Everywhere
Capítulo 1: Aquí
Logan se sentó en la escalinata de la puerta principal de la mansión. Tomó aire y escarbó en el bolsillo de su cazadora de cuero hasta que encontró un puro a medio consumir. Lo miró con deleite y esbozó una sonrisa de satisfacción. Lo deslizó bajo su nariz y se dispuso a encenderlo, dando una profunda calada. Respiró hondo y dio otra calada. Fijó su vista en el horizonte y entrecerró los ojos. Era una bonita vista, iba a echarla de menos.
- Es muy considerado por tu parte salir a fumar afuera.
Él reprimió una sonrisa y respondió convencido
- El profesor puede llegar a ser muy persuasivo cuando se lo propone.
- Estoy segura de ello. ¿Qué haces aquí, Logan?
- Relajarme – dio una calada profunda y apoyó los codos en los muslos adoptando una postura aparentemente tranquila. Pero lo cierto es que al sentir su presencia se le habían agarrotado cada uno de los músculos del cuerpo.
Jean se percató de que él evitaba mirarla por lo que decidió sentarse a su lado. La fuerza arrolladora de Logan la atravesó sin ni siquiera tocarla y tuvo que respirar hondo para mantener la calma.
Ambos se mantuvieron en un silencio cómodo durante un rato hasta que ella por fin habló.
- ¿Cuándo te vas?
- Mañana por la mañana - respondió de manera automática.
- Bien, te echaremos de menos
Él no dijo nada, tan solo giró su cabeza lentamente hacia ella hasta que sus miradas tropezaron. Sus ojos cambiantes la observaron con amabilidad y dulzura hasta que finalmente arqueó las cejas creando en su rostro una mueca interrogativa.
- Unos más que otros – admitió Jean finalmente
- Ya veo – asintió y levantó la comisura de la boca en una media sonrisa. Dio una calada y miró de nuevo hacia el horizonte.
- ¿Volverás? - dijo ella de repente
Logan sintió un nudo en el estómago pero mantuvo el rostro impertérrito. Se encogió de hombros.
- No lo se.
Ella asintió con la cabeza como si tratara de asimilar lo que acababa de oír. De repente hizo ademán de levantarse y le rodeó, situándose tras él.
- Cuídate, Logan – y le pasó la mano por la mejilla a modo de despedida alejándose tan silenciosamente como había llegado.
Logan cerró los ojos y puso su mano sobre la mejilla que ella había tocado, como si de ese modo la caricia permaneciera ahí para siempre. Como si formara parte de él.
Estuviera donde estuviera ya no sentiría solo.
Continuará...
