Descargo de responsabilidad: El mundo de Percy Jackson Pertenece a Rick Riordan.
Estas historia está dedicada a: "Sifutaborda" (Espero te guste ˆ-ˆ)
Pluzzle
"Es ella tu novia"
Leo no podía dejar de recordar las palabras acusadoras de Calipso cuando vieron la imagen de Reyna. Él no podía entender como la ninfa pensaba que la hermosa y seria Pretor podría ser novia de un pequeño y escuálido chico como lo era Leo.
La romana aspiraba para más. Ella era digna de tener chicos fuertes, viriles y protectores a su alrededor. Algo así como Jasón y Percy. No como Leo.
Sin embargo Leo no podía dejar de pensar en lo que pasaría si…
Es decir, su padre no era exactamente el hombre más apuesto del mundo y aun así su adorada madre se fijo en él…claro, su padre tenía la ventaja de ser un dios capaz de mostrar el aspecto que quiera…
Pero tampoco es como si Leo quisiera la atención de la niña romana. Él ya tenía a su Calipso que esperaría a que regrese a salvarla. Él no podía olvidar la promesa que le hizo a la semititan. No cuando ella era la única chica que se había interesado realmente en Leo.
Aunque Calipso cae en el amor con cada héroe que termine en su isla.
Sin embargo, Leo sabía que él sería el último héroe del que ella se enamorara. Calipso ya no estaría en esa maldita isla y no se vería obligada en amar a cada héroe se que cruce por el camino. Ella se quedaría con Leo y armarían su taller mecánico, serían felices por lo que les reste de vida.
Porque Calipso se quedaría con él ¿no? Ella no iba a dejarlo una vez desaparezca el hechizo de la isla ¿verdad?
-No Valdez, no debes pensar así-se regaña mientras continua haciendo lo posible por descifrar el como regresaría a Calipso.
Pero no es hasta que vuelve a ver a Reyna que sus intenciones flaquean.
La romana se ve cansada y desgastada. Su altivo porte tiene grietas por todos lados. Sus ojos muestran un vacio tan grande que Leo no sabe cómo interpretarlo.
Ella mira con ojos tristes hacia Jasón y Piper, hacia Annabeth y Percy, hacia Frank y Hazel…mira como si anhelara algo que le es prohibido. Como si no se sintiera merecedora de un cariño similar. Mira de la misma forma en que Leo ha estado mirando a sus amigos desde el inicio del viaje.
Durante unos segundos los oscuros ojos de Reyna chocaron con los suyos. Fue solo unos segundos, un momento, un instante que se perdería en el tiempo de la misma forma en que el recuerdo de Ecco desapareció…pero eso fue todo lo que Leo necesito para darse cuenta de que ambos no eran muy diferentes.
Podía verse reflejado en aquellos ojos. Podía ver reflejado el deseo de huir de todo y no poder hacerlo porque hay responsabilidades que cumplir. Podía ver como escondía gran parte de sus sentimientos tras una máscara de frialdad, de la misma forma en que él los escondía tras burlas y bromas.
Es por eso que Leo se arma de valor y busca encararla en el primer momento en que la ve sin compañía.
-Yo…puedo decirte algo-murmura Leo algo temeroso de que la romana lo degollé en ese mismo instante
-¿Qué quieres decirme?-masculla ella fulminándolo con la miraba-aun no te perdono Leo Valdez por la destrucción de mi hogar
-Sí, sobre eso…-balbucea el hijo de Hefestos jugueteando con su cinturón de herramientas-yo sé que no es una escusa. Pero estaba siendo controlado por un endoilon…y…pues yo no quería destruir tu casa.
-Tienes razón, eso no sirve de escusa-se burlo ella
Pero Leo puede verlo. Ella ya venía de un hogar roto. Una casa destrozada. Leo solo había destruido otro lugar que ella empezaba a ver como casa.
Sin darse cuenta, Leo empezó a hablar. Hablo y hablo de su vida con su madre, de lo que ocurrió en el incendio, de la culpa que sentía, del rechazo de su tía Rosa, de la colocación en el sistema y sus múltiples hogares de acogida. Le hablo de cómo se encuentra huyendo cada vez, de cómo quería simplemente irse y no ver atrás. De cómo siempre se ha sentido la séptima rueda en esa suicida búsqueda.
Reyna por su parte le devolvió el gesto contándole de su infancia en Puerto Rico. Le habla de su hermana Hylla y de su padre. Le cuenta los motivos por los que huyo de casa con su hermana. Le cuenta como conocieron a Circe y se convirtieron en sus "aprendices-esclavas". Le habla del dolor que sintió cuando su hermana la abandono para ser una amazonas. Le dice como odia que nadie pueda ver más allá de sus características frías, de cómo le molesta que nadie pueda notarla como un ser humano real en vez de un robot. De cómo Venus la condeno a estar sola por la eternidad. Porque ella sabe que un legado o un mortal no podrían comprender las magnitudes de ser una semidiosa romana hija de Belona…y un dios solo la haría sufrir.
Leo ve, como poco a poco ambos van encajando entre sí como piezas perdidas de un viejo rompecabezas. Ve como calzan cual engrane recién aceitado. Se maravilla ante la forma en que uno podía estar junto al otro sin detectar falla alguna.
Ella también puede sentirlo. Puede sentir como ambos parecen completar al otro. Puede ver como los temores de uno se ven disuadidos por el otro. Puede ver cómo podrían funcionar…
Pero Reyna tiene la peligrosa misión de llevar la Atenea Partenón al campamento mestizo para que la paz reine entre los griegos y romanos. Leo tiene la suicidad misión de acabar con un ejército de gigantes y evitar el despertar de la primordial Gea.
Posiblemente ninguno sobreviva. Posiblemente no volverán a verse después de esa pequeña charla. Posiblemente se convertirán en simples piezas incompletas…
Pero solo por ese momento pueden pensar que todo irá bien. Solo por ese momento pueden fingir que Thanatos no está esperando por ellos.
Solo por ese momento pueden dejar fluir sus sentimientos.
Griego y romana. No hay mucha diferencia en la forma de expresarse. Ambos lo saben, en su sangre corre el antiguo instinto de aprovechar las oportunidades. Así que de buena forma abrazan los besos y caricias prohibidas. Con pasión dejan que los suspiros y lloriqueos llenen el aire.
Nadie va a enterarse, nadie va a saber.
Y al final, cuando ella se tenga que ir a llevar una vieja estatua... Y al final, cuando él se sacrifique para cumplir una promesa…
Y al final cuando ninguno tenga al otro. Sabrán que el tiempo los volverá a reunir. Porque ella podría iniciar algo con un legado o un mortal. Porque él tiene algo formado con una ninfa enamoradiza.
Pero se pertenecen el uno al otro. Porque ambos son como viejas piezas de un rompecabezas que poco a poco se han ido armando…hasta quedar completos.
R&L
Tada! Leyna!
En lo particular, me gusto el Caleo en la Casa de Hades. Solo un poco en realidad, durante la primera leía…luego dejo de gustarme y termino por no gustarme al final de la Sangre del Olimpo.
Tampoco soy muy fan del Leyna pero me gusta más que el Caleo a decir verdad.
Ahora, espero que les haya gustado este oneshot. No se olviden de dejarme sus comentarios para saber sus opiniones.
Nos leemos
Cuídense
Byebye
Pd: Yeee el pedido 10/24 XDD
Pd2: Sigue un Perlia no tan Perlia…con algo de Thalico sin ser Thalico
Pd3: no me entenderán hasta que lo lean XDD
Pd4: Y de ahí…tatatataaannn un Percy/Ares *-*
