Reedición iniciada el Domingo, 12 de Febrero de 2006 a las 14:52 Hrs, hora de Colombia.
Bienvenidos a la reedición de "En el fondo de tu alma". No será muy diferente de la versión original, sólo estoy cambiando un poco las situaciones para adaptarlo más a 'la realidad'. Espero que se enganchen de nuevo con esta historia. Publicaré de nuevo los capítulos uno por uno. En donde más encontrarán cambios será en la primera parte de la historia. Espero les guste a los antiguos lectores y a los nuevos espero lo disfruten. Por último, muchas gracias por todo el apoyo recibido anteriormente... Gracias a ustedes esto es posible.
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Card Captor Sakura pertenece a CLAMP. Los personajes que no reconozcas son de mi propiedad y espero que si deseas usarlos me lo hagas saber. La trama del fic es una HISTORIA ORIGINAL MÍA y espero que no la reproduzcas sin mi autorización.
"Normal" – Hablando
"Cursiva con comillas" – Pensando.
Cursiva sin comillas – Voces.
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EN EL FONDO DE TU ALMA
CAPÍTULO I: EN BUSCA DE UNA NUEVA VIDA.
La joven caminó lentamente por los pasillos de la Universidad de Tokio. No podía negar que se sentía aliviada de saberse en vacaciones por unos tres meses, pero su rostro sólo mostraba una faceta fría y tranquila. La pequeña figura de la mujer de diecinueve años, se detuvo al encontrarse frente a frente con una figura masculina de aproximadamente veintiun años de edad.
"Excelente trabajo, mi querida Sakura" – Le felicitó un joven alto, de cabello rubio y ojos azules celeste, mientras la rodeaba con su brazo por la cintura y seguía su camino junto a ella.
"Gracias Jeff" - Respondió la joven de cabello castaño claro y largo y unos espectaculares y llamativos ojos verdes, mientras apresuraba su paso y se liberaba sin disimulo del abrazo de su compañero.
"Siempre has sido muy buena en los estudios" – Comentó el joven siguiendo a su amiga por los pasillos de la universidad.
Ella suspiró – "No siempre" – Pensó con nostalgia para después responder - "Gracias"
El hombre la miró resignado. Ella nunca había sido una mujer muy expresiva, así que no podía esperar una reacción efusiva. Él la conocía muy bien y sabía que ella era una mujer semejante al hielo... no por nada ése era su sobrenombre.
Siguieron caminando un poco hasta que Jeff encontró algunos compañeros de clase y se quedó con ellos, dejando que la joven siguiera sola su camino.
Sakura caminó hacia la cafetería llevando un sobre lleno de papeles en las manos. Tomó asiento en una de las tantas sillas del lugar y apoyó su cabeza en las manos. Observó alrededor y vio diferentes grupos de amigos celebrando la llegada de las vacaciones y entonces, se encontró a ella misma ahí sola, sin disfrutar, sin reír, sin sentirse bien - "Han pasado siete años... ¿por qué todavía siento que me falta algo?" – Pensó - "Ahora soy una mujer independiente, no necesito de nada ni de nadie para lograr lo que quiero" - dijo en voz alta mientras intentaba sacar todos esos pensamientos de su mente.
Y en verdad era una mujer independiente. A los quince años de edad comenzó a trabajar como niñera, también en tiendas, paseando mascotas y otras cosas... así reunió dinero y pudo viajar hasta Tokio, donde trabajó como modelo para estudiantes de arte, ganando muy poco dinero, pero obteniendo mucha independencia. Finalmente, pudo entrar a la Universidad de Tokio a estudiar Periodismo y Comunicaciones, y esa era la carrera que deseaba desempeñar durante toda la vida. Pronto sería una profesional y así dependería única y exclusivamente de ella misma. Los lazos que la ataban al pasado poco a poco se irían destruyendo y así dejaría de sufrir por la soledad en la que había estado sumergida...
Si, soledad. Extraño, ¿Verdad?... Pues bien, después de sellar la carta "The Void" y convertirla en la carta "The Hope", Sakura se sentía la mujer más feliz del mundo. Había logrado conseguir todas las cartas de Clow y además, había logrado conservar sus sentimientos hacia esa persona especial... Pero todo se había esfumado en un instante. Shaoran Li, compañero de primaria de la Antigua Card Captor viajó de regreso a su país natal, China, junto con su prima Meiling y a pesar de que estuvo en contacto por medio de cartas y llamadas telefónicas esporádicas, dos años después Sakura dejó de recibirlas y así mismo dejo ella de comunicarse.
Sus compañeras de la primaria habían partido a distintos lugares del país por sus estudios, Tomoyo, su mejor amiga desde la niñez, fue a vivir a Francia antes de que Sakura cumpliera sus quince años. Yukito, a quien consideraba su mejor amigo, tuvo que encargarse de su abuela enferma y por ello partieron hacia los Estados Unidos; la chica ojiverde mandó a Kero con él bajo la excusa de que los dos guardianes debían permanecer juntos, pero todos sabían que eso no era verdad. Simplemente quería dejar atrás todo lo relacionado con la magia, pues así como haabía traído cosas buenas a su vida, también había sido el principal factor para que ella se quedara sola. Había perdido el contacto con Eriol Hiragisawa ya que por alguna razón dejó de recibir sus cartas y finalmente se perdió la comunicación.
"Estoy sola, siempre lo he estado, ¿qué estoy esperando para rehacer mi vida?"- La chica ojiverde sacudió su cabeza y se secó una lágrima que rodaba por su mejilla. Bebió un sorbo del café que estaba tomando e intentó relajarse. De vez en cuando los sentimientos escondidos que tenía en su corazón intentaban salir a flote, pero ella siempre ocultaba lo que sentía. No podía mostrarse débil ante las otras personas porque podrían pisotearla y aprovecharse de su debilidad. Respiró profundamente y miró a su amigo Jeff, quien llegaba a su encuentro.
"Hola Jeff ¿ya es hora de irnos?" – Dijo al notar que el joven se quedaba estático parado a su lado.
El aludido sólo miró con ternura y paciencia y respondió - "Si Sakura, ya es hora de que vuelvas a tu casa y descanses" – Le propuso – "Yo te llevaré"
Jeff Miller era un estudiante de intercambio proveniente de Inglaterra. Se había autoproclamado el mejor amigo de Sakura. Él siempre había estado allí, desde la primera vez que la vio en la estación del tren en Tokio. La frágil figura de Sakura le había inspirado el tierno deseo de protegerla y finalmente se había convertido en la persona con la que la joven castaña cruzaba más palabras. Él también era estudiante de la Universidad de Tokio, lo que propiciaba una buena relación entre ellos. Se había preocupado porque Sakura siguiera con sus estudios y había hecho lo imposible para que continuara en contacto con su familia pero esto último nunca sucedió. La menor de los hermanos Kinomoto, lo dejó entrar en su vida, sin embargo, jamás le dio la confianza suficiente para que él pudiera ayudarla a seguir en contacto con su padre y su hermano.
"En este momento sólo necesitas descansar un poco y relajarte. Recuerda que esta noche tienes que estar de mesera en el bar que queda cerca de tu casa y necesitas reponer energías" – Le recordó Jeff durante el camino al pequeño departamento de la ojiverde.
"Si, eso haré" - respondió la castaña fríamente.
El joven sólo suspiró. Estaba acostumbrado a ese trato y es que su amiga era conocida como la mujer de hielo, no tenía amigos a parte de él, ni ninguna relación con algún chico, a todo el que se le acercaba lo espantaba con su fría forma de ser. Nunca sonreía. Su corazón parecía hecho de piedra. Pero Jeff ya estaba acostumbrado a su mal trato. La conocía a la perfección y sabía que no había nada que él pudiera hacer para evitar esa fría forma de ser de ella.
Después de un largo camino llegaron finalmente al departamento de Sakura ubicado en la parte centro de la ciudad. Jeff la dejó en la entrada y siguió su camino.
La menor de los Kinomoto echó un vistazo rápido al edificio, para después sacar sus llaves y entrar. Subió lentamente las escaleras y al llegar a su departamento abrió la puerta sin afanes –"De nuevo sola, aquí en esta casa que está vacía, nadie me espera" – Suspiró con tristeza y entró completamente. Dio unos pasos y llegó hasta la pequeña e improvisada mesa de comedor donde descargó sus cosas. Después, fue hasta su habitación donde se dispuso a darse un baño para poder estar lista para esa noche en la cual le tocaba estar de mesera en un bar. No era el mejor trabajo, pero le llevaba comida a la mesa y la distraía de su soledad.
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La joven de largos cabellos negros se recostó en el sofá de la sala de su mansión en Francia. Estaba cansada de estudiar y se merecía unas largas y divertidas vacaciones. Ella estudiaba en una de las mejores escuelas de diseño en París y hacía lo que desde niña le había gustado hacer: Vestir de la mejor manera posible a sus modelos.
La delgada y pálida figura de al menos diecinueve años de edad, se levantó del asiento y con sus ojos amatistas recorrió el lugar. Disfrutaba mucho de su estancia en esa casa, pero había algo que extrañaba de su ciudad natal, Tomoeda... Extrañaba el calor de hogar que la embargaba cada vez que recorría su casa, extrañaba las tardes que compartía en su habitación con su mejor amiga, probándose vestidos y grabando todo en video... La mirada azul se tornó nostálgica y el pálido rostro de Tomoyo Daidouji donotó tristeza.
"Mi querida Sakura... ¿Qué habrá sido de ti? Te he buscado y tu familia me ha dicho que no volvieron a saber nada de ti desde que entraste a la Universidad de Tokio..." – Tomoyo suspiró y se acercó a una ventana mirando hacia el horizonte – "Me gustaría tanto verte... Sakura..."
La puerta del recinto se abrió suavemente y por ella entró una mujer madura, de cabello rojizo con un fino corte a la nuca. Llevaba un hermoso traje elegante y su mirada era intimidante pero a la vez cálida - "Hija, ¿ya decidiste qué harás en vacaciones?" – Preguntó mientras se acercaba a la amatista.
"Aun no, Mamá, pero tal vez me gust..." – la chica fue interrumpida por una de sus señoras del servicio quien le avisaba sobre una llamada telefónica que parecía urgente.
Sonomi se apartó un poco y Tomoyo tomó el teléfono con calma - "¿Hola? ¿Quién habla?" – Preguntó la ojiazul al tomar el auricular.
"Mucho gusto en volver a escucharte mi querida Daidouji... soy yo, Eriol Hiragisawa" – Se oyó la voz de un joven responder en la línea.
Tomoyo estaba bastante sorprendida por el remitente de la llamada – "¡¿HIRAGISAWA! ¿Cómo has estado? ¿Dónde te encuentras?" – Alcanzó a decir la chica en medio de su emoción por escuchar a su compañero de infancia.
"En este momento estoy en París y me encantaría verte" – Dijo Eriol bastante cortés.
"Por supuesto Hiragisawa, dime donde y cuando y te aseguro que no faltaré"
"Me gustaría verte en el Mirador de la Torre Eiffel, si es posible mañana mismo. Tengo algo que hablar contigo." – Le respondió el joven inglés.
La hija única de los Daidouji aceptó la cita y después colgó el teléfono. Se sentó en el borde de la ventana por la cual había estado mirando anteriormente y de pronto se sintió extraña. ¿Eriol Hiragisawa? ¿Llamándola a ella?... Oh, no... ¡No podía ser! ¿Le habría pasado algo a Sakura?. Tomoyo sacudió su cabeza intentando calmarse y dejar de ser paranoica. Si Sakura no se encontrara bien, Eriol no esperaría un día para avisar. Pero... ¿Cómo se había conseguido su número?. Bien... tendría muchas preguntas para el día siguiente.
"¿un amigo especial, hija?" – Preguntó Sonomi que había estado atenta y algo sorprendida por la reacción de Tomoyo, pues desde que habían viajado a ese país, jamás la había visto tan feliz.
"Si, mamá. Un amigo de mi infancia" – Respondió para después dirigirse a su habitación con muchos interrogantes, pero a la vez muy feliz por poder reencontrarse con Eriol y revivir viejos tiempos de primaria.
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De vuelta en Tokio, durante su pequeña siesta antes de irse a trabajar, Sakura comenzó a soñar que estaba en un lugar totalmente extraño para ella – "¿dónde estoy? ¿Qué está pasando?" – Se preguntaba a la vez que veía dos hombres sentados en una pequeña sala. Había una chimenea encendida y parecían estar tomando un trago. Ella se encontraba mirando por la puerta entreabierta, podía observar que los hombres sostenían una conversación muy amena, reían a carcajadas parecían recordar viejos tiempos. Por más que intentaba no podía reconocer ninguno de los dos rostros. De repente con la luz de la chimenea se iluminó la silueta de otra persona, una mujer a la que Sakura veía totalmente pero no reconocía. Era una joven de cabello largo, de un tono café, ojos del mismo color y unas facciones muy finas. Sonreía y hablaba con las otras dos personas, se encontraba recostada en el marco de una ventana. De repente una de las siluetas se levantó de su silla y se dirigió hacia la chica de la ventana, se disponía a hacer algo pero Sakura no vio lo que era pues todo se ponía borroso.
La ojiverde se levantó de la cama muy asustada y perturbada –"¿Qué estaba soñando? Hacía ya mucho tiempo que no soñaba nada, ese sueño fue muy real... tal vez sea una premonición"- Pensó a la vez que se sobresaltaba por lo que había pensado - "¡¿qué demonios estoy pensando! Hace mas de siete años no tengo ningún tipo de sueño premonitorio, sin importar cuanta magia haya practicado esos sueños se alejaron de mi mente... ¿qué significa?" – Para pasar el susto fue a tomar un poco de agua a la cocina. Después de calmarse un poco, se dispuso a alistar todo para salir a trabajar. Finalmente debía ser responsable y no podía faltar al trabajo.
Al ir caminando por las calles de Tokio, donde ya comenzaba la noche, la antigua Card Captor miró hacia el cielo donde se veía la luna - "hoy está más radiante que nunca, tan grande, tan hermosa..." - Pensaba mientras se quedaba embelesada mirando aquel astro hermoso que esa noche parecía brillar mas que nunca.
Después de salir de su pequeño trance, la joven siguió caminando en dirección a su trabajo. Le esperaba una noche pesada, pero después de eso estaría en vacaciones. Ya había pensado en viajar, puesto que tenía dinero ahorrado extra, así que tenía mucho que hacer por delante.
Pero por ir tan distraída pensando en eso, no se dio cuenta de que ese día la luna brillaba más que nunca tratando de evitar el aura de oscuridad que la intentaba envolver...
Al día siguiente, la antigua card captor se levantó temprano en la mañana, se dispuso a hacerse el desayuno para después ir a tomar un baño y cambiar sus ropas para poder salir. Estaba muy distraída y pensaba en todo lo que había pasado la noche anterior mientras sacaba unos jeans de su armario y una camisa blanca de tirantes con pequeños detalles brillantes para poder cambiarse. Se arregló de una manera sencilla, no le gustaba llamar mucho la atención.
Salió a caminar por las calles, intentando despejarse pues últimamente había estado recordando toda su infancia y no quería. No quería recordar aquella época tan bonita y después percatarse de que en su nuevo mundo estaba sola. Sin nadie que la apoyara y la acompañara. Porque aunque Jeff se había proclamado su mejor amigo, ella lo veía como un compañero más, que le ofrecía su amistad. Pero no más allá de eso.
"Aprovecharé este tiempo para descansar de todo, tal vez me gustaría poder ir a Ámerica... dicen que es muy bonito... no sé, todavía puedo pensar en ello mucho tiempo" – Suspiró y siguió pensativa – "Debo comentarle a Jeff sobre esto... No creo que vaya a estar muy feliz de que me vaya pero..." – Negó con la cabeza y sus ojos se ensombrecieron – "A mí no tiene por qué importarme lo que él piense... Ni él ni nadie controla mi vida..." – Se recordó. Con este pensamiento Sakura se marchó a su casa para llamar a Jeff y decirle que se tenían que reunir para discutir algunas cosas.
Ni él ni nadie controlaría su vida...
Continuará...
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NOTAS INICIALES DE LA AUTORA:
¡Hola! Como se habrán dado cuenta, esta es la reedición de "En el fondo de tu alma" ya les había comentado de esto y lo hago porque hoy 10 de agosto cumplo mi primer año en esta página ! . Espero les guste y espero atraer a nuevos lectores con mi historia. Muchas gracias por todo el apoyo que recibí en la versión original. Estoy muy agradecida con ustedes por todo y espero seguir recibiendo sus mensajes, pues para esto también necesito inspiración.
Este primer capítulo me quedó un poco flojo, pero ya he explicado que yo no soy muy buena con los comienzos. Así que espero estén pendientes de lo que se viene. Aunque tardaré un poco... la explicación está en mi perfil.
Saludos,
Lunita Kinomoto
