un poco del aire fresco e intentando calmarse.

- Qué locura...- suspiró.

Metida en sus pensamientos, escuchó unos pasos acercarse. No se giró. No se movió. Siguió mirando al frente aunque instintivamente deslizó su mano hacia la cadera donde estaba su pistola.

- Hola.- Era una niña, una pequeña niña de ojos oscuros y cabello claro que sostenía una nota en la mano.- Eres Teresa?

- S..sí...¿por qué?

- Una mujer te busca.

- Una mujer?

- Sí. Se llama Jane y dice que tú sabes dónde está.

- Pues no, no lo sé.

- El hombre con quien hablé me dijo que dirías eso, y me dio esta nota.

"Estoy arriba", leyó Lisbon.

- Mmm... vale, muchas gracias.

Volvió a entrar en el edificio y subió por las escaleras. No se arriesgaría a utilizar el ascensor. Al llegar a la planta principal, se aseguró que Abott no siguiera allí y continuó su camino edificio arriba. Se detuvo ante las puertas del ático y llamó.

No hubo respuesta.

Deslizó la manó y se percató que estaba abierta. Pero antes de conseguir abrirla del todo, una mano atrapó su muñeca y la atrajo hacia adentro. La pesada puerta se cerró tras ella dando un fuerte golpe.

CONTINUARÁ...