Mi primer fic de hetalia, y mi primer fic con yaoi de verdad...así que tal vez no se me dé bien….espero que les guste este primer capítulo..

HETALIA AXIS POWERS NI SUS PERSONAJES ME PERTENECEN SON PROPIEDAD DE HIDEKAZU HIMURAYA AL IGUAL QUE LAS CANCIONES UTILIZADAS EN EL FIC, LO UNICO QUE ME PERTENECE ES LA TRAMA Y LOS MEXICOS.

Les hare una simple aclaración, María en el mundo de hetalia seria México del norte y Pedro México del sur

Ahora sí, disfruta del primer cap.

Boston, Massachusetts, Estados Unidos de América

5:17 p.m.

Casa de la familia Jones

Simplemente quería correr hacia el edificio más alto que existiera y lanzarse desde el último piso, se negaba completamente a ir, ¿a quién demonios se le había ocurrido inscribirlo ahí?, ah! Su bella y amorosa madre.

— Vamos Alfred, dale una oportunidad a la escuela, ¿sí? — escucho la voz de su mamá hablándole dulcemente.

El chico dejo de mirar la ventana para voltear a ver a su mamá, los ojos azules de este mostraban furia por una simple razón. A su madre se le ocurrió inscribirlos a el junto con su hermano, del cual no recuerda su nombre, a una escuela de música, si escucharon bien una escuela de música, el sabia a la perfección que no tenía ningún talento tanto en la música como en el baile, por lo menos su hermano sabia tocar el piano y cantar un poco, ¿pero él?

— Vamos Allie, hazlo por tu mamá, ¿Si? — el joven soltó un suspiro de resignación.

—Está bien mamá, lo acepto—dijo en voz baja

—Ya sabía que mi bebé aceptaría— dijo lo mujer mientras se paraba e iba a abrazar a su hijo el cual solo se dejo abrazar.

—Pero solo lo hago porque soy un héroe, y los héroes no rechazan ningún desafío—dijo el chico para después empezarse a reír de manera estruendosa

— Claro Alfred—contesto ella con una sonrisa— ahora déjame ir a preparar la cena, y tu ve a alistar tus maletas, recuerda que tienes que irte a California.

El chico asintió lentamente, y se fue a la sala de su casa, encontrándose con su hermano gemelo, Matthew, ambos fueron separados después del divorcio de sus padres cuando ellos tenían 7 años, cuando su padre murió cuando ellos tenían 13 años y Matthew regreso con su mamá, pero a pesar de eso conservo el apellido de su papá, ahora ambos tenían 16 años, y eran buenos hermanos (aunque Alfred siempre olvide el nombre de su hermano).

El rubio de ojos azules y lentes, mejor dicho Alfred, se sentó, o mejor dicho se aventó, a un lado del rubio de ojos amatistas y lentes, dándole un susto de muerte al menor.

—Alfred me asustaste— dijo en voz baja el de cabello rubio del cual sobresalía un rizo— ¿aceptaste?

— Si — dijo el ojiazul viendo a su hermano.

—Que bueno— dijo sonriente— así estaremos los dos juntos.

Y así continuaron todo lo que restaba del día. Al día siguiente ambos se levantaron temprano para ir al aeropuerto, allá su mamá lloraba como si fuera el fin del mundo, abrazaba a ambos chicos, les daba besos en las mejillas, se la pellizcaba , para la vergüenza de Alfred ya que varias chicas se reían de esto.

Ambos chicos abordaron el avión, no sin antes ver un drama hecho por su progenitora, ambos solo le sonrieron y subieron al avión para ir hacia California.

Los Angeles, California, Estados Unidos de America

2:33 P.M.

Camino a World Music School

— Eso fue cansado—menciono Alfred estirándose lentamente, en el asiento del taxi.

—Lo sé— contesto el de ojos amatistas con… ¿Un peluche de oso polar en las manos?—Pero por lo menos ya estamos en Los Angeles.

— Si~, aquí si hace calor— volteo a ver al menor y frunció el ceño ligeramente— ¿te trajiste a Kumajiro?

— Sí, es que no podía dejarlo solo en casa—

—Es un peluche—

—Sí, pero me lo regalo papá, así que no lo podía dejar en casa—

El otro sonrió débilmente y giro su vista nuevamente hacia la ventana, y así duraron buen rato hasta que pararon en frente de las enormes instalaciones de la escuela. Había varios edificios, algunos dormitorios y otros donde se encontraban las aulas. Ambos chicos bajaron del taxi y bajaron las maletas, después le pagaron al conductor.

— Alfred ve caminando hasta la entrada, yo mientras iré a la dirección a preguntar por nuestras habitaciones— el otro asintió.

El ojiamatista salió corriendo hacia la dirección, mientras que el otro trataba de mover las maletas con mucho esfuerzo, una de ellas le tapaba la vista (lamentablemente para el así no podría ver a las chicas que había) iba bien hasta que sintió que choco con algo y este caía al suelo.

—Oye idiota, fíjate por donde caminas— escucho el grito enojado de una voz femenina.

El rubio soltó la maleta que le tapaba la vista, para ver a una chica de cabello castaño oscuro largo y ligeramente ondulado y ojos color verde oscuro con el ceño fruncido lo más que podía. Esta se levanto y levanto el estuche de una guitarra del suelo.

—Lo siento mucho—menciono el chico sonrojado por la vergüenza.

— No te preocupes, está bien—La expresión del rostro de ella era seria— Al parecer traes mucho equipaje. —menciono está viendo todas las maletas del chico.

—Unas son mías, otras son de mi gemelo—

— ¿Tienes un gemelo?—pregunto la chica—Yo también tengo uno.

— ah, ¿sí?—

—Si— contesto la otra sin cambiar el tono de voz pero a pesar de eso era visible una pequeña sonrisa— Soy María Martínez, es un placer conocerte—dijo estirando su mano.

—Alfred F. Jones—contesto sonriéndole.

—Hermana—se escucho una voz de un chico haciendo que la chica se volteara.

—¿Que sucede?— pregunto la chica.

Alfred miro bien al chico, era de cabello castaño oscuro ligeramente largo y con un mechón que sobresalía entre el cabello, al igual que la chica tenía los ojos verde, media casi lo mismo que el, 1.77 y la chica tal vez 1.72

— ah, Pedro te presento a Alfred F. Jones es de… ¿De dónde eres Alfred?—dijo la joven volteando al ver al joven

—De Boston, Massachusetts, ¿y ustedes?—contesto el ojiazul.

— De México— contesto él— Soy el hermano gemelo de María, encantado de conocerte—dijo el chico estrechando la mano del americano, tenía una sonrisa dulce e inocente.

—Alfred—era Matthew—ya nos dieron los números de las habitaciones y el horario de clases,—El chico noto a los otros— Hola soy Matthew Williams, hermano de Alfred.

—¿Tú eres el gemelo de Alfred?— el chico asintió— Yo soy Pedro y ella María—Matthew miro a la chica y sonrió levemente— María, tu numero de habitación es…—Decía Pedro, leyendo el papel en sus manos—…351, aquí está tu llave.

— Alfred la tuya es la 350—dijo Matthew mirando a su gemelo y entregándole la llave, este duro rato en reaccionar a lo que sus hermano decía.

—María, ¡somos vecinos!— Decía emocionado el rubio, tomando las manos de la chica entre las suyas.

— ¿Enserio?—decía la chica sin cambiar la expresión de su rostro— ya sé que podemos hacer en las noches.

¿What?

—Gritarnos por las ventanas—contesto la chica mientras le daba una sonrisa a Alfred, el cual solo sonrió también, los gemelos de ambos se miraron y sonrieron, sabían que solo lo iban a hacer para molestar a los demás alumnos, aunque en su mente solo había un pensamiento "Este será un año muy largo"

—¿Qué habitación te toco, Pedro?— Pregunto Matthew

—425, ¿y a ti?—

—462—

—María—esta volteo a ver a su hermano— Este es tu horario, estas en la clase "Soul & Heart", yo también estoy en esa—

—Nosotros quedamos en la misma clase— Dijo Matthew.

— Entonces nos vamos a ver ahorita en las Exploración de Talentos—

—Es verdad, será mejor ir a dejar el equipaje a nuestras habitaciones e ir al auditorio que nos asignaron—

Matthew tomo sus maletas y se fue, al igual que Pedro, la castaña cuando iba a tomar sus maletas pero fue detenida por el rubio ya que este decía que las princesas no deberían cargar con su equipaje.

— ¿Y quién eres tú para decírmelo?—pregunto esta con un ligero sonrojo en sus mejillas.

I am the hero— el chico se empezó a reír estruendosamente, para después tomar las maletas de la chica y las de él y empezar a caminar con la chica a un lado de el. En el camino platicaron sobre las primeras cosas que se les ocurrían, hasta que…

— Oye Alfred, ¿cuál es tu talento?— pregunto la chica, el chico paró en seco (casi tira una de las maletas en el acto) este la volteo a ver con el rostro lleno de preocupación— ¿supongo que por la cara que traes no tienes ninguno?

—Pues nunca en mi vida he cantado en público y no se tocar ningún instrumento—decía el chico riendo nerviosamente.

—¿y qué piensas hacer allá entonces?—

—No lo sé—dijo el chico dando un leve suspiro

—Entonces, solo canta un canción que te guste mucho—dijo la chica empezando a quitarle sus maletas a Alfred— no es necesario que toques un instrumento, aquí te pueden enseñar a hacerlo.

—Bueno, en ese caso solo improvisare—

La chica sonrió levemente y comenzó a caminar un poco, hasta que se paró en seco, Alfred, que caminaba junto a ella, también lo hizo. Estaban frente a una puerta esta era simple de color blanco, tenia colgado un pequeño pizarrón y este tenía un marco que decía 350.

—Esta es tu habitación, héroe—fue lo que dijo la chica antas de caminar un poco mas hasta la siguiente puerta y sacar la llave para abrirla, Alfred hizo lo mismo, abrió la puerta y miro la habitación.

Era mucho más grande de lo que aparentaba, en realidad era como un pequeño departamento solo que sin una pared para separar las habitaciones, había dos camas individuales, había una especie de sala en medio de estas, tenía una TV y un buen equipo de sonido. Al lado de las camas había un escritorio y en medio de estos había una enorme ventana tipo francesa .Frente a la cama de lado derecho había un enorme armario para poner las pertenencias y ropa, mientras que por el lado izquierdo había una puerta, la que supuso que sería el baño.

Dejo sus pertenencias en el lado izquierdo y miro el otro lado, ya estaban las pertenencias de su compañero ahí, el chico miro las maletas y se dio cuentas de que en esta había calcomanías de la bandera del Reino Unido y de unicornios, hadas y cosas por ese estilo, por lo cual dedujo que era una chica y además era del Reino Unido.

Miro su cama, al igual que la otra no tenía ni sabanas, ni fundas para almohadas ni nada, el chico frunció el ceño y miro el pequeño libro que había sobre esta, no debían de ser más de 6 hojas. Se dedico a leerlo un poco, en el le daban la bienvenida y le decía que tenía que ir por la ropa de cama a las 6 de la tarde para que la eligiera del color que él quisiera.

Iba a seguir leyendo pero, el sonido de la puerta lo distrajo, se volteo a ver quién era, y era la latina recargada en el marco de la puerta con el estuche de la guitarra colgando de un hombro.

— ¿Nos vamos?— dijo la chica mirándolo.

—Claro—contesto este saliendo de la habitación y cerrándola otra vez— ¿Qué auditorio nos toco?

— el 2—dijo mientras caminaban por los enormes pasillos, mirando a todos los jóvenes que había, guitarristas, bailarines, cantantes, violinistas…en esta escuela había de todo.

Siguieron caminando, incluso salieron del edificio, hasta que llegaron a el enorme auditorio, pasaron la puerta y siguieron hasta que llegaron a la enorme puerta y al momento de atravesarla, se encontraron con chicos de todo tipo, había un rubio que parecía querer meterle mano a todo el que miraba, otro castaño no paraba de sonreír, había un rubio que parecía a punto de explotar del enojo, junto a él un ¿peliblanco? Que le sonreía y parecía alardear sobre algo, otro rubio de lentes que con solo verlo te daba miedo…en pocas palabras había de todo.

—Chicos por favor tomen asiento—se escucho una voz desde el escenario, todos voltearon a ver encontrándose con una mujer no mayor de 35 años de cabello castaño sonriéndoles.

Todos le hicieron caso y tomaron asiento, Alfred y María se sentaron juntos y luego a su lado derecho se sentaron Pedro y Matthew, sin que Alfred se diera cuenta a su lado se sentó otro chico rubio.

—Bienvenidos a World Music School, yo soy la maestra de canto Jennifer pero me pueden llamar Maestra Jenny—todos los alumnos asintieron y dijeron "buenos tardes maestra Jenny"—esperen chicos aquí no se habla aquí se canta…—Los chicos repitieron la frase pero ahora con un tono mas cantarín para después reírse levemente.

—Bueno lo que haremos en esta momento es la exploración musical—todos la miraron fijamente—Esto consiste en que pasen aquí al escenario y canten, bailen o interpreten alguna canción solo no la interpreten completa ya que vamos a tardar mucho, así que ¡Comencemos!

La maestra bajo del escenario y se sentó en las sillas junto a los alumnos, justo en el centro para ver todo el escenario, saco una lista y la miro un rato para después hablar y decir…

—Matthew Williams—el rubio se tenso un poco y se levanto lentamente, sentía la vista de todos sobre él, subió al escenario y miro lo que había en el, todo tipo de instrumentos se giro y miro a todos los presentes— ¿Y qué vas a cantar, cariño?—

—U Smilede Justin Bieber— el chico se acerco al piano y espero la señal de la maestra en cuanto esta la hizo empezó a tocar la primeras notas.

I'd wait on you forever and a day

Hand and foot

Your world is my world (yeah)

Ain't no way you're ever gon' get

Any less than you should

Cause baby

You smile, I smile (oh)

Cause whenever

You smile, I smile

Hey, hey, hey

Your lips, my biggest weakness

Shouldn't have let you know

I'm always gonna do what they say (hey)

If you need me

I'll come running

From a thousand miles away

When you smile, I smile

(Oh, whoa)

You smile, I smile

Hey

Baby take my open heart and all it offers

Cause this is as unconditional as it'll ever get

You ain't seen nothing yet

I won't ever hesitate to give you more

Cause baby (hey)

You smile, I smile (whoa)

You smile, I smile

Hey, hey, hey

El chico paró de pronto y volteo a ver a los demás, esperando a que hicieran algo y si todos empezaron a aplaudir.

—Matthew, tienes una voz muy dulce—fue lo que dijo la maestra después de que los aplausos cesaran— eres perfecto para cantar baladas y pop.

—Gracias—fuel el susurro tímido de el ojiamatista, que tenia las mejillas lo mas rojas que fuera posible, este bajo del escenario y cuando llego a su lugar fue recibido por las felicitaciones de su hermano y los gemelos latinos.

— Gilbert Beilschmidt—el chico de pelo blanco se paro, y subió al escenario, tomo el bajo que había ahí. Se volteo y grito:

—Prepárense para la presentación del asombroso yo, kesese— esto hizo que el chico de cabello rubio peinado hacia atrás se llevara una mano a la frente

—¿y qué vas a presentar, Gilbert?—fue la pregunta de la maestra.

—el asombroso yo interpretara una canción que él escribió—dijo sonriente— se llama Mein Gott.

En cuanto la maestra dio la señal empezó a tocar el bajo y empezó cantar con un voz rasposa en incluso algo chillona.

Dareka ga yonderu
Ore o yondeiru
Ii ze makasetoke iku ze
Motto!
Motto!

Higashi e nishi e to
Hashiritsuzukeru ze
Omae ga nozomu nara
Nadeteyaru

Sou sa tatakau shika nai nara
Yaru shika nai sa

Oresama saikou! Saikyou!
Saigo ni warau nowa Ja!
Oresama! Kimatta ze!

Danke!
Saijou!
Saikyou!
Omaera tataete ii ze
Dekai yume miseteyaru
Rensen renshou gachi da ze!

La mayoría se quedo callada y aplaudían lentamente esperando la respuesta de la maestra.

—Gilbert, eres bueno tocando el bajo, pero…—la maestra lo pensó—serias bueno solo tocando el bajo y de voz de fondo.

El chico hizo un mohín, dejo el bajo y empezó a dar pasos pesados hasta su lugar, la mayoría se estaba riendo por lo bajo por la reacción de joven ante el comentario de la maestra, este al llegar a su lugar se aventó en la silla.

—María Martínez—Los tres chicos voltearon a ver a esta que solo se levanto despreocupada mirando las botas vaqueras color café que llevaba puestas ese día, subió el escenario y saco la guitarra de su estuche, esta era de color azul eléctrico y tenia detalles en color plateado— ¿Qué vas a cantar, linda?—

—God Knows de Aya Hirano— la maestra le dio las señas y empezó a tocar la guitarra de manera impresionante.

Kawaita kokoro de kakenukeru

Gomen ne nani mo dekinakute

Itami wo wakachiau koto sae

Anata wa yurushite kurenai...

Muku ni ikiru tame ni furimukazu

Senaka mukete satteshimau

On the lonely rail...

Watashi tsuiteiku yo

Donna tsurai sekai no yami no naka de sae

Kitto anata wa kagayaite

Koeru mirai no hate

Yowasa yue ni tamashii kowasarenu you ni

My way kasanaru yo

Ima futari ni God bless...

La mayoría espero a que la chica terminara la interpretación con la guitarra, y se quedaron callados, esperando la respuesta de la maestra que tan solo se paro y camino al escenario para decir…

—María…—dijo la maestra lentamente pasando uno de sus brazos por los hombros de la chica—eso fue magnífico, tu interpretación con la guitarra es genial y además tu voz es súper potente, quedas de cantante de cualquier tipo de música y también como guitarrista.

La chica dio una ligera sonrisa al público y a la maestra y bajo del escenario, cuando llego a su lugar Alfred la miraba como si fuera una diosa.

— ¿Por qué no me dijiste que eras tan buena?—dijo el chico

—Nunca lo preguntaste—fue la respuesta de la chica que se había cruzado de brazos y piernas.

—Arthur Kirkland—fueron las palabras de la maestra.

El chico a un lado de Alfred se levanto, avanzo al escenario, y se paro en el centro, Alfred lo volteo a ver y sin saber por qué se sintió atraído por rostro del chico, además sin que se diera cuenta su corazón empezó a latir fuerte. Tenía el cabello rubio y desordenado, ojos verde4s y gruesas pero lindas cejas, solamente pudo decir una cosa… se había enamorado de aquel chico.