QUIERO DISCULPARME CON ALGUNOS POR HABER ELIMINADO MI HISTORIA DE "MUNDO ENCARNADO", ESTA VEZ HARÉ UNA MEJORA, EN SERIO MIS MÁS SEINCERAS DISCULPAS, ES QUE QUIERO HACERLO MEJOR, YA QUE, BUENO ME SIENTO ALGO TRISTE POR QUE TENGO POCOS REWIEWS (O COMO SE ESCRIBA).

MUNDO ENCARNADO PARTE 1

Las tortugas siempre han sido unos grandes y poderosos guerreros, temidos pero a la vez amados, a pesar de ser unos mutantes que vivieron en las alcantarillas la mayor parte de sus vidas. Sus enemigos eran muy poderosos, pero no los suficientes como para vencerlos fácilmente.

En cada generación incluyendo en esta, todo tiene su final, nuestras TMNT ya no existen en este mundo, al igual que sus amigos y enemigos, lo único que se sabe, pero que aún no se confirma, es que fueron a encarnar en 4 seres humanos que más adelante se darán cuenta de quienes fueron en sus vidas pasadas.

En un orfanato, habitaban varios niños que eran abandonados por sus padres, ya sea por un motivo en especial o sin ello, las mujeres que los cuidaban no tenían el tiempo suficiente como para darse cuenta de que cada día se integraban más menores a su localidad.

Una noche sin luna, era demasiado tarde como para que alguien estuviera levantado, para ser precisos el reloj marcaba la 01: 06 am, de pronto se oyó el sonido de la puerta al ser tocada por una mano, la señora del orfanato salió muy cansada y molesta por la hora en la que se le ocurría a esa persona interrumpir su sueño. Al abrir la puerta vio a una mujer de cabellos cuyo color era de un rojo vino intenso, y sus ojos ámbar parecían dos gemas de oro, si no estuviera con una expresión desesperada todos dirían que es simpática, usaba una capucha negra y sostenía en sus brazos a 4 bebés, los cuales lloraban sin consolación, parecían que hace algunas semanas habían nacido, a pesar de eso, las criaturas eran las más tiernas que la señora haya visto jamás.

_ ¿Qué hace usted a esta hora? – Pregunto la señora del orfanato, viendo la hora del reloj, el asombro llego a ella, era muy raro que una mujer a la mitad de la noche llegara a su puerta con unos recién nacidos.

_ Lo siento mucho señora, pero necesito que me haga un favor muy grande. – Para la mujer era complicado sostener a los niños.

_ ¿Y esos bebés tan hermosos? - Pregunto ella con preocupación.

_ Estos tres pequeños no me pertenecen. – Señalo a un rubio, el otro castaño y uno más con el pelo negro azulado, a cada minuto que pasaba los niños dejaban de llorar. – Son de otras mujeres, las cuales son mis grandes amigas y me pidieron que los trajera aquí, estuve de acuerdo con ellas en eso, creemos que estarán en una mejor situación que cualquiera que nosotras podamos darle. - Dijo viendo al de pelo rojo vino, como ella. – Pero este pequeño de aquí es mi hijo. - Beso su frente.

La señora del orfanato se compadeció de ella, y acepto cuidar a los niños por un largo tiempo, además, eran muy hermosos y a simple vista se notaban lo frágiles que eran, pasaron largas semanas y una carta llego donde ella, cuyas letras decían:

PARA LA SEÑORA JONES:
Lamentamos informarle que el Hospital de New York, exploto por causas desconocidas las cuales los Detectives investigan y debido a este indecente, muchos inocentes murieron, pocos lograron salir con vida.
ATTE: EL DEPARTAMENTO DE POLICIA DE NEW YORK.

La mujer no lo podía creer, siempre le gustaba visitar ese Hospital, porque además de que este su hermana allí, le gustaba visitar a los enfermos por caridad y compasión, en ese lugar la mayoría de las personas la conocían, tal vez sea por eso que los policías le enviaron esa carta.
Debido a eso, los 4 niños se quedaron en el orfanato por mucho tiempo.

15 AÑOS DESPUÉS.

Escuela "High". Los estudiantes caminaban por los pasillos tranquilamente, hasta que el director comenzó a hablar mediante las bocinas.

"Buenos días estudiantes y bienvenidos a la escuela "High", espero que hayan disfrutado lo mejor que pudieron de sus vacaciones de verano, pronto ingresaran a sus aulas, debo informar hay nuevos estudiantes y se han programado nuevas actividades escolares, a sí, respecto al uniforme, por hoy usaran ropa de calle, mañana deberán venir con el uniforme, eso es todo por hoy me despido y bienvenidos de nuevo."

_ ¿Uniforme? ¡Hay no! – Se quejo una de las chicas.

Los estudiantes comenzaron a quejarse sobre el uso del uniforme escolar (N.A: Yo me siento igual). Algunos comenzaron a hablar entre ellos respecto a ese tema.

_ Genial, otro día muy aburrido, y yo que quería usar mi patineta. – Se quejo un chico rubio de ojos azules y pecas en sus mejillas.

_ Hay no de nuevo, odio usar el uniforme. - Había otro chico que también se quejaba, su pelo era castaño, sus ojos de color marrón rojizo y usaba lentes.

Cada alumno entro a su respectiva aula luego de que el timbre sonó, avían algunos que se conocían desde hace mucho y por ello, volverse a ver era una señal de alegría por el tiempo que había pasado desde la última vez que se vieron, los nuevos eran tímidos ya que no conocían a nadie, algunos trataban de hacer amigos para no sentirse solos. Las carpetas eran para dos, así que los chicos se sentaban por parejas, de no ser porque una mujer entró al salón seguiría oyéndose el bullicio parecido al de un mercado.

_ Bien alumnos, es hora de presentar a algunos de sus compañeros nuevos, pero primero me presentare yo, soy su nueva tutora. Mi nombre es Angelina Paulsen, y espero llevarme bien con todos ustedes, a pesar de ser nueva, deseo que aprender mucho de las actividades y por eso, los maestros y yo decidimos antes de que volvieran al colegio que uno de ustedes será nuestro Presidente Escolar.

Todos los estudiantes estaban alegres y comenzaron a preguntarse quien podría ser el nuevo presidente, ¿Si una mujer o un quizás un varón?, cada uno sacaba sus conclusiones hasta que la maestra hablo de nuevo.

_ Muy bien, nuestro Presidente Escolar es Leonardo – Dijo ella muy alegre haciendo que el recién nombrado se ponga de pie.

Todos miraron con asombro a Leonardo, por muchos años él fue el presidente del colegio y el alumno favorito de los maestros.

_ Hola, los nuevos no me conocen a si que presentaré, mi nombre es Leonardo, tengo 15 años y tengo mucha experiencia sobre esto de la Presidencia, espero llevarme bien con todos ustedes jejej. – Sonrió soltando una carcajada. – Y bueno lo único que tengo que decirles es, buena suerte. – Se sienta en su asiento y todos le aplauden.

_ Muy bien Leo, así se habla. – Lo felicito un chico que estaba atrás suyo, es de pelo negro y ojos cafés.

_ Gracias Peter, espero que todo salga bien esta vez. – Choca puños con él.

_ Saldrá todo bien, te lo aseguro. - Le guiña el ojo con una sonrisa.

Algunos de los estudiantes conocían a nuevos maestros, otros a sus nuevos alumnos y compañeros, hasta llegar a la hora del recreo, el tiempo más agradable y divertido de todos los adolescentes.

_ Wow Donnie ese invento es asombroso, te quedo genial. – Le dijo uno de sus amigos nerd.

_ Gracias, he estado trabajando en esto por mucho día y noche, hasta sin descanso. - Contesto él todo alegre, sintiéndose orgulloso de su más reciente logro.

En eso alguien se acerca a ellos, su mirada era temerosa y todos se alejaban de él por eso.

_ Valla, valla, pero miren a quien volvemos a ver, Donnie y su nuevo invento. - Dijo el sujeto que apretaba sus puños. – El joven solo cerró los ojos haciendo una mueca de disgusto.

_No me lo digan, él esta atrás mío ¿Verdad? - Pregunto el chico todo nervioso de saber la respuesta.

Sus amigos, los cuales se encontraban acorralados por los bravucones que acompañaban al que lo amenazaba, asintieron con su cabeza en señal de afirmación.

_Ahora no se salvaras, nerd, muchas veces has huido y me dejaste con un ojo morado, pero me asegure de que esta vez no pase lo mismo. – Hablo con un tono amenazante, mesclado con seguridad.

_He… - Traga saliva.