MUY BUENAS A TODOS! Cuando comencé a escribir estas historias me propuse el crear una gran variedad de historias, y mi mente me ha ayudado con varias ideas para fomentar mis expectativas.

La siguiente historia será un A.U (Altern Universe) y las cosas se sabrán poco a poco. Además de que contara con varios personajes y elementos de otros manga/animes que irán apareciendo con el tiempo. OoC Natsu

- Hablar –

- 'Pensar'-

- Sueño / Recuerdo / Fantasías (Imaginaciones)

- *Onomatopeya de sonido* -

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MAGNOLIA

Una mañana tranquila en la tranquila ciudad y una siempre ruidosa en el edificio de Fairy Tail, y como maestro del gremio, Makarov se encontraba viendo como sus "hijos" se relajándose en el interior del gremio, no era algo raro, él siempre observaba a los jóvenes y no tan jóvenes que se encontraban dentro del edificio, después de todo, el 3°/5° maestro y el grupo que había estado en la isla Tenrou se habían perdido 7 años de vida de sus compañeros.

Especialmente observaba cierta mesa donde se encontraba el grupo conformado por una joven rubia de enormes proporciones, un hombre pelinegro que ahora se encontraba en calzoncillos, una pequeña niña de pelo azul, una mujer de cabello rojo con armadura, dos creaturas felinas, un macho de pelaje azul y una fémina de pelaje blanco y por ultimo un hombre con el cabello de color rosa/salmón, este último siempre había llamado la atención del anciano. Natsu, un mago de fuego que decía ser un Dragón Slayer igual que su compañera Wendy o Gajeel, pero el anciano sentía que había algo extraño en el mago de fuego, siempre parecía feliz, no que fuese algo malo… pero era realmente extraño que un joven siempre estuviese tan alegre, y con los años había entendido que ese tipo de personas o habían sufrido durante toda su vida antes del ahora, o que estaba ocultando algo muy oscuro en su interior, a decir verdad él no le agradaba el creer ninguna de esas opciones, pero si la experiencia le había enseñado algo era que siempre se debe esperar lo mejor y prepararse para lo peor.

Las puertas del gremio comenzaron a abrirse lentamente, y la figura de una mujer entro por eta, vestida con un kimono negro con detalles rojos que acentuaba su esbelta pero elegante figura, de cortos cabellos negros como la noche, que no hacían más que resaltar su pálido rostro de delicadas facciones y una cinta roja sobre su cabeza con un listón del mismo color se presentó frente a todos, sus ojos marrón dorado escaneaban el edificio, o mejor dicho a las personas dentro de este. Si hubiese dicho que venía de una agencia de modelaje para hablar con Mirajane cualquiera le hubiese creído.

- Disculpen, estoy buscando a alguien – saludo de forma plana pero educada, o al menos así sería si los demás no siéntense como si la mujer que hablaba frente a aquel gremio lo hiciese como si estuviera hablando frente a las piedras.

- Creí que jamás volvería a verte la cara en mi vida - dijo secamente el pelirosa, levantándose de su mesa y acercándose lentamente a la mujer que le miraba con cierto desdén, asombrando a la mayoría al ver la forma en la que hablo ¿De dónde se conocían? ¿Y porque Natsu le hablaba de esa manera?

- Natsu cuantas veces te he dicho que no hables así con las personas – reprendió Eza acercándose de forma amenazante hacia Natsu, más el DS no mostraba signos de agitarse, solo mantenía su mirada fija en la mujer de cabellos negros que observaba con curiosidad a Titania.

- Ara! No sabía que tenías dueña, siempre creí que ibas a ser del tipo "Lobo Solitario" – comento la mujer de kimono de forma burlesca al volver a mirar a Natsu, lo cual solo reforzó las anteriores preguntas en la cabeza de los demás, además plantar una nueva ¿De que "Lobo Solitario" hablaba? Desde siempre Natsu había demostrado ser una de más personas más sociables y amigables que hubiesen podido conocer – aunque para mí la verdad siempre parecías más un perro rabioso –

- Perro rabioso jajajaja esa si es buena – carcajeo Gray en una de las mesas del gremio.

- Ara! ¿Es que acaso este edificio tiene eco? ¿O es que acaso la cabeza de ese tipo es tan hueca que genera eco? – pregunto un tanto molesta la pelinegra al ver al mago de hielo por el rabillo de su ojo.

- ¿Qué fue lo que dijiste? – pregunto irritado el mago de hielo, levantándose de golpe.

- Ara ma… ¿además de tener la cabeza hueca tienes las orejas tapadas? – consulto la recién llegada con falsa preocupación, haciendo enfadar aún más al Fullbuster.

- Disculpe señorita, puedo saber su nombre, el por qué ha venido y el cómo conoce a Natsu – pregunto de forma cortés el maestro Makarov, tratando de evitar que la mujer de cabello negro saliese lastimada.

- Puede llamarme Mio si usted gusta, y la razón por la que es porque necesito hablar algo importante con Natsu – respondió de la misma forma educada pero vacía que parecía caracterizar a la ahora conocida como Mio, haciendo un extraño énfasis en el nombre del pelirosa, como si fuese algo nuevo para ella.

Mas el anciano Dreyar se dio cuenta que la mujer jamás respondió la tercera pregunta, estaba a punto de repetirla, pero el pelirosa hablo primero, pasando al lado de la pelinegra y dirigiéndose a la salida del edificio.

- Vamos a hablar en otro lugar. A solas -interrumpió Natsu, dándole especial énfasis a su última frase.


AFUERAS DE MAGNOLIA/ CASA DE NATSU

Ambos entraron a la pequeña choza de Natsu, antes de que el pelirosa le diera un portazo que cerró abruptamente la puerta, más la mujer no se agito, solo giraba su cabeza por toda la pequeña casa, viendo cada rincón de esta.

- Con que Natsu eh… No es un mal nombre – dijo primero la pelinegra dirigiéndole la mirada e iniciando la conversación.

- ¿Y acaso Mio es mejor?... Además ¿Qué mierda haces aquí? – pregunto irritado el dueño del lugar.

- Esa actitud si se me hace más común en ti desu wa ne(*) - comento Mio de una forma más relajada y con una pequeña sonrisa antes de responderle a Natsu - Creo que el motivo es más que claro, cuando nos separamos hace años decidimos que el único motivo por el que nos reuniríamos seria qu- –

- Y entonces ¿Quién fue? – interrumpió el pelirosa.

La mujer no se sintió ofendida por ser interrumpida, después de todo, la paciencia era una virtud que ni él ni ella tenían el "privilegio" de poseer - Pride desu –

- *suspiro* solo pudo ser ese idiota – suspiro el hombre mientras mecía su cabeza ligeramente.

- Ma, creí que estarías un tanto más afectado por esa noticia –

- ¿Por un maldito idiota como él? Era alguien inteligente y sagaz, pero se le suben los humos a la cabeza demasiado rápido, y cuando se pone así su derrota es inevitable – respondió irritado el DS

- Ara, realmente ambos se conocían bastante desu wa –

- ¿Uh? No me digas que… - Natsu no quiso siquiera terminar su frase, pues sabía que la respuesta era obvia - ¡AGH! ¡¿En qué demonios estaba pensando ese pedazo de mierda podrida!?... No, no me digas, seguro que estaba pensando en que es imposible que le ganaran, y que ni siquiera necesitaba usar su magia. Ególatra de mierda –

- La verdad no sé si eso sea cierto… pero hay otro motivo por el cual quiero hablar contigo – continuo la pelinegra, con mayor seriedad – cuando fui a ver su cuerpo, no encontré ninguna pista de quien pudo haber sido su asesino, lo cual me lleva a pensar en una sola posibilidad, y en lo personal no me agrada para nada desu–

- ¿Crees que nos están cazando?... No, es más que eso ¿crees que son ellos? -

- No es algo que pueda confirmar o negar desu wa – aclaro la mujer - Lo cual me lleva al segundo punto que quería hablar: acompáñame a decirle a los demás, en lo personal me desagrada la idea de ir, pero nuestra promesa no debe romperse -

- No, ni loco – respondió en menos de un segundo Natsu – si tu no quieres hacerlo, imagínate yo –

- Es necesario, si es cierto que nos están cazando, es mejor avisarle a los demás y prepararse para lo que se pueda avecinar – trato de convencer Mio, si eso no servía, aún poseía una as bajo la manga.

- Ya dije que no, y es mi última palabra – repitió el pelirosa cruzándose de brazos.

- ¿Ara? Ya veo, si esa es tu decisión entonces está bien desu – acepto rápidamente la pelinegra, para la sorpresa del pelirosa, quien entrecerró sus ojos rápidamente, era imposible que ella se rindiera tan fácilmente - Estoy más que seguro que "ella" querrá saber si te he visto y si se dónde estás, y como sabes no soy una persona que mienta si no es necesario –

Natsu camino lentamente hasta quedar frente a la mujer, con el ceño fruncido y prácticamente gruñéndole a la cara le dijo - No te atreverías -

- ¿Y por qué no? Digo, no existe nada que pueda detenerme de hacerlo desu wa -

- Porque si lo haces no descansare hasta que lo pagues – respondió el pelirosa, escupiendo cada palabra con ira.

- Entonces deberías venir conmigo y evitar que eso pase – dijo con simpleza Mio, mirando directamente a los enfurecidos ojos negros, su contacto visual duro varios segundos hasta que el pelirosa desvió la mirada mientras chasqueaba su lengua.

Natsu se retiró con una expresión de enfado, abriendo la puerta de forma tal que la arranco de sus bisagras, es por eso que le desagradaba aquella mujer, a pesar de su apariencia elegante y mentalidad simple, siempre conseguía que las personas o cosas cayeran dentro de su telaraña como moscas.

Mio en cambio sonrió mentalmente mientras veía como su "amigo" se alejaba de ella a un paso veloz, observaba como unas pequeñas lenguas de fuego aparecían en sus hombros y se mecían con cada remarcado paso que el pelirosa daba.

Comenzó a caminar varios metros atrás de él mientras reía al escuchar los malhumorados gruñidos de Natsu; pero el mecer de un matorral le hizo apartar la mirada de su entretenimiento, un lobo gris salto delante de ella mientras le mostraba sus amenazantes colmillos, sacando su lengua de vez en cuando para aparentar una mayor amenaza.

- Ara ma… Que pequeño tan grosero, enseñando los dientes de esa forma – susurro Mio golpeando suavemente su abanico en sus labios, encogiendo sus ojos mirando fijamente al canido que encogía su cuerpo ante la penetrante mirada de la mujer de cabello negro – ya tuve que lidiar con un perro rabioso así que lamentablemente ya no tengo paciencia para ti. Desparece –

Con solo esa fría palabra, una especie de bruma negra como la sombra más oscura se presentó a los pies de aquel lobo, trato de apartarse rápidamente, pero sus pies parecían no responderle, pegados al piso, hundiéndose cada vez más en las sombras, los gruñidos cesaron, cambiando aquel aguerrido sonido por unos lamentables alaridos de miedo y dolor, la criatura cayo de costado al suelo de forma seca mientras la oscuridad continuaba consumiéndolo, sus patas solo eran apenas un muñón ensangrentado y despojado de su anterior gloria , hasta que su cuerpo completo desapareció lentamente, engullido por las sombras.

Mio se quedó mirando el antiguo lugar donde aquel lobo fue completamente devorado por las sombras, un lugar en donde ni siquiera el césped se salvó de desaparecer. Comenzó a caminar lentamente por donde el pelirosa se había marchado, abriendo su abanico en su cara, tapando la expresión de asco que se formó en su boca escupió una palabras que venían desde el fondo de su paladar - Realmente repugnante desu wa –


Natsu se paró frente a las puertas del gremio, no quería entrar, no con el estado de humor en el que se encontraba, debía calmarse primero, o algo malo podía ocurrir.

Aunque fuese raro en él, prefirió abrir las puertas de Fairy Tail de manera suave, en su estado actual darle una patada a la puerta causaría que esta saliera volando. Busco con la mirada a Makarov mientras ignoraba las miradas incrédulas que sus compañeros de gremio le daban tras abrir la puerta del gremio con delicadeza, no tardó mucho en encontrar al octogenario, sentado sobre la barra del gremio bebiendo junto a Macao.

- Viejo, voy a una misión con Mio – informo Natsu de forma tranquila, mientras el maestro lo miro sorprendido.

- ¿Es en serio chico? – pregunto el Dreyar mayor mirando al pelirosa – sabes que esas peticiones las debe hacer el empleador ¿verdad? -

- Entonces yo puedo confirmarlo si así usted lo necesita – se escuchó desde la puerta, donde Mio se abría paso caminando de forma tranquila, como si el gremio fuese su propio hogar - lamento mucho mi presentación anterior, y por favor permítame presentarme una vez más – hablo nuevamente, inclinándose ligeramente frente al maestro de Fairy Tail y por primera vez mostrándose una sonrisa más amable y respetuosa - mi nombre es Mio, por pedido del representante de la empresa emergente "Kuzunoha", mi maestro Raidou me encargo el conseguir un guardaespaldas que fuese de ayuda en mi viaje por Fiore y otros países, y como puede ver recordé a Natsu, a quien a pesar de no tener una amistad… "amistosa", confió en sus capacidades para protegerme de los peligros que pueda encontrar –

- Nosotros también acompañaremos a Natsu – dio a conocer con voz de mando Erza, levantándose de su mesa y acercándose a la recién llegada.

- No es necesario, en estos momentos no dispongo de dinero suficiente para pagarl más personas y solo necesito un guardaespaldas – respondió la mujer de kimono negro, y aunque nadie más pudo notarlo, el pelirosa vio como la mirada de la pelinegra se endurecía.

- Yo insisto, no creo que sea prudente dejar a Natsu hacer ese tipo de misiones solo – aclaro Titania, mirando directamente a los ojos de la pelinegra.

- Ara ma… "no creo que sea prudente dejar a Natsu hacer ese tipo de misiones solo" ¿eh? ¿Acaso no confías lo suficiente en tu compañero? – pregunto Mio con una muy bien fingida incredulidad, mientras Titania retrocedía ligeramente, abriendo y cerrando su boca tras escuchar de otra persona sus propias palabras, realmente impactada con el hecho de que tal vez aquella desconocida tuviera razón y su confianza en el pelirosa no era la que ella creía.

Natsu solo suspiro mentalmente, Mio era realmente desagradable… pero bueno, era un peso menos que ambos se sacaban de encima – Okay, si no hay más que decir, y nadie se opone, Mio y yo nos iremos ahora –

La pelinegra asintió con su cabeza dándole una sonrisa serena, ambos comenzaron a caminar hacia las puertas del edificio, pero antes de salir Mio dio una media vuelta y se despidió con dando una reverencia.

Natsu solo siguió caminando, respiro profundamente y exhalo suavemente, tenía que prepararse mentalmente, nunca espero que este día llegara, pero llegó. Miro de reojo a Mio, quién caminaba unos pasos atrás de él, con un caminar tranquilo y una sonrisa serena en el rostro, como si todo le hubiese salido a pedir de boca, lo peor es que así era… como le irritaba tener que aguantarla, y lo que ponía la cereza sobre su pastel era que tendría que aguantar a los otros 3 más que espero nunca volver a ver.

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Capítulo 1: Reunidos por la Muerte

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SI, el dejar el título al final fue una idea loca que tuve casi al último, no sé si sirvió de algo la verdad...

Mio es de la Novela Ligera/Manga: Tsuki ga Michibiku Isekai Douchuu.

Trate de que su personalidad sea la misma que en la obra original, pero creo que igualmente la cambie un poco.

Y aunque en la novela se le describe como una mujer de cabello y ojos negros, en las ilustraciones a color se le ve con ojos de un color similar al marrón dorado, por lo cual me decidí por describirla de esa forma para evitar confusiones.

(*) El "desu wa" es la muletilla que usa.