=Intercambio de cuerpos=

Hola de nuevo! Esta es la segunda historia que escribo y espero la lean y la disfruten :D...


En una habitación perfectamente ordenada y limpia completamente decorada con tonos rosados una bella chica pelirroja de largo cabello y piel clara leía uno de sus libros favoritos "Romeo y Julieta". La chica descansaba de una larga jornada de escuela, acomodó su apreciado libro entre sus manos y dispuso leer de nuevo. Pero no todo es duradero, cuando creyó que nada podría empeorar empezó a sonar una estruendosa música que según ella le provocó migraña, se levantó de su cama furiosa y caminó hacia la ventana.

-¡Oye!-gritó enojada mientras hacía señas hacia la otra ventana que estaba justo al frente de la suya-Brick!

Tras la otra ventana se observaba como un chico de cabello naranja bailaba de un lado hacia otro meneando su cabeza de manera frenética al ritmo de la musca, la pelirroja le gritó por un largo rato hasta que el paró quedando justo al frente de la ventana.

-Ah, hola Momoko ¿qué se te ofrece?-preguntó inocentemente con una sonrisa ladina mientras, cruzado de brazos, se recargaba en el marco de la ventana.

-Estoy leyendo y no puedo concentrarme ¿puedes bajarle el volumen por favor?-pidió muy amablemente con una falsa sonrisa muy falsa.

-Claro-contestó tranquilo, ella sonrió y satisfecha se dispuso a regresar a leer su libro-pero…con una condición…-

Momoko paró en seco y con un gesto aterrador volteo a mirarlo, él sonrió burlesco.

-¿Qué condición?-pidió lo más tranquila posible, aunque por dentro sentía un manojo de nervios. A Brick lo conocía desde hace algunos años y sus pensamientos no eran del todo legales.

-Quiero que me muestres a las señoritas-sonrió con maldad mientras apuntaba su dorso desnudo.

-¡Ni lo pienses, pervertido!-grito avergonzada. Tan sonrojada como su rostro podía le sacó la lengua infantil mente, con toda su fuerza bajó el vidrio de su ventana pero…oh, oh…la camisa de su pijama quedó atrapada entre los vidrios arrancándosela con fuerza. Como pudo tapó su pecho con los brazos y soltó un grito tan agudo que el espectador se soltó a miles de carcajadas.

-¡Ya las viíJajaja ¡ni te preocupes ya las había visto antes! Jajaja-Brick se retorcía de la risa. Momoko indignada cerró la cortina de su habitación soltando infinidades de maldiciones al joven Brick.


A la mañana siguiente, nuestra chica pelirroja despertó relativamente tranquila a pesar de haber tenido una noche de perros. Como era costumbre después de un baño relajante, de nuevo vistió la falda escolar y un saco de cuello cerrado. Bajó a la cocina lo más relajada que de costumbre, en la cocina su madre la esperaba con un gran tazón de cereales para desayunar. Como cada beso su mejilla con una sonrisa y tomó asiento justo frente a ella.

-¿Qué tal tu mañana, querida?-curioseó su madre. Ella comiendo una cucharada de su cereal asintió con alegría.

-Bien mamá-agradeció sonriendo. A lo lejos llego un robusto señor con traje elegante y se sentó junto a las mujeres-Buenos días papá-

-Buenos días, amor-el señor besó en la mejilla a su adorada hija-mira lo que tengo aquí-

Momoko curiosa tomó el papel que el extendía su padre y lo leyó emocionada.

-Dios es una entrevista para la próxima semana en Yale ¡es tan emocionante!-

-Entrarás directamente a esta universidad, no necesitas esta entrevista, cariño-dijo muy orgullosa su madre mientras acariciaba su rostro.

-Mamá ¡esto es un sueño!-

-¡Mi pequeña ya entrara a la universidad! Dios estoy tan emocionada que explotaré-comenzó a reír sin control ganando una mirada decepcionante de su esposo.


Mientras tanto en la asa de Brick.

-¡Maldición!-gritó una mujer bajita mientras se alejaba tomando su mano adolorida.

-¿Estás bien cariño?-un hombre regordete y cabello rojizo leía muy concentrado el periódico.

-Claro amor, sólo estoy borrando mis huellas digitales-soltó con sarcasmo mientras vendaba su herida.

-Muy bien cariño sigue con eso-la señora le mando una mirada fulminante-¿estás emocionado por el gran juego?

Brick bajo el periódico y asintió sin entusiasmo.

-En el juego habrá cazadores de talentos, así que prepárate-aconsejó el señor sonriendo, Brick sonrió mientras asentía.

-Ya lo estoy, papá-sonrió con superioridad.

-Toma hijo, mi especialidad "huevos al ahí se va"-sonrió la señora mientras le servía una infinidad de huevos con tocino.

-Prepárate hijo, tú podrías ser el primer miembro de la familia que va a la universidad…

-El primero de tu familia, dirás…-interrumpió la mujer burlándose de su esposo.

-Oh cierto-rió el señor mientras enfocaba su mirada de nuevo a Brick-pero si las cosas no funcionan como esperabas, podrás trabajar conmigo en la pequeña tienda-

Brick arqueó las cejas sin nada de entusiasmo, ni siquiera le gustaba acompañarlo al lugar. Él no se veía ni siquiera parado en esa tienda.


Momoko salió de su casa y comenzó a caminar hacia la parada de autobuses, pero este paso a su lado sin siquiera detenerse. Resignada decidió aminar al instituto, que no estaba nada cerca.


-¡Socio!-se escuchó un ronco grito. Brick que ya había terminado de alistarse y salía de su casa con una mochila en el hombro, le lanzó un balón de rugby que atrapó muy orgulloso un moreno, caminó hasta donde estaban y con ágil salto entró al convertible negro de sus amigos.

-Hola Boomer-saludó el chico pelirrojo a un rubio que manejaba el auto. Después de un complejo saludo de manos volteó hacia la parte trasera donde un moreno los miraba con los brazos cruzados y aura deprimente.

-Vamos Butch, también me acordé de ti-se burló mientras que con él también hacia uno de esos complejos saludos de manos.

-Pues pensé que no-fingió estar indignado, todos soltaron una larga carcajada y emprendieron camino a toda velocidad hacia el instituto al que igual que Momoko asistían.

-Oye ¿y la música?-reprochó el rubio con una sonrisa. Prendió el estéreo y emprendieron camino. A unos kilómetros más miraron a Momoko caminar muy tranquila sobre la acera, no había otra persona a la vista.

-Miren chicos-llamó la atención el moreno mientras la señalaba-¿esa no es la nerd virgen?-

Brick apunto su vista hacia donde estaba la chica sin decir nada. Boomer en cambió solo negó, le causaba pena que la pobre chica tendría que soportar a ese par de idiotas molestándola siempre ¿y por qué no? aveces el también.

-Cierto es la última virgen del planeta-se burló Brick. Los dos chicos reían mientras chocaba las manos con Butch.

-Oh mira aquí hay un charco-dijo inocentemente Butch mientras se acercaba al volante.

-Después de todo la nerd no es muy inteligente-sonrió cómplice y también se acercó al volante arrebatándoselo a Boomer quien solo rodó los ojos. Brick hizo que dieran una vuelta peligrosa derrapando sobre el charco y haciendo que este se vaciara sobre la pobre Momoko. El grupo de chicos comenzó a reír sin control, incluso Boomer reía muy bajito.

La chica con toda la dignidad que le quedaba secó su saco y caminó mientras arreglaba su cabello.


Cuando Momoko llegó a la escuela, absolutamente todos comenzaron a reírse y susurrar cosas sobre ella, el bello cabello largo y sedoso tan característico de ella, ahora era un manojo de pelo enmarañado, enredado y muy esponjado, precia un corte afro. Al llegar encontró a Takaki "el chico hippie del instituto", un chico de su mismo curso que no arreglaba su cabello nunca y tenía un peinado parecido al de la pelirroja.

-Lindo peinado-alagó el chico, Momoko sonrió falsamente y con un asentimiento entró al instituto.


Al llegar al instituto, Brick se despidió de los chicos y salió del auto tranquilamente, después de todo no compartían curso y se mirararían hasta el entrenamiento, si es que tenían. Butch esperó pacientemente hasta que llego una motocicleta y casi le salta encima.

-Fíjate, idiota-gritó el chico que conducía de la moto mientras hacía señas obscenas y Butch empezó a reír como loco. Boomer solo negó y salió del auto, pero al tocar el pavimento una chica desaliñada y vestida provocativa mente de cabellera blanca y ojos grises se colgó en su cuello.

-Te estaba esperando, Boomy-dijo melosa mente mientras se acomodaba en sus brazos. Boomer incómodo la alejó con el ceño fruncido de su cuerpo.

-Lo siento Bell pero aquí no-le susurró mientras la dejaba en entraba de la escuela.

-Lo siento-sollozo la chica con los ojos llenos de lágrimas.


Momoko caminaba lo más calmada que pudo por los pasillos, aun se seguían burlando de ella, al llegar a su casillero encontró la escena que según ella era la más traumática que había visto. Carraspeó intentando incomodar a los que se estaban tragando y estos se separaron aun dando cortos besos.

-Siento interrumpir su…lo que sea que están haciendo pero es un lugar escolar, tómenlo en cuenta-regañó a Brick y a una chica vestida tan atrevida con el uniforme de porrista y totalmente maquillada.

-Oh pero si eres la loca-soltó arrogante la chica pelirroja mal teñida a Momoko.

-Oh pero si es el idiota número uno y su adorable novia Himoco-soltó en el mismo tono que la chica.

-Es Himeko, tonta-Momoko rió falsamente.

-Oh por cierto, siento lo de esta mañana no notamos que había un charco-Brick se disculpó inocentemente con burla muy marcada. Himeko rió por su aspecto.

-No te preocupes, Brick lo entiendo-dijo con sarcasmo-pero ahora entiéndelo tú, mientras yo me desarrollo en una preparatoria con personas como tú, esas personas son cada vez más idiotas. Oh por cierto, esto es lo que llegaras a tener en la vida, el genial futbolista y su novia la porrista…-

-La capitana de porristas, cariño-corrigió Himeko sonriendo altanera mente.

-Perdón capitana de porristas, pero enfréntemoslo los dos son tan huecos como su cabeza-dio un suspiro cansino y siguió con una sonrisa tan falsa como el culo de Himeko-son tan predecibles que podría apostar que tú…-apuntó a Brick- terminaras trabajando con tu papá en una tiendita, tal vez te cases con Himeko y si me adelanto unos años, te sentirás frustrado por haberte casado con ella y pronto serás un borracho regordete y ella-apuntó a Himeko que estaba muy confundida- perderá su belleza y aburrida de estar sola empezará a tener encuentros sexuales mediocres, con tus amigos…-

-¿Qué amigos?-el chico se atrevió a preguntar con voz temblorosa, Momoko con una sonrisa socarrona suspiró.

-Con la mayoría, lindo día-sonrió. Con elegancia cerró su casillero y se alejó de ellos.


Vaya ¿llegaron hasta acá? de antemano quiero agradecer a:

=Loca de remate

=JessiBSV

Gracias por leerme y agradezco su apoyo, en verdad :D. Muchas gracias por llegar hasta el final y quiero mandarle miles de abrazos llenos de miel y embarrados de amor´s. Cualquier corrección, duda o cometario ¡comenten por fis! hasta la proxima.