Saint Seiya

-Cantos de Ultramar-

Es el año de 1510, el Joven Cortes se separa de su hogar y su familia para seguir su destino, que lo llevara paso a paso a oponerse a la Voluntad del Dios Poseidón.

PROLOGO

LA LEYENDA DEL ATLÁNTICO

1519

El Navío español "Sta. Cecilia" navegaba tranquilamente en el océano Atlántico a 3 meses de haber zarpado de costas españolas. El cielo aun conservaba algunas estrellas, sin embargo era innegable la presencia de los primeros rayos del sol, al horizonte que quedaba atrás de su marcha. Se podía percibir por unos instantes que el Navío trataba de huir del Día, y que perseguiría a la noche hasta alcanzarla nuevamente.

Sin embargo aquello solo era una metáfora poética pues el mar era tan tranquilo en ese momento, quizás debiéndose más al hecho de que, la gran mayoría de la tripulación, permanecía dormida aun.

Mas sin embargo, un joven permanecía de pie observando el rítmico bamboleo de las olas, quien lo viera creería que se encontraba hipnotizado por algún hechizo de los seres fantásticos del mar… en conjunto con el tranquilizador ruido del mar, rompiendo su ritmo contra el cuerpo del navío.

"Nuevamente me adentro a este Océano" escucharía quien pudiese leer la mente del Joven.

"Aun pesa en mi la vidas de mis camaradas, olvidados en el fondo de este Océano"

"Y soy incapaz de olvidar esa terrible mirada… y la tristeza de la muerte de aquella inocente"

-Pero si es el Joven Cortes- dijo un marinero de alto rango -Veo que usted es todo un madrugador… ¿Acaso lo hipnotiza el Océano?, no se preocupe hace años que no desata su ira sobre nosotros, es una travesía difícil, pero la mayoría de los barcos llegan a puerto-

Los comentarios del Marinero sacaron violentamente de su ensimismamiento a Cortes, pero a pesar de eso el conservo su porte y su amabilidad.

El marinero miro al horizonte que trataban de alcanzar, ya no había estrellas pues el sol comenzaba a apoderarse totalmente del Cielo.

-Curioso el Clima- dijo al fin -¡será un día tormentoso! jeje… pero no se preocupe Joven Cortes lo llevaremos a salvo con su Excelentísimo hermano-

Cortes asintió amablemente mientras el marinero se retiraba a poner orden en la tripulación que se incorporaba nuevamente a sus labores… Cortes no pudo evitar observar como al horizonte una negra nube relampagueaba amenazante adelante en su travesía al Nuevo Mundo.

:::Continuara:::

Nota: Este fanfic hace referencia a un personaje de "El árbol de los Dioses" asi que de cierta forma este es una precuela a aquel fanfiction, espero sea de su agrado.