Disclaimer: Argentina pertenece a Rowein y a la comunidad Latín Hetalia. APH es de Himaruya.
Summary: Martín y una sensación rara. Simple.
Nota: En un primer momento, creía que escribiría algo histórico. Sin fechas ni demasiados nombres. Luego, se fue transfigurando y acabó en esto.
La sin nombre
Últimamente, a Martín lo rodea una sensación extraña. Es consciente de que no es la primera vez. Pero antes era más sutil, más efímera. Él no sabe de qué se trata, por lo que atribuye a que se siente vacío.
En ocasiones, ella se va. Lo deja, así, sin más. Su corazón palpita contra su pecho y, por lo general, es por preocupación o algún problema de su gente. Cuando todo concluye, ya lo está acompañando. Y se frustra. Sólo un poco, debido a que la percibe luego de que ésta se ha instalado nuevamente en él. No tiene explicación y, así, sin más, se va a dormir.
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Martín tiene pesadillas. ¡Tantas! Pero jamás se lo confesará a nadie. A veces, se despierta agitado y con el objetivo de sancionarse de que la independencia fue ya hace mucho tiempo. También se lo puede oír murmurar – ¡No te vayas! – en un grito sordo. Se desconoce a quién se lo dirige. O tal vez, a quiénes. En el peor de lo casos, su disgusto alcanza niveles en los que merodea por la casa. Temblando, a pesar de su transpiración y vigilando a través de las ventanas, por sí de casualidad un Falcon da acto de presencia. Todavía afligido por el recuerdo que le perfora la cabeza – inevitable y obligatorio luego de cada pesadilla –, la emoción desconocida lo mimosea y ésta vez, no se despertará ni con la alarma.
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Hoy, está un poquito feliz. Bueno, está mintiendo. ¡Su lindísima selección le ha ganado a Bosnia! Está eufórico y también toda su gente. No obstante, la inquietud le absorta de a ratos. Messi no parecía concentrado. Y él tampoco; a los minutos se plantea una justificación razonable y ella,le otorga un cosquilleo en la nuca.
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Está sorprendido. Estados Unidos – ese yankee – ha rechazado su apelación contra los fondos buitres. Se siente perdido, solo y cansado. ¿Qué se supone que hará ahora? La patrona le aconseja que se tranquilice y no se angustie. Sin embargo, ésa noche, la desconocida no lo visitó. Ni siquiera después de la mezcla de memorias y malos sueños que lo aturdieron.
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Tiene un intento de sonrisa. ¡Pero che, día patrio! Le encanta contemplar los actos de las instituciones escolares. Su canción favorita logra oírse desde Jujuy, en donde disfruta de un tereré fresquito hasta Tierra del Fuego, donde un mate caliente viene mejor.
Ah, el juramento a la bandera. – si Belgrano hubiese sabido que hasta se juraría por su creación, quizá habría vivido un poco más. Le gusta creer eso. – Fuiste un groso. Lástima que te fuiste rápido. – susurra para sí mientras escucha el »Sí, juro« de los niños.
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Martín todavía no sabe qué clase de sensación le ataca de a ratos. De momentos, es la emoción sin nombre – cuándo tiene bronca, le dice boluda y otras, directamente, la manda al carajo –.
No tiene mayor beteo que el de Word. Perdón por cualquier incoherencia.
Saludos.