Prologo

No puedes llegar y hacerme dudar sobre la decisión que tomé la última vez que te ví, no es justo para nadie, tú te lastimas y yo me lastimo. No puedes hacer que me encantes y que tenga el impulso de besarte, porque está prohibido, y no sería bueno. Tienes que darte cuenta de que ahora mi apellido es Cullen, porque ese era mi destino, pero... ¿Qué ganas ahora con confundirme? Yo estoy felizmente casada, con mi hija, mi marido, y ahora sus hermanos, los míos. Sé que no estás sólo, tienes a la mánada, tienes a Jacob como ejemplo de que no puedes meterte con una vampira. Para, por favor, no eligiré entre los dos... Porque siempre fue él, siempre lo ha sido.