Holasss , pues aquí les dejo esta nueva locura que escribi hace mucho tiempo, esta historia ya esta terminada asi que ire subiendo los capítulos, de acuerdo a como ustedes me lo pidan.
Pues no las aburro mas y espero me dejen su opinio.
Las quiero
Anna
Estaba completamente decidida a vengarme de los Cullen, de todos ellos, y por fin había encontrado un punto débil en esa familia que había destruido la mía, para ellos lo mas importante era la familia, pues ahí es donde les iba a dar.
Pero antes les contare mi historia, soy Isabella Swan tengo 25 años, puedo decir que tengo muy pocos recuerdos felices, los últimos que tengo son con mis padres en una hermosa playa jugando en la arena los tres, cuando yo tenia 6 años y esa fue la ultima vez que mi vida fue feliz y todo gracias a los Cullen.
Mi padre era un hombre maravilloso, que había comenzado una gran empresa de la nada, mis padres habían comenzado desde cero, hombro a hombro , pero el, Anthony Masen el maldito que quería la empresa de mi padre, nos hacia la vida imposible pero mi padre nunca se amedrento al contario mas luchaba para que nosotros no sufriéramos, pero Anthony Masen no descanso hasta que no mato a mi padre y nos quiso llevar a mi madre y a mi , pero la vida maldita nos jugo una maldita jugarreta , mi madre y yo quedamos vivas.
Mi madre quedo postrada en una silla de ruedas y con un problema mental severo , yo quede con varias fracturas y mucho tiempo de recuperación.
Pero ahora 20 años después con toda la fuerza y el odio mas vivo que nunca me iba a cobrar todos estos años de dolor y amargura, de odio de desprecios.
Por suerte de la vida estaban solicitando una asistente de Cullen Corp. Y yo iba aplicar para ese puesto, no dejaría que nadie me quitara esa maravillosa oportunidad que la vida me estaba dando, así que el lunes a primera hora estaba sentada en la gran recepción de CullenCorp, estaba esperando mi turno para entra a entrevista y nada mas y nada menos me entrevistaría Edward Cullen, el nieto mayor de Anthony Cullen, sabia todo de sus vidas, casi todo mi tiempo libre lo pasaba investigando cosas de ellos, me sabia de memoria la ficha de Edward Cullen, 30 años, soltero, era titulado en finanzas en Harvard y con un posgrado en administración empresarial y un doctorado, era un hombre muy inteligente, no se le conocía novia alguna o amantes, era lo que se le conocía como todo un caballero, como el príncipe que todas querían, tengo que reconocer que era un hombre guapo, alto, como de 1.85, ojos verdes, piel muy blanca y ojos verdes como esmeraldas y con un cabello cobrizo, pero ni el que fuera guapo, inteligente, rico y un caballero me harían desistir de mi venganza, haría que los Cullen pagaran la miseria de mi vida, la muerte de mi padre y el infierno que vive mi madre en vida.
-Isabella Swan- dijo mi nombre una mujer, era mi turno, seria la primera vez que tendría a un Cullen de frente y haría lo que fuera necesario para obtener este puesto.
Entre a la oficina que me indicaron, era enorme, el escritorio era de cristal y había una vista maravillosa, estábamos en un veinteavo piso, la oficina estaba decorada elegantemente, se veía que estaba decorada por un experto, ellos disfrutaban lo que nos habían quitado a mi familia y a mi, estaba parada frente a ese gran ventanal viendo a la ciudad y pensando en que ya mi venganza estaba cerca.
-Buenos días- dijo una voz varonil a mis espaldas, me gire lentamente para ver por primera vez a i peor enemigo.
-Buenos días Sr. Cullen- dije con una gran sonrisa, tenía que decir que era un hombre mucho mas guapo de lo que las fotografías se veía.
-Dime Edward por favor- dijo con una sonrisa torcida en su rostro que lo hacia ver mucho mas guapo, pero no dejaría que mi mente se nublara por una cara bonita, el extendió su mano para saludarme, cuando nuestras manos sentí una corriente eléctrica que me llego hasta la medula.
-Toma asiento por favor- dijo amablemente y retiro la silla para que yo me pudiera sentar, le agradecí con una sonrisa y el se fue al otro lado del escritorio.
-Así que Isabella Swan- dijo el viendo mi curriculum – Veo que tienes estudios en administración y eres secretaria contable- dijo el.
-Si , he trabajado como asistente en Boston- dije esperando que todo saliera como lo había planeado.
-¿Y por que decides venir a New York?- dijo el interesado.
-Por que mi madre esta un poco enferma y tiene que seguir su tratamiento aquí ,así que no me importo dejar todo para venir con ella- dije
-Es bueno que ame tanto a su madre ¿ y su padre?- pregunto y en ese momento me dieron ganas de gritarle que su abuelo lo había matado, peor me contuve, tenia que pensar con la cabeza.
-Falleció cuando yo era muy pequeña así que solo somos mi madre y yo- después de esa contestación , siguió entrevistándome, y yo agradecí al cielo saber casi todas las respuestas a lo que me preguntaba, duramos como una hora en la entrevista .
-Bueno Isabella pues bienvenida a CullenCorp- dijo el extendiéndome de nuevo ,volvía a sentir ese cosquilleo extraño pero supe que era de emoción de que había logrado el primer paso para mi venganza.
Desde ese día comencé a trabajar ahí , estaba segura que dios me estaba comenzando a dar las armas para que se hiciera justicia, aunque yo no era muy creyente de dios.
Ya tenia cinco meses trabajando aquí y Edward y yo cada diéramos mas cercanos, y eso era lo que yo quería, iríamos a Miami por una junta de trabajo, ahí es donde daría mi golpe.
Organice todo para que Edward y yo compartiéramos una suite , le dije que era mejor ya que cuando regresáramos de las juntas podríamos avanzar mas, así que me dijo que pidiera la suite presidencial , que tenia todas la comodidades y dos habitaciones.
Nunca había viajando en avión y estaba aterrada, pero no podía dejar que el se diera cuenta por que podría descubrir mis mentiras.
Trate de nos verme muy impresionada cando bajamos del avión, viajar con Edward era a todo lujo, mi padre pudo haberme dado todo eso si no hubiera sido por su maldito abuelo. Pero no pensaría en eso tenia que seguir en mi pape de dulce, tierna e inocente.
La primera junta fue muy pesada y yo no entendía nada de lo que hablaban pero anotaba todo lo que decían, así que en la noche buscaría en internet para saber lo que habían dicho.
Ese día en la noche Edward y yo nos sentamos en la sala, para que yo redactara unas cartas que se necesitaban para mañana, lo bueno era que la junta seria tarde, así que podría investigar mas de que se trataba todo lo que hablaban.
-¿Estas muy cansada?- me pregunto Edward, que ya no traía la corbata, y la camisa tenia los primero botones desabrochados.
-Algo, creo que seria bueno que pidiéramos algo de cenar- dije, me moría de hambre.
-Claro, yo me encargo- dijo el y pidió la cena a los 15 minutos el servicio a cuarto llego, Edward y yo comenzamos a platicar, cada día me platicaba un poco mas de su maldita familia, tenia una maldita familia perfecta, un hermano Emmet un año mas chico que el y Alice de mi edad, su hermano era un famoso jugado de Futbol Americano, y estaba comprometido con la modelo Rosalie Hale, ella era la imagen de Dior era una mujer muy bella, y su pequeña hermana era la diseñadora de modas Alice Cullen, ella comenzaba su carrera como diseñadora y ya había tenido un desfile en Milan, sus padres, Carlisle y Esme Cullen, eran los mejores padres según el, pero estaba segura que ellos sabían lo que su abuelo le había hecho a mi familia.
-¿Y tu Edward, cuando piensas comprometerte?- pregunte, aunque sabia que no tenia un novia o amante.
-Pues solo que ella se de cuenta de que existo- dijo con esa sonrisa torcida que lo hacia mucho mas guapo.
-Pues estará ciega, aunque recuerda que el que no habla dios no lo escucha- dije sonriéndole.
-Si en eso tienes razón- dijo apenado – ¿y tu, bella sales con alguien?- pregunto nervioso.
-No, el hombre que me interesa tampoco se ha dado cuenta de que existo- dije como si me apenara hablar de eso.
-Pues que estúpido- dijo el acercándose un poco mas a mi.
-No es estúpido, es un hombre muy inteligente, divertido y muy guapo- dije mirándolo fijamente a los ojos.
-Que bueno que pienses eso de el- dijo el teniendo sus labios a centímetros de los míos, y el momento se dio, sus labios hicieron contacto con los míos, sus besos eran suaves, tiernos, dulces, su lengua entro en mi boca y busco la mía, as dos hicieron una danza perfecta, sus manos se las puso en mi cintura, sabia que este era mi momento, era ahora o nunca.
Así que yo subí mi manos por su pecho de manera sensual , el beso se hizo mas demándate por parte de los dos, sin darme cuenta en que momento nuestras manos cobraron vida propia y comenzamos a deshacernos de la ropa, su manos sobre mi piel me hacían sentir maravilloso, su tacto era suave pero firme, el me tomo de la cadera y me puso a horcadas sobre el, rompimos el beso cuando nos comenzó a faltar el aire, nos miramos a los ojos, el preguntándome sin palabras si estaba segura y yo olvidándome por una noche de todo para estar en sus brazos, no hubo necesidad de ninguna palabra yo volví a besarlo y el comenzó a acariciar mis piernas hasta mis muslos desde ese momento todo fue caricias y besos.
Edward me cargo y me llevo a su habitación, me deposito con mucho cuidado en la cama, y fue ahí cuando me di cuenta que el ya no traía camisa y no traía falda, pero no me iba a poner a pensar en ese momento en nada, lo único que quería era seguir disfrutando de sus besos y su caricias. Antes de que el se pusiera sobre mi me encargue de quitarle el pantalón y sin pensarlo mas me quite la blusa, así que ambos estábamos en ropa interior solamente, Edward estaba sobre mi, nos tocábamos por completo, su labios ya conocían a la perfección mis pechos y era lo mas delicioso que había sentido en toda mi jodida vida, mi mano viajo hasta su gran erección y solo se imaginarme que tendría eso dentro de mi me daban ganas de tener un orgasmo.
Y sin pensarlo mas comencé a bajar el bóxer de Edward, el no perdió tampoco tiempo y quito mi ropa interior, después de eso comenzaron la horas mas intensas y hermosas de mi vida, Edward se preocupaba mas por que disfrutara que otra cosa. No se cuantas horas estuvimos entrelazados pero me quede dormida sobre su pecho y el completamente aferrado a mi cintura como si temiera que yo me fuera a ir.
A la mañana siguiente me desperté y fui al baño, cuando me mire al espejo me di cuenta que mi venganza ya había comenzado, destruiría a todos los Cullen, aunque Edward era un buen hombre, mis padres también lo fueron y a Anthony no le importo así que yo tampoco me preocuparía por su familia.
Que opinaron? Les gusto? Quien apoya a bella, yo la verdad no mucho, pero no sabemos lo que ella ha tenido que pasar, con el tiempo se darán cuenta que ni todos son buenos ni todos son malos.
Espero me dejen su opinión.
Las quiero
ANNA
