Sinopsis

¿Qué es lo que puede esperar un caballero de Atenea al enfrentarse a la vida diaria de un estudiante de preparatoria?, deberá aprender a moverse en un mundo al que no pertenece además de buscar a sus compañeros perdidos.

Eso es lo que vive la joven caballero de Escorpio al ingresar en el instituto Sweet Amoris con la firme convicción de cumplir con su deber para la Orden Ateniense, pero nunca esperó que tendría que pasar por el drama de la vida de una adolescente común y corriente, en especial la parte del Amor y el Romance.

Prologo

Hace 100 años, durante la última Guerra Santa, los caballeros de la esperanza lograron rescatar al mundo de las perversas garras de los ambiciosos dioses. El dios Zeus, rey de los cielos, al ver lo mal que quedaron los ejércitos de todas las deidades, planteo un periodo de tregua para que se recuperaran las tropas, así como el cese de todas las hostilidades hasta que él lo indicara.

Los años pasaron y el periodo de paz parecía estable, los subordinados de los dioses mantenían la tradición guerrera solo para estar listos ante cualquier eventualidad, no para un ataque próximo.

Pero no todos estaban conformes con el tratado de paz. Unos pocos se revelaron desencadenando una gran revuelta entre los guerreros de diversos dioses, proclamaban que el tiempo de paz debía acabarse, por lo que renegaron de sus deidades y atacaron a la tierra.

Se suscitaron cientos de combates en los cuales muchos, por no decir casi todos los caballeros de Atenea cayeron. Durante los ataques algunos de los aprendices desaparecieron.

Han pasado algunos años desde el último de estos trágicos enfrentamientos y los pocos sobrevivientes tienen la misión de recuperar a los aprendices perdidos para reincorporarlos al santuario, y algunos a sus respectivas familias. Para lograr esto el Caballero dorado de Escorpio, es la única esperanza de poder liberar a los jóvenes perdidos del influjo que nubla sus recuerdos.

One history
Finally, kick in the gate of pain
My resistance
No more chance, can't escape, despair
Break out!

Pain from the dark
Your sneer is only hypocrisy
Well, say it again
I'll be the one still standing tomorrow

Yes, my scars they cut deep, see my "EMBLEM"
So set me, soul on fire
Feel my wrath unleashed and go away!

Only in the darkness can I judge the nature of your crime
I will stop this here and now for all time
I hold the fate of our nation in the palm of my hand
I can take, we can make, getting for new world
L
ΛST RESOLUTION

- He, enano. ¿Feliz de dejar el Santuario? – interrumpió su canción un joven vestido con los ropajes dorados y una cabellera larga en color verde al igual que sus ojos.

- Como no tienes idea Dai jeje – decía el joven de largos cabellos negros y mirada azulina mientras apreciaba el paisaje árido y lleno de viejas construcciones, que en otros tiempos debieron ser miles de veces más impresionantes de lo que se veían ahora

- Escorpio-sama, Piscis-sama. El Patriarca los está buscando – un jovencito castaño con toda la indumentaria de los pretorianos llego corriendo hasta donde se encontraba parado el peliverde.

- Ya vamos Ash – el moreno se giro guiñándole un ojo

- ¿Cómo te aprendes los nombres de todos esos? – preguntó con burla el santo de piscis

- Simple. Es hermano de Kenshi, uno de mis chicos…

- Sí sigues diciéndolo de ese modo pensaran que tienes un harem completo

- Jajajaja Esa es la idea jajaja – declaró antes de emprender el asenso por las, aparentemente interminables escaleras de las doce casas

Tiempo después en la cámara del trono del templo patriarcal.

- Espero que tengan todo en orden para salir a sus misiones

- Todo listo su excelencia – respondían a coro los jóvenes mientras clavaban una rodilla el suelo en símbolo de respeto

- Me alegro mucho. Piscis hay unos papeles que deseo lleves en tu viaje

- Como usted diga Patriarca – respondió solemne, pero con una sonrisa el mayor de los jóvenes

- Ve al despacho de Kratos, para que te de explique mejor.

- A sus ordenes excelencia – pronuncio antes de levantarse y emprender su camino hacia el despacho del concejero del patriarca.

- Escorpio

- Dígame su ilustrísima – respondió el menor con su típica media sonrisa

- Espero que comprendes la importancia de tu misión. El futuro del santuario y de la tierra misma depende de ello.

- Lo comprendo bien, su ilustrísima.

- Además espero que la convivencia te sea beneficiosa

- Será interesante estar con normales de mi edad – murmuro con desgano

- A tu padre le interesa mucho que aprendas a moverte entre gene de tu edad

- Sé que lo hace con buena intención, pero no necesito eso. He vivido bien así tal y como estoy

- Solo hazlo ¿quieres? – dijo en tono conciliador y amoroso, tanto así que Escorpio estaba seguro que detrás de la máscara el Patriarca mostraba una amable sonrisa.

La fría mirada del menor se suavizó, mostrando una cálida y hasta encantadora expresión en su, casi siempre, serio y burlón rostro – Lo intentare. Dígale a mi padre que prometo intentarlo

El patriarca solo asintió con la cabeza antes de que el joven escorpio dejara la sala del trono rumbo a tierras desconocidas para él, en la que sería la misión más extraña que habría pensado tener en toda su vida.