Disclaimer: Harry Potter y sus personajes le pertenecen a J.K. Rowling y la trama a RavieSnake.
Esta es una TRADUCCIÓN AUTORIZADA, la autora del fic es RavieSnake y ella muy amablemente accedió a dejarme a traducir. El título del fic es Five Days lo que en español se traduce "Cinco Días".
Link de la historia original en el inglés: /s/12112 901/1/Five-Days (copie y pegue sin espacios)
Esta historia sólo será publicada en esta página, si la ven en otro lado por favor avísenme.
Rated M por lenguaje.
Advertencia general de la historia: incluye condiciones claustrofóbicas y representaciones gráficas de lesiones y enfermedades.
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"Cada segundo que aspiraba, el olor del pasto, el frío aire sobre su rostro, era tan precioso;
Y pensar que las personas tenían años y años, tiempo que gastar, tanto tiempo recorrido, y él se estaba aferrando a cada segundo"
- JK Rowling, Harry Potter y las Reliquias mortales
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Chapter 1: Día Uno: Mañana
—Granger, quítate de una puta vez —gruñó Draco mientras parpadeaba contra la débil luz, la suciedad y el polvo flotante. Hermione simplemente tosió a los escombros en el aire.
—Y joder, cubre tu boca —dijo él.
—No… no puedo —gruñó de vuelta Hermione al tiempo que intentaba extraer sus brazos que estaban atrapados en ángulos extraños, el derecho estaba metido entre ellos de alguna manera y el izquierdo se aplastaba entre su lado y el extremo sobresalido de una afilada pared de piedra. Los ojos de Draco se ampliaron mientras ella intentaba moverse.
—Y aleja tu mano de mi polla —demandó. Hermione dejó de moverse y fulminó con la mirada al hombre que estaba presionado directamente contra ella.
—No quiero tocar tu preciosa polla —cortó ella— Estoy tratando de liberar mi brazo.
—Bueno, haz otra cosa porque justo ahora no me gustaría ser toqueteado.
Hermione continuó fulminándolo mientras inclinaba su cabeza para mirar entre ellos. Dejó salir un suspiro irritado cuando vio que su mano estaba de hecho frotándose directamente contra su entrepierna. Subió la mirada de nuevo a él.
— ¿Puedes mover tus brazos? —preguntó ella. Draco gruñó con molestia pero torció su cuerpo en el estrecho espacio y trató de destrabar su brazo derecho que estaba atrapado de algún modo tras él y su brazo izquierdo que estaba atorado y acuñado a un lado de ellos, su codo doblado contra la pared opuesta a él por lo que su mano y su antebrazo estaban levemente arriba del nivel de sus caras colgando de una manera rara.
Su manga estaba alzada y desde ese ángulo se exponía claramente su Marca Tenebrosa.
Hermione alejó su rostro de esa visión. — ¿Podrías por favor mover eso? —chasqueó ella.
—Lo estoy intentando, maldición —dijo Draco a través de dientes apretados al tiempo que intentaba librar su brazo variando su peso.
— ¡Aaahh! —gritó Hermione cuando su hombro derecho se presionó contra ella dolorosamente mientras él trataba de girar —. ¡Detente! ¡Me estás lastimando!
Draco solo se movió más fuerte. — ¡Solo cállate! Estoy… estoy tratando de… ¡aaahh! ¡Maldita sea! —rugió él en frustración, sacudiéndose con violencia.
— ¡PARA! ¡PARA! —rogó Hermione mientras era empujada por sus movimientos contra la piedra dura y polvorienta.
— ¡Tenemos que salir de aquí! —Draco le gritó, el pánico naciendo en su voz.
— ¡Cálmate! —ordenó Hermione— Entrar en pánico no nos servirá de nada.
— ¡Jódete! —gritó de vuelta mientras intentaba girar su cuerpo con fuerza de nuevo. Hermione chilló de nuevo y luego empuñó su mano derecha para golpearlo directo en las joyas. Finalmente él dejó de moverse.
— ¡Aaah! Granger… —dejó salir—… ¿qué mierda?
—Necesitas calmarte —insistió ella otra vez al tiempo que Draco inclinaba su cabeza tan lejos como podría sin tocarla y respiraba agitadamente.
—Así que… ¿así que me golpeaste? —jadeó.
—Funcionó —fue todo lo que ella dijo.
Draco enderezó su cabeza de vuelta y le frunció el ceño. —Zorra —dijo mientras le daba un fuerte rodillazo en el muslo.
— ¡Imbécil! — gritó ella, pateando sus pies contras su espinillas. Ambos procedieron entonces a luchar furiosamente con sus cuerpos acuñados contra el otro, golpeando y pateando lo que encontraran.
La pelea física duró un total de treinta segundos pero terminó con ellos dos colorados y sin aliento.
—No podemos… seguir… así… —jadeó Hermione, haciendo una mueca cuando Draco le propinó una patada final. Él no dijo nada pero asintió a regañadientes antes de dejar caer su cabeza hacia atrás contra la piedra y cerrar sus ojos mientras trataba de recuperar el aliento.
—Esto no pasó —dijo, suplicando— Esto no está pasando. Esto de verdad no puede estar pasando.
Hermione dejó caer su propia cabeza y lo observó por un momento antes de recorrer su mirada por alrededor para finalmente averiguar cuán grave estaba su situación.
Era grave.
La grieta en la que estaban atrapados era amplia. Extendiéndose mucho más arriba de ellos a cada lado de sus cuerpos acuñados, pero las paredes solo se separaban más. Tal parecía que habían tenido "suerte" de no haber caído completamente hasta el final sino justo en el punto más estrecho.
—Por lo que parece, estamos alrededor de… diez metros bajo tierra —dijo ella después de un tiempo, bizqueando sus ojos hacia arriba de ellos—. Aunque no puedo inclinar mi cabeza lo suficiente como para tener certeza.
Draco abrió sus ojos para mirar arriba a la grieta en la que se habían caído y las paredes que se alzaban sobre ellos.
—Así que nada de escalar —murmuró él. Dio otra sacudida tentativa y añadió — Si es que alguna vez nos desatoramos.
Él trató de mirar abajo pero encontró su vista bloqueada por sus cuerpos y su rango de visión limitado por su propio brazo. — ¿Y qué tal abajo? —le preguntó a Hermione que sí era capaz de mover la cabeza lo suficiente para ver más allá de sus pies. Ella dirigió su mirada abajo.
—Está muy oscuro como para decir algo —ella respondió— Solo es negrura.
Draco gimió. — ¿Qué tan buena eres en magia sin varita? —inquirió. Al ver su ceja levantada él refunfuñó.
—Mira si puedes convocar nuestras varitas, —dijo él. Hermione lucía dudosa pero asintió en confirmación y concentró su mente en el hechizo.
— ¡Accio varita de Malfoy! —llamó ella. Ambos miraron arriba a la expectativa y, cuando una pequeña varita vino rodando por un costado del borde de la grieta sobre ellos, jadearon emocionados. Observaron la varita cayendo hacia ellos y rápidamente enderezaron sus cabezas atrás al tiempo que ésta caía en medio de sus cuerpos justo donde sus pechos estaban presionados juntos, a la derecha de Hermione y a la izquierda de Draco. Se balanceó precariamente allí y ambos Draco y Hermione se la quedaron mirando con temerosa anticipación.
— ¿Puedes alcanzarla? —susurró Hermione. Draco la fulminó.
— ¿Acaso luce como si yo carajo pudiera? —preguntó él, inclinando su cabeza en dirección a su brazo atrapado. — Mira si puedes cogerla con tus dientes —en cambio sugirió.
Hermione rodó sus ojos. — Eso es menos probable que tú tomándola con tu mano —ella pareció pensativa por un momento— Quizá… quizá podría trabajar porque está tocándonos —dijo ella— Prueba y conjura algo.
Draco frunció el ceño levemente pero miró a la varita entre ellos— Um… Lumos —intentó. Nada pasó.
— ¡Lumos! —gritó Hermione. No hubo reacción y ambos suspiraron con decepción.
—Bueno, ahí va esa teoría. ¿Alguna otra brillante sugerencia? —dijo Draco arrastrando las palabras.
—Trata y conjura un Accio varita hacia tu mano—dijo ella— Pero ten cuidado y no lo hagas... –
— ¡Accio varita!
—Con tanta fuerza… —Hermione terminó su oración en voz baja al tiempo que ambos veían la varita zumbar como un disparo desde donde estaba hasta azotarse dentro de la palma de él y luego caer en picada en el abismo donde él era incapaz de agarrarla con suficiente rapidez.
— ¡MIERDA! —rugió Draco. Hermione lo incitó a que se callara y luego inclinó su oído hacia abajo.
—Maldita sea, —dijo ella un momento después, alzando su cabeza.
— ¿Qué? —dijo Draco con el ceño fruncido.
—Estaba escuchando —explicó ella— a ver si podía escucharla chocar con el fondo y así poder cuán profundo va este agujero.
— ¿Y?
—Y no pude oír nada.
Draco dejó caer su cabeza hacia atrás. —Adorable —suspiró pesadamente— ¿Y tu varita?
—Está encerrada en mi baúl de especímenes, —respondió Hermione arrepentida—Así que, a menos que quieras una caja pesada de madera llena de frascos de vidrio cayendo aquí, mi varita no es una opción.
Draco frunció el ceño y permanecieron en silencio por un momento hasta que él habló de nuevo— ¿Quién sabe que estás aquí?
Hermione exhaló inquieta. — Nadie — respondió en voz baja—. Yo… yo hablé con mi mamá por teléfono justo antes de dejar la casa… le dije que iba a salir, pero no a dónde.
— ¿Y Weasley? —inquirió Draco— ¿O Potter?
Hermione sacudió su cabeza. —Están fuera en una semana en el campo… la fase final de su entrenamiento de Auror. Se fueron hace dos días a destinos desconocidos —dijo ella tristemente— ¿Y tú?
—Nadie sabe que estoy fuera —respondió Draco. —Mis padres están aún bajo arresto domiciliario y regularmente yo me quedo en otra parte. Será muy tarde para cuando se empiecen a preocupar…
Él cerró los ojos y también sacudió su cabeza contra la pared rocosa.
—Vamos a morir aquí dentro —suspiró él— Eso es todo… la línea Malfoy termina conmigo pudriéndome en un hoyo junto a una sangresucia.
Hermione fulminó con la mirada la Marca en su brazo y arrugó su nariz. — Yo no estoy completamente emocionada con la posibilidad de permanecer atrapada junto a ti tampoco, sabes.
—Bueno, tal vez si simplemente hubieras hecho como yo te dije, no estaríamos aquí —dijo él.
—Tú fuiste el que invadió mi búsqueda —Hermione lanzó de vuelta— Si la culpa es de alguien, es tuya.
— ¿¡Mi culpa!? —dijo él indignado, abriendo mucho los ojos— Si solo me hubieras escuchado –
— ¡No soy tu maldito elfo doméstico que solo toma órdenes, Malfoy! —interrumpió Hermione furiosa.
Draco se mofó. —Fue una simple sugerencia de que te movieras, tú idiota insufrible— dijo él hirviendo con rabia— No una orden para brillar mis putos zapatos… no que alguna vez confiaría en tus torpes manos para tocar mis zapatos.
Hermione lo fulminó con la mirada, labios cerrados en una fina línea. — ¿Torpes? Tú ni siquiera pudiste convocar tu varita que estaba a unos pocos centímetros de distancia —replicó ella—. Solo la dejaste caer. Es un misterio cómo llegaste a ser Buscador con tan pobres reflejos.
Él arrugó sus ojos. — Era un maldito buen buscador.
Hermione bufó con burla. —Harry te vencía cada vez.
—Potter es un bastardo tramposo —gruñó Draco y Hermione se rio.
—Celoso, ¿eh? —dijo ella, — Siempre estuviste celoso de él.
—Sí, toda la puta razón —dijo entre dientes. Entonces, él arrugó su cara al tiempo que retorcía su cuerpo dentro del estrecho espacio.
—Detente —gruñó Hermione adolorida de nuevo cuando el hombro derecho junto con la cadera de él la empujaron más bruscamente dentro de la piedra alrededor de ellos.
—No —dijo Draco —. Voy a salir de este maldito hoyo —él se impulsó colocando los pies alrededor de las pequeñas salientes de rocas al lado de ellos y cuando sintió un sitio firme, intentó empujarse a él mismo con sus piernas. La acción logró moverlos a ambos hacia arriba levemente pero forzó a su brazo acuñándolo contra una piedra afilada. Él maldijo e inmediatamente los dejó descender a su posición previa cuando sangre empezó a derramarse por su brazo.
—Carajo —dijo él, girando su antebrazo tanto como pudo para ver el largo corte que la piedra había hecho en su piel.
—Eso fue brillante —musitó Hermione secamente y con una mueca —. Ahora que has logrado cortarte a ti mismo y arañar mi espalda como un infierno contra estas rocas, ¿crees que podrías dejar de ser estúpido?
—Estoy tratando de salvar nuestros traseros —Draco le espetó— No puedo hacer eso estando sin hacer nada.
Hermione exhaló profundamente y volvió su atención hacia la entrada de la grieta. Ella bizqueó contra la pequeña cantidad de sol que se filtraba hacia ellos y entonces gritó.
— ¡AYÚDENNOS!
—Por amor a Merlín —Draco se encogió cuando su voz resonó alta alrededor de ellos, pero Hermione siguió.
— ¡AYUDA! ¿PUEDE ALGUIEN OÍRME? ¡AYÚDENNOS!
— ¡PARA! —Draco gritó por encima de ella— Suenas como un animal moribundo. Vas a atraer predadores.
Hermione se detuvo y alzó una ceja en su dirección. —Actualmente somos animales moribundos.
Draco parpadeó y luego alzó su cabeza. — ¡AYUDA! ¡AYÚDENNOS!
Hermione rodó los ojos una vez antes de gritar de nuevo. Migas de polvo de arriba se liberaban, tierra polvorienta proveniente de las paredes caían sobre ellos al tiempo que sus gritos combinados salían de la grieta y vibraban contra ellos. Continuaron por varios minutos hasta que el polvo se volvió mucho y Hermione comenzó a toser de nuevo.
Draco ladeó su cabeza lejos de ella cuando lo hizo y un trozo de tierra cayó directamente dentro de su ojo derecho.
— ¡Joder! —chilló él, cerrando su ojo contra el material externo. Él intentó extraer su mano para frotarlo, pero no pudo lograrlo. Abrió el ojo solo para cerrarlo de nuevo cuando el dolor se volvió demasiado. Involuntariamente lágrimas se derramaron por sus mejillas mientras Hermione continuaba tosiendo y estornudando. Fue después de varios minutos que el aire se aclaró, la tos seca de Hermione se detuvo y las lágrimas de Draco eliminaron el sucio.
Hermione intentó calmar su ritmo respiratorio mientras parpadeaba en la dirección de Draco a través de ojos llorosos. Él parpadeó de vuelta con ojos igualmente llorosos y dejó caer su cabeza contra la piedra de nuevo.
—No más gritos —inhaló él en voz baja. Ambos se quedaron callados y alternaban entre cerrar los ojos y mirar hacia arriba a la luz que no tenían esperanza de alcanzar.
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N/T bueno mis queridos lectores, les traigo una nueva traducción! que la verdad tenía planeada desde hace tiempo pero no pude publicarla hasta ahora… esta historia siendo un poco diferente a What The Room Requires pero igual de cautivadora en mi opinión ;) espero que les haya gustado así sea un poquito este primer capi e intrigado también... todo se irá desenvolviendo... y bueno, sigo diciendo que no soy experta en esto de las traducciones, así que si ven algo raro o que no concuerde, por favor digánmelo, traducir es un proceso de continuo progreso.
Por último, gracias enormes Doris por ayudarme a revisar este primer capi, ¡eres genial!
Sin más, nos leemos, ¿pronto? Jaja
Oh and Ravie, if you read this, THANK YOU AGAIN!
