Hola~ :)

Después de un tiempito si publicar algo... les traigo este corto fic que constara de 3 capis n_n/ Originalmente iba a ser un one-shot, pero me he bloqueado horrible XDD asi que decidi el dividirlo e irles mostrando lo que llevo de este fic :) mas que nada también a ver si la idea gusta XD

Muchas cosas me inspiraron a esto, a pesar de que ahora estoy en blanco XD, asi como el dorama de Coffee Prince y la cancion de Smile de B1A4~ a pesar de que lo que escribi no tiene parecido con esas dos cosas pues sirvieron de inspiracion ;) incluso, lo que leeran a continuacion en esta primera parte la tome del dorama, adaptandola a los personajes y ambiente.

Disclaimer: Hetalia no es mio, el dorama de Coffee Prince tampoco y Smile de B1A4 mucho menos ¡Nada lo es! salvo este humilde fic en el cual estoy trabajando poco a poco y con mucho cariño para el fandom.

Aclaraciones: OOC. AU. Uso de nombres humanos. Humor-Romance (mas lo ultimo que nada)

Bueno, que no se diga mas~ ¡Espero les guste!


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New Feeling

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Arthur Kirkland era un joven ingles quien cumplió los treinta años recién. Era inteligente, buen trabajador, muy guapo y, a pesar de su personalidad un tanto peculiar en ocasiones, todo un caballero. Sin duda, como muchas mujeres solían decir, un buen partido como pareja. Y, para agregar, el mejor candidato a marido, tal y como también se murmuraba entre el personal femenino de su lugar de trabajo.

Sí, eso quería él en esos momentos, dar el paso inicial para convertirse en el esposo de quien amaba. Ambos llevaban saliendo ya un tiempo, como dos años más o menos, y ya era momento de subir de nivel, como decía constantemente Francis, en tal relación.

Y, por primera vez desde que conocía a ese rubio francés, iba a tomar consejo de su palabra.

Por lo tanto, ahí está él… frente a la joyería más fina y costosa de toda la ciudad, observándola desde la entrada divagando en ciertos recuerdos, al mismo tiempo que se disponía el ir hasta adentro en busca de lo que necesitaba. No es que no estuviera seguro, nada que ver, lo había pensado durante un tiempo, uno no muy largo, y ahora estaba lo suficientemente seguro el ir y proponerle matrimonio a su pareja; en realidad, no se recordaba a él mismo estar tan seguro en algo en su vida, y tal cosa le motivaba.

Se alisó un poco el elegante traje que llevaba puesto, que usaba porque venía de su trabajo, tomó aire y sonrió listo para adentrarse al edifico.

Una vez adentro la enorme cantidad de joyas y de más le recibió. Se quedó boquiabierto al detallar el lugar; todo estaba muy ordenado, las joyas separadas por tipo, categoría, estilo… y hasta en forma que ni tenía la más mínima idea.

Salió de su trance cuando una mujer, varios años mayor que él, se le acercó con una sonrisa amable con intensión de atenderle.

-¿Algo en que podamos ayudarle, joven?- ofreció, con la actitud característica de un empleado hacia el cliente.

-S-si- se aclaró la garganta, recuperando la compostura, y le comentó a la mujer lo que exactamente estaba buscando y necesitaba.

Ella rió levemente, sin burla ni nada, al darse cuenta de sus intensiones y que se le notaba un poco nervioso a pesar de que seguridad era lo que le sobraba.

-Sígame- le indicó con la misma amabilidad anterior, trasladándose hasta la vidriera principal, justo donde estaba lo que el oji esmeralda buscaba.

Sin decir nada más, la siguió sin evitar poder mirar a su alrededor, aún seguía bastante impresionado, ni se imaginaba que un lugar así podía existir.

Llegaron hasta allá y la empleada se colocó un guante de fina tela en una de sus manos e inició a mostrarle y ofrecerle la diversidad de modelos, tamaños, estilos y mucho más que había de tal joya.

Arthur prestaba atención a cada una de ellas, buscando que alguna le hiciera recordar a la persona a quien se la iba a entregar, pero le resultaba un poco difícil…

-Joven- ella, al percatarse de su indecisión, le llamó sin apartar la vista de lo que hacía- ¿Cuál es la edad de la novia?- y le miró esperando rápidamente la respuesta, una vez que dejó algunas de tales joyas sobre el mostrador.

-¿No… via?- se tensó, sin que se notara, y evitó la mirada paciente de la mujer- E-ella tiene veinte cuatro- sonrió, algo incómodo por la situación, simplemente sin poder evitar ponerse nervioso ante tal pregunta. Es que, su pareja no tenía nada de novia.

-Comprendo- totalmente ajena a lo que el rubio pensaba, señaló hacia unas de las joyas que recientemente había sacado de su lugar- Me parecería esta- la sacó de su cajita y se la mostró- Es sencillo, elegante y bastante femenino. Lo amará-

Arthur no pudo evitar cambiar su sonrisa anterior por una más natural, si tal personita escuchase tal cosa de seguro se sentiría bastante ofendido.

-Él… -rápidamente rectifico- Ella no es para nada femenina-

-Oh…- se extrañó, pero rápidamente siguió mostrándoles otros modelos.

Arthur veía cada una de ellas, en donde una era más hermosa que la otra, pensando que debía tomar una decisión rápido, no podía estar toda la vida en tal posición…

Pronto será el momento definitivo, hará su propuesta y esperaba con todo el corazón obtener la respuesta que mas deseaba. Sentía que todo se derrumbaba si tal cosa no sucedía…

-Me llevare este…-

-Perfecto-

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¿Continuará?

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¡Lista la primera parte! ¿Que les parece? ¿Debo continua? :o no hay lio, aunque a nadie le guste yo lo acabé XD no me gusta dejar las cosas a medias, mas cuando ya me falta poco para acabar completo el fic.

La segunda parte esta casi lista, solo tengo que editar unas cositas, en un par de dias estara subida :)

Sin mas, espero les haya gustado esto y que animen a seguir leyendo~ Es la primera vez que toco un tema, a fondo, como este y quiero que salga algo lindo XD

¿Opiniones? :o Son libres de dejar un review, si quieren uwu

¡Gracias por leer! Hasta la próxima~