N/A: Bueno mis chicas y chicos, como están? Yo estoy muy bien, aquí trayendo un nuevo fic, el que planeo que no será mas de 10 caps. Al menos así lo preveo, xD Pues de que se trata, jaja pues una de mis ideas locas. Eso si, les advierto que tiene mucho Angst, Drama, un poquito de romance, xD Pero sip, como se estarán imaginando, tiene mucho sufrimiento, xDD
Pues nada, les dire que esta es diferente a las demás (un tanto parecida a Star Collision en cuanto a edades, mas nada) ya que tenemos a nuestra pareja favorita casada, pero... ¬¬ no todo es feliz, por que? Tienen que leer para saber, xD
Advertencia Próximos Capítulos: Cuando lean entenderán estas advertencia, pero como quiera las colocare aquí.
1. Contiene Ichiruki (si, no lo veremos como siempre suelo poner, donde Ichigo piensa que quiere a Rukia pero no la quiere, aquí si la AMA)
2. contiene lemmon, (este capitulo ya contiene 1.. pervertidos!)
3. lo mas probable es que también haya un lemmon ichiruki, aun no lo he decidido pero es lo mas probable (O.O' no me he cambiado de paring, xD)
4. si habra la maravillosa presencia de Shirosaki! peroooo... no como siempre lo coloco, (el maldito pervertido, divertido que jode a Ichigo pero que de cierta manera tiene la razon) No, aqui sera sadico y si es posible habran agresiones (a quien? No sé (si se, pero no les dire!) asi que lo veran sadico, aunque no sale en este cap.
5. Nada de la saga fullbring a sucedido, en este fic me tomare la libertad de utilizar varios pj (entiéndase Ginjou y Tsukishima) para la historia. So, que Ichigo aun no es fullbringer ni sabe que diablos es eso!
6. ya dije que iba a ver mucho sufrimiento? ¿no? pues vuelvo y digo, la Hime aquí sufre, y llora... esperemos que tenga un final lindo!
Parings: Mencionare las parejas que estaran viendo
Ichihime, Ichiruki, Renruki, TatsIshida, Rangiku&Hisagi, lo mas probable es que sea un HitsuHina o un HitsuKarin, aun no se... y JintaYuzu.
Disclaimer: Bleach no me pertenece, le pertenece a Tite Kubo-sempai y a la Pierrot. Es publicado semanalmente en la Shonen Jump. Yo solo los utilizo para divertirnos un rato, haciendo reír, sufrir y pervirtiendo, xD De la misma manera Beautiful Lie es propiedad de 30 Seconds to Mars. SI fuera mía seria millonaria y seria esposa de Jared Letto, xDD
ETC: Categorizado como Mature por el contenido de Lemmon, futuras palabras obscenas y situaciones adultas. No leer si eres menor de edad. Contiene un poco de OCC, sino te gusta el OCC, abstenerse a la lectura.
~ ~ CAP I: BEAUTIFUL LIE
Its a beautiful lie
Its the perfect denial
Such a beautiful lie to believe in
30 Seconds to Mars - Beautiful Lie
Hacia cerca de cinco años que mi vida había cambiado. Para mi mejor amiga Tatsuki Arisawa esto era lo mejor que me había pasado. Tenía todo lo que siempre había soñado, y se suponía que era feliz. Exacto, se suponía que debía ser feliz. Pero yo no lo era. Y a veces pienso que jamás lo seria.
Cuando tenía quince años descubrí que tenía poderes, unos muy raros por cierto. Yo desconocía que en el mundo podía existir tanto mal como hasta esos momentos. Descubrí que existían unas criaturas llamadas hollows, además de que mi adorado hermano se había convertido en uno. Mis nakamas también tenían poderes, excepto Tatsuki-chan, aunque esta, al igual que Asano-kun y Mizuru-kun si podían ver todo lo que ocurría a su alrededor. Kurosaki-kun, Ishida-kun y Sado-kun éramos los únicos del instituto que teníamos poderes, aunque los míos jamás me permitieron poder defender o proteger a alguien. Siempre fui una carga. Siempre he sido una carga. A veces he deseado que nunca hubiera tenido los poderes que tengo, ser igual a Tatsuki-chan, no tener poderes, así jamás hubiera pasado por lo de Hueco Mundo, donde fui secuestrada y humillada por un perverso hombre que deseaba convertirse en un dios. Pero luego me arrepiento de mis pensamientos y pienso que si nunca hubiese tenido poderes, jamás hubiera sido capaz de salvar a Kurosaki-kun, curarle sus heridas y recuperarlo por completo. Él podría estar muerto, y eso jamás me lo permitiría, porque yo lo amo. Porque él es mí adorado Ichigo-kun.
Esta es una de esas partes donde Tatsuki-chan me dice que he tenido suerte. ¿Por qué? Porque llevo tres años de casada con Kurosaki-kun. Ya no soy Orihime Inoue, sino Orihime Kurosaki. Debería estar feliz, ¿verdad? No, no lo soy. Porque a pesar de que soy su esposa… Ichigo-kun no me ama. Y eso sencillamente duele mucho. Y lo peor de todo es que estoy segura de que él jamás me amara como yo lo amo. Desde luego que él siempre me protege, siempre tiene una sonrisa para mí y jamás me ha gritado o tratado mal, siempre me trata con ternura y amistad, pero es solo eso, una gran amistad.
Kurosaki-kun se caso conmigo porque… ¡yo no lo sé! Es gracioso, debería saberlo, pero honestamente no lo sé. Y no, no significa que él me ame en el fondo de su ser, por que no es así, me quiere pero no me ama. Lo conozco demasiado bien como para saber cuándo Ichigo-kun esconde algo. O al menos intenta esconder algo, pero a mí no me engaña. Yo se que Ichigo-kun tiene a alguien dentro de su corazón, y jamás podría borrarla de allí. Rukia Kuchiki, mi eterna amiga… mi eterna rival.
Kuchiki-san no solo fue la que le otorgo por primera vez los poderes a Ichigo-kun, sino que es la única mujer por la que Kurosaki-kun ha sentido algo más allá de la amistad. La única mujer que tiene su corazón y que siempre lo tendría, la única mujer que ha detenido su lluvia. Kuchiki-san decidió regresar a la Sociedad de Almas junto a su hermano, luego de todo lo sucedido en Hueco Mundo y todo lo que ocurrió con Aizen y de cómo Ichigo-kun lo derroto. Kuchiki-san se despidió de Ichigo-kun, y al solo verlo tan triste, sentí que mi corazón era exprimido, mis ojos se llenaron de lagrimas. Yo amo a Kurosaki-kun y no deseaba que sufriera, yo daría mi vida para no verlo sufrir. Pero en ese instante, yo no podía hacer nada. Y ese día… la lluvia regreso al interior de Ichigo-kun y no ha existido alguien que logre contenerla.
Nunca había visto tan triste a Ichigo-kun como ese día. Es obvio que en el aniversario de la muerte de Masaki-san, siempre que vamos a llevarle flores a su última morada, Kurosaki-kun tiene esa sonrisa agridulce en su semblante. Y claro está, esa sonrisa no me gusta. Pero al menos sonríe, no como el día en que Kuchiki-san camino por ese senkaimon, dándole la espalda, para luego voltearse y dedicarle una última sonrisa. Ese intercambio de miradas fue un cuchillo que desgarro mi corazón. ¡Yo jamás podría compartir esas miradas! Creo que Ichigo-kun lloro en privado, lo sabía porque sus ojos estaban rojizos y no fue al instituto durante dos días, y no permitía que nadie hablara de Kuchiki-san, como si ella no existiera, para aliviar su dolor. Y eso me dolió en el alma. Porque yo sabía por lo que él estaba pasando, porque yo lo he pasado a diario durante toda mi juventud y ahora en mi adultez, solo que es diferente. Ichigo-kun ama a Kuchiki-san, y creo que ella lo ama a él, pero fueron separados por el destino. Yo, en cambio, amo a Ichigo-kun, pero él no me ama a mí y el destino nos unió. A veces sueño con que la lluvia logre conectar mi corazón con el de él. Pero no creo que eso sea posible.
Luego de que Kuchiki-san se fuera a la Sociedad de Almas, Kurosaki-kun se acerco a mí, y yo, como su eterna enamorada, me volví en su pañuelo de lágrimas, su mejor amiga, la única que podía comprender su dolor y ayudarle a "superarlo", aunque esto jamás ha sido posible. Fui la chica que estaba ahí para él, pero que jamás recibiría nada a cambio, al menos no en lo que respecta al amor. Y así fue hasta que entramos a la Universidad. Ichigo-kun se convirtió en doctor, y es uno de los mejores en el Hospital de Ishida-san, junto al propio Ishida-kun. Mientras que yo pude abrir una pastelería en la ciudad, donde cuento con varios empleados. Todo va bien. Nada está bien.
Aun no sé cómo pude aceptar todo esto. ¿Quizás por que lo amo demasiado? Sí, creo que es por eso. No solo había caído bajo, sino que había perdido mi dignidad. Ichigo-kun y yo nos casamos, y él jamás me devolvería todo el amor que yo siempre le he profesado, todo lo que recibo son caricias, besos y todas esas pequeñas cosas que me hacen feliz… aunque esa felicidad solo dura momentos. Cada vez que me besa imagino que me ama como yo lo amo a él. Cada vez que tenemos relaciones, imagino que él solo piensa en mí y no en ella. ¿Por qué duele tanto? ¿Por qué? ¿Por qué simplemente no puedo disfrutar-con cierto egoísmo- el que él es mi esposo, el que él se acuesta conmigo en las noches? ¿Por qué debo pensar de esta forma? ¿Por qué no puedo conformarme con su cariño? ¿Por qué quiero que me ame? ¿Por qué me dolió tanto descubrir que su primera vez no fue conmigo, sino con ella?
Todas las noches, cuando me acuesto a su lado, pienso en como seria despertar y escuchar un "Te amo" de su parte. Seria hermoso, ¿verdad? Jamás he escuchado que alguien me diga esas dos palabras, aparte de mi hermano Sora. Cuando era pequeña, mi onii-chan siempre me contaba un cuento, donde la princesa siempre vivía feliz con su príncipe para toda la vida, luego me traía uno de mis osos de felpa y al final, cuando yo estaba casi dormida, me decía que me amaba mucho. ¡Como extraño a Sora-nii-chan! ¡Como deseo decirle que estaba equivocado! ¡Que los cuentos de hadas no existen, y que la chica jamás logra obtener al amor de su vida! O al menos no en mi historia… después de todo, yo no soy una princesa, y ella sí lo es. Sus ojos son como estrellas, su mirada y su forma de actuar es de la nobleza, ¡por supuesto que cualquier hombre se enamoraría de ella! Yo no podría jamás compararme con ella, porque solo soy una simple chica, una plebeya. Cómico, ¿cierto? casi siempre la plebeya se vuelve princesa, lástima que yo jamás pueda tener esa transformación.
Todas las veces que hemos tenido relaciones, cuando él cae dormido, comienzo a llorar, por que se que él no pensó en mí, sino que pensó en ella. Y lo sé, lo siento. Solo basta con observar a sus ojos cuando besa mi frente, solo basta con ver esa sonrisa triste en su rostro, esa que desgarra mi alma. No soy estúpida, se que cada vez que cierra sus ojos y besa mis labios, la recuerda a ella, se que cada vez que sus dedos recorren mi piel, piensa que es la de ella, y sé que cada vez que su cuerpo se une al mío, piensa en ella…
— ¡Oi Orihime!, ¿estás bien?— la fuerte voz de Ichigo hizo salir de sus pensamientos a la chica de cabello naranja, quien preparaba unos pastelillos de colores azulados y verdes. Las lágrimas que había corrido por sus mejillas habían dañado al menos dos pastelillos, mojándolos con las saladas gotas; la chica los descarto de inmediato, colocándolos aparte del resto. Limpio rápidamente las lágrimas que estaban deslizándose por sus mejillas, secando sus dedos en su delantal rosado con fresas tejidas y se volteo sonriente. Estaba muriendo por dentro, pero su sonrisa mostraba tranquilidad y adoración al hombre que estaba frente a ella. Durante todo ese tiempo, Ichigo se había vuelto mucho más guapo. Su cabello naranja era más largo, y varios mechones caían por su rostro, haciendo que su mirada fuera mucho más misteriosa. Hasta hacia un año, Yuzu era la que recortaba su cabello, luego de que ella se casara con Jinta, Orihime tomo ese lugar, recortando con muchísimo cuidado y devoción los mechones naranjas de su adorado shinigami sustituto. El rostro de Ichigo mostraba preocupación, mientras que sus manos sujetaban su bata blanca y su maletín negro que contenía todos sus documentos del trabajo. Desde hacía un tiempo venía observando y escuchando los sollozos de Orihime, y él no sabía por qué. Jamás habían tenido una discusión y él siempre trataba de reconfortar la falta de amor, con cariño y debía confesar que verla llorar hacia que su garganta se secara y que su pecho se contrajera dolorosamente. Detestaba verla llorar, ¡demonios, sí que lo detestaba!
— ¡Bienvenido, Ichigo-kun!— exclamo con felicidad. No sabía cómo era capaz de mostrar felicidad cuando dentro de ella, todo estaba en ruinas. La mirada preocupada de Ichigo se suavizo, dejando ver la sonrisa, que de cierta manera, era la personalizada para ella. Una suave y despreocupada, cuyo resultado era casi la desaparición por completa de su ceño fruncido. —Has salido temprano, porque aun son las…. — miro el reloj de la pared, regalo de Sado-kun para su cumpleaños pasado. Era de madera y muy fino, hacia juego con la cocina que Kurosaki le había mandado a construir para así practicar nuevos platillos y postres para la repostería. ¡Por Kami-sama! ¡Eran las 6:30 de la noche! ¿Ella había estado en la cocina desde las 4 y no se había fijado? Rio nerviosa. — No me había percatado que eran las 6:30, creo que me entretuve pensando en los duendecillos azules…— rio, aun nerviosa. Ichigo frunció el ceño y luego ladeo la cabeza. ¡Ni siquiera había preparado la cena! Durante su noviazgo y luego matrimonio, había aprendido gracias a Yuzu, como cocinar para Ichigo, sin añadir nada extraño. Por supuesto, en su comida siempre añadía wasabi, pero a la de él no. Y por lo visto, su comida le gustaba bastante, porque siempre solía aclamarla con un "Esta delicioso, Orihime".
—Está bien, Orihime. Ya que no has preparado nada, porque no salimos a cenar afuera. Desde hace mucho que no lo hacemos y ahí un nuevo restaurante cerca del hospital. — ¿Ichigo la estaba invitando a cenar? No es que fuera algo raro, es bastante usual que una pareja de esposos salgan a comer juntos, y desde luego que Ichigo y ella habían salido a restaurante pero… pero siempre era porque Kurosaki-san hacia las reservaciones, ¡no por que Ichigo fuera el que la invitara!
—No quiero ser una mo…—
—Inoue, solo iremos a comer, no es nada del otro mundo. — replico seriamente, colocando sobre el mostrador de madera sus cosas, para luego dirigirse a la nevera y buscar un vaso, llenándolo de jugo de naranja. —Además, ya es tarde como para que comiences a realizar la cena. — dio un largo sorbo a su jugo para luego sonreír. —Y supongo que abras olvidado que día es hoy, ¿cierto?— la mirada de confusión de la chica debió haberle respondido, porque Ichigo rio, para luego negar la cabeza divertido. —Orihime, es 3 de septiembre, hoy cumples 23 años, así que será un regalo de mi parte. — ¡Como lo había olvidado! ¡Si Tatsuki-chan, Ishida-kun, Sado-kun, Isshin-san, Yuzu-chan y Karin-chan la había felicitado! ¡Sin contar a Urahara-san, a Yoruichi-san y Tesai-san! ¡Oh Kami! ¿Tan envuelta en problemas estaba como para olvidar –nuevamente- el día de su cumpleaños? —Ve a prepárate. — dijo, saliendo de la cocina, dejándola anonadada.
No solo la invitaba a comer, sino que se había recordado de su cumpleaños, cuando ella-luego de tanta felicitación y problema- lo había olvidado. Estas eran una de las cosas que hacían que ella amara a Ichigo mucho más de lo que ya lo amaba. Porque aunque él no la amara, siempre trataba de hacerla sentir bien. Si, sabía que no tenía mucha autoestima, pero al menos podía tratar de ser feliz con solo tenerlo a su lado, ¿cierto?
Claro, ya sabía por qué había olvidado su cumpleaños y por qué se había envuelto en sus problemas. Urahara-san le había comentado sobre el regreso de Kuchiki-san a Karakura. Según el ex capitán, Ichigo-kun lo sabía desde hacía bastante tiempo, pero él no le había dicho nada. La chica subió las escaleras con cabeza baja, dirigiéndose al cuarto de baño.
La chica se baño y luego se alisto con un sencillo vestido negro, con un pequeño pero sensual escote. Ese vestido lo había adquirido hacia un par de meses atrás, y nunca lo había utilizado por qué pensaba que no le iba a quedar bien. Incluso en esos momentos sentía que ese vestido no era para ella. La realidad era que el vestido parecía ser diseñado para la chica, porque sus curvas femeninas eran resaltadas con gracia y elegancia, mientras que el escote dejaba ver cierta cantidad de piel y de sus atributos-tan codiciados entre los hombres que visitaban su repostería. Cepillo su cabellera y luego de esto se aplico algo de perfume. Sonrió para sí misma, una sonrisa tímida e insegura, mientras que uno de sus dedos secaba las lágrimas que se estaban deslizando lentamente sin que ella se hubiera fijado. ¿Por qué estaba llorando? Ni siquiera lo sabía, últimamente parecía estar en esa gran depresión, llorando y sintiéndose mal. No solo físicamente, sino emocionalmente. Luego de haber culminado, se encamino hasta el auto, donde Kurosaki la esperaba, observando su teléfono móvil. Cuando la chica subió al auto, el joven le dirigió una sonrisa, e hizo un apunte mental de decirle a Orihime-más adelante- de que adquiriera mas vestidos como esos, por que sin duda alguna le quedaban muy bien.
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— ¿Estás bien?— cuestiono el hombre de cabello naranja, con su mirada llena de preocupación. Orihime había estado en silencio durante todo el trayecto al restaurante, y ahora que su comida estaba sobre la mesa, la chica ni siquiera había hecho un esfuerzo con tomar los cubiertos y comenzar a digerirla. Eso era extraño… no, eso era preocupante y alarmante. Ichigo siempre reía cuando veía a Orihime comer, la chica tenía un apetito voraz, pero al mismo tiempo tenía un metabolismo sumamente rápido, por lo que Inoue no engordaba. Pero eso no era lo importante en esos momentos, sino que la joven mujer que estaba frente a él parecía estar perdida en sus pensamientos, mientras que sus ojos mostraban que en cualquier momento, ella comenzaría a llorar. —Hime, ¿Qué ocurre?— pregunto nuevamente con voz suave, al ver que la chica no había respondido a su primera pregunta.
"No lo sé, Ichigo-kun. ¿Por qué no me dices que ocurre? ¿Por qué no me dices porque me ocultaste que Kuchiki-san iba a regresar? ¿Por qué no me dices como te sientes? Claro, no tienes por qué decirlo, porque yo se que estas feliz, lo veo en tus ojos, lo veo en tu sonrisa, y lo vi en el momento que entraste a la cocina divertido. ¡La amas, Ichigo-kun! ¡Tú la amas! ¡Y yo soy el estorbo aquí! No puede existir una relación de tres, es obvio que yo soy la que sobra, es obvio que ustedes están felices por volver a verse. ¡Oh, Kami-sama! Por favor, por favor… has que este dolor en mi corazón se detenga, por favor. Es demasiado doloroso…
—Estoy bien, Ichigo-kun. Es solo que no tengo mucha hambre. — mintió sonriente, sin ni siquiera levantar su mirada. Estaba consciente de que en cualquier momento comenzaría a llorar, sentía sus lágrimas formándose en sus ojos. Pero ella no quería que él la viera llorar. No, porque entonces, ¿Qué le iba a decir? "Lloro por que se que te perdí." "Lloro por que se que no te he perdido, porque jamás fuiste mío" —Debo ir al tocador, regreso rápido. — se excuso, colocándose de pie con suavidad para luego caminar con la cabeza baja hasta el tocador de mujeres.
Orihime no sabía si alguien podía morir por tanto llorar. No, eso era imposible porque si no ya ella habría muerto desde hace mucho tiempo. La chica coloco el cerrojo a la puerta, para recostar su cuerpo sobre el tocador y comenzar a llorar sin dejar nada por dentro. Sus sollozos comenzaron siendo eso, leves sollozos, para luego convertirse en lágrimas y gemidos de dolor. ¡Como dolía todo! Se miro al espejo una vez más, observando el maquillaje regado por su rostro. Tomo papel higiénico y procedió a limpiarlo, para luego-con manos temblorosas- buscar algo de maquillaje en su bolsa y comenzar a aplicarlo. Respiro una y otra vez para luego salir del cuarto de baño, un poco más tranquila.
Cuando se dirigió a la mesa, Ichigo la estaba observando, aun con esa mirada preocupada que había visto antes de dirigirse al cuarto de baño. —Estoy bien, Ichigo-kun. — le dijo, sentándose y llevando a sus labios un poco de la soda dietética. Había probado vino una sola vez en su vida, y fue en su boda. Orihime estuvo a punto de vomitarlo, no le gustaba para nada, por eso nunca pedía vino en su comida, sino soda o agua. Hubo un largo rato de silencio, donde solo se podían escuchar los cubiertos de ambos chicos de cabellos naranjas. Orihime mordió su labio inferior antes de romper el silencio. —Kuchiki-san regresara mañana. — comento en voz baja, subiendo su mirada para observar la reacción de Ichigo.
El corazón del chico dio un vuelco al escuchar el nombre de Rukia. Él ya sabía que la shinigami regresaría al día siguiente, lo sabía desde hacia al menos dos semanas, pero prefirió no decirle nada a Orihime. Él conocía muy bien los sentimientos de la joven mujer que estaba frente a él. Ella lo amaba. Y él… él estaba demasiado confundido como para saber que sentía a ciencia cierta.
Desde luego que había amado-o amaba- a Rukia. ¡Por supuesto que sí! Ella no solo le había otorgado sus poderes, sino que ella fue la primera mujer de la que se enamoro, y la primera mujer con la que tuvo relaciones. Amaba a Rukia, demonios sí que la amaba. Pero esa chica de cabello naranja que estaba sentada frente a él, también ocupaba un espacio muy importante en su corazón y en su vida. Él sabía que Orihime lo amaba, que lo había dejado todo-sin importarle el que podía morir- para salvar a Rukia. Se había entregado al enemigo para protegerlo a él. Y se había convertido en su paño de lágrimas cuando ella (Rukia) se fue. Sabía que él no volvería a ver a Rukia en un largo tiempo, y maldición sino había tenido razón. Era egoísta de su parte, era incluso malvado, pero él decidido que podía quedarse con Inoue, la dulce y hermosa chica que siempre había estado enamorada de él. Se caso con ella, y era el único hombre-dichoso, por supuesto- en poder apreciar a Orihime de una forma en que ningún otro podría hacer. Él se convirtió en el primer hombre de Inoue, él-de forma egoísta, no solo la despojo de su virginidad, sino de su dignidad, porque prácticamente obligo a Orihime a perderla, para que se casara con él, para que se quedara a su lado, aun sabiendo que él amaba a otra. Ichigo se odiaba a sí mismo, él había caído tan bajo, todo por no querer estar solo, y se había llevado junto a él a Orihime. Lo peor de todo es que a pesar de que jamás le había dicho un 'Te amo' a la chica, ella no parecía dejar de amarlo. Él deseaba que ella lo odiara, porque así sería mucho más sencillo todo, pero ella continuaba amándolo.
—Lo sé—respondió en el mismo tono de voz que la chica, cambiando su mirada. Orihime mordió su labio, esta no era la mejor forma de celebrar su cumpleaños número 23, pero era mejor conocer la verdad, por más que doliera, que a estar siempre sumergida en la mentira. La chica suspiro, sintiendo como su pecho dolía. —Orihime, esto…—
La chica bajo la cabeza, para negarla, mientras dos gruesas lagrimas comenzaban a deslizarse por sus mejillas. Las limpio rápidamente para luego subir su mirada y sonreírle de forma amigable a su adorado shinigami, aun con sus manos en su rostro porcelana. —N-no es nada, Ichigo-kun, siempre supe que iba a llegar un momento donde todo iba a culminar, porque después de todo tu y Kuchiki-san…—
—No, maldita sea, escúchame. — dijo el chico con voz fuerte, aunque no tan alta como para llamar la atención. La chica de cabello naranja limpio nuevamente las lagrimas que se estaban deslizando para mirarlo a los ojos. Ver de esa forma a Orihime lo hacía sentir tan mal, la chica no merecía eso, ella merecía ser feliz con la persona que ella amaba. Aunque esa persona fuera él. —Yo quiero…no, yo no quiero, yo necesito que esto siga, Orihime. Me gusta todo esto, sé que no he sido el mejor hombre, trato de serlo, en serio, y sé que todo lo que he hecho es una maldita mierda, pero créeme, desde el comienzo me he esforzado para que esto sea productivo y… creo que lo he logrado, Hime. Me gusta ser tu esposo, me gusta que tú seas mi esposa, me gusta despertar en las mañanas junto a ti y… estoy acostumbrado a esto. Sé que todo lo que estoy diciendo es egoísta y estúpido y merezco que me odies, pero… por favor, sigamos juntos, intentemos mejorar esto. No está del todo dañado, no importa si Rukia ha regresado, solo continuemos como siempre lo hemos hecho. Solo tú y yo. — dijo el shinigami, sin ni siquiera haber tomado una bocanada de aire. ¡Dios santo! Él era un maldito perro, esta pidiéndole a Orihime que continuar, porque él la necesitaba, sin importarle lo que podía sufrir ella.
—I-Ichigo…— balbuceo la chica, mientras más lágrimas se deslizaban por sus mejillas. Él le estaba pidiendo que continuara, que deseaba que todo funcionara. ¡Oh, Kami-sama! Sabía que eso estaba mal, pero realmente no le importaba, él quería estar a su lado. Le estaba pidiendo que se quedaran juntos. Él quería intentarlo. ¿Estaba bien eso?
El shinigami sustituto tomo las manos de la chica por encima de la mesa. Él no podía ser tan maldito como abandonar a Orihime luego de todo lo que ella soporto por él. Si él hacia eso… él no merecería seguir viviendo. —Por favor, Orihime. — suplico con voz baja, pero determinada, dedicándole esa sonrisa que era específicamente para ella. Ichigo llevo su mano izquierda al rostro de Orihime, haciendo que esta cerrara sus ojos mientras el acariciaba el suave rostro con ternura. No era del todo un sacrificio estar a su lado, Inoue era hermosa, bondadosa, y lo mejor de todo es que ella lo amaba. Él sabía que sentía algo por ella, pero todo era tan confuso, porque luego pensaba en Rukia, y las cosas se volvían borrosas y densas para él poder comprender. El joven seco las lagrimas que estaban bajando nuevamente por las mejillas de su esposa. Orihime mordió su labio inferior para luego abrir sus ojos y asentir. Por primera vez se iba a permitir el ser egoísta y todo porque él se lo estaba pidiendo. Claro, ella tenía muy bien estipulado en su corazón que si llegara el caso donde Kuchiki-san y él sufrieran demasiado, ella se apartaría. Era lo justo, ¿cierto?
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Ese era uno de esos momentos donde Orihime se sentía culpable. Aun sabiendo que él le había pedido que continuaran juntos, ella se sentía sumamente culpable porque pensaba que Kuchiki-san y en el amor que Ichigo le tenía. Eran tantos los sentimientos que se hacían presentes en ese instante, desde la tristeza, hasta amor hacia ese shinigami que besaba sus labios con dulzura.
Ichigo ya no era un joven, él era un hombre, un adulto que conocía muy bien que cada decisión que tomaba traería consecuencias. Él sabía muy bien que esa decisión que tomo de continuar con Orihime iba a traer consecuencias. La primera de todas iba a ser que debía alejar por completo todos esos sentimientos que sentía hacia Rukia, para así no causarle daño a esa chica que estaba desnuda junto a él, y a la que estaba besando con tanta ternura.
Cuando todo había comenzado, años atrás, Ichigo no podía pensar dejar de pensar en ella cuando estaba junto a Orihime. Le avergonzaba admitirlo, porque sabía que Orihime estaba consciente de ello, sus ojos grises llenos de dolor se lo dejaban ver. Luego de tanto tiempo, eran muy pocas las veces-al menos cuando estaba haciendo el amor con Orihime- en que pensaba en Rukia. Simplemente se concentraba-sin mucha dificultad- en la chica que estaba a su lado, la hermosa princesa que era su esposa y que era mucho más de lo que el merecía.
—I-Ichi…— gimió la chica entre sus labios. El shinigami deslizo sus labios por el cuello porcelana de la chica. Luego los subió hasta el lóbulo, mordiéndolo suavemente, provocando un gemido de la chica, mientras que sus dos dedos se encontraban moviéndose a un ritmo considerable dentro de ella. Orihime arqueo su espalda, logrando que su pecho rozara el torso desnudo del chico, provocando cierta fricción que provoco que ambos gimieran. Un tercer dedo se unió, haciendo que sus músculos internos se contrajeran alrededor de ellos. Minutos después, la chica jadeaba con dificultad luego de haber llegado al orgasmo. Sus labios volvieron a unirse, mientras sus lenguas danzaban en un suave vals. Era difícil de entender para Orihime el como Ichigo podía hacerla sentir tan bien, sin ni siquiera amarla. Ichigo se incorporo levemente, quedando sentado, mientras la chica estaba sobre su regazo, abrazada a él. Ambos gimieron un poco mas fuerte cuando él entro en ella, moviéndose suavemente. Las uñas de la chica rozaban lentamente su espalda provocando unos deliciosos escalofríos.
Ichigo asalto su cuello, besándolo y mordiéndolo con delicadeza, provocando los sollozos de pasión de la chica. ¡Demonios, como adoraba estar dentro de ella! ¡Como le gustaba tenerla junto a él de esa manera! Sus embestidas se volvieron más rápidas y mucho mas intimas, provocando que la chica arqueara su espalda, con sus ojos cerrados, dándole más libertad al joven de que pudiera morder y besar su cuello.
— ¡I-Ichigo!— gimió la chica, aferrada a su cuello, con su cabeza recostada a su pecho, escuchando los rápidos y fuertes latidos del corazón del chico. Sus músculos internos estaban volviendo a contraerse alrededor de su miembro. Estaban a punto de llegar, podía percibirlo.
—Hime…— murmuro el chico, mientras su vista se nublaba y sentía como 'explotaba' dentro de ella, liberándolo todo en el interior de Orihime. La chica de cabello naranja respiraba con dificultad y dejo escapar un 'ahh' cuando el chico se dejo caer hacia atrás, haciéndola caer sobre su torso desnudo. Ichigo sonrió para luego besar su frente con dulzura. Inoue le devolvió la sonrisa, mientras que varias lágrimas se deslizaban por sus mejillas, cayendo en el torso del chico. —No llores, Orihime. — dijo él, limpiando las lagrimas del rostro de la princesa de cabello naranja. —No llores— repitió, acercando los labios de la chica a los de él, besándolos delicadamente.
—Te amo, Ichigo-kun— murmuro la chica, acostando su cabeza sobre el pecho de Ichigo, haciendo que su cabellera ocultara su rostro. Esas eran las tres palabras que Orihime siempre pronunciaba luego de haber hecho el amor con él. Y esas eran las tres palabras que hacían que su corazón diera un doloroso vuelco, porque le recordaban a otra chica.
"Te amo, Ichigo"
"Te amor, Ichigo-kun"
Tan parecidas, y al mismo tiempo tan diferentes. Él no merecía recibir ninguna de las dos. ¡Demonios, No! No las merecía. No merecía a Orihime, tampoco merecía a Rukia. Sin percatarse sus manos acariciaban el cabello de Inoue, mientras que su mente comenzaba a traerle recuerdos de eventos pasados. El primero se refería a Rukia, cuando ambos se entregaron, cuando ambos se dijeron "Te amo" y el segundo era de Orihime, la primera vez que estuvo con él, cuando sus ojos grises, repletos de lagrimas, lo observaron fijamente, con tanto amor y devoción que hicieron que su alma abandonara su cuerpo. Sus mejillas estaban sonrojadas, debido al evento que habia ocurrido minutos antes, pero se veía tan hermosa de esa manera, con su cabello naranja cállenlo a los lados, sus mejillas rojas, sus ojos llorosos, y sus labios rosados dibujados en una sonrisa. "Te amo, Ichigo-kun"
—Yo…— ¿Qué iba a decirle? ¿Qué la amaba? Podía ser cierto, después de todo él estaba consciente de que ya no veía a Orihime como una amiga, sino como algo mucho más allá de lo que es la amistad. Además de que a eso se le podía añadir su odio a todos los hombres que se volteaban a verla, y esas ganas de protegerla de todo. Si, quizás él la amaba, pero él no podía decirlo porque un nuevo rostro llegaba a su cerebro. Rukia. —…lo sé. Yo lo sé…— sabia que eso era cruel, responder a todos sus "Te amos" con un 'Yo lo sé' pero era lo único que podía hacer. —…Yo lo sé…— Por suerte la chica no lo había escuchado por que se había quedado profundamente dormida sobre su torso. Con tanta delicadeza como él podía manejar, acostó a la chica a su lado, cubriéndola con las mantas blancas y acercándola a un abrazo.
Su padre siempre le estaba diciendo que al final, él lo perdería todo por su idiotez.
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El delicioso aroma a pancakes y a tocineta lo hizo moverse en la cama. Gruño al percibir los rayos de sol sobre su rostro, provocando que le fuera dificultoso el poder abrir sus ojos. ¡Rayos, debía decirle a Orihime que adquiriera unas nuevas cortinas, más oscuras! Se volteo al lado contrario, mascullando molesto, para luego colocarse de pie, tomar sus pantalones del suelo y colocárselos. Aun con los ojos semi cerrados se dirigió por el pasillo de la casa, tropezando con uno de sus zapatos e hiendo a parar-muy torpemente- sobre una de las mesas de madera donde estaban las fotos de Sora-san y de su madre, tumbando y destrozando uno de los envases de las velas y como consecuencia cortándose su mano izquierda.
— ¡Maldita sea!— grito al ver la sangre manchar el suelo. Gracias al dolor se despertó por completo, observando su mano cortada. Dolía, pero no era algo por lo que iba a morir, había pasado por peores cosas, entre ellas un hueco en su pecho-gracias al maldito de Ulquiorra-, y había sobrevivido, un cristal en su mano no iba a provocar que se desangrara hasta morir. Al menos que tuviera muy mala suerte.
— ¡Ichigo! ¿Qué ocurrió?— pregunto Orihime, subiendo las escaleras apresuradamente y corriendo hasta él, con su mirada preocupada. Inoue estaba vestida con uno de sus cortos vestidos para dormir, dejando ver sus tonificadas piernas. La chica tomo las manos de su esposo entre las suyas, con mucha delicadeza de no provocar más dolor del que ya tenía. — ¡Sōten Kisshun!— llamo la chica, haciendo que su domo dorado se apareciera y se colocara sobre la mano herida de Ichigo.
—No era necesario, Orihime. Era solo un tonto golpe— replico Ichigo, llevando su mano derecha tras su cabeza. La chica sonrió cálidamente, dejándole claro que no le importaba lo que él dijera, ella siempre lo iba a curar. Luego de un par de minutos, el domo desapareció, dejando completamente sana la mano de Ichigo. —Gracias. — agradeció.
— ¡Ahh, el desayuno!— exclamo Orihime, corriendo y bajando las escaleras de dos en dos. Ichigo rio ante la acción cómica de su esposa. Habían cosas que no cambiaban, y que el agradecía que no cambiaran. Suspiro, para luego ladear la cabeza. Parecía que Orihime había despertado un poco más alegre, y eso era bueno. El joven bajo las escaleras y entro a la cocina, donde la chica se encontraba preparando los platos con el desayuno. Su cabello naranja le caía sobre la espalda, con ligeras vueltas en sus puntas, mientras que sus pies descalzos se movían con gracia por la cocina, mientras tatareaba alguna de sus canciones. Ichigo dirigió su atención en buscar el jugo de naranja y llevarlo hasta la mesa, sirviendo los dos vasos de cristal. Orihime llego con los dos desayunos, colocándolos sobre la mesa con una encantadora sonrisa. Cada vez que la observaba de esa manera se repetía a si mismo que era un maldito suertudo, y que no merecía tener una chica como ella de esposa.
La pareja se sentó y comenzaron a digerir sus alimentos. Ichigo leía el periódico sin mucho interés, era más de lo mismo. Más muertes, robos y corrupción, además de los nuevos lanzamientos de algún aparato electrónico. Kurosaki tomo el jugo de naranja para darle un sorbo, cuando con el rabillo de su ojo observo como Orihime salía corriendo por el pasillo de la cocina. — ¡Oii, Orihime!— exclamo, colocando el periódico sobre la mesa y corriendo a perseguir a la chica, quien se había encerrado en el cuarto de baño. — ¿Orihime? ¿Qué ocurre?— pregunto preocupado, tocando a la puerta. Continúo tocando a la puerta y llamando a su esposa hasta que esta salió del cuarto de baño, pálida y descompuesta. Orihime se recostó de la puerta de baño, llevando sus manos a su boca, respirando con dificultad. — ¿Qué ocurre, Hime?— pregunto mucho más preocupado el joven shinigami, acercándose a la chica y colocando su mano sobre la frente de esta, notando que tenía fiebre. Kurosaki tomo a Orihime por la cintura para luego cargarla y dirigirse a su habitación, acostándola suavemente sobre la cama.
—E-estoy bien, Ichigo-kun. Es solo que comí demasiado rápido y creo que hice una mezcla de wasabi y la miel de los pancakes y me provocaron nauseas. — murmuro la chica, con una sonrisa exhausta en su rostro. Ichigo asintió, después de todo él era doctor y sabía muy bien que esas combinaciones extrañas que hacia la chica no eran saludables.
—De ahora en adelante no habrá wasabi ni esa Red Bean Paste en las comidas. Dañaras tu estomago y todo tu sistema digestivo. — la regaño el joven, mirándola seriamente. Orihime hizo un puchero, no podían quitarle eso, ella amaba las comidas con ello, no tenían gusto sin wasabi o Red Bean Paste. —Y esta vez cuando digo que no habrá, es que no habrá, Orihime. — le espeto Ichigo, volteándose como si se tratara de un padre regañando a su hija. La chica suspiro cuando vio a Ichigo irse. Estaba casi segura de que él iría directamente a la cocina para echar a la basura los alimentos.
Y tenía razón, Ichigo se encontraba echando a la basura esos alimentos 'destructores' del sistema digestivo de Orihime.
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Desde hacían horas Orihime se había sumergido en un sueño profundo. Ichigo le escribió en uno de las notas para pegar a colores de Orihime que iba a salir. Había colocado la nota-naranja- pegada a la puerta de la nevera. No había colocado a donde iria, pero tenía la ligera sospecha de que Orihime podría imaginar a donde él iría. A la Tienda de Urahara.
Cuando llego a la tienda, el ex capitán comenzó a molestarlo-del mismo modo que lo hacia su padre- preguntando el por qué continuaba con su rostro de amargado si tenía una chica como 'Kurosaki-san' a su lado. Ya el maldito no la llamaba Inoue-san, sino Kurosaki-san. El chico-luego de haberle pegado un fuerte golpe al hombre- aguardo a que el senkaimon apareciera en la tienda, dejando ver a dos sombras encaminarse a la tienda. Esas dos sombras pasaron a convertirse en tres, dos femeninas y una masculina. Frente a él estaba Rangiku Matsumoto-con su cabellera mucho más larga- Renji Abarai-igual que siempre- y por ultimo Rukia, quien tenía su cabello mucho más corto que antes. Sin percatarse, sus labios se habían curvado para dejar ver una sonrisa. La mirada de Rukia se suavizo al ver al shinigami sustituto, mientras que el corazón de este dio un vuelco en júbilo de volver a verla. Ichigo cambio su mirada hacia otro lado, al recordar las lagrimas de Orihime. Llevo su mano tras de su cabeza, para luego fruncir el ceño.
—Comenzaba a pensar que no iban a llegar. Son unos lentos— se mofo el chico, tratando de cambiar el flujo de sus pensamientos. Rukia embozó una sonrisa satisfactoria para luego lanzar una patada al chico. Ichigo cayó al suelo, con la nariz rota, mientras Renji y Matsumoto se reían.
—Lo dice el maldito idiota que no tiene que pedir los permisos. — le espeto Rukia, cruzándose de brazos. Así era la relación de ambos, gritos, peleas, pero en el fondo un cariño muy especial. —Es bueno verte de nuevo, Ichigo. — dijo la mujer, aun con sus brazos cruzados sobre su pecho. Ichigo se percato de que Rukia tenía el pequeño escudo en su brazo de teniente, y que también portaba los guantes de la familia Kuchiki.
—Maldita enana— le grito cuando se coloco de pie. Esta vez su rostro mostraba una sonrisa, la que hizo que Matsumoto arqueara sus cejas e interrumpiera el momento.
— ¿Y Orihime-chan? ¿Dónde está? ¿Dónde la dejaste?— pregunto la mujer, haciendo que Rukia e Ichigo embozaran una mueca de dolor al escuchar el nombre de la chica. Desde hacía mucho que la nueva teniente sabía que Ichigo se había casado con Orihime, y aunque por una parte se alegraba, porque ella también había hecho su vida, sentía cierto dolor en su pecho.
—Cierto, ¿Dónde está In- Kurosaki-chan? Un buen esposo debe estar al pendiente de su esposa, fresa. Por eso siempre estoy al pendiente de Rukia. — sonrió Renji, sin malicia alguna. El chico no tenía ni la más minima idea de lo que había ocurrido entre Rukia e Ichigo. Los otros tres shinigamis se quedaron en silencio, Matsumoto esperando las reacciones, Rukia avergonzada por que no esperaba que Ichigo se enterara de esa manera y Kurosaki paralizado. Hubo un 'click' en su cabeza, el que había hecho que entendiera una cosa: Rukia se había casado con el mandril. El chico sentía enojo, un gran enojo, y no hacia Renji y tampoco hacia Rukia, sino hacia él mismo. Él era infeliz porque pensaba en lo que podría sufrir Rukia, él había hecho infeliz a Orihime, por esa misma razón. ¡Y ella se había casado con Renji! ¡No había pensado en é! ¡Maldita sea! Su reatsiu se elevo un poco, pero logro controlarlo casi de inmediato.
—Orihime… ella… ella…esta…— la noticia no permitía que pudiera completar su oración. Aun estaba anonadado y furioso, sobre todo la última. —Ella está en…—
— ¡ Ohayô, Rangiku-san, Abarai-kun, Kuchiki-san!— exclamo la perfecta voz de Orihime, quien venía seguida por Urahara. La chica tenía una gran sonrisa en su rostro, mientras caminaba hacia ellos. "Una sonrisa falsa" se dijo así mismo Ichigo. Orihime lucia unos vaqueros oscuros y una blusa a cuadros, mientras que su larga cabellera iba peinada en una trenza. — ¡Bienvenidos!— exclamo nuevamente al estar junto a ellos. Antes de que pudiera decir algo mas, Rangiku la había abrazado, provocando que la chica perdiera el aire y comenzara a tornarse purpura. —R-ran..giku-san…— balbuceo.
— ¡Orihime-chan! ¡Luces hermosa! ¡Tendrás que decirme como te ha tratado este baka, y todo lo que han hecho! ¡Y luego iremos de compras!— exclamo feliz la mujer, aun abrazando de forma efusiva a Orihime, quien estaba a punto de desmayarse.
—Rangiku-san, estas asfixiando a Inuoe— indico Rukia, antes de que Matsumoto soltara a Orihime y esta diera varios pasos torpes para ser sujetada por Urahara, quien se gano una terrible mirada de Ichigo.
—No es Inoue, Rukia. Es Kurosaki. — aclaro molesto Ichigo, sonando cortante y frio. Tono que no paso desapercibido por nadie en el pequeño grupo. Orihime observo temerosa la mirada de enojo que tenia Ichigo, y podía percibir como el reatsiu oscuro de su hollow comenzaba a resurgir. Antes de que alguien pudiera decir algo, la chica ya estaba a un lado de Ichigo, colocando su mano con delicadeza sobre su hombro.
—No es nada, Ichigo-kun. Kuchiki-san puede continuar llamándome Inoue…—
—No es Kuchiki, Orihime, es Abarai-san. — reitero de la misma forma cortante Ichigo a su esposa. Orihime cerró los ojos un instante, comprendiendo lo que había ocurrido y sintiendo un enorme dolor en su interior. Ichigo estaba resentido, el estaba dolido porque la chica a la que amaba… su único amor… se había casado.
Kuchiki-san se había casado con Abarai-kun… ya no era una la que sobraba en ese computo… "Abarai-kun y yo somos los que sobramos aquí."…
N/A: Bien, como ya habrán visto, pues termino el primer cap, xDD Pues les explicare algunas cosillas. Como habrán leido, Ichigo quiere a Orihime, incluso él piensa que la ama, cosa que es cierto, pero no como quiere a Rukia. Ya durante el desenvolvimiento de la historia pues veremos como es que Ichigo descubre a quien en verdad quiere, xD Otra cosa, he dejado una serie de pistas sobre algo al respecto de Orihime, a ver si ustedes descubren que sera... mmm, no voy a decir nada, lelolelo, xD Y pues es lemmon, se que fue corto (comparado con otros que he hecho) pero entiendan, este... no podía mostrarlos en su 'todo' por que recuerden que Ichigo esta sumamente confundido (para unas cosas, pervertido) xD Este... ¿se me quedo algo por aclarar? Ahh claro, les iba a decir que todos los caps comenzaran con Orihime narrando, por cierto, como ha quedado? nunca habia escrito de esa forma y en verdad que no se como quedo! les gustaría que la historia fuera desde el punto de Orihime o una narración normal como el resto de mis fics? acepto sugerencias. Bueno pues no tengo mas nada que decir, solo decir (perdón por la redundancia, xD) que si tienen dudas, pues déjenlas en el review, si tienen sugerencia para escenas futuras, pues déjenlas en el review, si creen saber que ocurre con Hime, pues déjenlo en el review, y si piensan que saben a quien atacara (en una manera pervertida-joder ya lo dije, xD) Shirosaki, pues déjenlo saber en el review! Y ya me largo por que los aburriré, xDD
Invitación:
Pues creo que ya lo he dicho varias veces sobre la apertura de un foro de debates y apreciación de parejas de Bleach. Yo lo cree hace como tres meses atrás, y pues ya hay varios ichihimes y Ulquihimes, pero quiero que se unan ichirukis, ginxmat, renruki y sobre todo mas ulquihimes por que no podemos hacer debates sino hay de todas las parejas, y solo hay un Fanclub que es el ichihime (el que yo manejo) y muy pronto pues me daré a la tarea (si alguien quiere ayudar, se le espera) de abrir el fanclub de ulquihime, pero quiero que hayan ichirukis para que abran su club y comiencen con su apreciación a la pareja. Podemos ser felices todos juntos! si después de todo, amamos a bleach! así que si alguna de ustedes es ichiruki, y quiere ser parte del staff de esta pareja, del mismo modo que del renruki, hitsuhina, hitsukarin, ichihime, ichiruki, ulquihime, matsugin, etc... pues únanse y déjenmelo saber! así que los esperamos por allí!
La direcion es:
http: / five - lifetime - onelov . serie - tv - forum . com/ (unan los espacios)
o si nos buscan por google, coloquen Five lifetime one love, es la segunda direcion, la que dice www. travesura realizada. com (problemas con el cambio de direcion y se quedo con eso de harry potter, xDD)
