¡Hola!, creo que luego de vario tiempo de tener inactiva esta historia, el dia de hoy hago algo que fue muy importante para mi y es eliminar lo ya escrito para hacer una reestructuracion de la trama en general, es una cosa muy dificil para mi... siento como que es como echar mentiras y luego decir la verdad, pero esto lo hago, porque siempre luego de leer con mas calma tu propio trabajo y analizarlo una y otra vez, descubres fallas, situaciones, y creo que aunque la historia fue algo bien hecho, la trama se fue tornando rapida y a veces algo extranormal.. por eso, pretendo explotar mi propio argumento para mejorar la calidad de esta historia que la considero maravillosa, esperando entregarles a ustedes un trabajo excelente, de calidad, interesante, dramatico.
Espero entiendan mi decisión que es y fue extremadamente dificil, pero sin embargo mi cabeza esta explotando idea tras idea, escena tras escena y ahora en un concepto mas realista y mas dramatico que la historia desarrollada anteriormente, espero que esta reestructuracion les guste y agrade a muchos, sino, con todo el gusto, aceptare el que dejen de leer la historia.
Aclaro, algunos capitulos, como los iniciales siguen siendo lo mismo, despues de todo, la historia nacio ahi y ahi continua, ademas a esos capitulos les imprimi mucho dramatismo y realismo que me hacen sorprenderme a mi mismo.
Muchos Saludos y sigue estando con toda la dedicacion para el foro de Chocolate y Menta. Agradezco tambien a NT_Lupin quien ha estado insistiendo en continuar la historia, la historia la continuare, de echo se alargará pues tiene mucho que explotar y modificara grandes partes de la historia, de esho, el nombre de la madre de Lily, ya no es el mismo, y algunos personajes cambiaron.
Saludos.
Ed Wiz.
Papá Soltero busca…
Por Ed Wiz.
Capítulo No. 1
¿Cómo era mami?
Su rostro estaba empapado de tanto llorar y sus gemidos de lamento no podían ser escuchados debido al hechizo silenciador que le había lanzado a la puerta, sin embargo, se sentía pesado, su alma estaba destrozada y aquel día en especial era uno más en el que se lamentaba y preguntaba ¿Qué había echo mal?, la mujer que él amaba con locura y la cual le había dado una preciosa hija de nombre Lily, lo había abandonado como a un vil perro enfermo, se había desaparecido de todo el mundo mágico o al menos del mundo mágico británico, dejándolo a cargo de su pequeña hija, una hermosa princesa que ahora tenía ya seis años, seis años en los que él muy orgullosamente había hecho de aquella bebé, una niña sana, fuerte y muy hermosa.
Y sí, de ese suceso tan impactante, habían pasado ya había seis largos años, años en los que él, periodista reconocido del periódico "El Profeta" se había echo cargo de una pequeña niña de seis años, sin la ayuda de nadie y pese a sentirse orgulloso de eso, el resentimiento de haber sido abandonado por quien creyó ser el amor de su vida le golpeaba sin remordimiento el alma y esa noche de luna llena, esa maldita noche de Halloween no ayudaba en nada a la fortaleza que aparentaba tener ante los demás.
– ¿Papi? – una voz hizo que calmara su llanto, se giro hacia la puerta y pudo escuchar leves golpes en ella.
Aquel hombre de 26 años se puso de pie, sumergió su rostro en agua fría, luego, dando unos pequeños suspiros y mirándose al espejo camino tranquilamente hacia la puerta del baño.
–Princesa – dijo con extrema ternura al abrir – ¿pasa algo? –
–Tengo miedo a los truenos papi – le dijo abrazando su pierna con fuerza.
–Pero princesa, te he dicho que no debes tenerle miedo a una tormenta – se agachó hasta su altura –además sabes que mientras yo este contigo, nada te pasará – le guiño un ojo.
– ¿Puedes dormirte conmigo el día de hoy? – le miro suplicante.
–Claro que sí pequeña – le sonrió con más ternura –pero por ahora papi tiene que terminar unas cosas del trabajo, en cuanto termine iré a tú cuarto a dormir –
–Puedo estar contigo y luego ir a dormir juntos – la súplica en su voz era más intensa.
–No creo que… – se mordió un labio y luego sonrió aún más –claro pequeña, anda ven – la cargó y juntos comenzaron a caminar hacia el despacho del joven.
El hombre dejó a su pequeña hija en un viejo sofá frente al escritorio del despacho, luego dándole un fugaz beso en la frente se encamino hacia su lugar, en el trayecto no pudo evitar sentirse aliviado, aquella pequeña, pese a la inestabilidad emocional que un Halloween podía causarle por la partida de la mujer que amó, le aliviaba el alma cuando la palabra papi salía de sus labios.
–Papi – se escucho una vocecilla luego de un rato.
–Dime Lily – detuvo su escritura y miró a su pequeña hija.
– ¿Como era mami? – dijo de pronto.
El corazón de aquel hombre se detuvo un momento, su mejor amiga le había dicho que ese era el riesgo que muchos padres solteros corrían, la gran pregunta del millón de galeones, ¿Quién era su mami?, ¿Cómo se llamaba su mami?, ¿Dónde estaba su mami?, todas englobando el tema que dicho padre evitaba tocar.
–Tú mami es… – se detuvo un poco –tú mami fue una gran bruja, una excelente aurora del Ministerio de Magia, era muy bonita y al igual que tú tenía esos penetrantes ojos que hacen que diga sí cuando quiero decir que no, eso sí, el cabello oscuro y un poco rebelde lo heredaste de mí – y desde el día en que su mejor amiga le había dicho de las preguntas sobre mama, él se había prometido decirle la verdad.
– ¿Por qué mami no esta con nosotros? – la dulce voz de la niña se escucha interesada en el tema.
–Porque decidió emprender un viaje muy largo que la hizo separarse de nosotros – mentira, en ciertos puntos mentiría –y no nos podía llevar con ella –
– ¿Volverá? – le pregunto nuevamente.
–Es algo que no puedo contestarte pequeña – se puso de pie –pero basta ya de preguntas, es muy tarde para que sigas despierta – fue hasta ella no sin antes con un movimiento de varita dejar su escritorio impecablemente limpio.
Mientras sentía un brazo de su pequeña hija apretarse con seguridad de su cuello acompañando el silencio de ligeros ronquidos, observaba el techo incomodo, de un momento a otro recordó lo sucedido una noche tormentosa, como la que afuera se ensañaba con el clima, aquella noche en que su hija y él tendrían un nuevo destino.
– ¿Te vas? – pregunto atónito.
–Por supuesto que me voy – le contesto fría –acaso esperabas que me quedará a cuidar a una mocosa, no Harry, yo tengo futuro, un futuro arruinado por ti y esa niña –
– ¿Pero que estás diciendo?, ¡no te reconozco! – se separo de ella con brusquedad.
–No pido que lo hagas, siendo sinceros, no exijo que lo hagas – se burló un poco –así como tampoco pido entiendas mi posición, ni cuestiones mi decisión –
–Tengo que llevarte a San Mungo, quizás estés bajo la… – fue interrumpido.
– ¿Imperius?, no, no es ninguna maldición, hechizo, encantamiento, ni nada Harry – le respondió fría y mordaz –esto lo hago por mí misma –
–No te quedes por mí – le suplicó usando aquella última arma que tenía –quizás por mí ya no sientas nada, pero la pequeña, ¿Qué hay de ella?, no puede crecer sin su madre –
–Entonces que muera y se solucionará el problema – el chico abrió la boca totalmente sorprendido –soy una aurora Harry, una aurora con un prometedor futuro en América –
–De que te sirve ser una reconocida aurora si por dentro no eres más que una mierda– el chico le miró con intenso rencor –una asquerosa y repugnante mierda –
– ¡Como te atreves! – la mujer sacó su varita.
–Si sales por esa puerta, jamás y ten por seguro que estoy hablando enserio – le sostenía la mirada y no tenía miedo de que la varita lo apuntará con firmeza al pecho –jamás te acercarás a Lily, me dejo de llamar Harry Potter si lo permito –
– ¿Lily? – Se burlo exageradamente –veo que eres sumamente sentimental, no entiendo como fue que puede tener algo contigo –
–Cuando abriste las piernas no dijiste lo mismo, ¿oh sí? – Le regreso el comentario de forma mordaz, los ojos de aquella mujer se abrieron enormemente, jamás pensó escuchar a Harry decir algo así –quieres que recite tus palabras, "Oh Harry", "Oh Harry te amo" – dijo frio.
–Debí de haber estado borracha – dijo intentando contenerse mientras apretaba su varita con extrema fuerza, unas ligeras chispas rojas surgían de ella –o fueron quizás las ganas de presumir que el gran auror Harry Potter, el héroe de toda Inglaterra, fue mío –
–Sabes, no mereces ni que siga rogándote que te quedes – saco su varita y se puso alerta, si quería batalla la tendría –después de todo, una mierda seguirá siendo una mierda, por siempre de los siempre, ¿no? – un rayo rojo fue repelido con éxito y la mujer observó fríamente al moreno.
–Asqueroso mestizo – le miro con intensa rabia –pero que más da, esa mocosa y tú son nada para mí, hasta nunca – aun furiosa desapareció entre llamas esmeraldas.
– ¿Harry? – una voz distrajo al moreno de su letargo, esté aún observaba con la varita enfundada la chimenea del atrio del Ministerio.
–Hermione – dijo volviendo en sí –Oh Hermione – se dejo caer de rodillas en el suelo.
Él había sido un auror de renombre, haber derrotado a Lord Voldemort y ser quien por varios años después de su caída persiguió y encerró a sus seguidores le había dado una fama y gloria insospechada a pesar de contar con 17 años y ser un simple estudiante de auror, así qué un tiempo después, lleno de riqueza y fama, Harry Potter había ya con 20 años conquistado al mundo mágico y ascendido de puesto al ser nombrado Jefe del Cuartel de Aurores del Ministerio de Magia.
Aún siendo jefe de departamento llevaba a cabo peligrosas misiones por todo el mundo y ahí fue donde conoció ha aquella mujer, el amor fue a primera vista, se enamoró con locura y la relación fue al instante, su primera noche, su primera entrega y ella quedo embarazada, siendo imposible de pasar un embarazo por desapercibido, la aurora se ocultó por un tiempo, tuvo a la pequeña y después, aquella noche de Halloween, sin tocarse el corazón se había ido dejando a Harry solo y con una bebé de varios meses de nacida.
–Ah Harry, es raro verte tan temprano por mi oficina – dijo una voz firme y tranquila a la cabeza de una mesa llena de varios magos.
–Buenos días Kingsley, seré breve – se disculpo por interrumpir aquella junta –solo vengo a entregarte este documento – aquel papel llego a las manos del moreno auror con magia.
– ¿Tú renuncia? – Dijo atónito y la mesa miro con escepticismo al chico –seguro que estás bromeando, vaya bromas las tuyas, siempre han sido buenas… –
–No es ninguna broma – dijo con más firmeza –es mi renuncia, lo siento pero por ahora deseo tomarme unas merecidas vacaciones –
–Pero Potter, Harry – se puso de pie Kingsley –si quieres unas vacaciones te doy tiempo, no es necesario que… –
–En otra ocasión – dijo –en otra ocasión quizás, sepa del porque he dejado tan agradable puesto y me he decidido por tomar el de un simple corresponsal del Profeta – salió de la habitación sin darle tiempo a Kingsley de decir nada más.
Suspiró, su vida había dado un radical cambio desde que ella se fue, nunca supo más de ella, ni tampoco intento averiguarlo, aunque como periodista eso era prácticamente imposible, solo breves comentarios y sencillas notas, "triunfadora en América", sonrió con amargura y de pronto sintió una mano moverse en su cuello, aunque su vida era simplemente diferente a la de antes, no se lamentaba ni siquiera por un segundo, el tener a su lado a tan hermosa niña y de haberla criado haciendo su mejor esfuerzo como padre y madre a la vez.
El silencio era algo que comúnmente acompañaba su recámara, sus ojos miraban con frialdad el reflejo que el espejo le devolvía, su rostro bello y fino como lo fue siempre, su cabello perfectamente cuidado era su punto más fuerte a la hora de seducir hombres y llevarlos a la cama.
–No puedes dormirte ya – se escuchó una voz femenina que distrajo la atención de aquella mujer.
–No tengo sueño, si lo deseas puedes salirte de la habitación o irte a dormir al sofá de la sala, yo no pienso apagar la luz – respondió con frialdad.
–Sabes, no entiendo porque sigo siendo amiga tuya – dijo aquella mujer –siendo sinceras, creo que es porque somos compañeras de campo –
–Yo no eh pedido tú amistad, de echo, no me interesa – la crueldad en su voz no inmutaba a la mujer que yacía acostada en una cama.
–No puedo creer que tengas un corazón tan podrido – le contesto con la misma frialdad –ah me olvida, si lo creo, fuiste capaz de abandonar a una niña de dos meses, que no seas capaz de mandar al demonio la amistad de la única persona que te conoce mejor que nadie en un lugar donde nadie te quiere –
– ¿Nadie me quiere? – Dijo riendo –tengo a todo el ministerio americano bajo mis pies –
–Sí claro – cerró los ojos y se puso a dormir –es mejor que te sigas engañando –
–No me estoy engañando – le grito furiosa –soy la mejor aurora del Ministerio y tengo un gran futuro… –
–Cierto, una aurora ejemplar con el corazón más podrido que nada – le contesto firme – ¿no sientes siquiera un poco de arrepentimiento? –
– ¿Arrepentimiento? – se miró al espejo –arrepentirme de haber dejado a esa mocosa a su suerte – sus ojos enfocaban con firmeza todo su rostro y luego con extrema frialdad respondió –No, no me arrepiento de lo que dije e hice, es más, espero firmemente que esa mocosa este muerta –
–Creo que si me pongo a pensarlo detalladamente puedes llegar a ser la nueva Lord Voldemort – le grito –sabes, me das asco –
–Retira lo que dijiste – la mujer saco su varita –retira lo que dijiste perra –
– ¿Perra yo?, pero querida amiga yo solo soy como sueles decirme en algunos momentos, una sangre sucia – le encaró con firmeza –sabes que – le sonrió ácidamente –es mejor ser una sangre sucia como suelen llamarme los de tú clase a ser una perra sin corazón –
–No puedo tolerar más esto, no me importa que seas la ahijada del jefe del departamento de Seguridad Mágica – se puso de pie –no voy a permitir que me… –
–Tú no tienes ningún derecho a pedir nada – le grito –el ser la famosa aurora llamada… – fue interrumpida por un rayo rojo que paso por encima de su cabeza.
–Tú lo has dicho, no tengo corazón y no lo tendré al matarte – le apunto directo al pecho y comenzó a soltar una risa maniaca mientras la mujer que estaba en cama estiraba su mano para alcanzar la varita –pero no te mataré, tú lo has dicho, soy famosa y no es necesario ensuciarme las manos con una asquerosa sangre sucia como tú –
–Solo espero que dentro de aquel capullo de odio y locura quede algo de sentimiento humano porque con lo que te diré te pondrás a rezarle a todos tus antepasados sangre limpia para evitarlo – la risa maniaca paró, la mujer llamada Violeta se puso de pie de la cama y miro a la bruja.
Hubo varios murmullos y luego la aurora miró a Violeta con la boca muy abierta –No, yo no puedo… –
–Oh sí – le respondió –sí, regresarás a Inglaterra dentro de un año y justamente tendrás que toparte con todo ese pasado que intentas ocultar –
–Esto debe ser una broma – dijo nerviosa –yo no puedo regresar a Inglaterra –
– ¿Tienes miedo de toparte con una niña de seis años? – le dijo mordaz –la gran aurora más importante del Ministerio Americano tiene miedo de una mocosa de seis años –
–Yo no le tengo miedo a nada, no has escuchado esa mocosa no existe para mí, pero no pienso volver a Inglaterra… –
–Porque simple y sencillamente temes que tú famosa imagen caiga por los suelos cuando una mocosa te llame mamá y su padre diga a todo el mundo mágico que lo abandonaste como a un vil perro y lo dejaste a su suerte – se burló –los medios te despedazarían y jamás volverías a pisar este Ministerio y sabes porque, porque si algo respeta este suelo mágico de América es a la familia y créeme que tener en sus filas a una madre desobligada no será muy agradable –
–Eres cruel – le dijo de pronto.
– ¿Cruel yo? – Se burlo –no, pero es hora de que pagues todas tus deudas con la vida y que mejor que empezando por enfrentarte a un hombre ya no de veinte años y enamorado querida, sino uno de veintiséis y si no me equivoco capaz de darte unas buenas bofetadas morales –
– ¿Qué intentas decir? –
–No lo sabes, Harry Potter es un periodista muy famoso en tu país, sus artículos son alabados por muchos y lleva tres años consecutivos recibiendo el premio "Escritor del año" y mira que escribe de maravilla –
–Basta, basta ya – dijo totalmente furiosa –no pienso regresar a Inglaterra –
–Pues ve empacando, porque de mi cuenta corre que en menos de lo que se aparece un mago estarás tomando un avión camino hacia allá – le dijo ácidamente –me la debes, ¿o ya olvidaste como me humillaste frente a todo el cuartel por haber sido engañada por un vampiro y haberme acostado con él creyendo que era el amor de mi vida? –
– ¡Perra! – guardó su varita y fue directo a su cama.
–Lo aprendí de la mejor – sonrió con satisfacción –de ti, querida amiga – tomó sus cosas y salió de ahí.
Continuará.
