:::Disclaimer:::
Ed, Edd y Eddy no me pertenecen. Hago esto por diversión y placer.
Es el primer KevEdd que hago, espero sea de su agrado. Podría decirse que también es mi primer fic, pero la verdad es que ya había escrito algunos antes pero simplemente desaparecieron.
+Imperfecta Perfección+
Capitulo 1: Idiotas.
Eddy estaba furioso con la situación. Doble D y Kevin?! Y todo era su culpa! Por imprudente, por cobarde y por ser un mal amigo, él lo sabía y se sentía culpable, y quizá esa culpa que sentía hacia que no pudiera decirle nada, y también el hecho de que ahora Kevin acaparaba todo el tiempo y atención del Cabeza de Calcetín, y sin mencionar que cuando este no veía Kevin amenazaba a Eddy diciéndole que no se acerque a Doble D.
Todo comenzó desde el incidente; una buena estafa, mucho dinero, mal lugar para disfrutarlo, mal momento para quedarse. Esos sujetos no solo eran más que ellos, eran mucho más fuertes. Ni siquiera se molestaron en intentar enfrentarles, solo debían correr. Ed, el más grande y fuerte de los tres, aunque alcanzaron a golpearlo un poco se las ingenió para huir; Eddy, el más escurridizo, logró salvar parte del dinero y correr junto a Ed; pero Doble D, el cerebrito, ni era fuerte, escurridizo o rápido… Eddy se dio cuenta muy tarde que se había quedado atrás.
Lo peor era que Doble D no estaba molesto con él, al menos si lo hubiera estado hubiera sido más fácil tener un momento con él con la escusa de disculparse y con ello también decirle que había perdido la cabeza al pasar tiempo con Kevin. Nada bueno podría salir de ello, Eddy sabía muy bien que Doble D solo saldría herido, y aunque Kevin estuviera siendo amable con él ahora, y hasta un poco posesivo, seguía siendo el mismo idiota que los molestaba hace solo poco tiempo atrás.
- Eddy, estas exagerando, Kevin no es tan malo como crees. – decía Doble D cada que Eddy intentaba hacerlo entrar en razón. En realidad no podía decirle directamente todo lo que temía.
Ni el mismo Cabeza de Calcetín se daba cuenta de lo que sucedía con él mismo. Eddy se lo esperaba, siempre supo que Doble D no era igual que el resto, es decir, demasiado sensible, demasiado limpio, demasiado vocabulario, demasiado nerd como para ser como el resto, y quizá para el resto no fue tan obvio porque justamente se había juntado con él y con Ed, o quizá con Jimmy allí nunca pudieron verlo. Pero para Eddy, con tanto tiempo que pasaba con él, no le fue difícil darse cuenta que tarde o temprano Doble D descubriría su verdadera inclinación.
Pero gracias a él, sucedió demasiado temprano, y el idiota aun no se daba cuenta! No se daba cuenta de su boba sonrisa cuando estaba cerca de Kevin, no se daba cuenta de los suspiros cada que se despedían, no se daba cuenta del sonrojo en su rostro cada que Kevin se le acercada demasiado! Quizá Kevin si se daba cuenta! Quizá lo hacia apropósito para aprovecharse de su cerebro y eventualmente convencerle de que hiciera todas sus tareas! Y antes de que pudiera decirle todo ello a su amigo, recordaba que él mismo había hecho eso en el pasado.
Pero ahora era diferente, realmente había llegado a quererlo como su amigo, realmente se preocupaba por eel, y aunque hubiera sido un cobarde aquella vez, cuando se dio cuenta que Doble D se había quedado atrás, volvió, pero claro, ya era muy tarde. Estaba aliviado de que estuviera bien, pero le daba rabia que fuera gracias a Kevin.
- Te lo advierto, enano, deja de buscarlo. – le susurraba amenazante Kevin después de interrumpir sus intentos por hablar con Doble D. Si antes le temía un poco, ahora realmente le temía mucho, la pubertad había sido muy generosa con Kevin y no solo era apariencia, no por nada sin mucho esfuerzo se había convertido en uno de los abusivos mas temidos de la secundaria a pocos días de ingresar en ella, y al ser el atleta estrella era el favorito de los profesores e incluso líder de otros abusivos de cursos superiores, y como la vida era tan injusta, también el rompecorazones más cotizado. Eddy aprendió a no molestarlo más y a ignorarlo por su propia seguridad.
Y para agregar un elemento más en su gran lista de cosas que lo hacían genial, Kevin poseía la moto más estupenda de todo el lugar. La amaba tanto como había amado a su bicicleta en la infancia. Y curiosamente todo esto había sido lo que había salvado a Doble D y lo que en primer lugar los había juntado.
Aunque quisiera darse todo el crédito, la verdad era que Kevin y Doble D hacia un tiempo que se llevaban bien, es más, la verdad era que Kevin nunca había tenido un problema con el Cabeza de Calcetín, y cuando este amable y tímidamente le había ofrecido su ayuda cuando tuvo problemas con su moto, ese no-problema se convirtió en cortesía mas gratitud y aprecio con el tiempo. Si bien antes de ello Kevin había sido un abusivo con Doble D, después de esos momentos a solas en su garaje viendo como milagrosamente hacia andar de nuevo a su moto, Kevin tenia cierto trato especial con el cerebrito.
- No recuerdas cuando te empujaba por los pasillos y te hacia bromas pesadas? – le insistía Eddy a Edd.
- Las bromas te las hacia a ti, sí, es verdad que yo también salía afectado a veces, pero ya se disculpó y, bueno, ha cambiado – lo defendía siempre.
La verdad era que había cambiado, y no solo con Edd, si no con todos, incluyéndolo. A veces tenía algunos deslices, cuando tenía presión de sus amigos, pero siempre tenía el cuidado de no lastimar o involucrar a Doble D.
- Pero cuando sus amigotes se den cuenta, tú serás quien salga lastimado.
- Perdona, que dijiste Eddy? – Doble D era su amigo, y aunque quería protegerlo de lo que estaba seguro sucedería, no sabía cómo. A veces era tan testarudo.
- Ven a mi casa después de clases. Necesito decirte algo import—
-Otra de tus estafas?! – Kevin golpeo los casilleros tan bruscamente que ambos Eds se sobresaltaron. – No lo creo enano, el Doble Tonto ya tiene un compromiso conmigo. – lo dijo con una sonrisa maliciosa que incluso Doble D se sintió lo suficientemente intimidado como para decir algo. Eddy no tuvo realmente tiempo de decir nada mas, Kevin tomó a Doble D del brazo y se lo llevo a quien sabe donde, sin embargo Doble D le regaló una débil sonrisa antes de desaparecer por uno de los pasillos. Una sonrisa de disculpa?
- Es un idiota! – ambos lo eran.
Después de clases no vio a su amigo por ningún lado y resignado volvió a su casa junto con Ed. A pesar de que Ed fuera un tonto, él también se daba cuenta de la ausencia del otro, y quizá él era quien mas sufría ya que pensaba que Doble D estaría molesto con él. Eddy sabía que no era así, pero como podría explicarle el por qué Doble D ya no se juntaba con ellos? Opto por decirle que tenía muchas tareas y tenía que estudiar más cosas que ellos. Aun así Ed seguía triste.
- Saludos, Eddy, Ed – al llegar a la puerta de su casa Doble D ya estaba allí esperándolos. Ed lo recibió efusivamente y Eddy solo pudo preguntar.
- Que paso con—
- Practica con el equipo. Se olvido que la tenia, pero fue muy amable en traerme hasta aquí de todas formas. – Se apresuro el explicar Doble D. – Aprovechemos antes de que cambie de opinión. – Eddy les hizo entrar a ambos, y como solo quería hablar con Doble D, puso unas películas para que Ed se distrajera y pudieran hablar con tranquilidad y al mismo tiempo compartir un momento entre amigos.
Hubo un momento donde ninguno dijo nada de nada, pero era más para dejar que Ed se concentrara por completo y dejara de ponerles atención. Técnica que usaban siempre que querían hablar solo ellos dos.
- Acaso ya eres su esclavo? – empezó Eddy en un susurro, el otro no tuvo que decir nada, solo darle una mirada haciéndole saber que su comentario fue muy inapropiado. – Lo siento, pero eso parece. Ya no podemos ni hablar o armar estafas como antes. Además, por tu comentario hace rato…
- No es lo que crees, Eddy – respondió calmadamente mirándolo a los ojos.
- No? Entonces qué es?
- Somos amigos.
- Amigos? Acaso no recuerd—
- Ya sé lo que dirás, y te responderé lo mismo. Ha cambiado.
- Ok, ok, sé que no llegaremos a ningún lado con eso – respondió un poco cansado de la situación – Pero al menos explícame por que no deja que nos veamos? – pregunto Eddy acusatoriamente. Doble D sonrió ligeramente mientras se sonrojaba un poco.
- Desconfía de ti. Tiene miedo que otra vez… -dudó un momento - … que otra vez suceda lo de la anterior vez.
- Fue un accidente – respondió Eddy un poco dolido y arrepentido – te juro que en cuanto me di cuenta volví.
- Lo sé. Y lo entiendo. Pero para Kevin eso no es relevante. El solo esta protegiéndome. Y según él, alejándome de los problemas, que en su cabeza eres tú, Eddy. – Eddy quiso decir algo para defenderse pero Doble D lo interrumpió. – Yo se que solo fue un accidente, he intente decirle eso. Bueno, al menos logre que no te golpeara, pero no puedo quitarle la idea de que fue tu culpa y que lo harás otra vez. Yo le dije que eres bueno, pero por ahora sigue paranoico y no me escucha.
- Le dijiste que yo era bueno? – Eddy no pudo evitar sonrojarse ante ello, aunque no se sentía merecedor que aquel pensamiento hacia él.
- Si, pero creo que el pasado y sus diferencias no le dejan verlo. – Rió Doble D – igual que a ti. Él también es bueno, Eddy, te digo que ha cambiado. – de repente las palabras de Doble D ya no sonaban tan absurdas. – El mismo se dio cuenta que estaba siendo ridículo, y accedió en traerme y no interrumpir siempre y cuando prometiera no participar en ninguna de tus estafas que probablemente planeabas y era la razón por la que me llamabas.
- Yo solo quería hablar contigo – se defendió Eddy. Pensó por un momento todas las cosas que acababa de decirle Doble D, realmente solo estaría protegiéndole? Realmente no se estaba aprovechando de él? Realmente había cambiado?
- En realidad, si quieres que esta situación cambie, deberías hablar con él. – sugirió Doble D tranquilamente. – yo lo intente, pero es un poco testarudo, además que es un poco difícil darle la contra, sabes? Aun me intimida un poco. – admitió sinceramente. Eddy pensó un momento antes de responder. Doble D es una de esas personas en las que puedes confiar plenamente en sus palabras, nunca mentía y aunque ocasionalmente solía ser sarcástico, siempre era brutalmente honesto; y cuando sugería algo usualmente era lo más acertado por hacer.
- Garantizas que no va a golpearme? – dijo Eddy finalmente un poco malhumorado. A Doble D le brillaron los ojos y una amplia sonrisa se dibujo en su cara. A Eddy siempre le pareció tierno verlo así, y aunque le pesaba lo que había decidido hacer, valía toda la pena y el esfuerzo solo por ver esa sonrisa.
- Yo hablare con el – respondió emocionado mientras le abrazaba espontáneamente. Al parecer Doble D también los había extrañado mucho. Luego de ello terminaron de ver la película mucho más relajados.
- Doble Tonto me dijo que querías hablar conmigo, mas te vale que no sea ninguna de tus bromas enano. – fue el saludo que Kevin le dio a Eddy al llegar al estacionamiento del colegio donde había sido citado. Un lugar sin gente pero a vista de todos por si necesitaba testigos.
- No es ninguna broma. Solo quiero a mi amigo de vuelta. – Eddy se tuvo que morder la lengua para no devolver los insultos. Kevin solo necesitaba una provocación y adiós ambiente de pacifismo y tregua. Kevin frunció el entrecejo antes de responder.
- Tú lo perdiste por tu idiotez. – respondió seriamente. – No voy a dejar que le vuelvas a poner en peligro. – advirtió casi en un gruñido.
- Fue un accident—
- provocado por tu idiotez! – ambos se estaban enfadando un poco. Era cierto que cada que Eddy decía eso a Doble D sonaba arrepentido, pero cuando se lo decía a Kevin mas parecía un ladrido que advertía una mordida. Pero Kevin ladraba más fuerte, y obviamente mordía más fuerte.
- Y a ti que te interesa?! Por qué el repentino interés en el Cabeza de Calcetín?! Acaso quieres aprovecharte de su cerebro y que haga todas tus tareas?! – Eddy tenía que estallar y sacar todo ello en algún momento, que mejor que frente al sospechoso?
- Quieres decir igual que tú?! – respondió maliciosamente Kevin. – Como andan tus calificaciones sin él ayudándote? – Eddy se quedo un momento en silencio. La verdad era que no iban muy bien, pero se debía mas a que estaba más concentrado en recuperar a su amigo, no en que lo necesitaba para ello. Kevin sonrió satisfecho pues creyó haber dado fin a todo el asunto.
- No necesito de él para aprobar, solo lo extraño. – Eddy respiro profundamente para calmarse, no estaba allí para tener una confrontación con Kevin ni nada parecido. Estaba allí para convencerlo de que podía confiar en él. Y porque? Simplemente porque Doble D se lo había pedido. – Te admito que no he sido el mejor de los amigos, y que sí, fue mi culpa que se haya encontrado en peligro. Fui un idiota al no darme cuenta que no estaba detrás mío, y cuando me di cuenta volví, gracias al cielo ya lo habías rescatado y… -parecía que su lengua se iba a incendiar por lo que iba a decir a continuación - …de verdad te lo agradezco mucho. – Eddy quería morirse por lo que acababa de decir. Pero al parecer todo ello había calmado un poco al más alto, pues también se dio cuenta cuanto le había costado decírselo.
- La verdad es que no confío en ti – dijo Kevin seriamente luego de tomarse un tiempo para pensar que decir. – Pero el tonto parece que sí. Sé que tampoco fue buena idea alejarlos tanto, pero de qué otra forma puedo mantenerlo a salvo?
- … mmm… dime, realmente te importa Doble D?
- ciertamente más que a ti – respondió cortante. Eddy tuvo contar hasta 10 para no empezar otra discusión sin sentido.
- Se que eres más grande y más fuerte, pero si hieres a Doble D de cualquier forma te juro que te moleré a golpes – atino a decir Eddy curiosamente con mucha seguridad en la voz.
- Iba a decirte algo parecido. – Se miraron a los ojos un rato descargando ese resentimiento que siempre se habían tenido.
- No le hagas llorar – dijo Eddy finalmente un poco más bajo. Más que una amenaza parecía una súplica. Antes de que Kevin pudiera decir algo Eddy siguió hablando. – Para mí también sigues siendo solo un idiota abusivo.
- … al parecer al tonto le gusta rodearse de idiotas. – comentó Kevin un poco más relajado también un poco cansado de toda esta situación.
- Es que es un idiota. – respondió Eddy. Ambos se rieron. Y de un momento a otro todo ese odio, resentimiento y rivalidad entre ellos simplemente pareció absurdo. Ambos eran unos idiotas, era cierto, pero ahora tenían algo más en común, ese cariño raro hacia Doble D, y no por su cerebro.
- … no… no lo involucres en tus estafas, si? Especialmente las peligrosas!
- No lo hago. En aquella ocasión era algo inocente que resultó; lo que sucedió fue que nos quedamos en el lugar equivocado en el momento equivocado. No teníamos nada que ver con esa pandilla, ellos solo quisieron asaltarnos. – explicó Eddy.
- No los estafaron a ellos? – pregunto Kevin seriamente con un repentino interés en lo que tuviera que decir Eddy.
- No, al menos que se hayan vestido de niñas y se hayan encogido y adelgazado. Pero reconozco que fue imprudente quedarnos allí a esas horas, eso fue mi culpa. – admitió Eddy. Kevin pensó un momento.
- Ellos no debieron estar allí en primer lugar. Gracias Eddy, tengo que ir a saldar cuentas. – Kevin parecía estar molesto pero no con él. Fue tan raro escucharle llamarlo por su nombre que se quedo mudo mientras veía como se iba hacia su moto. – Hazme el favor de acompañar a Eddward a su casa. – se puso su casco y con un estrepitoso sonido se alejo de allí.
- Eddward? – Eddy tenía la sensación de haber visto un alienígena o algo parecido. De un momento a otro Kevin había cambiado totalmente!
Cuando fue consciente de si mismo otra vez, se dio cuenta que aun faltaba para que termine el colegio. Se apresuro a encontrar a Doble D antes de que empezaran las clases.
- Que hizo qué?! – preguntó alarmado Doble D.
- Se fue, dijo que iba a saldar unas cuentas o algo así – Eddy le había relatado toda la charla que tuvo con Kevin, al principio Doble D se alegro muchísimo al escuchar que de alguna forma habían hecho las paces, pero ahora se veía extremadamente preocupado.
- Las clases aun no terminan. – realmente eso era lo único que le preocupaba? – Que le dijiste?!
- solo le conté lo sucedido aquella vez, que no conocíamos a eso tipos – Eddy tenía el presentimiento que quizá Doble D no le había contado todo.
- oh no, Eddy, creo que acabas de provocar una guerra! – Doble D tenía los ojos bien abiertos y había empalidecido de repente. – No quise contarle todo porque si lo hacía sabía que algo malo pasaría! – se estaba poniendo un poco histérico.
- Tranquilízate Cabeza de Calcetín, puedes explicarme que sucede?!
Resulta que el Señor Popularidad no era solo un abusivo de colegio, atleta estrella y demás cosas infantiles. Gracias a su inmenso amor y pasión por su moto había conocido gente igual de obsesiva y agresiva que él, que gustaba de la popularidad y cosas extremas. Una "pandilla" de motociclistas era lo último que faltaba en la lista de cosas que hacían genial a Kevin.
Incluso Eddy había oído hablar de ellos, y en algún momento creyó que fueron ellos quienes les habían querido asaltar ese día, pues también tenían motos. Pero luego se entero que esta "pandilla" a la que pertenecía Kevin se distinguía por una cosa: No eran delincuentes. Lo parecían, pero eran justamente lo opuesto. Gustaban de recorrer las calles presumiendo sus motos y salvando y ayudando gente y animales. Esto sonaba extremadamente ridículo, pero era la verdad, aun así Eddy no pudo evitar lanzar una gran carcajada. Pero lo que se oía de ellos no eran sus buenas acciones, aunque si eran bien sabidas; era una pandilla bastante grande y unida como una familia, por lo que si alguno de sus miembros era agredido u ofendido, lo último que oían del agresor era que se encontraba en el hospital gravemente herido. No por hacer buenas acciones dejaban de ser agresivos y violentos, no hacían vandalismo, pero peleaban horriblemente con estos; eran sumamente territoriales, y les gustaba que su territorio fuera pacifico y solo para ellos, aunque tuviera que correr sangre para conseguirlo. La gente normal los respetaba y amaba, los delincuentes les temían, no porque fueran muchos, cada miembro era realmente fuerte a su manera.
Ser parte de esa familia no era fácil, había que impresionarlos de alguna forma. Pero una vez que te tomaban cariño todos ellos lucharían por ti. Doble D se había ganado su cariño.
- Que tanto me he perdido? – pregunto Eddy por enésima vez.
- En aquella ocasión ellos me conocieron en persona por primera vez, pero al parecer Kevin ya les había hablado sobre mi – se sonrojo un poco. – volví al poco tiempo y logre impresionarlos con mis conocimientos sobre motos y reparándoles a quienes lo necesitaban.
- Te usaron.
- No, Eddy, ellos me lo piden muy amablemente y me pagan con dinero, obviamente no quise aceptar pero Kevin los amenazo que si no me pagaban atentaría contra sus motos o algo así. Es muy rara vez que hago esos favores, ya que tienen su propio mecánico, pero cuando es complicado incluso para él o está muy ocupado es cuando me lo piden.
- Cuanto te pagan?
- Ese no es el punto, Eddy! Esos tipos que nos atacaron la anterior vez son parte de una peligrosa pandilla rival y estaban invadiendo su territorio sin razón aparente, para evitar un confrontamiento Kevin dijo que vinieron por ti porque eso también creyó él, pero hasta ahora no tenían motivo par-
- Respira Doble D! – grito Ed un poco asustado mientras zarandeaba a su amigo. Doble D tomo aire tratando de tranquilizarse un poco.
- Si te dio las gracias sin más a Ti, significa que estaba hablando en serio. Estaba molesto?
- Si.
- Supongo que el malentendido entre ustedes quedo arreglado, pero ahora temo mucho por lo que vaya a suceder…
- ATENCION A TODOS LOS ESTUDIANTES! AQUELLOS QUE VIVEN EN O CERCA DEL CENTRO, POR FAVOR APROXIMENSE AL AUDITORIO INMEDIATAMENTE. – el anuncio dejó confundidos a todos, el turno luego del receso había sido completamente normal, pero para el segundo turno las cosas se pusieron un tanto extrañas pues algunos maestros no se habían presentado, como era el caso del maestro de los Eds y por ello habían tenido tiempo para hablar. Pero ahora esto?
- Tengo un mal presentimiento. – dijo Doble D muy preocupado y cubriéndose la cara.
- Chicos! Chicos! Escuchen esto! – gritó Johnny con una radio portátil en la mano. Todos allí presenten quedaron en silencio para escuchar.
- …esta un completo caos. La gente corre a refugiarse temiendo por su vida. Algunos Thunders están ayudando a ponerlos a salvo, pero los principales están en plena confrontación…
- Que ha pasado? – pregunto Nazz quien también escuchaba atenta a la radio y se helo al escuchar 'Thunders'.
- Un confrontamiento de pandillas a plena luz del día! Dice que los Thunders se movilizaron de repente, casi todos ellos! Todo parecía que iba a ser pacifico pero algo sucedió! – relató Johnny un poco alarmado.
- Donde esta Kevin? No dejen que—pero Nazz fue interrumpida.
- Él ya está allí. – Fue lo último que dijo Edd antes de desmayarse.
Cuando Edd despertó se encontró a sí mismo en la enfermería del colegio. Con sus amigos cuidándole. Según la luz que entraba por la ventana ya era bastante tarde.
- Que sucedió? Donde esta Kevin? – fue lo primero que dijo al levantarse.
- Nazz está hablando por teléfono con uno de sus amigos ahora mismo. Todos ya se fueron a sus casas pero nos permitieron quedarnos hasta que recuperes el conocimiento. Todo ya termino. – Trato de tranquilizarlo Eddy mientras le ayudaba a pararse. – Ed se fue con su hermana y Jimmy hasta su casa, pero ha estado llamando cada cinco minutos para saber como estas. – explico Eddy justo antes de que su celular sonara.
- Rolf se fue con Ed pero volverán en su camioneta. – Johnny también seguía allí aun con su radio portátil en mano. Edd lo vio suplicante por noticias sobre el enfrentamiento. – No hay muertos si es lo que quieres saber. Tablón opina que debió haber, a veces me da miedo su forma de pensar. – Johnny intento bromear para tranquilizarlo, Edd se tranquilizo un poco pero aun seguía preocupado.
- Malas noticias, chicos – era Nazz, Edd se congelo – Kevin esta en el hospital. – Edd sintió que estaba a punto de desmayarse otra vez. – Lo bueno es que está consciente y está preguntando por Doble D. Hombre, todo este asunto tiene algo que ver contigo? – pregunto divertida Nazz, cómo se la notaba tranquila Edd pudo relajarse un poco, seguramente no lo estaría si Kevin estuviera grave, pero aun así estaba en el hospital.
- Rolf y Ed ya están afuera, supongo que podemos ir al hospital a ver cómo está el Cabeza de Zanahoria. – informo Eddy antes de que Edd pudiera responder.
Kevin se molesto un poco al ver a Doble D allí, él había preguntado si estaba bien, no había pedido que lo trajeran. Después de regañar a uno de sus amigos motociclistas dejaron que ambos hablaran a solas.
Este amigo de Kevin al fin pudo relatarles todo lo sucedido. Al enterarse Kevin de la verdad de lo que había sucedido aquella noche, de que en realidad los habían atacado sin razón a los Eds, fue a avisarle al líder de los Thunder Hearts quien enfureció al darse cuenta que les habían dejado irse sin más luego de haber invadido su territorio, pero como era un asunto pasado no podían simplemente ir a buscar pelea, sin embargo tampoco iban a quedarse sin hacer nada. El líder reunió a todos los que se encontraban allí, que eran bastantes pero no todos, y fueron pacíficamente a resolver el asunto. Aunque los otros fueran una pandilla "peligrosa" y rival, ambos líderes se tenían respeto y hasta aprecio, al igual que muchos de los miembros más antiguos. El líder de los Thunder Hearts fue a pedir una compensación por tal ofensa explicándole todo lo sucedido, todo esto junto a Kevin.
- El otro líder estaba dispuesto a dársela junto con unas disculpas, todo iba bien hasta que los ofensores mostraron la cara – relato un poco molesto el amigo de Kevin.
Resulta que dentro de aquella otra pandilla había un grupo de rebeldes, auténticos delincuentes que usaban la protección y nombre del grupo para hacer fechorías. Al principio el plan era no señalar a nadie para evitar problemas pero cuando el otro líder notó la intensa mirada de odio que Kevin le dirigía a cierto grupo no fue necesario decir más. Sucedió algo muy radical ese momento.
- El líder sabía muy bien quienes eran pues no era la primera vez que algo así pasaba. Era un grupo no más numeroso pero pequeño en comparación del nuestro en ese momento. Su líder los expulso ese mismo momento y ordeno al resto que se lo comunicaran a los demás integrantes. Los tipos estaban furiosos y como venganza nos atacaron sin previo aviso. Kevin y los más cercanos a nuestro líder fueron los primeros en recibir el ataque. No pelearon ni nada, solo se defendieron y protegieron al líder. Hubo una gran tensión ese instante y el otro líder no sabía qué hacer, si empezaban a pelear iba a ser una gran confusión. – siguió contando mientras todos les escuchaban atentos.
- Cuantos eran? Los rebeldes quiero decir. – pregunto Nazz.
- Unos treinta más o menos, los que habían atacado a Eddward antes eran unos seis o algo así, pero ellos fueron quienes empezaron todo el lio ahora. Ellos empezaron a burlarse e insultar a Kevin y este se estaba conteniendo hasta que empezaron a insultar a Eddward, fue allí cuando todo empezó. Kevin se lanzo contra el que había hablado, fue el primero y luego los demás le siguieron. La otra pandilla decidió retirarse pues ya no tenían responsabilidad con ellos. Así que nosotros teníamos total libertad de tomar venganza. Para nuestra mala suerte, se dispersaron y empezaron a destrozar cosas a su paso, tratando de invadir nuestro territorio. Fuimos a cazarlos por supuesto. Dieron pelea pero nos encargamos de ellos. – contó orgulloso.
- Y porque Kevin salió herido? – pregunto Rolf.
- Lastimosamente, de alguna manera, esos seis o no sé cuantos tipos lograron aislar a Kevin, se la tomaron con él porque dedujeron acertadamente que él había sido el que había contado todo, además que ya desde antes estaban resentidos con él. Kevin es muy fuerte la verdad, pudo el solo con ellos hasta que llegamos, luego, aun estando herido fue detrás de uno específicamente, ahora con su motocicleta. Parecía una guerra medieval, el tipo no tuvo oportunidad contra la furia de Kev-
- ERES UN GRANDISIMO IDIOTA! - *SLAP!* - TE MERECES CADA UNA DE ESAS HERIDAS! – un Edd furioso hecho un mar de lagrimas salió de la sala donde estaba Kevin y sin mirar a nadie se fue caminando por los pasillos del hospital a quien sabe donde dando enormes zancadas.
Todos se quedaron helados por un momento y fueron rápidamente a ver a Kevin, este se encontraba aun en shock por la impresión con una de sus mejillas rojas por la reciente bofetada que acababa de recibir.
- Que sucedió?! – pregunto Nazz alarmada.
- Hoy me dieron muchos golpes, pero ninguno dolió tanto como el que acabo de recibir. – dijo Kevin antes de reírse suavemente mientras se sobaba la mejilla.
Eddy suspiro. Realmente a veces hay cosas que son inevitables, y el camino que recorrían este par y a donde llegaría era una de esas cosas.
Que les pareció? Merece mas capítulos? Espero no haya quedado muy alejado de los personajes, pero bah… es lo que hay…
Por cierto, los Thunder Hearts originalmente iban a ser Thunder Heads pero por un error del teclado salieron mas lindos… nombre originalmente inspirado en… un programa de la infancia sobre un fantasma… quien logre adivinar primero el nombre del programa y donde aparece dicho nombre le hare un fanart de KevEdd de su preferencia ;D
+LykanYouko+
