¡Hola!
Ustedes se preguntarán ¿Qué esta haciendo esta mujer? ¿Y saben qué? ¡Es lo mismo que me preguntó yo!
Esta bien, esta bien, ya sé que no tengo constancia para nada y que tengo un par de fics inconclusos por ahí. ¡Pero estoy pasando por una etapa de verdadera sequía! Incluso tengo un par de cosas escritas que no me cierran del todo y no sé como corregirlas… y otras que sé que quiero hacer pero no me salen… En fin, neurosis tan propias de mí.
Aclaro desde el vamos que jamás leí Ni vi una adaptación cinematográfica. de la novela homónima. Creo que es de Jane Austen, pero ni siquiera de eso estoy segura. Tampoco sé si escribí bien el apellido.
Y antes que me olvide, los personajes no son míos. Pertenecen a Rowling.
Quizás pueda parecer un universo alterno, pero no: es un post- Hogwarts…. Más o menos común y corriente.
Es cierto que también tal vez le noten un toque novelesco, porque de hecho se me ocurrió viendo una escena de una telenovela mexicana mientras hacia zapping.
Este capítulo es como un prólogo Aunque no los ponga en antecedentes de casi nada. Así que es muy corto.
¡Espero que les guste!
Orgullo y prejuicio
Preliminares: Los herederos
- No puedo creer que nos hayas ocultado algo así, mamá.- dijo ofuscado un pelirrojo de unos 25 años, mientras tamborileaba los dedos sobre un pulido escritorio.
- ¿¿Yo?- prácticamente rugió una mujer pelirroja, un poco bajita y que parecía haber adelgazado mucho de golpe y luego vuelto a engordar unos pocos kilos.- ¡Mi madre fue la que decidió que no quería volver a verme en su vida por casarme con tu padre!-
- Lo que si es increíble.- apunto su hija, también pelirroja y más joven que su hermano, mientras se echaba el cabello para atrás para que su hijo no lo tomará y lo jalará - Es que no nos hayas dicho que Fabian y Gideon eran tus hermanos.-
- ¡Por supuesto que no! ¿Y darles otro argumento para querer unirse a la Orden?-
- ¡Pero es algo genético!- argumentó el muchacho.
- Como ese, por ejemplo.- giró los ojos la mujer mayor.
Los tres dejaron de discutir cuando una puerta que estaba detrás del escritorio se abrió y entró un hombre. Caminaba muy recto. Quizás el impecable traje que llevaba estaba demasiado almidonado. Cuando estiró el brazo para estrechar la mano de Molly, a Ron le asombró que no se hubiera roto la manga del saco.
- Mucho gusto en conocerlos, aunque sea bajo estas circunstancias.- dijo mecánicamente el hombre, mientras les estrechaba las manos. Ginny hizo muchas complicadas maniobras para poder sostener a James, su niño, mientras saludaba al hombre. - Tomen asiento, por favor. Yo soy Julius Madrischt y soy, o al menos lo seré por un tiempo más, el abogado de la difunta señora Prewett, de apellido de soltera Welsh.- El labio inferior de Molly tembló, pero no dijo nada.- ¿Desean tomar algo mientras esperamos?-
- ¿Esperamos?- pregunto de inmediato Ron.- ¿A quién?-
- ¡Oh! ¿No lo sabían?- el abogado había hecho aparecer una tetera y un juego de té y ahora servía la infusión. – Se ha localizado otro heredero.- soltó sin más.
- ¿Cómo? ¿Quién? ¿Por qué? ¿Cuándo? ¿Dónde?- se sorprendió Molly.- No lo tome a mal, no me importa el dinero. Pero siempre había creído que ya no tenía familia.-
- Su padre, el Sr. Prewett, murió hace más de treinta años. Desde entonces, su viuda, su madre, ha sido la dueña efectiva de la herencia. Ahora que ha muerto, le correspondería a sus hijos. Usted es la única sobreviviente de todos ellos. Pero su padre tenía una hermana, que se caso con un muggle y por eso fue eliminada de la vida familiar. Su tía tuvo un hijo.-
- ¿Así que tengo un primo? ¿Dónde esta? ¿Vendrá hoy? ¿Es mago?- pregunto ansiosa Molly.
- No, lamentablemente él murió cuando el retorno del Innombrable. No había heredado los poderes de su madre. Pero su hija sí. Ella es ahora la otra heredera efectiva de los Prewett, aunque no lleve ese apellido. Ya tiene que llegar.-
Efectivamente, en ese momento se abrió la puerta detrás de los pelirrojos, que daba a la calle. Entro un ráfaga de aire caliente y potente luz solar, tan propios del verano.
Entró una mujer de aproximadamente la misma edad que Ron, aunque más menuda. Se quitó una capelina blanca (que hacía juego con un vestido blanco de muselina, con flores color crema.) y una espesa cabellera castaña le cayó hasta por debajo de los hombros.
- Siento haber llegado tarde.- primero le estrecho la mano a Julius. Luego se giró hacia los otros tres.- Buenos días. Yo soy... – avanzó hacia la pelirroja mayor, sonriendo y con la mano estirada. Apenas se vieron bien las caras, la escena se detuvo por completo, como si alguien hubiera presionado "pausa".
Molly vio reflejada su propia cara de pasmosidad en la de Hermione antes de desmayarse.
Cuando la mujer volvió en si, su hijo la sostenía mientras Julius le echaba aire con el mismísimo testamento de su madre. Se sentó con dificultad en la silla y vio como James se reía ante las muecas de Hermione. En el rostro de la castaña había huellas de lágrimas aún frescas. En el de su hija también. Pero ambas sonreían.
- ¿Entonces…?- Molly tomó un poco de agua y logró hablar.- ¿Entonces… tú eres la otra heredera?-
Hermione asintió con la cabeza y sonrió más pronunciadamente.
- Es fantástico. Más de lo que podría pedir.- Molly abrazó a la chica, que se había acercado. – Pero… - miró interrogante a Julius.- ¿Cómo…? ¡Oh, que importa eso ahora! ¡Hermione, eres una Prewett!-
- Entre otras cosas…- sonrió la chica.
- Me voy.- Ron tomó sus cosas y comenzó a caminar hacia la puerta.
- No puedo creer que vayas arruinar esto.- Ginny dejo a James en brazos de su abuela y siguió los pasos de su hermano. - ¿No te parece que es hora de olvidarlo?-
- ¿¿Olvidar?- Ron no levantó la voz, pero se tornó más fría y lacerante.- ¿Olvidar que ella me engaño? ¿Olvidar que no pensó en mí? ¿Qué me traicionó? Yo creo que no.- el pelirrojo miró a la flamante heredera Prewett con algo peligrosamente parecido al desprecio.
- ¡No digas tonterías!- El abogado los miraba sin saber que hacer.- ¡Sabes muy bien que Hermione hizo lo que debía! ¡Deberías estarle agradecido!- gritó la pelirroja menor.
- ¡Ella jamás hizo lo que debía! ¡Algunos aquí sabemos perfectamente que falto a sus deberes! ¡Si hubieras estado en mi lugar también te habrías enfadado!-
- ¡Yo confió en ella! ¡Siempre lo hice!-
- ¡Yo no! ¡Nunca confié en ella y me parece que he tenido razón! ¡Además, nunca le importamos ninguno de nosotros!-
Portazo marca Weasley.
Hermione, que venía llorando silenciosamente desde el comienzo de la discusión, sollozo con más fuerza ante las últimas palabras de Ron. Apoyó la cabeza en las rodillas de Molly.
- Supongo… - cortó el abrupto silencio el señor Madrischt.- que… teniendo en cuenta estos conflictos familiares… - Hermione levantó la cabeza para mirarlo mientras hablaba y él le alcanzó un pañuelo.- La mansión… la venderán y se repartirán el dinero.-
- ¿Tiene muchos recuerdos allí, Molly? ¿Recuerdos felices?- Hermione se irguió, poniéndose dignamente de pie y tomando a James en sus brazos. El niño la miró con sus brillantes ojos verdes y le sonrió.
- Muchos hermosos recuerdos con mis hermanos.- afirmó Molly. – Pero no me parece inconveniente… -
Hermione le sonrió también desde sus enrojecidos ojos castaños. Harry debía de haber sido así de bebé, cuando amaneció un día en la puerta del número cuatro de Privet Drive. ¡Harry! Lo había amado tanto. Había sido el hermano que nunca tuvo. Si ella tuviera un lugar, que de hecho lo tenía, pero no era suyo realmente, donde saber que había pasado horas con Harry, lo conservaría contra viento y marea.
- Por supuesto.- Hermione le acarició la mejilla a James.- A mi tampoco me parece inconveniente conservar la Mansión. A más tardar la semana próxima trasladaré mis cosas. Y espero que Ginny tenga un cuarto cercano al mío.-
CONTINUARÁ…
¿Raro? Yo creo que todavía no saben lo que es raro… Tratándose de mí.
En realidad, yo muchas veces pensé que Hermione se enteraba que en realidad pertenecía a una antigua familia de sangre pura. Y de hecho, casi me gusta más otra versión que creo que nunca usaré y a continuación detallare porque.
Bueno, después de observarme mucho tiempo he llegado a la más que obvia conclusión que no sirvo para los fics largos. Y esa otra teoría iba incluida en un fic largo. Quizás lo acorte y lo haga de todos modos. Quizás no, lo veo tambaleante.
Así que, si alguien esta leyendo estas larguisimas divagaciones de escritora amateur, pido más paciencia de la normal. Si bien este es un fic RW/HG, lo que ya es un gran punto a favor en mi dedicación, estoy probando con técnicas nuevas: digamos escribir capítulos cortos y bien encadenados y no poner cosas de más… O sea, lo que tendría que hacer cualquier buen escritor, excepto lo de corto que no me gustan los capítulos de dos páginas, pero que creo que es lo que saldrá esta vez.
Entonces, en realidad me daría mucho ánimo que me dejaran un Review. Cuántos más Reviews me dejen, más cortos y con menos cosas incoherentes serán los capítulos.
O al menos haré el esfuerzo.
¡Hasta la próxima!
