La miras de costado, por el hombro, por atravez, por debajo, sobre, pero sin embargo la miras porque te gusta la gracia con la que mueve sus dedos por las puntas del firme papel con el cual todos los libros están fabricados.Y la miras porque te gusta como el viento escurridizo choca contra sus mechones de pelos acomodados por detrás de su oreja y encierran esos mechones entre dos paredes cristalinas llamadas "Ojos".La miras porque te gusta como utiliza sus suaves dedos para enganchar sus mechones nuevamente con su oreja como peque~os ratones que i6ntentan huir.Y la miras porque te gusta que cambie de vestuario cada eterno amanecer.Y la miras porque cada uno de esos vestuarios son de tu total satisfacción. Y la miras porque sientes que cada vez que se viste con un diferente atuendo, se viste para que solo tu la observes.Y la miras porque consideras tierna la forma en la que las suelas de sus variados zapatos se amigan con la sucia tierra creciente del suelo.Y la miras porque te gusta la forma en la que lleva su brazo a las profundidades de su bolso y cuidadosamente revuelve la jungla de objetos simplemente para encontrar la palmera que necesitaba en ese mismo momento.Y la miras porque te gusta cuando el sol se posa sobre sus genuinas mejillas y las hace resplandecer por entre los arboles y plantas extravagantes.Y la miras porque cada uno de los variables rostros que se posan sobre su expresión facial logran hacerte curvar tus labios.Y la miras porque te entusiasma la forma en la que acomoda su dedo indice sobre el horrocrux con forma de un collar serpentino para que de una vez por todas sepamos como hacerlo desaparecer de la faz del universo.Y la miras porque te enorgullece que, a pesar de no tener tarea de Hogwarts, saque sus inmensas carpetas llenas de escrituras y las siga con la vista, una, dos, tres, o cuatro veces al día.
Pero lo que más te gusta de mirar a Hermione es cuando tambalea sus labios hasta los tuyos para poder eliminar el contacto visual.
