Hola, la verdad es que no saben cuanto siento el haber dejado por tanto tiempo abandonado el fic pero es que he tenido varias cosas que hacer, no se si muchos sepan pero estoy por terminar mi carrera y estos últimos semestres han sido la locura; también se me dificultó mucho seguir con la historia debido a que estuve un tiempo por fuera del país pero ya volví y prometo que esta vez no me demoraré tanto en subir.
Para la gente que seguía la historia antes como pueden ver he borrado los demás capítulos y es que siendo sincera cuando volví a leerla para retomar con el fic no me gustó para nada como estaba quedando así que decidí volver a empezar, la historia no va a cambiar simplemente le he agregado y quitado ciertos detalles. Espero que tanto a ustedes como a las personas nuevas que quieran leer el fic les guste y que lo disfruten mucho.
Para la gente que empieza a leer el fic quisiera aclarar ciertas cosas , la historia transcurre de forma distinta a la original por lo que en gran parte no me voy a basar en esta. ¡Adicionalmente, la Sakura que verán acá es un poco distinta, no hasta el punto de ser alguien sin emociones sino que va a ser menos sentimental (no es no me guste el personaje como es, sino que siento que es un personaje que no ha sido explotado como debería), otra cosa es que van a verla interactuando mucho con los chicos y no tanto con las mujeres esto se explica con el paso de la historia! Espero les guste 3
Disclaimer: Naruto ni sus personajes me pertenecen
Había pasado ya un tiempo desde la última vez que los vi, Sasuke por su lado decidió irse con Orochimaru en busca de poder al parecer ser un ninja de Konoha no significa ser lo suficientemente fuerte como para lograr su confianza. Por otro lado, Naruto despúes de no haber podido cumplir su promesa de traer a Sasuke de nuevo a la aldea, había decidido irse con Jiraya para poder volverse más fuerte y lograr a unir de nuevo al equipo 7; sabía que no podía quedarme atrás de nuevo por lo que comencé mi entrenamiento junto con Tsunade-sama al principio no fue nada fácil, mi maestra nunca se ha caracterizado por ser compasiva por lo que desde el primer día comencé con un entrenamiento que era el triple de duro de lo que acostumbraba y eso me costó no solo varias horas adolorida sino de sueño también, sin embargo después de tanto esfuerzo se podía evidenciar que mi resistencia física era mucho mejor, al igual que mis técnicas de combate, pero Tsunade-sama no solo me ayudó a mejorar mis técnicas sino que también aprendí Ninjutsu Médico, hasta el punto que según varias personas podía incluso llegar a superarla.
Todo lo anterior me hacía sentir orgullosa de lo que había alcanzado, había lograr superar la partida de mis compañeros por medio del esfuerzo que había colocado cada día en mi entrenamiento y no llorando y encerrada en mi habitación como lo salía hacer cuando ellos estaban en la aldea, creo que el hecho de poder enfocarme en algo más que en mi enamoramiento por Sasuke había logrado que dejara de ser aquella niña llorona y resignada a ser protegida todo el tiempo por sus compañeros. Sin embargo, sabía que aquello no era suficiente, así como yo me había matado entrenando ellos también lo estaban haciendo y estaba segura que si no seguía entrenando iba a volver a ser una carga, o una molestia, para ellos y lo que menos deseaba era ser eso, no quería que me volvieran a subestimar, no quería que volvieran a protegerme, era yo quien les demostraría que también podía protegerlos.
Durante esos años de entrenamiento también había logrado presentar los exámenes para ser Chūnin y aunque me costó un poco al final del día me había ganado con méritos tanto mi banda nueva como mi chaleco y gracias a esto me encontraba realizando misiones con un rango mucho más alto, con la única diferencia que en estos momentos las realizaba con varios equipos; en varias misiones había servido como un refuerzo de otros equipos y en muchas otras había sido parte de equipos conformados con respecto a las características de cada misión, debido a esto había logrado entablar una mejor relación con los doce de Konoha*, o como se llamaban ahorita los 10 de Konoha debido a la falta de mis dos compañeros de equipo; y no solo con ellos, sino que había tenido la oportunidad de conocer a mi nuevo compañero Sai, la verdad es que era una persona bastante rara y es que al pertenecer a la división ANBU había sido entrenado para no tener ningún tipo de sentimiento, lo cual generaba que muchas veces termináramos discutiendo por el poco tacto que este tenía.
Como ya lo dije, la partida de mis dos compañeros generó que lograra acercarme más a los demás y que de este modo lograra aprovechar las habilidades de cada uno de ellos para lograr mejorar las mías, aunque esto generó también que distanciara bastante de las chicas y es que me había obsesionado tanto con el tema de ser mejor kunoichi que ciertas cosas que antes me parecían importantes, como mi cabello, la forma en que vestía y las charlas de chicas quedaron en segundo plano; y no me entiendan mal no es que las considere débiles sino que muchas de los equipos con los que me había tocado realizar misiones eran conformados por 2 hombre y una mujer por lo que ahora tenía mayor contacto con los hombres de mi generación, tanto así que logré que cada uno de ellos me entrenaran, hubo unos que accedieron sin pensarlo dos veces; sin embargo, hubo otros que fueron bastantes difíciles de convencer, Neji que cada vez que pasaba el tiempo me daba cuenta de lo mucho que se podía parecer con mi excompañero de equipo debido a la seriedad que ambos poseía y Shikamaru, que la verdad si no lo conociera me cuestionaría bastante cómo es que alguien tan vago podía llegar a ser un ninja.
Mi primer maestro fue nada más y nada menos que Rock Lee, y si al principio mencione que el entrenamiento con Tsunade era fuerte, el entrenamiento con él era 2000 mil veces más agotador, pero gracias a esto logre mejorar tanto mi taijutsu como mi resistencia y ahora era capaz de dar 500 vueltas a la aldea sin una gota de sudor. Después entrene con Kiba y Akamaru quienes me enseñaron a desarrollar mis sentidos especialmente mi olfato y oído. Luego siguió mi entrenamiento con Shino (Aunque al principio fue incomodo debido a su personalidad distante y silenciosa con el tiempo desarrollamos una amistad) junto a él logre mejorar mi ataque a larga distancia. Entrene un tiempo con Shikamaru, aunque sea un vago de primera es uno de los ninjas más inteligentes del mundo shinobi, a diferencia de los demás mi entrenamiento con él fue orientado a desarrollar mejor mis habilidades mentales y de esta forma lograr manejar los momentos más difíciles que pueden resultar de una misión, como anticipar los movimientos de mis enemigos y en caso de verme descubierta o acorralada lograr pensar en varias posibles situaciones analizando cual podría ser mejor sin la necesidad de arriesgar mi vida o la de mis compañeros; durante mi entrenamiento con él aproveche de pedirle ayuda a Chōji y Sai para seguir con mi entrenamiento físico. Por último, acudí a Neji con quien mejoré mi velocidad y mi capacidad de reacción y aunque hasta el momento todavía me es difícil creerlo ha sido uno de los que más me ha ayudado y con quien se podría decir llevo una relación amistosa.
Estaba casi segura que todo lo que había realizado hasta el momento era suficiente para poder ayudar a Naruto con la búsqueda de Sasuke y poder volverlo a traer a la aldea, sin embargo, aquella ilusión poco a poco se fue desvaneciendo y es que pronto sabría el por qué ese esfuerzo que había realizado no había bastado para ninguno de los dos.
Espero que les haya gustado, por fa si es así déjenmelo saber con un comentario! Y espero no demorarme más de una semana en subir la continuación.
