"Before the sunset"
Ya eran las 8 pm, ya me cambié, ya llamé a Jacob, también a mi madre, igual a mi padre. Ahora solo me falta llamar a Sam.
No podía entrarme en la cabeza que iría a un "internado" por mi mala conducta en mi casa, colegio e instalaciones públicas.
Tampoco me entraba que iba a terminar con mi novio por el simple hecho que estaré lejos de él y las relaciones a larga distancia no funcionan tanto… NADA, PARA MI.
La idea de terminar con él no era algo de WOW voy a morirme. Ya que nuestra relación se fue separando. Pero no estoy segura de separarme de él, igual lo quiero. Hemos compartido varias experiencias muy bonitas e inolvidables.
A veces se salía de control, y me hablaba feo, después se disculpaba conmigo. Esto pasaba muchas veces seguidas.
Cogí el teléfono y busqué en el directorio.
"Jamie Gallow"
"Jessica Stanley"
"Sam Ulley" lo encontré en el directorio y apreté el famoso botón de llamar.
Me ponía nerviosa al escuchar el timbrado de cuando llamas a alguien.
"Deje su mensaje en la casilla de voz" sonó
Me tranquilice al escuchar eso.
Fui a la cocina a tomarme un Tylenol. Me tranquilizo un poco
Insistí con que me contestara como 5 veces. A la 6ta me contestó
-Aló? – contesto my dear Sam
-Sam? Como estas? – le pregunté
-Bien Bella, tu? – dijo con una voz de sueño, era un vago, mi vago
-Igual… te - tengo malas noticias – le dije.
-Cuales? – pregunto
-Me voy, me voy del país, me voy a Jamaica a un internado – le dije tímidamente, aterrada de la respuesta.
-Te vas?, sin mi?, PORQUE?! – grito
-Sam, mis papás me enviarán, no es por que yo quiera, para nada – lo traquilizé – yo no elegí esto.
-Bella! Y que haremos, nosotros, nuestra relación – desesperado siguió
-Supongo que debemos dejar un tiempo, las relaciones a larga distancia no funcionan – le sugerí cerrando los ojos, con miedo
-No Isabella Marie Swan, tu no terminas conmigo, entendiste? Tu no eres nada sin mi, si te vas te juro que no te dejaré con…– dijo alterado. Escuchó mi suspiro, y se tranquilizó.
-Bella Lo lamento mucho, no quiero que te vayas.
-No es que no quieras, tengo que irme, y yo no quiero mantener una relación a larga distancia – dije- y es una muy larga distancia, créeme.
Lo pensó - Bueno… Terminamos – al oír esa palabra salió una lágrima de mis ojos, automáticamente.
Suspiré – Debo irme, tengo que salir en media hora – dije secándome las lágrimas.
-Chau – Dijo y colgó
Esa despedida fue la más rápida de todas mis anteriores despedidas. Fue seca y triste.
Me sentí mal, por él, por mi, por cómo se despidió de mí, sin ningún cuídate, te quiero o sin ningún llámame, te extrañare.
Empecé a llorar. Me arrepentía. En el teléfono Sam sonaba tan herido. Triste. Empecé a llorar tanto que temblé y el celular se me cayó al piso, junto con mis lágrimas.
La gente que pasaba a mi alrededor me miraba con cara de tristeza; algunos se reían o me miraban raro.
Me senté en el suelo, en medio de la recepción del aeropuerto, ya que no aguantaba tanto estar parada. No puedo creer lo tanto que me afectó al terminar con él.
Un hombre alto, de unos… 18 años, pelo cobrizo, ojos verdes, tez bronceada, guapo se acercó a mí y se sentó a mi lado.
Me sequé las lágrimas al verlo y me tranquilizé. Pensé… Es uno de los muchos chicos con los que vas a estar en la vida Bella… tranquila.
-Buen lugar para sentarse y llorar ah? – pregunto con una sonrisa torcida, como las que hacía Sam.
-Em.… Sí, estoy loca – Dije con una voz baja y seria, traté de pararme, pero no pude.
-Puedo? – se ofreció para ayudarme a pararme.
Lo miré y le di mi mano.
Me levantó y me sonrió.
-A donde te vas? – pregunto viendo mi ticket de viaje
-A Jamaica – se sorprendió, lo miré como preguntando porqué se sorprendió.
-Yo también voy ahí, a un internado, hay, a mis padres se les oc…
-A que internado te vas? – le corté la palabra.
-A "Sunset Palm", algo así. – dijo
Le sonreí, ese guapo iba a estar en el mismo internado que yo… Pero… en que estaba pensando, acabo de terminar con Sam y hace como 3 minutos estaba llorando por nuestra separación y ahora estoy pensando en nuevas relaciones?! Oh. Deja de pensar eso.
-Yo también iré a ese internado, que coincidencia – le dije – al menos tendré a alguien conocido.
-Ah! Que divertido, iremos juntos – rio – Soy Edward, Edward Cullen- estiro la mano hacia mí.
-Bella Swan
-Bella? Qué raro nombre – dijo
-Isabella, pero me gusta que me digan Bella, solo Bella – aclaré.
-Ya es hora de salir – miro su reloj- vamos a la puerta.
-Si. – Recogí mi celular del piso y lo apagué.
Avanzamos hacia la puerta de embarque de avión. Así de la nada empecé a sentirme muy bien-
"Mierda, este guapo va a ir conmigo" pensé, era una zorra, yo sé, acababa de terminar con mi novio y ahora estoy pensando en otros chicos.
Pero solo por terminar con Sam significa que debo quedarme sola por 10 años sin compañía y toda deprimida… NO, NO, NO. Si voy al internado es para hacer vida social (aparte de educarme).
"Así es Bella, iras con ese guapo a tu lado" me dije. OH SI!
Nos sentamos en la sala de espera a esperar que llamen nuestros nombres.
-Iré al baño – se paró Edward.
-Ok.
Al ver que se alejaba de mi y al ver que estaba demasiado lejos para que no pueda escuchar cogí mi celular, lo prendí y llamé a Tanya.
-Tanya! – grité en el auricular
-Bella? Ah! Como estas? Que tal? Hablaste con Sam?
-Bien, si, si hablé con Sam, terminamos, fue todo. – le dije rápido – Pero en el aeropuerto conocí a un chico…
-Oh! Me parece bien! Como se llama?! – me cortó
-Edward Cullen
-No mientas… era mi ex novio – respondió con voz seca.
-Que?! Edward Cullen?! – no lo podía creer; Tanya no era tan bonita… nada. Qué iba a hacer? No podía enamorarme del ex de mi mejor amiga.
-Si, pero no importa si te gusta, quédatelo, no me importa- respondió convencida.
-Enserio? – pregunté
-Si, enserio – toció, no la veía tan convencida – pero bella… acabas de terminar con tu boyfriend, osea… no te parece un poco pervertido?, no es por nada ya?... pero a mi si.
-Tany, yo sé, ni siquiera he dicho que me gusta, solo digo que es guapo – le explique
-Ay que zorra Bells, no creí eso de ti. – fastidio.
-Tanya! , yo no te he dicho nada para que me hables así, yo se que hago mal, pero no tienes que decirme eso.
-Pero Bella, no me parece ah. Si tú te vas a poner así, mejor me llamas cuando estés de unos mejores humores – dijo.
-Que te pasa? – grité, pero ya había colgado.
No sé que le había pasado. Nunca es así. Tal vez mi ida no le sentó tan bien o creo que nunca estuvo de acuerdo que le hablara sobre su ex novio. Pero, ¿qué culpa tenía yo?
-Volvi! Me extrañaste? – grito Edward abriendo los brazos.
-Si, mucho
-Que bueno – sonrió.
-Te puedo hacer una pregunta? – lo miré con una mirada convencedora.
-Si, claro – lo convencí
-Emm… Co…conoces a Tanya – pregunté dudosa.
-Si, era mi ex novia – respondió – puedo preguntar porque?
-No creo…
-Bueno
-Y porqué ya no es tu novia? – seguí con mis preguntas.
Tania era muy celosa, pensaba SOLO en ella, a sus amigas las cambiaba, por mi. – dijo – no me dejaba libre, era una mala persona.
Me quedé con la boca abierta. ¿Esa era Tanya? Oh… la verdadera Tania. Nada con la que yo conocía; Amable, educada, buena, solidaria, etc (todos los verbos buenos)
Tal vez había cambiado. O… no conocía la parte secreta de Tanya.
"Edward Cullen" dijeron por el altavoz del aeropuerto. "Isabella Marie Swan"
-Esa soy yo y tu! – me paré y vi mi numero de asiento – 24, tu?
-13
-Bueno te espero en la cabina – le dije
-Soy clase alta… tu también?
-Oh… no, soy económica. – me quede muy decepcionada.
-Oh… entonces nos veremos en el aeropuerto de Jamaica.
-Si, te espero ahí - respondí
Sonrió y se fue. Yo también entré en el avión. Me quedé picona por no haberme tocado con él en las cabinas.
Él entró primero. Vi donde se sentó. Sólo, en asientos de cuero con pantallas táctiles.
Todo bien, ninguna chica guapa se sentaba a su costado, libre para mi… hasta ahora.
PERO 10 segundos después que la felicidad comenzara, una chica de pelo rubio, flaca, tez pálida, alta se sentó al lado de Edward.
Ah! Que rabia. Esta fea no me va a quitar a Edward. Los ví, comenzaron a conversar.
A mí me toco un asiento alfondo, al costado de un gordo con granos por toda la cara… y que comía todo el rato. 5 HORAS CON ÉL AL COSTADO Y EDWARD FELIZ HABLANDOLE A LA CHICA DE SU COSTADO… NO, TENGO QUE HACER ALGO… ESTA NO ME LO VA A QUITAR, NO AHORA, A MI PRESA…
Me paré y me fui a la zona de clase alta esquivando las maletas de mano.