¿Dónde quedó el ''No habrá ObiRin en mi perfil''?

Espero que les guste... este pequeño Drabble.


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Sentada en aquella banca, con la vista baja y el viento jugando con sus cortos cabellos castaños, parecía un ángel perdido. Teniendo sus manos a cada lado, movía sus pies con lentitud, casi en un gesto inconsciente; manteniendo sus ojos entrecerrados, brillosos por un llanto que no quería soltar

¿Por qué me duele tanto?

Su pecho dolía, de un momento a otro todo dejó de tener sentido. ¿Por qué?, se preguntaba; estaba segura que el día había comenzado de la mejor manera. Se había encontrado con Kakashi, con Obito e incluso con su Sensei y su sonrisa seguía ahí.

Y ahora, de repente, todo perdía su brillo.

¿Qué tienes Rin?

Una vocecita hacía eco en su mente, intentando hallar el por qué de aquella tristeza. Mas no tenía respuesta, mas no sabía qué pensar. ¿Por qué, de un momento a otro, podemos sentirnos tan mal?

Había despertado viendo el Sol brillar y, ahora, lo encontraba tapado por grises nubes; privándola de su brillo y nublando aún más su corazón.

Una traicionera lágrima se deslizó por su mejilla, un nudo se formó en su garganta y las ganas de tapar su rostro y echarse a llorar fueron insoportables. ¡¿Qué le dolía tanto?!

...Obito

La sonrisa de su compañero apareció en sus pensamientos y el deseo de que la abrazara se instaló en su corazón. Un abrazo de él, ¿Calmaría su inexplicable dolor?

Como si el cielo quisiera darle un alivio a aquello desconocido, el pequeño Uchiha se acercaba a la Nohara. Lindas flores blancas bailaban en su espalda, escondidas de los hermosos ojos marrones de la joven chica.

Si al principio Obito no entendió el llanto escondido de Rin, mucho menos pudo comprender cuando la misma se levantó con rapidez, corriendo hacia él y rodeándolo en un cálido abrazo que no supo interpretar. Las flores cayeron y sus brazos rodearon el pequeño cuerpo de la Nohara sin dudarlo, brindándole el cariño que necesitaba sin saberlo.

El sentirla llorar hizo que él mismo deseara soltar lágrimas, sin embargo solo atinó a cerrar sus ojos con fuerza y no preguntar. Tan solo siendo el pilar que ella necesitaba, tan solo queriendo que volviera a sonreír.

Las lágrimas dejaron de bajar lentamente y Rin, escondiendo su rostro en el hombro de Obito, sonrió.

El dolor inexplicable... desaparecía con ese abrazo.

Tan solo así, tan solo a su lado.