¡Holaaaaa! Hacía mucho que no escribía un fic... Así que estoy desentrenada (?) Este será mi primer fic en esta nueva cuenta que he hecho, así que espero que les guste :3

Disclaimer: Todos los personajes ecepto Saray y Ryu pertenecen a Level-5.


Hacía ya algo de tiempo, un admirador secreto de otro país distinto al de Japón mandó una carta de amor a nuestra protagonista. Saray Afuro es una chica de cabellos rubios como el oro, ondulados y corto, de tez pálida como la nieve y ojos verde pistacho luminosos como el día. En cuanto ella recibió la carta, no entendía el por qué. Al parecer, un chico la ha estado observando desde que el mundial empezó, en la carta explicaba el amplio juego de la chica en los partidos, lo linda que se veía al celebrar una victoria...La intriga de Saray era cada vez más amplia, pero ella no podía hacer nada, solo esperar a que ocurriera algo.

La rubia sabía que en este mundial, algo espléndido ocurriría.

La ojiverde fue despertada por Haruna, la cual estaba enojada al ver que la chica no se despertaba.

-¿Qué hora es...? -susurró Saray de una forma que casi ni se escuchó .

-Demasiado tarde, ¡el entrenamiento ha empezado sin ti! -dijo Haruna muy enfadada.

-¿Qué? ¡Oh no! -dijo Saray levantándose de golpe y preparándose para el entrenamiento, lo cual hizo reír a Haruna.

La ojiverde pudo llegar a tiempo al entrenamiento, aunque ya casi habían acabado. El entrenador no le regañó, por suerte. Así que cogió un balón y con la mirada buscó a cierto pelirrojo para poder hacer unos pases con él.

-Saray-chan, ¿llegaste hoy un poco tarde, no? -dijo el pelirrojo antes de que Saray lo encontrara.

-¡Ah, Hiroto-kun! -dijo Saray sonriendo- Ayer me dormí demasiado tarde... -dijo Saray casi en un suspiro.

-No importa. -Hiroto le sonrió- Hagamos unos pases juntos, ¿te gustaría venir luego conmigo a comprar unas cosas?

-Está bien, Hiroto-kun.

Justo cuando terminó el entrenamiento, Saray y Hiroto decidieron que ya era hora de ir a comprar. Hiroto le entregó una lista a Saray con todo lo que tenía que comprar de la tienda.

-A ver... Me pregunto donde estará esa tienda... -dijo Saray de una forma despistada, mirando a todos lados menos al frente.

Después de mucho esfuerzo, encontró la tienda. Ahora solo le quedaba encontrar a Hiroto. Mientras lo buscaba, sonreía y daba casi saltos de alegría. Tan despistada iba que acabó cayéndose al suelo por tropezar con alguien.

-¡Auh! -gimió Saray y pudo ver como su rodilla sangraba- Jo...Ya me hice una herida.

-¡Disculpe! No quería tirarte. -dijo un chico de tez morena y ojos negros como la noche.

-No importa... -dijo Saray clavando la mirada en sus ojos- Aunque me duele un poco la rodilla pero no pasa nada. -sonrió.

-Todo fue culpa mía... -dijo el chico misterioso recogiéndole la compra y entregándosela. -Ten.

-Muchas gracias. -dijo Saray levantándose con su ayuda y no pudo evitar fijarse en sus manos, llevaba unos guantes de portero así que la ojiverde pensó que le interesaba el fútbol- ¿Te gusta el fútbol?

-Pues sí . -dijo el chico rascándose la nuca.- Aunque aún no soy muy bueno.

-¡Seguro que eres genial, ya verás! ¿Te gustaría jugar un rato conmigo?

-Esto... -el chico se veía nervioso- Ahora no puedo, pero seguro que otro día podremos. -sonrió- ¡Adiós!

-¡Eh! ¡Espera...! -pero ya era tarde, el chico se fue- Me pregunto como se llamaría... Ni si quiera le he podido dar las gracias.

En ese mismo instante, Hiroto vino corriendo y muy cansado. Aunque Saray aún seguía en sus pensamientos.

-¡Saray-chan! -dijo Hiroto- No te encontraba, esto... ¿Estás bien?

-¿Eh? ¡Hai, hai! -dijo Saray repetidas veces- Vámonos, los demás nos estarán esperando.

Hiroto asintió y ambos caminaron hacia el área de Inazuma Japón .

Saray no paraba de mirar al cielo , no podía olvidar al chico de antes, ¿cómo se llamaría? ¿De dónde sería? … Ya que no parecía japonés a primera vista. Las dudas surgían en la cabeza de Saray.

¿Volverán a encontrarse?

Continuará...


¡Espero que os haya gustado! Quizá sea un poco cortito pero en el próximo intentaré alargarlo :3