Disclaimer: The Legend of Korra es propiedad de Nickelodeon.

*Supongamos que todos iban en el mismo Kinder y bla bla bla...*

Bueno, simplemente es un pequeño makorra que escribí hoy ¿Por qué? No lo sé. Pero me encantan los fics/one-shots/drabbles donde los personajes son pequeños *n*.

Era la hora del recreo. En realidad nada fuera de lo común, pues en jardín de niños muchas cosas que haces en "clase" también las haces en recreo. Por ejemplo, dormir, jugar con legos, comer galletitas, o dibujar. Y precisamente eso estaba haciendo Korra.

-Unos toques por aquí ¡Y listo!-Sonrió orgullosa. A sus ojos había logrado dibujar un retrato digno de todo un artista -uno abstracto, quizá-.

-¡Mira Asami!-Se lo mostró con burla. Pues sabía que las simples y aburridas creaciones con brillitos y estrellas de Asami eran basura comparadas con su obra maestra.

-Está feo.-Dijo con cara de asco antes de volver a jugar con todos los brillos de colores.

Korra soltó un bufido. Probablemente sólo lo dijo porque le tenía envidia.

Tomó un sorbo de su jugo de uva para armarse de valor, y así caminar hasta Mako, quien se encontraba jugando con carritos en un rincón del patio.

-Ten, para ti.- Se sonrojó y extendió su mano para que el niño tomara el dibujo.

Él frunció levemente el ceño. Odiaba que lo molestaran ¿Qué acaso esa niña no se daba cuenta de que estaba en medio de una importante carrera de coches?

No obstante, decidió tomar la hoja.

-¿Qué es esto?-Preguntó enarcando sus cejas tratando de encontrarle forma alguna.

-¡Da!, eres tú.-Le contestó como si fuera lo más obvio del mundo.

-¡Claro que no! Yo no me parezco a esta... Cosa.-Se defendió el pequeño.

-Bueno, es porque yo te dibujé más lindo de lo que en verdad eres, niño tonto.- Le sacó la lengua, enfadada.

-¡Pero si son puros garabatos!

-¡No es verdad!-Korra hizo un puchero, e indignada se fue de ahí. Preguntándose internamente por qué le regaló uno de sus dibujos perfectos a alguien tan gruñón como él, que claramente no era capaz de distinguir el verdadero arte ni aunque lo tuviera delante de sus narices.

Mako rodó los ojos. Niñas... Eran tan molestas.

Estaba dispuesto a retomar su carrera de coches. Pero entonces reparó en unas letras negras en la parte inferior de la hoja. Tal vez el fuerte de Korra no era el dibujo, pero por lo menos su letra se entendía.

"Te quiero, niño tonto." Se leía.

Su sonrojo fue instantáneo. Quizá le debía una pequeña disculpa a la niña.

La buscó con la mirada y la encontró en una mesa, muy concentrada en lo que hacía.

-¿Qué haces?-Interrogó cuando llegó a ella fingiendo desinterés.

-Dibujo a Tahno.-Respondió todavía indignada sin mover los ojos de su dibujo.

Mako se cruzó de brazos, bastante enfadado.

Entonces Korra dirigió su atención a él. Un poco sorprendida por esa mueca extraña que tenía en el rostro.

-¡Tú sólo me puedes dibujar a mí!-Le reprochó con un deje de celos, y un adorable puchero, mientras tomaba la hoja y la hacía pedacitos.

Gracias por leer.

Cuídense :)