Advertencias: Slash, obviamente. Palabras malsonantes. Spoilers ligeros de BD.
Escrito -desde hace siglos- para el Drabblethon de Crack! And Roll (link en mi profile).
Vejestorio
(Seth tenía esa inmensa sonrisa que ofrecía al mundo y Edward aún se sorprendía de que fueran amigos).
Tenía esa enorme sonrisa que dedicaba a todos sin distinción, con los ojos brillantes de tanto reír; rebosando energía, alegría, inocencia. Con el corazón más puro de todo Forks —¿de todo Estados Unidos?— o La Push, quién sabe. El perfecto chico, que al final no era perfecto siquiera, con el que siempre, sin importar lo que sea, puedes contar.
(A menos claro, de que se trate de una nueva manera de romper el corazón de su hermana; sin embargo, estará allí para abrazar a tu esposa embarazada y así esta entre en calor.)
Edward se sorprendía de que fuera su amigo —amigo, amigo, amigo. Lo repetía varias veces y seguía sin creérselo—, ¿quién en su sano juicio querría ser amigo de alguien como él? —aunque claro, siempre cabría la posibilidad de que Seth estuviera loco. Eso explicaría muchas cosas, pero Edward siempre trataba de no pensar en eso—. Nadie.
No comprendía cómo, al tocarlo, no huyera despavorido ante su piel helada, en contraste con la suya que hervía como nunca. Al mirarlo, saber que conocía todos sus secretos con tal naturalidad (aunque claro, ni se te ocurra leer mi mente, Edward, aunque Edward no pudiera evitarlo: el don era parte de él). Al besarlo, cuando sus lenguas se enredaban en duelo, peleando por territorio, el vampiro prefería opinar que Seth se asqueaba con el contacto —aun cuando mayormente al final repitiera Joder, Edward, no sabía que los vampiros supieran bien o Mierda, para ser un vejestorio, no besas tan mal, siempre con una palabrota colada entre sus labios—.
Y Edward, a su lado, se sentía vivo, como si su corazón realmente latiera, tuviera o un alma o le quedara algo de humanidad en esa existencia vacía —que, ante todo, ya no era tan vacía—.
Porque Seth era un sol —brillante, alto, reluciente— y al estar con Edward hacía que este brillara.
La escena de Seth viendo a Edward brillando con escarchita me encanta, ¿vale? Aunque preferí hacerlo como analogía~