Nuevos Piratas Sombrero de Paja

La banda se reúne

Loguetown...

El sol bañaba con sus rayos matutinos los techos de los edificios y hogares ubicados en la ciudad que viera nacer al primer rey de los piratas: Gol D. Roger, en la plaza principal las palomas volaban atolondradamente de un lado a otro esperanzadas a que algún transeúnte dejara caer alguna migaja con la cual saciar su pequeño pero voraz apetito. Los habitantes del pueblo realizaban la misma rutina que desde hace años cumplían, la venta de mercancías, la fabricación de variados objetos, restaurantes, panaderías, herrerías, etc. servían cabalmente de la manera más pacifica de lo que se podría esperar.

El mundo seguía siendo la misma esfera de tierra y agua que daba vueltas alrededor del sol, pero era un mundo distinto al que gente de antaño estaba acostumbrada. Comenzando con el mismísimo Loguetown, mucho se hablaba sobre algunas fiestas que se celebraban cada vez que el rey de los piratas ponía un pie en la ciudad donde su homologo del pasado nació, creció y murió; aunque tambien se acostumbraban a las ya clásicas persecuciones de los marines a todo aquel que se atreviera a festejarle al hombre que prácticamente tenía su fotografía en cada cuartel de la marina que existía en el planeta. Pero ese detalle a la gente no le importaba, para ellos Monkey D. Luffy no solo era el rey actual de los piratas, era el símbolo de la nueva era de los sueños, y mientras el mundo se volvía loco buscando en los mares con tal de pescar a su banda, Luffy y sus nacumas se daban el lujo de pasearse por el mundo teniendo aventuras, celebrando banquetes y conservando su título de cualquiera que se lo quisiera arrebatar.

Y hablando de esas magnificas fiestas, hoy se celebraba una muy importante, en un bar conocido como Bar Gold Roger, cuyo dueño anterior Raoul dejó como un lugar donde piratas y marines compartían el licor y la comida sin importar de quien se tratara. Siempre había una fiesta sin importar si se trataba de la celebración del nacimiento del hijo de algún oficial de la marine o por el fallecimiento del perro favorito de algún capitán pirata, las risas y los cantos nunca se acababan y el bar estaba lleno de vida y clientes. Como decía la fiesta de este día se hacia para celebrar el inicio de unos muchachos en el mundo de la piratería, los invitados aun no llegaban pero quienes organizaban los festejos estaban algo atareados, y bueno no cualquier día unos chicos se lanzan al mar para enfrentarse a la aventura que algunos conocen como vida en busca de lograr sus sueños y cumplir sus metas (bueno en este mundo eso es muy frecuente). En la entrada del bar un sujeto corpulento entraba cargando dos barriles de cerveza mientras otro tipo igual de grande sujetaba una caja tapada con una especie de manta, o eso al menos creo ver, pero se podía ver que un hueso sobresalía de dicha caja.

Adentro, un hombre rubio y otro peliverde se peleaban mientras el primero se adentraba en una pequeña cocina que había en el local, mientras que el peliverde le gritaba un montón de groserías y demás palabras fuertes mientras un altísimo sujeto de afro singular los miraba sin asombrarse (al parecer las peleas de esos dos ya son cosa de todos los días). Junto a Louis (el actual dueño del bar), estaba platicando un tipo de larga nariz acompañado de una mujer rubia que escuchaba muy impresionada las historias que su compañero narigudo les contaba. En una mesa se encontraba una morena de cabello negro, estaba empacando algunos objetos dentro de un cofre pequeño de donde apenas se alcanzaba a ver unos rollos de papel, un log pose, una brújula, entre otras cosas. Por último un hombre muy risueño y con sombrero de paja gritaba a todo pulmón preguntándole al tipo rubio sobre la hora en que comenzarían a comer obteniendo por enésima vez un no como respuesta y la promesa de un chichón en su cabeza si continuaba fastidiando al cocinero...

-¡Auh! Pero Sanji, ¡ya tengo hambre! – se quejaba el pelinegro inflando las mejillas cual niño berrinchudo

Ya te dije que aun no barril sin fondo, la comida es para la fiesta, aun no llega Hancock-san ni mi Nami-swan con los demás ingredientes para la fiesta – contestaba Sanji mientras cortaba unos vegetales y los colocaba en recipientes

Aunque me duela admitirlo, el Ero-Cook tiene razón, ¿acaso quieres que los chicos lleguen y no encuentren nada para comer? – dijo Zoro mientras acomodaba unas mesas

¡Zaz! - Se abre la puerta estrepitosamente

¡Hey, Sanji! ¿Donde quieres que guarde esta carne? – preguntó Franky mientras metía la caja en el bar

¡MESHI! ¡MESHI! ¡MESHI! ¡MESHI! ¡MESHI! – gritaba Luffy al oler los pedazos de carne, aun cruda, mientras unas manos o dos o quizás treinta lo sujetaban

Luffy-san por favor, Sanji y todos los demás queremos que esta fiesta sea un bello recuerdo para los chicos, se que tú tambien deseas lo mismo, así que ¿por que no nos dejas encargarnos de esto mientras Usopp y tú pasean por el pueblo un rato? – dijo Robin mientras soltaba lentamente a su capitán

¡Hey! ¿Por que yo? – pregunto Usopp mientras la mujer rubia de al lado lo veía

¡Porque si! Ahora piérdanse un rato – le contesta Zoro poniendo esa mirada intimidante que tanto aterraba al francotirador

Pe...Pero ¿y Kaya? – balbucea Usopp señalando a su acompañante

No te preocupes cielo, yo me quedo con Robin preparando algunas cosas, además puede que encuentren a los chicos y eviten que se metan en líos, Loguetown puede ser peligroso – le dice Kaya sonriéndole y sentándose junto a Robin

Esta bien, el gran Capitán Usopp se encargará de esto, quizás me encuentre con Yasopp y los chicos, así los traemos a la fiesta, Pahahahahahahaha – dijo Usopp mientras jalaba a Luffy hacia afuera del bar lejos de sus amados trozos de carne

¿Crees que este bien dejarlos irse a ellos dos solos? – le pregunta Kaya a Zoro

No te preocupes Kaya, Luffy y Usopp conocen muy bien el pueblo, ya saben todos los atajos y escondites y rutas para llegar a este lugar – responde el peliverde mientras secaba el sudor de su frente

El que me preocupa es Ryu, ese niño heredo tu sentido de orientación – le mencionaba Robin al espadachín

Ahi vas de nuevo mujer, mientras Ryu sea el mejor espadachín del mundo que importa si sabe donde queda el este y el oeste – le responde Zoro con una venita en la frente

Hey marimo, Robin-chwan tiene razón ese hijo tuyo se pierde hasta en el cuarto de baño, jejeje – comentaba Sanji mientras Zoro se cabreaba más con el cocinero

Si, como si tus mocosos fueran perfectos: una niña obsesionada con los berries y un pervertido junior, con suerte lo bueno fue que ninguno heredó tus cejas en espiral – fue lo que dijo Zoro comenzando otra pelea hasta que una mujer pelinaranja les dio un golpe a ambos

¡Ya dejen de pelear par de burros tercos! Bien Sanji, aquí están los tomates que querías y las chuletas, debiste ver a esos carniceros tuve que regatearles el precio de la carne y no dejaban de mirarnos de forma rara – dijo Nami mientras que agotada se sentó con Kaya y Robin

¡¿Como que raro?! Si se atrevieron a hacerte propuestas indecorosas...yo...yo... ¡yo los freiré en aceite hirviendo y los rebanaré con mis propias manos!- gritaba Sanji furioso mientras un aura de fuego lo rodeaba

Cálmate Sanji, Hancock ya los castigó, los convirtió en piedra y a cambio de devolverlos a la normalidad nos hicieron un descuento del 70% por todas las cosas – dice Nami mientras Hancock buscaba por todos lados a su amado Luffy

¿Luffy, amor? ¡Volví! No me digan que... se volvía loco por verme de nuevo y salió a buscarme – dijo Hancock poniendo su cara de eterna enamorada

Bueno no, Usopp se lo llevó para que no se comiera la comida antes de tiempo y quizás encuentren a los chicos – respondió Brook rompiéndole la burbuja rosa a la emperatriz pirata

¡Dime que es verdad hombre esqueleto! – exigió la bella mujer mientras miraba amenazante al músico

¡Lo juro! ¡Lo juro! ¡Por mis ojitos bellos lo juro! ... Bueno, aunque ya no tengo ojos yohohoho – contesta el esqueleto para luego echarse a reír

No te preocupes Hancock, tu Luffy no se va apartar de ti solo porque te fuiste por unas horas – la animaba Nami que comenzaba a sacar los adornos para decorar un poco el bar

Eso lo dices porque tienes a tu marido ahi en la cocina, pero yo aquí en este bar mientras mi esposito querido anda por ahi a merced de que cualquier zorra quita-maridos que me lo quiera robar, si esas locas que habitan al acecho de cualquier apuesto hombre y no se tocaran el corazón aun sabiendo si aquel buen mozo tiene una bella y abnegada esposa y bellos y adorables hijos – respondió Hancock mientras se llenaba de lagrimas al imaginarse a un grupo de mujeres secuestrando a su Luffy

Conozco a Luffy-san desde hace años y se que solo tiene ojos para ti, para sus hijos, para su tripulación, para su One Piece, pero sobre todo su mayor pasión es la comida. No creo que le quede lugar para andarse fijando en mujeres tentadoras – le dijo Robin mientras terminaba de meter unos cuantos libros en el cofre

Ah, Robin siempre tienes las palabras para calmar la situación – dijo Kaya tranquilamente

Hey, Hancock y ¿donde dejaste a la pequeña Shirahoshi? – le preguntaba Franky mientras metía una caja de sodas al congelador del bar

Ella vendrá con sus primas Coral y Bell hasta la tarde, no puedo dejar que mi futura sucesora ande por ahi, con todos esos hombres libidinosos y de pensamientos sucios, se que ya tiene 15 años pero una madre sabe cuidar a sus hijos – le respondió Hancock al cyborg peli-azul

Vaya, ya pasaron dos años desde que no se reúnen los chicos juntos, cada quien se fue a entrenar a un lugar distinto: Ryu se fue a las montañas heladas de la isla Drum; Zeff se fue al Baratie a aprender de los grandes chefs del East Blue; Vivi se fue a modelar los vestidos de Pappug en Mariejois; Tom anda haciendo trastadas con la Franky Family en Water 7; Kureha se fue a estudiar medicina a la gran academia de Arabasta; Yasopp se entrena en Whiskey Peak; y Ace, mmm bueno Ace, oye Hancock ¿sabes donde está Ace? – dijo Nami

Mmm, no, ese niño siempre ha sido muy aventurero desde pequeño, en su última carta hace un año nos dijo que ya cruzo el Grand Line escondido en un barco de la marina, pero lo que me preocupa es esto que le llegó ayer a Luffy en un News Coo – respondió Hancock mientras sacaba de entre sus ropas un papel enrollado que mostró a todos (incluido el cantinero del bar)

En un cartel con letras grandes y claras decia:

Se busca

Vivo o muerto

Monkey D. Ace "El príncipe rojo"

25, 000,000

Se le busca por derrotar al Sargento Menor Kuno Abukara y al Comodoro Leopold Ebisawa,

A la banda de piratas de Ricky el Toro,

Por comer gratis en 10 restaurantes del reino de Prodence

Y por viajar como polizón en barcos de la marina.

En medio de la recompensa del muchacho y las causas de esta, se encontraba la foto de un muchacho de rostro parecido al de Hancock solo que con rasgos un poco más marcados, sonriendo con una cabellera larga y con una banda roja que cubría su frente.

¿Solo eso tiene de recompensa ya tu niño? – le pregunta Zoro a la princesa serpiente

Bueno, no se si sea correcta, su hermano Sabo me dijo que ha movido un poco sus influencias como Capitán de la Marine para que la recompensa de Ace no subiera tanto – le respondió Hancock dejando impresionados a todos dentro del bar

¿Y Luffy que dijo? – preguntó ahora Kaya

Se echo a reír y brindó con cerveza por la primera recompensa de su hijito – respondió Sanji mientras cocinaba unos cuantos pescados en una parrilla

Pero ¿como le hizo para llegar al Nuevo Mundo siendo tan joven aun?, a nosotros nos llevo tiempo hacerlo y eso que ya no eramos tan jóvenes como nuestros hijos – se preguntaba Robin mientras colocaba unos vasos en la mesa

En eso se asoma una jovencita que vestía un atuendo típico de Amazon Lily, con un escote azul que dejaba ver sus pechos (lo suficiente para impresionar, pero no tanto para evitar mirones), una falta tipo pareo color azul turquesa y unos zapatos de tacón del mismo color

Nos dijo en sus cartas que buscaba los lugares donde salían los barcos de la marina o de piratas que viajaran hacia el Grand Line, se las arreglaba para esconderse sin que nadie lo viera y llegaba a lugares donde entrenaba y hacia amigos – responde una chica quinceañera igualita a Hancock solo que más joven

¡Shirahoshi! ¿Que haces aqui? Se supone que tus primas y tú llegarían más tarde – le pregunta Hancock molesta

¡Ash! Mamá estaba aburrida en el barco de las Kujas, así que convencí a Coral y a Bell para tomar un bote y entrar a Loguetown, solo que la aburrida de la abuela Nyon no nos quería dejar venir, es tan anticuada – contesta con un tonito muy de adolescente la hija de en medio de la familia Monkey – Boa

Ay dios, ¿que he hecho para que me castigues con esta hija tan rebelde y traviesa? – se pregunta asi misma Hancock mientras dos chicas un par de años mayores que Shirahoshi entraban al bar: la primera alta y de cabello castaño y la segunda un poco más alta que la primera y de cabello rojo, ambas vistiendo el tradicional traje de guerreras de la tribu de las Kujas, ambas muchachas igual de hermosas que su pequeña prima

¡Perdón, tía Hancock! Pero Shirahoshi es muy testaruda, como el tío Luffy. Pero es que nos dijo que en estos pueblos hay muchachos guapos y atractivos, y... bueno no aguantamos la tentación – dijo Coral (la chica pelirroja) mientras se arrodillaba frente a su emperatriz

Esta bien, Coral, ya estoy acostumbrada a que Shirahoshi se las ingenie para engañarlas y cumplir con sus caprichos. Pero dime hija, ¿como esta eso de que en las cartas de Ace? Acaso ¿tu hermano te escribió cartas? – dijo Hancock poniendo cara de duda hacia su hija

Si, mamá, Ace me enviaba cartas a parte: me conto sobre sus aventuras en la Isla Goat; en Tequila Wolf ¡dijo que vió al abuelo Dragon!; dijo que encontró un nuevo nakama en Thriller Bark; que se peleó con unos marines en Arabasta; que comió con muchos piratas de la tripulación del Yonkou Trafalgar Law en el Archipiélago Sabaody; entre muchas otras cosas, mi hermano me lo contó todo, que envidia – le dice su hija mientras tomaba una manzana de la mesa y comenzaba a comérsela

Tú y tus hermanos me harán envejecer antes de tiempo con todas las travesuras que hacen – dijo Hancock mientras se desplomaba en una silla como toda madre sufrida

Ay mamá, pero que cosas dices, Sabo está en la marina trabajando duro para convertirse un día en Almirante de la Flota; yo me entreno para convertirme en la Emperatriz de Amazon Lily y mi hermanito menor Ace quiere ser el pirata más fuerte del mundo para llegar a ser el Rey de los Piratas. ¿Acaso eso te llena de tanto estrés? – dijo la niña con ese tonito de niña mimada que a su madre no le gustaba

No te preocupes, Hancock, no eres la única madre que tiene hijos inconscientes – le dicen ahora Nami, Robin y Kaya acompañando a su amiga Hancock en su sufrimiento de madre

Loguetown, zona norte...

Un tumulto de gente se empujaban por la calle principal, al parecer algo había que llamaba la atención de todos los paseantes que transitaban por el pueblo, si nos movemos y empujamos a uno que otro podemos ver a tres jóvenes, dos chicos y una chica. Uno de ellos tiene cabello verde y algo largo, tiene una camisa blanca y unos pantalones verde oscuro acompañadas de botas negras, en su brazo izquierdo lleva un pañuelo verde oscuro y a la cintura portaba un cinturón del que estaban sujetas tres katanas: dos de empuñadura color plata y funda roja mientras que la tercer espada tiene una protector con diseños de dragones. El otro muchacho es alto al igual que el peliverde, solo que su cabello es rubio y oculto su ojo izquierdo, tiene rostro de galán y siempre con un cigarrillo en la boca (aunque a su madre no le guste) viste un elegante traje negro con camisa de vestir purpura y una corbata negra, zapatos oscuros y bien limpios y brillantes. Por ultimo la chica que iba en medio de ambos, era igual de rubia que el muchacho del cigarrillo, su rostro es hermoso (de hecho muchos tipos la voltean a ver) lleva una blusa rosa con una minifalda azul marino acompañada de sandalias de diseñador. La razón por la que se les quedan viendo es por la tremenda pila de compras que la chica obligaba a cargar a los dos muchachos, uno de ellos (el peliverde) se quejaba mientras que el otro no tenía más remedio que obedecer a lo que la niña les ordenaba a hacer...

¡Vamos, rápido Ryu y Zeff! ¡La zapatería D'Angelux queda a unas cuantas calles! – gritaba la rubia mientras corría agitando su bolso

¡Hey déjanos descansar un rato, loca! – grita el peliverde sentándose y respirando un poco agitado

¡No le digas loca a mi hermana, cabeza de brócoli! – le grita el rubio al otro joven muy molesto

¿A quien le dices cabeza de brócoli? ¡Pervertido de campeonato! – le responde el espadachín parándose enfrente del rubio

A ti, Ryu alias "me pierdo en todas partes" – dice el muchacho de elegante ropa llamando la atención de todos

¿Ah, si? Pues tu Zeff, "piernas de bailarina" no puedes dar ni dos pasos sin que esa nariz tuya se chorreé de sangre al ver a una mujer bonita – le reclama Ryu a Zeff en tono burlón

¡Zeff y Ryu basta! Primera vez que nos reunimos en dos años y lo primero que hacen es seguir peleando, ¡parecen niños! Vamos a la zapatería y luego a buscar a los demás, si siguen asi la pobre Kureha se va asustar de los dos, saben que ella es muy tímida – los regaño Vivi mientras les jalaba las orejas a ambos chicos

¡Ah la linda Kureha-swan! De seguro ya se está desarrollando – dijo Zeff con su ojo visible en forma de corazón mientras sus piernas se movían cual espagueti escurriendo además de que sus mejillas y nariz se ponían rojas

¡Ahi vas! ¡Cocinerillo depravado! – le dice Ryu sonriendo y burlándose del rubio

¡MARIMO! – grita Zeff preparando su mejor patada

¡ERO-COOK! – grita Ryu desenvainando una de sus espadas

¡Punch! – se escucha sobre las cabezas de cada uno de los muchachos

Ya dejen de pelear, parecen perros salvajes – les ordena Vivi mientras de sus puños salía un poco de humo después de haberlos golpeado

Lo sentimos – dijeron los chicos al unisonó

Loguetown, zona sur...

Van dos personas caminando tranquilamente, la primera es una jovencita de 15 años, tiene cabello castaño que le llega a los hombros y que cubre con un sombrero rosa con una cruz blanca en el, lleva una blusa sin mangas y unos pantalones azules y unos botines color rosa. El tipo que la acompaña es alto, cualquiera diría que es un joven de 20 años o más pero él no sobrepasa los 17 años, tiene cabello azul y lleva puesto solamente un traje de baño de hombre color negro y una camisa desabrochada en color verde limón, sus ojos los lleva ocultos tras unos lentes oscuros y en su cuello lleva un collar de oro con la palabra SUPER en letras mayúsculas, su pecho llevaba una estrella azul tatuada y anda descalzo...

Oye Tom, ¿no crees que este sitio sea muy peligroso? – pregunta la chiquilla al grandulón

Hey Kureha no tengas miedo, estoy contigo, yo te protegeré de cualquier peligro, ¡soy un super androide! – le dice su fuerte amigo

En eso un sujeto velozmente le arrebata un maletín a la muchacha y sale corriendo hacia un callejon oscuro...

¡Ay! Mi maletín, ¡ahi llevo mis libros y mis instrumentos! – gritaba Kureha al borde del llanto

¡Nadie molesta a mis amigos y se queda sin castigo! – gritó Tom cargando a su amiga en brazos saliendo a gran velocidad superhumana para alcanzar al ladrón

Cuando entran al callejon, Tom y Kureha se quedaron perplejos: el callejon estaba patas arriba, manchas de pintura fosforescente por todos lados, cascaras de huevo, masas de chicle esparcidas por el suelo y en el fondo del callejon pegado por el chicle gigante, manchado de pintura y con olor a huevo podrido estaba el ladrón atrapado en el montón de basura que lo sujetaba a la pared. Delante del malhechor estaba un sujeto que tenia una capa verde, traje de spandex negro, botas verdes grandes, en su mano derecha con un guante verde sostenía un enorme tirachinas rojo, en su espalda debajo de la capa se veía un arco con un estuche de flechas junto al arco, cuando el tipo volteo Tom y Kureha pudieron ver que el sujeto usaba una rara mascara dorada con líneas verdes, en sus ojos llevaba una especie de gafas especiales y parecía tener una nariz larga. Pero lo más raro era que en el callejon se podía escuchar una cancioncita que sonaba más o menos así:

Sogeki no shima de.

Umareta ore wa.

Hya kupatsu hyaku chyu.

Ru, ru, ra, ra, ru.

Nezumi no medama mo.

¡Lock on!

Omae no haoto mo.

¡Lock on!

Sogeki no shima kara kita otoko.

Ru, ru, ru, ru, ru, ra, ra.

¡Sore nigero!

Sogege soge soge.

Sogekingu.

Ahora, sufre la ira de Sogeking rufián, el Rey de los Tiradores no perdona a los ladrones sucios como tú – grito el hombre de la mascara

¿Yasopp? ¿Eres tú? – le preguntan Tom y Kureha asombrados del tipo enmascarado

¿Qué? Claro que no, ciudadanos. Yo soy Sogeking, verán... Sogeki no shima de. Umareta ore wa. Hya kupatsu hyaku chyu... – les dice el superhéroe cuando se dispone a cantar su tema

Yasopp no cantes, no nos engañas ¡eres tú! – le dice Tom algo enfadado

No soy yo chico, ¡yo estoy aqui! – les dice un muchacho de cabello negro y rizado que se asomo desde la entrada del callejon

Pero, ¿como? Tu estas ahi – iba decir Kureha apuntando hacia el callejon pero Sogeking ya no estaba

Yasopp, ¿aun no le dices a Kureha de tus poderes de fruta del diablo? – le pregunta Tom a su amigo Yasopp en privado

Jejeje, creo que no, pero no le digas ella aun tiene la ilusión de que Sogeking y yo somos amigos, no se como reaccione cuando le diga sobre mi Inner-Inner no mi, que me permite liberar mi yo interno y el de otras personas – le contesta Yasopp mientras se cruzaba de brazos

Bueno, Yasopp dejando de lado a "tu amigo" Sogeking, debemos llegar a la plaza principal, Ace en su carta dijo que quería vernos a todos ahi – dijo Tom

¡Ok, síganme! – grita Yasopp y los otros jóvenes lo siguieron rumbo al centro de Loguetown

Loguetown, plaza central...

Sobre la reconstruida plataforma de ejecuciones, estaba parado un muchacho, vistiendo una chaqueta roja con un estampado en la espalda de una calavera sonriente, un pantalón y botas negras, su cabello largo con una banda roja en la frente. En su cintura llevaba una espada cimitarra dorada sujeta al cinturón del muchacho...

Vaya si que esta muy alto aqui, se pueden ver muchas cosas, hasta se ve el puerto – decia el chico mirando hacia abajo mientras se comía una pieza de carne

¡Hey tú, esta prohibido subir a esa plataforma mocoso! – gritaban unos hombre uniformados unos metros más abajo de donde estaba parado el chico

¿Nani? – pregunta curioso el adolescente mientras mira como los molestos hombre se abajo le gritan

¡Quedas advertido niño! Sino te bajas de ahi dispararemos – le grita el más alto de los sujetos y por su abrigo grande se veía que tenía el puesto de mayor responsabilidad del grupo

¡No me voy a bajar! ¡Quiero ver si encuentro a mis nacumas! – les responde el niño

Muchacho insolente, soy el Vice-Almirante Bishamon, vine a esta ciudad porque me dijeron que por aqui andan los Sombrero de Paja, pero me entretendré machacándote a ti mientras los encuentro a ellos – le gritó el marine para luego dirigir la siguiente orden a su grupo - ¡hombres preparen! ¡Apunten! ¡Fuego!- entonces los marines dispararon sus armas contra el chico

Gomu Gomu no Fuusen – grito el muchacho inflándose como globo ante la mirada aterrada de los marines que vieron como sus balas rebotaban contra el cuerpo del niño y no lo traspasaban

¡AAAAHHHH! ¡Otro hombre de goma! – gritaban los marines mientras las balas regresaban hacia ellos, por fortuna lograron esquivarlas

Esto no puede ser posible, solo hay un hombre de goma y ese es Monkey D. Luffy el Rey de los Piratas, esto debe ser una ilusión, si debe ser, eso yo me asegurare. ¡Jelly Party! – grita el Vicealmirante para luego convertir su brazo derecho en una masa gelatinosa y arrojando pequeñas partes de colores hacia el joven parado en la plataforma

¡Que chistoso! Haber que les parece esto: ¡Ice Shots! – grito ahora el joven poniendo sus manos como si fueran dos pistolas y de la punta de sus dedos índice y medio en cada mano brotaban balas de hielo que golpearon a las masas de gelatina que el vicealmirante le había arrojado congelándolas al instante

¿Quién demonios o que demonios eres tú? – pregunto muy furioso el vicealmirante

¡Mi nombre es Monkey D. Ace, yo voy a convertirme en el pirata más fuerte de todos los tiempos y me volveré en el Rey de los Piratas! Shishishi – confiesa el muchacho gritando a todo lo que daban sus pulmones con una gran sonrisa

Continuara...