Mi nombre es Kagome Higurashi

Estoy en la bañera pensativa, recordando algunos sucesos de la semana.

Flash Back

El lunes me desperté temprano, tome una duche, cepille mis diente y desayune antes de salir, mi viaje en tren fue algo depresivo, ya que al ver a un montón de personas felices conversando, o escuchando música o simplemente sonriendo, yo en cambio no tenía nada porque estar feliz, mis padres llevaban separados la mitad de mi vida, mi madre Naomi me odia y mi hermano pequeño Souta es su hijo adorado, mi padre Goura solo se preocupa por él mismo, Souta me ignora totalmente, no tengo amigos con quienes charlar, mi vida es totalmente patética; cuando llegue a la universidad me apresure a mi clase, al terminar todas mis clases me fui a casa, esta vez sin prestas atención a las personas cerca de mí solo para no deprimirme más y hacer aun peor mi día, cuando entre a mi casa vi una nota de mi madre indicándome que mi almuerzo estaba servido, después de comer me fui a la cama y me puse a pensar mientras observaba mi muñeca, "¿cómo se sentiría cortarse las venas?, ¿qué sensación deja el morir?" con estos pensamiento deprimentes llenando mi cabeza me dormí por inercia.

El martes no tenía clases, así que me quede en mi cuarto escribiendo, dibujando y pensando mientras escuchaba afuera a mi madre gritar cosas inteligibles para mí.

El miércoles mí padre vino a visitarme, aquello me alegro un poco, salimos a caminar mientras él solo me contaba sus problemas, sin detenerse a escuchar los míos, aquello me hacía sentir peor, porque sabía que el solo me buscaba cuando necesitaba ayuda, para lo demás estaba Souta; cuando llegue a casa almorcé y me puse a hacer la tarea que tenía pendiente tratando de no llorar por la desilusión de ese día.

El jueves mi madre y yo discutimos, me decía que yo era un estorbo que solo una vez en mi vida había hecho algo, que Souta es el mejor hijo que tiene, que desearía que fuera un poco más como él.

Fin Flash Back

Hoy no había asistido a la universidad, en cambio me quede en la cama, hasta que la casa quedo vacía, me había dirigido al baño y había sacado unas navajas del gavetero, llene la bañera y me desvestí, cuando entre el agua se desbordo un poco por los lados, ya había salido totalmente de mis pensamientos, viéndome allí, tome las navajas entre mis dedos y como hace algunos días quede viéndome la muñeca de mi brazo izquierdo, tomé la navaja firmemente con mi mano derecha haciéndome unos pequeños cortes en ella y fui pasándola lenta y profundamente por mi muñeca de manera vertical, para que nadie pudiera evitar el final, lo que sentí fue algo indecible, algo indescriptible, PAZ...

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