Aún no logro olvidar aquel momento en el que lo vi por primera vez…
Yo estaba en mi balcón, que queda justo enfrente de la habitación de la casa de al lado, y allí estaba él. En ese momento no le vi la cara porque estaba dándome la espalda, pero yo no le quitaba la mirada de encima porque se me hacía muy raro que después de tanto tiempo habitaran esa casa, observé lo que hacía él, se empezó a quitar la camisa, no podía quitarle la mirada, es que era tan perfecto… ¡Su pelo, su estilo al vestir…!
Dios, estaba como idiotizada admirando su belleza, solo pensaba: "Que se quite el pantalón". Es que tenía un trasero…
Capítulo 1 – Una nueva sensación…
¡Hola! Me llamo Melinda (aunque todos me llaman Mel) y tengo 16 años. Por ahora no tengo novio y mi vida cambió desde que supe que él existía…
Era el mes de diciembre y estaba en la casa de mis tíos de San Fernando (Cádiz) vivo allí desde el verano pasado y como siempre la que estaba conmigo era mi prima Sandra. Desde hacía mucho, la casa de al lado estaba desocupada y no le daba mucha importancia, era la noche de año nuevo y todos festejaban mientras yo estaba en mi cuarto observando el rascacielos desde mi ventana. Las horas pasaron y entonaba canciones en mi mente hasta que me quedé dormida…
A la mañana siguiente…
Desperté e hice mi rutina de aseo, comí algo ligero y salí a hacer ejercicio. Al regresar note algo diferente, y cuando más me acercaba, vi que había un camión de mudanzas en la casa de la vecina. Se me hizo raro porque había estado tanto tiempo desocupada pero igual no le presté mucha atención y entré rápidamente a casa de mis tíos.
Subí a mi habitación y fui a ducharme luego bajé a la cocina, tomé un vaso de zumo de naranja y regresé al cuarto, estando allí cogí el iPad de mi prima, caminé hacia el balcón que quedaba justo enfrente de uno de los cuartos de la casa de al lado. En ese momento se me hizo irrelevante, me puse los auriculares para escuchar algo de música, como siempre, Justin Bieber… ya casi era mediodía y hacía un calor impresionante, no parecía que estuviéramos en invierno, cuando decidí salir de la habitación, vi que alguien estaba al otro lado del balcón y me llamo la atención. No sabía quién era, y cada vez me causaba más intriga… después de unos minutos logré verlo, pero solo de espaldas y sinceramente, me quedé sin palabras y seguía observando, era alto, pelo de color castaño claro, demasiado guapo.
Pensaba: "¿Qué hago yo aquí espiando a mi vecino? ¡Mejor me voy! "
Pero no fue así. Seguí pegada al balcón esperando poder ver su cara pero vi algo mejor "Vaquero" como decidí llamarlo, ya que llevaba unos vaqueros puestos, caminaba y caminaba por su cuarto como que no le gustaba, pero al final, tendría mucho calor y se quitó la camisa, era perfecto. Quise gritarle pero ocurrió algo mejor…
Aún seguía yo mordiéndome el labio deseando poder ver su cara de ángel, simplemente él, se estaba desabrochando su pantalón. Casi morí y reviví yo en mi mente gritaba: "Quítate el maldito pantalón" y cuando se lo iba a bajar…
