Fue hace mucho tiempo, me encontraba entrenando en el parque ese atardecer, estaba todo en calma, el sol se estaba ocultando y el cielo se volvía de un color rosa, me quede mirando aquel color, en mi relajo sentí como el suave viento acariciaba mi cabello e invadía mi cuerpo, el sonido de las hojas chocando entre sí, el olor a humedad en el aire, de pronto el ligero sonido de unos niños riendo me despertó, uno de estos niños estaba a mi lado y estaba tocando mi pierna con su mano, era una niña, pequeña, de contextura delgada, ojos color miel y cabello castaño oscuro, con una pequeña sonrisa maliciosa en su rostro.
Le sonreí, pero en ese instante, en un parpadeo, estaba en un lugar completamente diferente, era muy iluminado, el sol chocaba su luz contra los blancos yacimientos del lugar, cerré mis ojos por un instante para poder acostumbrarme a la luz, era fuerte y no me dejaba ver, al cabo de un rato pude abrirlos con tranquilidad, la vista era hermosa, estaba cerca de un arrecife, las aguas eran esmeraldas y su oleaje tranquilo, parecía el paraíso. ¿Cómo llegue ahí? Supuse que era la habilidad de esa niña y yo termine siendo su juguete de prueba o algo así.
Pasaron las horas, ya había visto lo suficiente, nunca había estado en un lugar tan hermoso, pero era tiempo de volver y me preguntaba como lo haría, por más que camine no encontré a nadie hasta que logre ver una edificación a lo lejos en la cima de una montaña.
Camine por horas hasta que pude finalmente llegar hasta un castillo, era tenebroso, con cabezas de dragones como entrada hacia el particular lugar, se veía viejo, pero, no abandonado, todo estaba muy oscuro aun que era de día, los grandes arboles invadían el lugar, no se lograba ver el cielo de lo espeso que eran, su sonido era música y los pequeños rayos de sol que llegaban a mi rostro me daban una extraña sensación de calma, habían ciertos espacios donde entraba fuertemente la luz, como si algo gigantesco se posara ahí , seguí el sendero y llegue a dos enormes puertas de madera, las cuales me costó abrir, salude pero nadie respondió, me quede en la entrada por un rato pero aun que llame nadie contesto.
Observe el lugar, era gigante, el techo era muy alto, habían unas escaleras enormes a la entrada, como en las películas, ese lugar debió costar una gran fortuna.
Un fuerte sonido como un grito no humano me saco de mi lugar y me espanto, algo se acercaba al castillo y no era precisamente humano, mire por una de las ventanas hacia afuera y en ese espacio vacío de luz logre visualizar una enorme bestia, era como una lagartija de color rojo, pero mil veces su tamaño, era tal cual los libros de Game of Throne, un dragón y de el bajaba Kacchan, no lo podía creer, ¿Por qué Kacchan tendría un dragón? De hecho ¿Por qué había un dragones ahí?.
Kacchan lucia muy distinto, en ese instante estaba seguro de que era él, pero, habían algunas cosas distintas, estaba más alto, su cara más alargada y masculina, y tenía extrañas ropas, no pude dejar de mirar su pecho desnudo junto con esos collares, quede admirado un momento, me convertí en un chico baboso, con su capa burdeo, bajo de su dragón, le acaricio y pronuncio:
-Descansa un rato, fue un día difícil.
Se le veía feliz con ese animal, tenía una sonrisa en su rostro cuando le hablaba y deposito un tierno beso en la mejilla del dragón, me avergoncé y me escondí entre unas estatuas, el venia hacia la entrada, abrió las puertas de par en par sin inmutarse, sus fuertes pisadas hacían eco en el lugar, ahí pude comprobar que era Kacchan sus ojos carmesí, su cabello tieso y rubio y esa mirada agresiva, propias de él, pensé *Tal vez es un pariente de Kacchan* aun que me resultaba estúpido porque yo sabía que los Bakugou solamente eran ellos tres, Kacchan, la tía Mitsuki y el tío Masaru.
El hombre respingo la nariz y olfateo el lugar, se la rasco y luego se dirigió hacia un gran salón donde solo había un gigantesco sillón y la chimenea, el clima no era frio, pero él estaba muy cerca de la chimenea, como si el calor no le molestara, un trozo de carbón cayó cerca de él y con su mano derecha descubierta lo tomo y lo volvió arrogar, ya me estaba asustando, ¿no se quemó? ¿Habrá mejorado su habilidad y yo no me entere para anotarlo en mi cuaderno?.
De la nada, como un ataque de rabia lanzo una explosión a la chimenea prendiendo aún más el fuego... estaba enojado, lo cual no me sorprendía, pero pronto comenzó a refunfuñar, y a gritar:
-Ah! ¿Qué mierda ese olor?! ¿Dónde está? Huele a humano!
Humano había dicho, me asuste y por más que me intente esconderme el pronto me encontró derribando de una patada la estatua donde me escondía, quede congelado, su mirada posada en mí, no me atreví a devolverle la mirada, puse mi vista en el suelo y sentando en cuclillas solo me dedique a temblar abrazando mis piernas.
-¿Quién mierda eres?, ¿Vienes del pueblo?
-No... este... me perdí...
-Perdiste... ¿Eres de la villa verde y te perdiste?
-¿Villa verde?
-Tus ropas indican que eres de la villa verde, no me mientas o hare que Drakoris te devora.
Observé mis ropas y si, claramente tenía un atuendo que no era mío, una camisa blanca de anchas mangas con una solapa verde de muy fina costura, pantalón tres cuartos color café oscuro y un cinturón de cuero con finos detalles, era precioso, nunca había tenido ropa así, como de otra época, como del Señor de los Anillos, estaba fascinado hasta que me tope nuevamente con la amargada cara de Kacchan.
-Yo... no sé cómo llegue aquí.
-Ven.
Me tomo bruscamente del brazo y sin mayor esfuerzo me llevo hasta las afuera donde el dragón dormía.
-Por favor no! Suéltame!
-¿Qué hacéis aquí? ¿Estabas espiando?
-Solo quiero volver a mi hogar! Una niña uso su habilidad para traerme aquí y –grite desesperado-
-¿Habilidad? -Interrumpió.
-Sí, tú haces bombas ¿no?
-Suficiente. Drakoris abre la boca, tengo la cena.
-No!
Grite eufórico, tratando de sacarme de su amarre, pero me tomó más fuerte y me apretó contra su pecho, tenía miedo, no podía activar mi habilidad y me veía reflejado en los ojos del dragón, el dragón abrió la boca, pero cuando Kacchan me iba a lanzar hacia él, el animal cerro la mandíbula dándose media vuelta dejando su espalda hacia nosotros.
-Jodida Drakoris, hija de puta! Hasta cuando me tomas el puto pelo, ¿Qué mierda te crees?!
Grito lanzándome a su espalda de la cuál rebote cayendo al suelo, comenzó a patear al dragón mientras yo intentaba huir del lugar. Que espantoso lugar, era de enfermos o algo así, estaba asustado, ya realmente no sabía donde estaba o como volver a mi hogar, y ¿que pasaba con mi habilidad?, ¿porque no se manifestaba?, todo iba de mal en peor y lo peor era sentir como una mano fuerte y cruel me tomaba por la espalda haciéndome retroceder hasta el, choque contra su pecho y me llevo de vuelta al castillo lanzándome por los pasillo haciéndome deslizarme hasta la bajada de la gran escalera de la entrada. Mi pecho latía como si mi corazón se fuera a salir, tenía miedo y la oscuridad invadía más el lugar con la llegada de la noche, los ojos de ese hombre brillaban extrañamente con la luz nocturna, no, él no era Kacchan...
-Te lo preguntare otra vez ¿De dónde vienes? ¿Quién eres? y ¿Qué haces aquí?.
No pude evitar llorar –Mi... casa está en Japón, soy Mido... Midoriya Izuku, una niña con extrañas habilidades me trajo hasta aquí y... creo que este no es mi mundo, porque en mi mundo no hay dragones –Hable entrecortado por el llanto, el hombre me veía fijamente a los ojos, casi sin parpadear, se me acerco, me tomo del brazo y me arrastro por las escaleras hacia el segundo piso, hacia el final de un largo pasillo donde las gárgolas me miraban a los ojos observando mi temor, entramos a una habitación iluminada solo por la luz de luna, me lanzo a una cama que estaba en medio del cuarto cayendo de espalda y levanto sus manos las cuales comenzaron a iluminarse hasta incendiarse dando luz al lugar, prendió unas velas que estaban en las paredes y apago las ardientes llamas de sus manos.
Repentinamente se abalanzo contra mí, acorralándome en las blandas sabanas, pude ver muy de cerca sus ojos color carmesí, me sonroje y comenzó a olerme comenzando por mi cuello hasta llegar a la apertura de mi camisa, miro mi rostro y comenzó a tocarme con su ardientes manos, quemaban mi rostro y cuello, no entendía por qué estaba actuando así, tan cruel, desafiante e invadiendo mi espacio personal, hasta que se explicó.
-Ya entiendo. -Dijo tocando su mentón, parado frente a mí- Te enviaron los pueblerinos, ¿no?
-¿Qué?.
-Creen que si me dan un atributo yo les protegeré de todo mal.
-No se... de lo que hablas.
-No te hagas el estúpido. Los pueblerinos siguen siendo unos ignorantes, yo no los protegeré de nada, menos por haberme enviado un chiquillo enclenque.
-Ah! Perdón, pero yo no vine aquí a ser tu puta o algo así. -Me exalte, sin darme cuenta le alce la voz.
-¿Puta? Ellos te enviaron para que seas mi cena. Comer ¿entiendes? -Apunto a su boca dejándome ver sus colmillos, como los de un lobo.
-... Usted... ¿No es humano?
-Cuanta ignorancia!! –Grito haciendo explotar sus manos, ahora si se parecía más al Kacchan que conozco.
-Soy el rey de todos los reinos, el Dragón, el último Bakugou. Bakugou Katsuki! ¿Cómo te atreves a llamarme humano? !
Estaba impresionado, ¿Dónde mierda me había enviado esa niñita?, esto ya era peligroso, era un mundo de fantasía del cual no tenía idea donde estaba, pensé, mejor seguir el juego.
-Perdón! – Dije inclinándome. – Soy un ignorante en todo el aspecto mi señor... por favor déjeme servirle, no tengo nada más que ofrecerle, estoy confundido, tal vez bajo algún hechizo.
-No estas bajo ningún hechizo... puedo verlo. –Dijo ya calmado –Si, te dejare servirme, este lugar está muy sucio y yo no he tenido tiempo de hacer una limpieza, bien, estas a prueba -Dijo apuntandome con su dedo índice. -esta será tu habitación así que acomódate aquí... y no tengas miedo, yo no como porquerías.
-¿Que?!!... que amable mi señor.
Dicho eso Kacchan se fue de la habitación cerrando las puertas, haciendo un gran alboroto al salir.
–Porqueria... -Susurre -Eres un estúpido Kacchan, con 15 o 25 años seguirás siempre, pero siempre siendo un estúpido.
Estaba disgustado.
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Hola, espero que te haya gustado el 1er cap. de esta historia y agradezco que lo hayas leído.
Tengo pensado no hacer más de tres o cuatro capítulos como máximo, porque aún estoy con otra historia, pero me gustó tanto esta idea, asi que quería hacerla y rápido.
La imagen de portada le pertenece /crispy_r_c/media
Por favor visitarla y ver su trabajo.
Suerte.
