N/A: Hola de nuevo. ¡Ya he vuelto! Siento haber tardado tanto pero entre los problemas técnicos, creativos y de tiempo me ha costado acabar este fic y darle la forma que quería. Esta es la secuela de Mientras pasan las horas, aunque puede leerse independientemente de los fics que la preceden recomiendo que antes leáis las dos historias anteriores:

-LO QUE PASA EN LAS VEGAS SE QUEDA EN LAS VEGAS. Durante un caso en Las vegas Hotch y Emily se acercan más de la cuenta y se empieza a forjar entre ambos una confianza que traspasa las barreras profesionales que tanto se esfuerza por mantener Hotch. A partir de ese momento empiezan a suceder muchas cosas y conocemos los sentimientos de Aaron al respecto hasta que un viejo enemigo aparece. CUARTA TEMPORADA.

-MIENTRAS PASAN LAS HORAS. Tras ver a Hotch a punto de morir por el ataque de Foyet, Emily se percata de que se ha enamorado de él. La situación de Hotch no es fácil y todo se complica con la muerte de Haley. Las dudas de Emily respecto a lo que siente Hotch les llevan a una situación incómoda que no se llega a resolver. Ahora es a Aaron a quien le toca mover ficha. QUINTA TEMPORADA.

El fic comienza antes de la sexta temporada con un caso independiente de tres capítulos y os introduzco a tres personajes propios que trabajarán con la Unidad y tendrán importancia.

-Inspector Dixon. Jefe al cargo en la comisaría de Birmingham, Alabama.

-Teniente Taylor. Subordinada de mayor rango del Inspector.

-Detective Melvin. Subordinado directo del Inspector.

Dicho esto, espero que os guste.

DISCLAIMER: Los personajes de Mentes Criminales no me pertenecen, son propiedad de CBS.


Capítulo 1: Sweet home Alabama

Julio de 2010. Una ola de calor azotaba la costa Este de los Estados Unidos. Resultaba tremendamente asfixiante. Casi nadie podía permanecer más de una hora seguida en su despacho y Emily se empezaba a arrepentir de no haber pillado vacaciones justo en esa época. No quería ni imaginarse el calor que estaría pasando Reid en Las Vegas. El joven genio había cogido precisamente esa semana para visitar a su madre. Le echaba en falta, al menos con Spencer bromeaba durante el trabajo o se distraía de tanto calor.

No era raro ver a García, Morgan o JJ rondar por el Bullpen para escapar del insoportable calor que hacía en sus despachos. Ese era su consuelo, porque mientras junio había sido más ajetreado, en dos semanas que llevaban de mes solo habían viajado una vez por un caso.

En la sala de juntas al menos podía notar el chorro del aire acondicionado, así que se escabulló y empezó a elaborar un informe. Allí por lo menos estaba fresca y tranquila, sin sentirse observada por cierto individuo que de vez en cuando ocupaba sus pensamientos. Alzó la cabeza con los ojos cerrados, intentando disfrutar de la fresca brisa que salía del aparato e intentando desechar de su mente cualquier tipo de pensamiento que tuviera que ver con su jefe. Y justo fue con su mirada con lo que se encontró al abrirlos.

-Todavía no os he llamado para la reunión. –Dijo extrañado de encontrársela en la estancia. Intentó disimular su sobresalto, dado que ni siquiera le había oído acercarse a ella.

-Es por el aire acondicionado. Aquí hace menos calor que en el Bullpen. –Explicó observándole. Tenía la frente empapada en sudor, la camisa arremangada y se había despojado de la corbata. Ni siquiera con casi 40 grados Aaron Hotchner se quitaba el traje. Se la quedó mirando unos segundos, haciendo que apartara la mirada incómoda.

-¿Cómo estás? –Desde su última discusión durante el caso de Los Angeles había intentado hablar con ella, pero siempre le evitaba. Durante el mes de junio parecía haberse dado por vencido y ella prefirió aprovechar el tiempo para reflexionar sobre su vida, lo que se tradujo en adoptar un gato... "En vez de Sergio le tenía que haber llamado Resignación de Soltería Eterna…"

-Acalorada. –Contestó sonriendo por su pensamiento. Pudo notar como su semblante se suavizaba y en seguida supo a que se debía: era la primera sonrisa sincera que le dedicaba en mucho tiempo, aunque técnicamente se le había escapado…

-Sí, puede llegar a ser insoportable.

-Y que lo digas. Ayer me costó convencer a García y Morgan de que no convocasen una batalla de globos de agua. –Hotch sonrió divertido. Lo cierto es que hacía aún más tiempo que no le veía sonreír a él, pero claro, verle serio era lo habitual.

-Eso hubiese sido muy poco profesional. –Por un momento se quedó perdida en esa sonrisa, en esos hoyuelos tan rematadamente encantadores que se le formaban cada vez que reía.

Pese a todo lo sucedido esa sonrisa seguía teniendo el mismo efecto en ella, la dejaba hipnotizada por unos segundos y provocaba que sus otros sentidos bajaran la guardia. Su oído distinguió como unos pasos se acercaban haciendo que saliera de su momentáneo estado de ensoñación.

-¿Interrumpo? –Inquirió Rossi al ver la escena. Ambos negaron volviendo a la normalidad y Hotch se apresuró a sentarse a su izquierda al tiempo que Emily se ganaba una mirada curiosa por parte del mayor. El resto del equipo no tardó en llegar.

-Birmingham, Alabama. –Anunció JJ. –El cuerpo de Joanne Walker de 23 años fue encontrado en Ward Park.

-Cinco puñaladas en la espalda… -Interrumpió Rossi en voz alta mientras ojeaba el informe.

-Su cuerpo fue envuelto en una sábana y arrojado completamente desnudo.

-¿Hubo abusos?

-El forense ha determinado que hubo violación, pero fue post-mortem. –Explicó la rubia.

-Si solo hay una víctima ¿por qué nos llaman? –Preguntó Morgan.

-Maggie Fox y Karen Munn desaparecieron hace un mes y quince días respectivamente. –Vieron las fotos de dos chicas jóvenes y atractivas de pelo oscuro. –Sus familiares han recibido una caja con cenizas y una nota similar que simplemente dice "Maggie. Huesos. Cenizas. Prueba."

-Dime que es una broma macabra, por favor… -Rogó Prentiss.

-Es imposible determinar si las cenizas son de las víctimas. –Comentó Rossi.

-Casi imposible. En las cenizas entregadas a los Fox había restos de ADN. –Todos miraron a su compañera sorprendidos.

-Apuesto a que Reid podría darnos una estadística sobre lo complicado que es descubrir ADN en un cuerpo incinerado…

-Seguro que sí, Morgan, lo que no creo que adivinara es que el ADN de las cenizas perteneciera a un hombre. –Prentiss frunció el ceño.

-¿Añadimos una víctima masculina?

-¿Pero qué tiene que ver el caso de las cenizas con el cadáver del parque? –Preguntó Morgan. JJ apretó un botón del mando.

-A eso iba. Ayer, la policía recibió una carta anónima. –Todos ojearon la carta adjunta al informe.

-"Si hubierais hecho bien vuestro trabajo las familias no pasarían por esto." –Leyó Rossi.

-Se burla de la policía. –Sentenció Hotch.

-El Inspector Dixon nos quiere allí para que les ayudemos. La noticia de las cenizas se ha filtrado a los medios y ha causado gran revuelo.

-Es organizado. –Comentó Morgan. –Si incinera los cadáveres no sabremos cómo las mata. El cuerpo de Joanne significa que nos ha dejado una pista y ha sido porque él ha querido.

-Salimos en media hora.

El vuelo a Alabama no fue muy largo y no tardaron en llegar a la comisaría central. Allí les recibió el hombre al mando.

-Inspector Dixon. –Un hombre de mediana edad, pelo claro y mirada oscura como el carbón se acercó a ellos. JJ estrechó su mano. –Hablamos por teléfono, soy la Agente Jareau. Le presento al Agente Hotchner y a los Agentes especiales Rossi, Morgan y Prentiss.

-Bienvenidos. Gracias por venir. –Dijo estrechando cordialmente sus manos. –Les hemos habilitado una sala para que puedan trabajar a gusto. –Una mujer de cabello castaño y un hombre robusto y alto se acercaron. –Ellos son la Teniente Taylor y el Detective Melvin, trabajarán con nosotros. –Saludaron con un gesto de cabeza.

-¿Han investigado la nota?

-Así es, pero este cabrón es escurridizo. Aún no tenemos una pista en claro y ya son cuatro las víctimas que como mínimo tiene en su cuenta. –Dijo el Detective. La mujer les entregó un periódico.

-Los medios ya le han apodado el "asesino mensajero". –JJ bufó con desagrado y miró a Hotch.

-Les convocaremos y diremos que se trata de una broma de mal gusto. Lo que quiere es atención y se la vamos a quitar.

-¿Y si vuelve a actuar? –Preguntó la Teniente con recelo.

-En ese caso nos mandará otra pista que nos diga algo más acerca de su conducta. –Explicó Rossi. El Inspector asintió y le hizo un gesto a la Teniente para que fuera con JJ a preparar la rueda de prensa.

-Mandaré los datos a Reid por si nos puede ayudar con el perfil geográfico. –Dijo Morgan saliendo de la sala.

-Bien. Prentiss, ve al forense por si hay algo que no hayamos visto. –Luego se giró hacia el Inspector. –Necesito que la comisaría esté vigilada, es muy probable que el SUDES esté observándonos.

-Pondré a dos de mis hombres. –Hizo una seña al Detective y éste salió de la sala tras Prentiss. Morgan volvió a entrar.

-Si no le importa, nos gustaría hablar con las familias de las víctimas.

-Claro, no hay problema.


Morgan y Hotch se encargaron de hablar con las familias de las víctimas. Por lo que les contaron, no entraban dentro de un grupo de riesgo: eran chicas jóvenes, independientes y precavidas, estudiantes o trabajadoras que no se metían en problemas. Chicas completamente normales que no llamaban excesivamente la atención, salvo por el hecho de que eran atractivas y de pequeña complexión. Prentiss no encontró ninguna pista más en el cuerpo de Joanne y Dave había empezado a analizar la carta. Por la mañana JJ dio la rueda de prensa, siempre bajo la atenta mirada de la Teniente Taylor.

Parecía que el inspector quería tenerlo todo controlado y aunque les daba cierta libertad, apenas se despegaba de Hotch y mantenía a sus subordinados cerca del equipo. Prentiss tuvo a Melvin casi todo el tiempo pegado a su trasero, apenas habían dormido y encima no hacían avances. Llegó a la sala de la comisaria en la que solo estaban Hotch y JJ.

-He tenido al Detective Melvin pegado a mi culo durante toda la mañana. –Se quejó en voz baja.

-Dixon quiere tenerlo todo controlado, es natural. –Trató de calmarla JJ.

-Ya lo sé, pero apenas me ha dejado respirar en la escena donde encontraron el cadáver. Y no es una persona precisamente agradable.

-La Teniente Taylor también ha estado pegada a mí toda la mañana y a Morgan parte de la tarde. –Explicó la rubia con mirada comprensiva. –Aunque ella por lo menos es amable…

-Tened paciencia, esto nos ha pasado más veces como para que nos sorprenda. –Intercedió Hotch.

-¿Qué tal va Reid? –Preguntó Emily cambiando de tema.

-Está elaborando un perfil geográfico. En cuanto tenga algo nos lo dirá. –Un grito se oyó fuera y se apresuraron a ver qué sucedía.

Al llegar a la entrada vieron a una oficial con la expresión descompuesta y una caja tirada en el suelo. El Inspector Dixon y la Teniente llegaron corriendo.

-¿Qué ha pasado? –La Teniente se agachó y comprobó lo que había en el paquete: una mano amputada.

-Dios mío… -Miró a Dixon con aprehensión.

-Es él. –Le devolvió la mirada a su compañera y luego la desvió hacia Hotch.

Esa había sido la consecuencia de la rueda de prensa que habían dado por la mañana. Una carta y una mano.

-¿Por qué una mano? –Preguntó Melvin cuando estaban todos reunidos. Rossi sujetó la carta en la bolsa de pruebas y leyó.

-"Dejen que les eche una mano, ya que no han podido ayudarlas. No se alarmen, no es de Maggie. Con ella hice algo mucho mejor, aunque no les sirva de consuelo a sus padres. Dejen que sigan manteniendo la esperanza de encontrar su cuerpo. Ni siquiera con esas alimañas aquí impediréis que acabe con mi trabajo."

Un oficial entró en la habitación apresuradamente.

-Señor, acaban de informar que un mensaje similar ha sido entregado a los padres de Karen Munn.

-Morgan, JJ. –Solo con decir sus nombres, ambos salieron de la habitación en dirección a la casa de los Munn.

Dixon dio un puñetazo en la pared y salió por la puerta. Taylor salió tras él, posiblemente a intentar ofrecerle alguna palabra de consuelo o hacer que volviera a la realidad. No tardaron en volver a entrar.

-Juega con nosotros y se ríe de las familias.

-¿A qué se referirá con "acabar su trabajo"? –Preguntó Prentiss sin dejar de mirar la carta que sostenía en su mano.

-¿Usted qué cree? –Melvin le arrebató la carta con violencia. –No hace falta ser un federal para darse cuenta. –Rossi, que estaba a su lado, se interpuso entre ella y el hombre.

-Cuidado. –Le avisó para que no se sobrepasara. La postura amenazante del Detective alertó a Hotch, que dio un paso para ponerse al lado de Emily.

-Mi Agente no tiene la culpa de esto. –Advirtió encarándole.

-¿Insinúa que la tenemos nosotros? –Hotch permaneció con el rostro inalterable.

-No insinúo nada. El único que tiene la culpa es el SUDES.

-MELVIN, YA BASTA. –Le reprendió el Inspector. –Están aquí para ayudar. Eres uno de mis mejores hombres, pero si no respetas su trabajo me veré obligado a apartarte del caso. –El tono de su voz era duro. El detective pareció considerarlo hasta que le devolvió la carta a Prentiss y le ofreció una disculpa en lo que prácticamente fue un murmullo. –Organiza tres patrullas para que vigilen las casas de las víctimas por si el sujeto vuelve a contactar con ellas. –El detective asintió y se marchó para cumplir su orden. –Les pido disculpas. Eso estuvo fuera de lugar.

-Tranquilo. A veces nos pasa. –Confesó Emily con frialdad para restarle importancia.

-Será mejor que comprobemos las cámaras de seguridad e interroguemos al receptor del paquete. –Sugirió Taylor rompiendo la tensión. Rossi le dirigió una mirada a Hotch y salió tras la pareja.

-¿Estás bien? –Le preguntó a Emily cuando se fueron.

-No hacía falta armar una escena.

-Una cosa es que cuestionen nuestro trabajo y otra que agredan a uno de mis agentes.

-No me agredió, solo me arrebató la carta. –Aunque su tono era conciliador, Hotch intuyó que estaba molesta. Se miraron durante un momento.

-Procuraré que no te toque coincidir con él de nuevo. –Emily se giró tratando de disimular una sonrisa. Se acercó a ella para mirar la carta que aún sostenía. -¿Qué pensabas?

-Es extraño... –Notó como su cuerpo se tensó al sentirle cerca, pero no se movió y mantuvo la expresión serena que tanto le caracterizaba. –Cuando dice que no impediremos que acabe con su trabajo... Nos está diciendo que tiene un objetivo… ¿Crees que se referirá a las víctimas? –Hotch pensó un momento.

-Es un sujeto organizado que se burla de nosotros, es inteligente y nos ha esquivado con astucia. No elige las palabras al azar.

-Ni a sus víctimas. –Interrumpió ella mirándole. –¿Y si aplicamos el modus operandi de la última víctima al de las que no hemos encontrado todavía? ¿Y si a todas las atacó por la espalda y luego las violó postmortem? Dijisteis que eran de complexión pequeña, pero aun así las atacó por detrás.

-Se ve débil. Puede que tenga alguna discapacidad o un físico poco ventajoso y dificultad para mantener relaciones en su vida diaria. –Sujetó la carta un momento y sus dedos se encontraron con los de Emily. Ella levantó la mirada cuando acarició sutilmente su mano. Echaba tanto de menos el tacto de su piel que se atrevió a mantener el contacto por dos segundos antes de coger la prueba. –Se la mandaré a Reid, por si nos puede decir algo más. –Dijo mirándola de cerca.

-Bien. –Contestó apartándose de él.

Las cámaras no habían registrado nada sospechoso. El muchacho que entregó el paquete había sido interrogado: por lo visto una mujer de características parecidas a las de las víctimas le había pagado 50 dólares por entregarlo. Posiblemente ella había sido contratada por el SUDES, aunque al no encontrarla no pudieron comprobarlo. El chico descartó que se tratara de Maggie Fox. Por su parte, el ADN de la mano estaba siendo cotejado y los resultados saldrían en unas horas para ver si había coincidencia con algún desaparecido u otro caso.

Los padres de las víctimas estaban desechos, la señora Fox había sufrido un colapso al recibir otra nota. En ella el SUDES era más directo e increpaba a la policía por el asesinato de su hija, siempre con un tono de burla en sus mensajes. La otra mano que recibieron los Munn era de la misma persona que la que el sujeto mandó a la comisaría, estaban desconsolados pensando que podía ser de su hija.

-¿Creéis que las conocía? –La pregunta de la Teniente Taylor hizo que todos la miraran.

-Es probable. En sus cartas utiliza el nombre de pila de las víctimas. Quizás no sea solo por debilidad por lo que las ataca por la espalda… -Dijo Rossi mirando el panel con las fotos del caso. Morgan marcó el teléfono.

-Al habla la caliente Analista PG. ¿En qué puedo ayudarte? –Morgan sonrió coqueto.

-Hola preciosa, necesito que analices los círculos por los que se movían las víctimas y con el perfil geográfico que ha hecho Reid busques algún patrón. Es posible que el SUDES conociera a las víctimas.

-Me pongo con ello de inmediato. –Dijo antes de colgar.

-Estamos listos para dar el perfil. –Aseguró Hotch haciendo que todos le siguieran al vestíbulo de la comisaría.


N/A: Reitero mis disculpas por haberos hecho esperar pero ya sabéis que me gusta acabar los fics antes de publicarlos para no dejaros luego a medias y aprovecho para desearos un ¡FELIZ 2016!

Y ahora sí, ¿Qué tal un review? No dejes en dejar tus primeras impresiones y expectativas. ;) ¡Saludos!