***CONFERENCIA SOBRE EL DIGIMUNDO***
Por: CieloCriss
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(Crossover de Digimon y Sakura Card Captor)
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Capítulo uno --*El invitado*--
- ¡¿Digimundo?! - exclamaron en unísono.
- Eso es lo que dije, hijos, ¿Acaso no han oído hablar de los digimons?
- Tomoyo me ha dicho que su madre le va a comprar un huevo, de donde saldrá un digimon, pero como su mamá vende juguetes, pensé que esas cosas eran eso.
- Nada de eso, Sakura. - explicó con amabilidad el señor Kinomoto, mientras servía la cena - Los digimons son bases de datos con vida, podría decirse que se derivan de la computación.
- ¿Bases de datos reales? ¡Eso está incoherente!, yo no entiendo.
- Eso es sencillo de explicar, los monstruos no piensan bien y por eso no captan.
- ¡Hermano! - gritó la jovencita dueña de las cartas Clow (bueno, ya eran en ese entonces, cartas "Sakura", ¿no?), después de dicha queja decidió que era buena idea pisarle el pie derecho a su impertinente consanguíneo, quien se quejó levemente, pero luego opinó:
- En conclusión, vas a dar una conferencia sobre el Digimundo... pero, no sabes nada sobre el asunto, ¿verdad?.
- Sí, a eso iba. - replicó sonriente - El Mundo Digital es nuevo para casi todos los seres humanos, sin embargo, hay chicos que saben mucho sobre ese mundo, ya que son oficialmente considerados como "niños elegidos", eso según el diario de Tokio #33.
Kero escuchaba atento bajo la mesa, ¿Qué sería el mentado Digimundo?, había visto en las noticias que la Tierra se había unido a un mundo virtual, y que en ese lugar, habitaban monstruos, "digital monsters", él creía que en todo eso había un misterio, pero no había querido molestar a Sakura, prefería que la niña siguiera pensando que esas cosas eran juguetes (no es que fuera tonta, sólo le faltó información, además, todo podía ser un "chisme", una nueva leyenda, o un mito renacido... ¡A saber!).
- Conseguí comunicarme con uno de los niños elegidos - continuaba el agradable padre - Él es un chico muy amable, me dice que comprende que los medios de comunicación, la ciencia y todo el mundo, estén confundidos con el extraño surgimiento de Digimons, dice que sabe que la mayoría de los humanos no se han tomado en serio lo que ocurrió, pero que es deber de él, y de los demás elegidos, dar a conocer lo maravillosos que son los digimons, me informó que el fin de todo esto es que en un futuro ambos mundos puedan convivir en armonía, que cada niño tenga un digimon, pero que éste no sea su juguete o mascota, sino su verdadero amigo.
- Qué digifantástico - musitó Touya, con sarcasmo... estaba medio asqueado de oír tanto la palabra "Digimon". Por un momento se preguntó si el muñeco amarillo (Kerberos) que tenía su hermana, era uno de esos animalejos.
- ¡Vaya papá, se oye muy interesante!
- Ya lo creo hija .- siguió emocionado - El chico incluso se ofreció a ayudarme a dar la conferencia sobre el Digimundo, pero vive lejos y yo me ofrecí a darle alojamiento por una semana, ¿Qué opinan?
- ¡Qué bien!, tendremos visitas - agregó Sakura, con entusiasmo.
- ¿Qué edad tiene ese mocoso?
- Tiene 13 años, se llama Koushiro Izumi - dijo él - me conecté con él por la red, fue una suerte que quisiera ayudarme, él dijo que con ello toda la universidad sabría sobre el Mundo Digital, que no era un desperdicio, hasta se mostraba agradecido...
- Pero hay un problema - interrumpió Touya - Yuki estará también viviendo en nuestra casa una semana, y justamente esta.
- Lo sé, por eso quería pedirles que alistaran el cuarto de visitas.
- Papá, no hay cuarto de visitas
- Está el Ático, confío en que lo limpiarán para que nuestro invitado esté a gusto.
- o_oU - A Sakura no le gustaba la idea de que aquél chico estuviera en el sitio donde había encontrado el libro que contenía las cartas Clow, eso le dio un escalofrío, pero no se preocupó mucho - De acuerdo, yo limpiaré, además a mi hermano le toca hacer la cena.
- Tengo que trabajar - aclaró él - mejor cocina tú, cuando llegue el susodicho será mejor que dejes atrás tus artes culinarios, no queremos que el mocoso ese, se envenene.
- ¡Yo no cocino mal!
-¡¡ Pero tampoco bien!!
Ella ya no hizo más caso a su hermano, siguió con el interrogatorio.
- ¿Los padres del chico le han dado permiso?, ¿Cuándo llega?
- ¡Oh, sí!, tuve la oportunidad de hablar con la madre del muchacho, ella es una mujer muy amable - de pronto el joven padre se dio la vuelta y vio el calendario - este... me temo que... El joven Izumi llega hoy.
- ¿Quéeee?
- A Preparar todo - ordenó nervioso, como si el presidente se fuera alojar en su casa.
Kero y Sakura tenían sospechas extrañas sobre el Digimundo, aunque no hablaron mucho de ello; la niña había estado muy ocupada limpiando para la visita, por otra parte, su padre se había tenido que marchar, su hermano se había ido al trabajo y el muy desgraciado le había embarrado la cena, Sakura no pudo negarse, Touya siempre le había hecho el favor de intercambiar días cuando lo necesitaba.
Kerberos podía jurar que Yukito, más bien "Yue", le hacía una visita a Touya, por asuntos específicos, talvez también quería estar protegiendo a Sakura, bueno, mejor no suponía nada, luego podría equivocarse.
El teléfono sonó.
- ¿Aló?, ¡Ah!, Hola Tomoyo (...) sí, estoy sola - hubo un silencio por parte de la castaña chica de ojos verdes – (...) Vaya... no, no puedo ir a probarme los nuevos diseños, es que estoy esperando una visita, pero gracias por acordarte de mí, me halaga que cosas esas ropas... ¡es decir!, esos lindos vestidos, para mí.
El teléfono comenzó a fallar, hubo un extraño corto circuito y se terminó la llamada.
- ¿Tomoyo?, ¿Estás ahí?
- ¿Qué pasa, Sakura?
- Nada, Kero, creo que la llamada se cortó
Esa conversación trivial fue interrumpida por el sonido de un timbre, Sakura tembló de pronto, ¿Por qué se ponía nerviosa?
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Sakura se acercó a la puerta, la observó un momento y esperó a que el timbre volviera a sonar, tenía un presentimiento sobrenatural, sus manos sudaban frío, pero, ¿Por qué?, había acaso una razón lógica de ello, ¡Claro que no!, y ella, grande optimista, no iba a dejar que una premonición la afectara a tal extremo.
Se asomó por el orificio de la puerta, todo para ver quien era. Primero la vista se le emborrachó al ver tanto cabello despeinado y rojo en el cráneo de un chico de tez blanca y ojos negros (muy negros, hasta parecía un maniático porque no se le distinguía el iris de la pupila), le dio un poco de miedo, pero ya que se aclaró más su vista, dedujo que era un ser humano normal, si era así, ¿Por qué sentía sus piernas temblar?, Kero estaba a su lado, no emitía sonido, se había instalado en la espalda de la niña y trataba de imitar a un muñeco.
- ¿Sientes lo que yo, Kero?
- Sí.
Eso lo susurró lo más calmada que pudo, acto seguido giró la perilla y abrió la puerta.
- Buenas tardes - saludó educadamente el visitante - Yo soy...
- Koushiro Izumi - interrumpió Sakura, ofreciéndole una hermosa sonrisa, el chico asintió y ella lo invitó a pasar, extrañamente se había tranquilizado mucho al oír hablar al antiguo desconocido, la voz del pelirrojo estaba llena de sensatez, y de alguna manera era amena.
- Pasa y siéntate - ofreció ella - ¿Quieres una taza de té?
- No por el momento, gracias.
El chico no era muy parlanchín, le recordaba fugazmente a Eriol.
- Mi nombre es Sakura Kinomoto, me da gusto que hayas decidido ayudar a mi padre en eso de la Conferencia sobre el Digimundo.
La Card Captor notó que a su interlocutor le brillaron los ojos de curiosidad, Koushiro parecía ansioso de hablar de eso.
- Bueno, ese es mi deber como digielegido - entonces él miró a Kero, que yacía en el hombro de la niña, de aproximados 11 años. - Dígame, Kinomoto-san, ¿Es eso un Digimon?
- ¿Qué?, ¿Kero?... - se puso bastante nerviosa – No, no, no, claro que no, es un muñeco, jeje, sí, mi amigo de la infancia... y por favor, no me hables de usted, ni me digas Kinomoto-san, prefiero que me llamen por mi nombre.
- Como gustes. - dijo Koushiro, sonriendo - Pero no me engañas, eso que tienes ahí podrá no ser un Digimon, pero sí es un ser vivo.
Sakura no sabía que hacer, era sin duda un chico muy listo y terco, pero algo seco, aún así, le inspiraba confianza.
- Te equivocas, además, ¿Cómo puedes saberlo?
- Bueno, yo no lo he descubierto, pero Tentomon lo ha visto moverse.
- ¿Tentomon?, ¿Qué es eso?
- Es un digimon, por supuesto, ¿No te ha contado tu padre de ellos?
- No mucho... yo pensé que eran unos Tamagotchis modernos - respondió con vergüenza.
Koushiro se levantó y caminó pausadamente hacia la ventana, la abrió, y dejó entrar a su digimon, un extraño insecto de color rojo con verde que tenía varios pares de patas (incluyendo tenazas) y unos ojos gigantes.
- Hola, terrícolas. - anunció de forma espeluznante, Sakura pegó un grito al cielo, Kero se puso en guardia.
- Tentomon, no los asustes. - regañó de forma fraternal - ... Ahora he visto que "Kero" /Ese es su nombre, ¿verdad?/ se ha movido, y te pregunto, ¿Qué es?
- Este... Yo...
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Continuará...
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Notas de la Autora: Pues aquí les traigo mi primer crossover, donde decidí mezclar las series de Digimon y CCSakura, será un fic corto, pero espero que emocionante, por favor, déjenme comentarios acerca de lo que opinan, claro que si lo prefiere, pueden escribirme un e-mail a: cielocriss@graffiti.net
Dedicado a Zelshamada (Vass-chan), quien es una gran amiga y escritora