Aiacos estaba tirado sobre la cama de su habitación, el pobre espectro de Garruda estaba algo deprimido desde hace una semana y a su lado estaba Minos de Grifo. Los dos jueces estaban en silencio sobre todo el peliblanco al ver la depresión del pelivioleta el cual suspiraba pesadamente junto a una mirada tenue hacia el techo.

-¿Qué te pasa Aiacos?- Preguntó Minos con algo de curiosidad- Estás muy decaído

El mencionado hizo un bufido de enojo al noruego y se echó bocabajo mientras mantenía esas mejillas infladas

-Tenía que ser Minos…-Habló entre dientes, él quería hablar o tratar su asunto con Radamanthys debido a que el espectro de Wyvern tuvo momentos similares con Pandora pero con un friendzondeado como el Grifo eso nunca- Ah, estás aquí… No te interesa

El espectro peliblanco miró algunos cuadros del Garuda y en ese caso algunas fotos con cierta chica hermosa como fuerte de cabello purpura y ojitos rojizos. Esa chica Violate de Behemoth era el gran amor del juez desde hace algunos años y en eso basó Minos para dar con su hipótesis

-La mayoría de las veces que estás así con esos ánimos bajos es porque Violate está involucrada en eso, ¿No?- Eso fue como un pequeño golpe bajo para el pelivioleta el cual bajó de improviso su cabeza sobre la almohada y gritó de manera chistosa

-¡AHHH! ¡Déjame en paz Minos!

El pobre Grifo suspiró mientras contemplaba como el pobre Garuda estaba sufriendo y llorando de manera exagerada como muy al estilo anime, mientras estaba acostado bocabajo como si fuera una niñita luego de una ruptura amorosa, de hecho no era común que Aiacos estuviese una semana sin Violate, de hecho siempre esos dos andaban en junta como si fuera la parejita perfecta del Inframundo, cursi pero cuando las cosas eran serias eran poderosos como despiadados.

Minos estaba cerca de la cama de su compañero pero a una distancia algo prudencial por temor a que lo mandara a la mierda con su Ilusión Galá peliblanco con tal de tranquilizar y escuchar a su amigo daba su opinión

-Teniendo en cuenta la relación que hay entre ustedes, si se lo dices el problema se solucionaría enseguida, ¿No?

El pobre nepalí miró de reojo a su estúpido amigo pero sin despejarse de la almohada, su voz estaba algo acongojada

-No es tan simple…

El espectro del Grifo encontró una silla y se sentó cerca de la cama mientras de reojo miraba algunas fotografías más del grifo y su waifu entre ellas una donde la espectro pelipurpura alzaba al espectro de Garuda como si fuera toda una princesa.

-Debe ser duro seguir teniendo esos problemas aunque ya tengas una bonita novia- En el espectro nepalí se dibujó una vena y un enojo al estilo anime, Minos se alejó un poco por temor a que el Garuda lo mandara al demonio.

-Estoy enamorado de Violate…

-Por favor, lo dices todo el tiempo aparte de que te juntas todo el rato con ella- Cortó el Grifo, a veces era molesto el vínculo entre el Garuda y su mano derecha, se pasaba de cursi de en vez en cuando

-Pero es que no lo entiendes, Minos- El pobre Garuda miraba las sabanas de la almohada mientras su cara estaba caída y algo roja- La amo y la quiero tanto hasta el punto de no poder poner de forma adecuada mis sentimientos en palabras

Ahora se levantó sentándose sobre la cama mientras miraba fijamente a su amada mano derecha que sonreía como toda una niña, sí, era aquella foto donde Aiacos y Violate la pasaron genial en una playa de Grecia en el verano

-Ya no me conformo con sólo besarla

-¿Entonces significa que…?- El noruego sonreía llegando a un conclusión

-Quiero saberlo todo sobre Violate…- Quedó pensativo hasta una vez más volvió a llorar al estilo anime como siempre con las lágrimas en forma de cascada y voz chistosamente quebrada- Pero no puedo decírselo, mi alita derecha sólo me ve como un superior a pesar de que andamos juntos todo el tiempo.

Minos decidió darle una mano al pobre Garuda en la espalda mientras el pobre nepalí estaba con ese puchero de tristeza pero al menos sonreía torpemente por la ayuda y el apoyo de su amigo grifo el cual se le ocurrió un plan para llamar a la espectro super fuerte super sexy… Y para eso estaba el pobre Radamanthys que iba a ser castigado esta noche por Pandora, por enésima vez.

(…)

Pandora estaba disfrutando de una Coca Cola sin azúcar desde su trono mientras Zeros de Rana y varios espectros daban abucheos al pobre Radamanthys, esta noche iba a ser castigado y todo por no comprarle un regalo bonito de su tierra natal. El cejotas rubio estaba con su cuerpo marcado y musculoso junto a una pantaloneta morada con rayas blancas, descalzo y con guantes azules mientras a su frente estaba la campeona del inframundo, uno de los espectros más letales, la mano derecha y la waifu de Aiacos, la temible Violate.

La joven usaba una camiseta tipo top hasta la cintura que remarcaba su prominente busto, sus brazos y su cintura marcados en junta con sus cicatrices que le daban un toque rudo pero sensual, pantaloneta negra y guantes rojos. No era el castigo de la lira pero que mejor castigo que recibir una putiza de parte de Violate en cualquier estilo, sea al estilo UFC o al estilo WWE, en cualquiera de las materias la espectro de la Behemoth era una diosa en hacer sufrir a tipos fuertes.

El sonido de la campana empezó comenzando por una Violate que usaba un ensayo de rodillazos y codazos de los cuales Radamanthys bloqueaba con éxito pero la pelipurpura aprovechó para darle un puntapié que mandó al Wyvern al suelo, fue ahí donde la audaz espectro tomó a Radamantys para hacerle una llave mortal simulando a un fuerte estrangulamiento en el cual el pobre Radamanthys se sofocaba ante la falta de aire.

El pobre inglés gritaba como toda una niñita mientras que espectros como Zeros se burlaban del pobre juez sobretodo la rana que tomaba uno que otro buen selfie con tal de mostrar el ridículo a que sometido el pobre Wyvern, un dolor en el culo pero por Pandora sama era capaz de todo

(Nota: Radamanthys ya me lo imagino víctima de una Pandora sexy vestida de mistress… Las 50 sombras de Pandora)

-Violate…- Suplicaba el espectro

-Lo siento, señor Radamanthys…- Forzaba más la llave con tal de no liberar a su contrincante- La palabra de la señorita Pandora es la voluntad del Señor Hades y todo aquel que…

-Aiacos… Aiacos

-¿El señor Aiacos?- La pelipurpura alzó una ceja, no había visto a su amado desde la semana pasada

-Quiere verte… Esta noche… Muy depre…- El Wyvern tocó repetidas veces el suelo del ring haciendo que perdiera el combate por sumisión y como siempre el público aplaudía a Violate la cual se sentía un poco absorta, de hecho creía que Aiacos le ocurría algo malo ya que no era común que el Garuda la ignoraba y bueno iba a preguntar por su estado.

Pandora sentía envidia pero de manera sana hacia el Garuda y su mano derecha, era la pareja perfecta y a seguir en el Inframundo y quizás la mejor. No los culpaba de ser felices y no era muy normal que Aiacos como Violate se ausentaran en menos de una semana ya que era normal o en ocasiones que ambos estaban en junta o a veces se pasaban de cursis pero en las misiones ellos demostraban ser unos completos despiadados y no dar misericordia hacia sus enemigos.

Pandora miraba con tristeza al Wyvern, si tan sólo fuera como Aiacos bueno lo amaría pero el Wyvern tenía fallas y estaba dispuesta a pulir la lealtad que tanto pregonaba pero a su manera, al menos el cejotas inglés recompensaba y bastante bien.

(…)

La joven Violate estaba vestida con su chaqueta negra de entrenamiento junto a su bolso mientras Aiacos estaba sentado en la cama ahí mirando a lo bajito mientras trataba de mirar la tele pero su pequeña depresión no se lo permitía

-Que tal señor Aiacos- Otro golpe duro para el Garuda, "Señor" lo hacía quedar como viejo pero también como un simple superior. Quería que lo llamara Aiacos o Suikyo… O Sui-chan pero nunca Señor

La ojicarmín se rascaba la cabeza como si hubiese cometido una falta hacia su amado comandante

-Ya sé que vine sin avisar pero quiero…- Se sonrojó- Pasar la noche con usted

Aiacos estaba con cara de WTF al escuchar eso, de hecho siempre durmieron juntos pero nunca tuvieron tales cosas intimas entre ambos, se respetaban el uno al otro aunque también tenían el trabajo de por medio o una guerra santa de pocos capítulos.

-¡¿Eh?!...- Se sonrojó pero debía guardar la compostura pero era evidente que esas palabras de la pelipurpura le hacían volar la cabeza hasta llegaba a imaginarla en ropa interior o hasta… ¡Mierda, debía comportarse como un Juez del Infierno!

-¿Pasa algo Señor Aiacos?- Preguntó la joven guerrera mientras el pobre Garuda estaba con cara de idiota hasta que recuperó la compostura

-Eh, bueno… T-te dejaré quedarte esta noche

-Gracias Señor Aiacos- Le besó dulcemente en la mejilla haciendo que el pobre Juez quedara rojo una olla, anhelaba trazar una X ahí afuera, usándose su Garuda Flap y en tres minutos caer sobre la cruz trazada o a no ser que se caería de cara sobre los pechos o el marcado pecho de su amada… ¡Mierda por dos!

Violate por su parte sacaba su bolso para traer unos refrigerios que compró en alguna cafetería del inframundo, le ofreció unos pastelillos de Mora al pelivioleta junto a una Coca Cola. El nepalí aceptó gustosamente aunque comenzó probando el pastelillo mientras la espectro super fuerte le contaba acerca del encontronazo que tuvo con Radamanthys

-Bueno, la señorita Pandora me encargó castigar a los espectros que desobedecieran sus órdenes, eso mismo iría para el Señor Radamanthys

-Pobre Cejotas, si sigue así de tarado con la señorita Pandora la va pasar muy mal, mal, mal- Decía Aiacos entre risas, a veces le resultaba divertido la situación amorosa de su pobre amigo

-Si no lo culpo, supongo que esas son… Como se llaman, las situaciones de la vida- La ojicarmín tomaba su Coca Cola y fue ahí donde la mente le traicionó al pobre Garuda, una gota de la lata de manera inconscientes trazaba su camino desde el mentón hasta entrarse en su cuello e ir de profundo hacia la camiseta y posiblemente entrando en el busto de la espectro pelipurpura.

El pobre Aiacos se sentía como un pervertido al mirar los melones de su waifu, esas dos preciosuras eran como bolitas de arroz y suaves como esos submarinos o esos ponqués de Bimbo y quizás eran como una suave almohada, comodos como… Como… ¡Mierda por tres!

-¿Señor Aiacos?- Preguntó Violate notando la actitud perdida de su amado superior- ¿Le pasa algo? Está como perdido en sus pensamientos

El Garuda se sacudió la cabeza hasta responder de manera correcta e intentando mostrar ejemplo como cordura

-Lo siento mi amor, es que el hambre me provocó una confusión, ahaha- Se rió chistosamente mientras la pobre espectro estaba con una gota en su cabeza pero al menos entendía el pequeño chiste de su amado.

La joven decidió pararse a cocinar pero el buen Aiacos decidió ser el encargado de hacer la cena, tomando como guía unas recetas que le dio el buen Zeros decidió echar manos a la obra para preparar aunque sea un platillo especial y también un baño de agua caliente debido a su pelea contra Radamanthys, tenía que relajar sus músculos para una próxima batalla, todas esas cosas agradeció enormemente.

(…)

Finalmente ambos estaban acostados en su alcoba matrimonial rodeado entre CD como viejos casettes de heavy metal ochentero y noventero. Los dos espectros se la pasaron viendo alguno que otro programa del ya decadente MTV o alguno de esos shows animados para adultos donde evidentemente se cagaban de la risa.

Aiacos estaba con su camiseta negra sin mangas con la palabra BRAVE inscrita en blanco junto a unas bermudas rosas, Violate tenía una chaqueta negra con cuernos de demonio, en la parte detrás estaba el dibujo de una carita de puerco y la palabra ALONE escritas en rosa y pantaloneta corta del mismo color, eso la hacía quedar muy linda como si tuviera su apariencia infantil a pesar de su fornido físico, eso incomodaba un poco al pobre Garuda.

-Bueno, supongo que…- La pelipurpura apagó el televisor y prendió la luz del cuarto, ahora era una conversación a solas con su amado comandante. La espectro ojicarmín sonreía cariñosamente mientras el pobre Aiacos se sentía rojo de la vergüenza y del temor a perderla, el no tener a su ala derecha.

-Señor Aiacos- Sonreía tiernamente mientras se sonrojaba- Ahora estoy abierta a cualquier conversación

El pelivioleta se rascó la cabeza mientras reía tontamente

-Hahaha, después de lo que pasamos hoy no me queda algo más que contarte

-Pero estoy segura de que sí- Se acercó para mirar fijamente a su amado, como una mirada tierna y kawaii de interrogatorio, muy contrario a esas miradas llenas de malicia y maldad que empleaba en las batallas- De hecho, estuvo comportándose raro todo el día

-Pero lo que dices no tiene algo que ver contigo- Aclaró el pobre Garuda mientras sentía que sus ánimos bajaban un poco pero siempre conservaba una sonrisa- Tiene que ver conmigo

La espectro super sexy infló las mejillas a modo de bufido de enojo

-Siempre me está ocultando sus sentimientos, a veces pienso que usted es un egoísta

-¿Soy un egoísta?

La pobre Violate bajó la mirada mientras estaba sonrojada y con una mirada tenue

-Siempre me está ayudando en todo momento a pesar de que peleo muchas batallas por usted, pero aun así aunque me haga más fuerte temo que no puedo hacer nada ni por usted cuanto usted está en problemas- Unas manos agarraron sus brazos como si los invitara a verlos, esas cicatrices y esas marcas fornidas daban a entender que no era un inútil, era una guerrera digna de su presencia como una guerrera con lealtad inquebrantable y aparte era una chica que desafiaba a los más fuertes y siempre lograba la victoria.

No conforme con eso Aiacos abrazó a su chica lo bastante mientras la pobre pelipurpura estaba muda de la impresión como de aquel lado mostrado por Aiacos

-Señor Aiacos…-La espectro super fuerte se sonrojó mientras sentía un pequeño temblor sobre su hombro derecho

-Violate, te amo…- La joven decidió corresponder el abrazo de su amado superior que por cierto estaba llorando al estilo anime, ahora la escena cambió a un Aiacos chibi abrazando a una Violate chibi de manera exagerada como Moe y kawaii mientras hacía unos pucheros de ojitos brillosos

-Te amo, Violate- Se detuvo para mirar a su amada- ¿Acaso te dije que te amo?

-Yo también te amo, Señor Aiacos- Respondió la ojicarmín mientras acariciaba el cabello del pobre Garuda el cual seguía abrazándola como si fuera un niño

-¿En serio?- Ahora tenía los ojitos morados brillosos

-Sí, te amo con todo mi ser

-Pues yo también te amo con todo mi ser- Respondió el Garuda hasta que puso sus manos sobre los hombros de su amada y ahora era el ahora o nunca

-Violate, puedes decirme todo lo que quieras pero te diré que…- Respiró hondo y suspiró pesadamente- Te deseo sexualmente

La pobre espectro quedó callada con los ojos dilatados mientras el rubor se estaba incrementando ahora en su rostro hasta parecerse un pobre tomate, se cubrió los ojos y su cara como si hubiera sido testigo de algo indecente y más de parte de su novio.

-Señor Aiacos- Hizo mohín de que tenía miedo con la cara roja- Nunca me imaginé que tuviera esa clase de pensamientos

-¡Tienes razón!- El pobre Garuda empezó a llorar al estilo anime lamentándose de su comportamiento- ¿Qué clase de persona crees que soy?

Apretó sus puños mientras hacía una mirada baja como tenue, temía que no era lo correcto para la chica espectro

-Lo sé, lo sé… Soy de lo peor y te entiendo pero…- Suspiró y tomó el suficiente valor para mirar a su novia- Violate, yo te amo… Y bueno… Es normal que piense en tener sexo contigo

La joven pelipurpura quedó muda y roja en sus mejillas pero estaba con una sonrisa, de hecho pareciera que lo suponía

-Entonces, ¿Esa era la causa de tus preocupaciones el día de hoy?

-Así es…- Decidió mirar hacia otro lado esperando una respuesta como una bofetada o alguna golpiza brutal pero lo que recibió un pequeño abrazo por parte de Violate, la chica pareciera aceptar esa proposición y quizás experimentar eso

-¿Violate…?

-Señor Aiacos… ¿Tenemos ahora sexo?

Otra vez el pobre Garuda quedó con cara de WTF, ¿En serio la joven iba a tener sexo con él? ¿Iba a verla desnuda? ¿Era difícil metérsela?

-¿Señor Aiacos? ¿Estabas pensando que me conmocionaría?- Miró con curiosidad y preocupación a su amado jefe

-¿Pero estás segura de que quieres?- Preguntó el Garuda con algo de temor de que las cosas podrían salirse mal

-Señor Aiacos…- Ladeó la mirada mientras sonreía, su sonrojo la traicionaba pero no negaba así de fácil sus sentimientos por el Garuda- Usted es la persona que más quiero en el mundo y no tengo alguna razón para rechazarlo

El espectro decidió respirar profundo y decidió mirar fijamente los carmines de su amada espectro y saber más allá que unas simples cicatrices

-Bueno… Pero si me pasó contigo pararemos, ¿De acuerdo?

Aiacos decidió quitarse la camiseta negra mostrando un cuerpo fornido como marcado, muy típico de un hombre común de su edad, a sus 22 años era común que hombres como él tuvieron un físico de puta madre, los jueces del infierno no estaban exentos después de todo para ganar una Sapuris tenían que arriesgarlo todo hasta obtenerlo.

La joven pelipurpura se acercó cerca del cuerpo musculado de su amado posando su mano sobre ese marcado, la espectro se sonrojó un poco al sentir los latidos del corazón de su amado jefe

-Violate…- Miraba al techo

-¿Sí señor Aiacos?

-Si por algún motivo cambias de opinión…

-Te digo que quiero hacerlo- Respondió alegremente la espectro super fuerte dando a entender que era su respuesta definitiva- Puedes hacerlo como lo desees

El pelivioleta decidió mirar fijamente a su amada espectro la cual le tomaba sus mejillas con ternura, el Garuda sonrió y tomó sus mejillas para darle un beso en la frente, una pequeña risa y un liguero sonrojo se impregnó en su rostro.

-Bueno Violate, te aclararé algo

-¿Qué cosa mi señor?

-Quiero cuidarte ya que te amo pero también quiero que lo hagas por mí.

-Señor Aiacos…

-Pero más allá de cuidarte…- Ahora la pelipurpura rodeó su cuello mientras el Garuda miraba con toda su alma y su ser a su linda y dulce Violate. En verdad su mano derecha en verdad era más hermosa más que lo que recordaba.

-Quiero llegar a conocerte aún mejor

-Señor…

-Shh… No me llames así, sólo llámame Sui-chan

La espectro quedó en silencio hasta que los labios de su amado espectro comenzaron a unirse de manera lasciva como ardiente, sus cabellos se caían como redes negras pero eso no impedían que su momento pudiese seguir así como así... Esa noche era como cualquiera para saber las esencias entre ambos y quizás lo más agradable entre ambos.

Una experiencia sin duda inolvidable…

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