Feliz día, amor.

Un oneshot de Neji y Hinata por el día del amor y la amistad. ¡Felicidades!

Feliz día, amor.

-.-.-.-.-

Se sentía muy cansado al despertar, preferentemente, hubiera preferido no haberse levantado temprano o en la mañana. Se acurrucó entre las sábanas y buscó el calor del cuerpo de su esposa, pero solo se encontró con las almohadas de ella.

-¿Hinata?

Su cabeza aún le dolía un poco, y para su disgusto, la luz del sol entraba y le daba directamente en la cara, obligándolo a apartarse de la cama y buscar algo de ropa que ponerse.

-¿Qué hice anoche? -Se dijo mientras terminaba de arreglarse y peinaba sus cabellos. Fue entonces cuando se dio cuenta del desorden que reinaba en su habitación.

Prendas casuales e íntimas regadas por todas partes, sogas y cadenas, y una paleta de castigo algo vieja fueron algunas de las cosas que identificó a simple vista.

-¿Qué demonios hice anoche?

Un punzante dolor en su sien le dio a entender que lo que fuera que haya hecho sí que lo agotó, por lo que salió de la habitación y fue en búsqueda de su esposa.

-¿Hinata? -Neji entró en la cocina, y encontró un adorable desayuno para dos servido en la mesa, pero de Hinata, nada.

-En un momento voy, querido. -Se escuchó por fin la voz de Hinata, y esta entró vistiendo una yukata un tanto larga.- Feliz día, amor -Hinata abrazó por la espalda a su esposo y lo besó en la nuca, provocándole cosquillas- ¿Cómo amaneciste, Neji?

Neji se sentía como si estuviera flotando. El perfume que usaba Hinata le parecía bastante familiar...

FlashBack

Llegó un poco más temprano de lo que pensó a su casa. Estaba cansado y solamente quería comer un poco y dormir, pero también quería abrazar a su mujer, rodearla con sus brazos y tenerla toda la noche para él solo.

-Hinata, he llegado -Neji cerró la puerta detrás de él, y comenzó a buscar a su prima, ahora esposa, por la parte baja de la casa, sin éxito alguno- ¿Hinata?

Subió hasta el dormitorio de ambos con la esperanza de encontrarla, más no estaba ahí. Notó que sobre la cama había prendas interiores demasiado sugestivas (para lo que conocía a su esposa) e imaginarla con dichas prendas puestas le provocó una extraña sonrisa.

-¿Neji? -Hinata entró al cuarto y descubrió a su esposo con las manos en la lencería- ¡Puedo explicarlo!

El aludido soltó la ropa y vio cómo Hinata la tomaba y trataba de esconderla inútilmente.

-¿Es tuya? -Preguntó Neji de forma divertida y Hinata se sonrojó a tal punto que parecía un fierro al rojo vivo.

-B-bueno, y-yo p-pensé que a-a lo mejor te... gustaría... -Le dijo con un tono de voz que iba disminuyendo- Y yo quería, bueno, quiero darte un regalo, pero...

A pesar de estar cansado, Neji sonrió, y tomando la prenda, se la acercó.

-¿No tienes más cosas? Es decir -Un extraño sonrojo se apareció en las mejillas de Neji- si lo que quieres es hacer algo interesante...

FlashBack End.

Perfecto, Neji recordó MUY BIEN lo que había hecho con Hinata; después de ayudarla a ponerse la prenda exótica, hicieron uso de cuanto objeto que les prometiera una experiencia sexual novedosa, él le puso a Hinata el perfume que le regaló Kakashi en su cumpleaños, se terminaron las dos botellas de licor que les regalaron el día de su boda y en su mente recreó todo el recorrido amoroso que realizaron a lo largo de su casa, desde el pequeño armario de la planta baja donde hallaron las cuerdas, hasta el dormitorio, donde dieron rienda suelta a varias fantasías.

Y a menos que su mente le jugara bromas pesadas, Hinata le había dicho esa noche que le tenía un regalo.

-¿Niisan? -Hinata soltó a Neji y, preocupada, puso una de sus manos sobre su frente- No tienes temperatura, pero te sientes un poco caliente. ¿Estás bien?

-Me duele un poco la cabeza, pero no es nada alarmante. -Fue la respuesta breve de Neji, y se sentó frente a su desayuno.

Hinata se separó un poco de su esposo y le sirvió una taza de té; después de cerciorarse de que él comenzó a probar lo alimentos, salió de la cocina y regresó con un paquete envuelto en papel rojo con un listón blanco.

-Feliz día, amor -Hinata le dio un beso completamente pasional a su esposo en boca, y este casi se atraganta por lo súbito del acto- Sé que te va a gustar.

Neji se pasó lo que estaba desayunando, y pensando que Hinata podría intentar otro gesto como el anterior si no abría el regalo, hizo a un lado su desayuno y comenzó a estirar del listón para quitarlo de la caja.

Al ver el contenido de la misma, pasaron muchas cosas por su mente, pero no supo expresar ni una. Se limitó a levantarla pequeña ropita de color celeste y Hinata le sonrió aún más.

-Júrame que es una broma, Hinata -Neji paseaba la vista de la prenda a su esposa de manera consecutiva- ¿Desde cuando...?

-Tres semanas y media -Fue lo que le respondió Hinata, y Neji se lanzó sobre ella; la besó con pasión y regresó su vista al contenido de la caja.

-¿Estás segura? -La sonrisa de Neji aumentó aún más, y para su contento, Hinata asintió.

-Completamente Neji. Fuí con Sakura ayer, e Ino y Shizune confirmaron mis sospechas -Hinata acercó su silla y recargó su cabeza en el hombro de su esposo- A mi me gustaría tener dos niñas y un niño. ¿No crees que sería muy lindo?

Neji rodeo a Hinata con sus brazos y la estrechó, la volvió a besar tanto en su boca como en su frente. Después, un solo recuerdo, específicamente hablando, la imagen de Hinata vaciando un vaso de licor, lo puso en alerta.

-¡¿Y qué rayos haces?! -Neji salió corriendo y al volver le puso sobre la yukata una enorme cobija- Aún estamos en invierno, no deberías descuidarte, tampoco debes esforzarte, y mucho menos beber. ¿Sabes lo que le sucede a los hijos de madres alcohólicas? Tienen dificultades, a veces nacen con bajo peso o...

-Tranquilízate -Hinata tomó las manos de su esposo- Eso no pasará, y si ocurre algo malo, lo afrontaremos juntos.

La noticia no sorprendió a sus familiares y amigos, pero si les justificó realizar celebraciones en cada sitio al que visitaran, pese a que Neji prefería mantener a Hinata alejada del bullicio para no estresarla de más, y esta solo deseaba (en sus primeros meses) que el piso dejara de moverse.

Cumpliendo los 4, todas sus amigas lograron convencer a Neji de que ellas eligieran los decorados y las primeras ropas del bebé, abarcando desde frases con indirectas hasta debates existenciales sobre lo que se debía y no comprar.

-Si quieren comprar tanta basura para un bebé... ¿Por qué mejor no se casan y tienen el suyo?

Una enorme sensación de hostilidad rodeó a Neji, y de no ser por que a Hinata le encantaron las cosas, Neji no hubiera tenido paz en mucho tiempo.

-¡Tenemos que hacer una fiesta de bebé! -Gritaron al unísono para terminar de crispar los nervios de Neji- Y te lo hacemos cuando tengas 7 meses, así podremos juntar TODO lo que necesitamos.

Los dientes de Neji se redujeron por 3 milímetros; al menos, eso fue lo que le dijo el dentista de Neji a Hinata.

Al cumplir los seis meses, Neji quería acompañar a Hinata a su cita, pero esta logró evitarlo.

-Prométeme que me dirás el género de nuestro hijo. -Fue la única petición que le hizo, pero Hinata no parecía querer saberlo.

Durante la cita, Ino trató de mantenerse neutral, pero la curiosidad y el deseo de conocer la reacción de Hinata le ganó a ella.

-¿Quieres saber el sexo de tu bebé? -Le preguntó Ino, sin embargo, Hinata negó con la cabeza- ¿Por qué? creí que a eso venías.

-Vine a mi revisión, pero quiero que el sexo del bebé sea sorpresa. -Hinata acarició su vientre- Sé que Neji está impaciente por saberlo, pero creo que es mejor si lo sorprendemos.

Y aunque Hinata se sentía eufórica por dejarlo en secreto, Neji no compartió su opinión por unos días.

-¿No pudiste pedirle que te lo escribiera en un papel?

Y así estuvo Neji por un mes completo, aunque sus reclamos fueron abatidos por las muestras de cariño de Hinata, y el hecho de saber que en muy poco tiempo serían padres hacían que olvidara esos humorísticos ratos que le hacía pasar Hinata.

Más aún, ya que terminando el mes, Hinata sintió las primeras contracciones. Neji se aterrorizó, y aunque trataba de disimularlo, era evidente que no podía soportar la presión y la ansiedad.

Fueron horas de la primera etapa, mismas en las que ambos trataban de consolarse haciendo comentarios sobre el bebé, hasta que inició el parto y fue imposible para Neji hacer cualquier cosa por su esposa, ya que terminó desmayado en el piso, producto de la presión y la ansiedad del momento.

Cuando despertó, trató de correr, cosa que le impidieron, en búsqueda de su esposa, hallándola en otra habitación con un pequeño bebé dormido en brazos.

-Neji, cariño -Hinata, pese a que se veía agotada, sonreía como algunas ocasiones contadas en vida, mismas de las cuales Neji fue testigo- Es hermoso. ¿Verdad?

El bouke se acercó hasta su esposa, y tomó a su hijo somnoliento con mucho cuidado.

-Bienvenido al mundo, Hiro.

FIN

¿Qué? Solo es un oneshot, y solo me queda decirles dos cosas. Una, hoy 14 en un día luctuoso, Vicente Guerrero fue fusilado, por eso se le honra, y dos, es el día del amor y la amistad, de ahí que surgiera este fic. Gracias por leer, y suerte.