Hola como están espero que muy bien.

Bueno lo que traigo el día de hoy, es un pequeño delirio O.OU que se me ocurrió esta mañana, espero que sea de su agrado, cabe decir que creo que este fic será corto (espero), pero eso dependerá de que cosas raras se me vengan a la mente xD. Realmente tambien espero no atosigarles demasiado con mis fics y mas que todo no defraudarles.

De antemano mil gracias por leerlo y espero me regalen sus opiniones plasmadas en un review.

Pensamientos------------> Cursiva

Texto--------------------> negrita

"Deseos"

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Era una tarde calurosa, el otoño comenzaba a desprender las hojas de los árboles, llenándome con un aire lleno de calidez efímera que golpea suavemente mi cara y mece con un deje de ironía mi cabello, mientras cierro los ojos y trato de respirar profundamente, reflexionando lo que ahora es mi vida.

Sasuke-kun sin que nadie se lo esperara inclusive yo, regreso a la aldea como si nada hubiese pasado y luego de una semi-condena que tuvo que cumplir durante dos años, seguía igual que siempre, no se si aun mas frió que antes, al menos conmigo si lo era.

Suspiro mientras los rayos de un naranja peculiar bañan mi faz, aparto el cabello que choca contra mi rostro colocándolo detrás de mis orejas, a veces me pregunto si la razón del porque ahora este un poco largo llegándome debajo de mis hombros era la misma que tenia antes, pero sonrió con causticidad recordando el "porque" que todos creen saber.

- Si supieran- me respondo a mi misma, sabiendo simplemente la verdad, que lo hago porque quiero no por gustarle a nadie mas.

Estoy por cumplir los 24 años en unos cuantos meses más, específicamente el año siguiente, pero aun así me planteo si el camino que he tomado es el correcto, soy ¿realmente feliz? -Abro los ojos de repente-.

A veces pienso que si, que no necesito nada, que me siento completa, como ser humano, como ninja medico, pero me cuestiono a mi misma si es así también como mujer.

Si "el" aun me afecta, mentiría si dijera que no es verdad, llevo casi toda la vida sintiendo algo distinto por "el" al contrario de lo que siento por los demás, aun ahora se que sigo experimentado un sentimiento por su persona, pero talvez ahora es un poco diferente.

Los años pasan llenándonos de experiencias nuevas, nos hacen pensar en lo que en realidad significa la vida y que cada día hay que vivirlo como si fuese el último, he crecido, he madurado, he cambiado pero aun en mí en algunos sentidos siento que ciertos aspectos llegaron tarde.

Lo veo pasar al lado de Ino y Karin, una es otra que siempre le quiso y la otra es su ex subordinada que le profesa estima también.

Sonrió triste, mis ojos no se llenan de lagrimas, pero aun así el nudo que se forma en mi garganta apretándome hasta las entrañas causándome dolor me recuerda todo, me recuesto mas en la banca en la que llevo desde hace mas de dos horas sentada, mi espalda contra el respaldo del asiento y mi cabeza sobre la esquina superior mientras cierro los ojos tratando de hacerme con el entorno del lugar.

Que relación es la que ellas tienen con el, para mi es un misterio, pero no me lastimo intentado investigarlo.

Pensar que ellas están al lado de el como yo quisiera estarlo, seria estupido siquiera imaginármelo como también lo seria pensar que si yo le diera una idea de lo que significa para mi de nuevo, se quedaría conmigo como en mis sueños de niña tonta que solía tener o como en los cuentos de hada ridículos y cursis que aun a veces leo.

Me siento idiota, seria como creer que "si el conociera realmente la persona que soy abandonaría a unas chicas perfectas con las que sale y se daria cuenta que en mi podría encontrar lo que siempre deseo".

Mis labios se curvan de nuevo formando una media sonrisa con sarcasmo en ella. No es que tenga mi autoestima baja, antes si pero ahora no, solo trato de ser un poco realista, Ino me dijo una vez que florecería y me convertiría en una hermosa flor, la mas bella de todas, pues puede que en lo que cabe tenga lo mió, he cambiado tanto físicamente como mentalmente y tengo quienes me muestran afecto, Lee que aun se desvive intentando conseguir una cita con migo, Sai que aunque le encanta molestarme le he notado mirándome descaradamente, Naruto que aun me aprecia pero como amiga, como lo hizo desde que se dio cuenta a los 12 años de edad que entre el y yo nada mas podríamos querernos como amigos, casi hermanos.

No soy una amargada que no tiene vida, al contrario tengo a mi cargo muchas responsabilidades y es por eso que mi vida es estar sola.

La respetable y admirada pupila de la Hokage, es como todos me llaman, sin imaginar que a veces cometo cosas que aunque no dejo de hacerlas, en ocasiones me hacen sentir vulnerable y asqueada de ellas.

Mis padres están orgullosos de mí si tan solo supieran ellos y las demás personas, lo que sucede a veces dentro de la habitación de mí departamento no creerían lo seria que ahora parezco al estar en público.

De nuevo abro los ojos al sentir una sombra tapar la tenue luz del sol que al ocultarse tras el paso del tiempo aun daba en mi cara, mas al darme cuenta de quien se trata.

- Sakura- la llama.

Alzo una ceja- Sasuke- lo veo al lado de sus amiguitas- konichiwa Ino y Karin- les saludo igual que a "el" tratando de ser cortes, la rubia me saluda pero la pelirroja nada mas levanta una ceja.

- Que haces aquí- pregunta el moreno sin interés.

- Creo que eso no es asunto tuyo-respondo, los tres me miran extrañados mientras me levanto de la banca- es mi día libre- comento mientras un brillo en los ojos de Sasuke casi imperceptible no pasa desapercibido para mi, no se de que se trate, además que no quiero saberlo- pero ya debo irme- me despido no esperando que me respondan.

No es que este de malas ni que sea una pesada, es simplemente que no me gusta que aun en mi descanso se plante cerca de mi, exhibiéndose junto a sus admiradoras, a veces pienso que lo hace adrede para hacerme daño, pero Sasuke-kun es demasiado frió para hacer semejante estupidez, además que nunca ha mostrado interés por mi.

Llego a mi casa, me descalzo en la entrada y saco mi blusa tirándola sobre el sillón de la sala, quedándome solo en mi sostén rosa favorito, el calor se hace mas y mas insoportable.

Me cuestiono si hago o no, lo que llevo pensando desde la mañana, lo ejecuto siempre cuando es mi día libre y cuando me siento muy estresada.

Suspiro, quitando las gotas de sudor que están en mi frente, mi respiración esta desigual, como es posible que me den tantas ganas y este tan sola.

Pero solo yo se la respuesta, que aunque tuviera a alguien a mi lado no dejaría que nadie mas que "el" me tocara, pero en este caso "el" no esta interesado y yo sigo siendo a veces muy infantil.

Mis manos se van directo a mis pechos aun cubiertos por el sostén apretándolos un poco, cierro los ojos, una imagen de "el" invade mi cabeza, los abro de repente y me dirijo a mi habitación.

Con tranquilidad abro la puerta de mi cuarto, me tiro de espaldas sobre la cama posando mi vista en el techo como si fuese lo mas interesante en el mundo.

Suspiro de nuevo aun no me decido, volteo la cara hacia la mesita de noche donde el reloj marca las 6:00 de la tarde, cierro mis ojos mientras mis manos se encargan de desabrochar el sostén y deshacerse de el; suspiro y de nuevo ambas manos se posan en mis pechos apretándolos suavemente, queriendo sentir aquellas sensaciones que por curiosidad tardía me dieron ganas de experimentar hacia 9 meses y que de vez en cuando practicaba, me sentía enferma, algo asqueada pero aun así quería probarlo una vez mas, aunque me arrepintiera como siempre y me negara como una persona decente y no me reconociera quiera sentirlo.

Bajo mi mano izquierda por mi cintura, mientras la derecha sigue tratando de acariciar mis pechos, los escalofríos se apoderan de mi cuerpo, mientras con paciencia me saco la falda, quedando aun con el ridículo pant rosa que tanto me gusta.

Sin vergüenza alguna, bajo mi mano derecha y comienzo a acariciar mi extremidad mas profunda aun cubierta por mi pant con los dedos, mientras mi mano izquierda apreta uno de mis pechos, se que un profundo sonrojo ha cubierto mis mejillas.

Siento como la humedad cubre mi ropa interior mientras mi respiración esta acelerada, en un rápido movimiento quedo totalmente desnuda y me levanto de la cama quedando de rodillas, abro las piernas mientras mi mano derecha regresa a su cometido y la izquierda también.

Cierro los ojos mientras acaricio, froto y muevo circularmente mis dedos contra mi entrepierna tratando de satisfacer mis mas recónditos deseos y lo imagino a "el" haciéndome todo eso, a veces quisiera hacerme un genjutsu yo misma a su lado para no tener que fantasear, pero si lo hiciera me sentiría mas sucia de lo que ya me siento, no me avergüenza talvez pero aun así se que lo que hago no es correcto.

Acelero los movimientos dentro de mi, moviéndome en vaivén contra mis dedos, mientras ellos frotan aceleradamente, comienzo a quedarme sin respiración, con las mejillas y la cara cubiertas de un rojo profundo, los ojos cerrados y la boca entreabierta repitiendo su nombre "Sasuke-kun" casi delirando, siento tensarme lentamente y un hormigueo cubre completamente todo mi ser, grito su nombre mientras me siento llegar a la meta suprema ; agradezco vivir alejada de la demás gente para que así no sepan ni oigan nada de lo que hago.

Saco mi mano de donde estaba y con la otra alcanzo un pequeño trozo de papel de la mesita de noche para limpiar la humedad que esta en mis dedos, me recuesto de espaldas de nuevo en la cama aun desnuda, mientras trato de regular mi respiración y los latidos acelerados de mi corazón.

De pronto la realidad cae en mi y las lagrimas cubren mis mejillas al darme cuenta el nivel de delirio por el cual estoy poseída a momentos, sabiendo que aunque fantasee con "el", jamás pasara en realidad.

Porque ella no iba a ofrecérsele de ningún modo y tampoco el llegaría sediento por ella buscándola teniendo mucho para escoger ya.

La chica pelirosa cerro los ojos mientras las dolorosas lágrimas seguían cayendo sin percatarse de los ojos rojo escarlata, con tres comillas en ellos que la miraban desde la ventana.

Se levanto al baño mientras se lavaba con culpa la mano con residuos de su pasión, cuando acabo se lavo la cara, luego se dirigió a la regadera dejando que las gotas de agua helada cubrieran su piel, se lavo el cabello y también se cubrió completamente con su jabón con pesar, luego tomo la esponja y la lleno de gel de cerezas tratando de borrar cualquier olor que aun tuviera y se restregó completa con rabia, de pronto arrugo el ceño y cerro los ojos mientras las lagrimas volvían inundando sus ojos verdes, sus hombros temblaban y sus puños fueron a dar contra la pared del baño sin utilizar chacra por su puesto ya que si no la hubiera destruido, pero talvez eso era lo que necesitaba desquitarse con algo la frustración y el dolor que sentía, tenia un vació que nada podía cambiarlo.

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No era la primera vez que la veía, lo llevaba haciendo desde hacia meses, un día cuando por curiosidad se intereso por ver lo que la chica pelirosa hacia estando a solas.

La primera vez se quedo helado, nunca hubiera creído que su ex compañera de equipo fuese tan atrevida y eso le atraía, el día que la había visto no había podido soportarlo y se había marchado, no porque no pudiera tomarla o forzarla si era necesario, pero de antemano conocía los sentimientos que la chica guardaba para el, aunque ella lo ocultara tan bien.

Desde aquel día comenzó a frecuentar su ventana y se dio cuenta que ella hacia eso siempre en sus "días de descanso", verla le excitaba, más aun cuando la chica mientras le mostraba tan apetecible espectáculo, le llamaba fantaseando seguramente con el. El era un hombre, frió si, pero aun así un hombre y no pensaba marcharse por lo menos no esa noche, tenia en mente probar de algo que se le había antojado desde hacia mucho.

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Cuando se calmo, cerro la regadera y ya completamente limpia, se lavo los dientes y lo que vio en el espejo no le extraño, no reconocía ni siquiera lo que veia en su reflejo, mas bien en la persona que se había convertido.

Llego al cuarto solo en toalla ignorando aun a su joven intruso que ocultando perfectamente su chacra desde que había llegado, estaba aun observando.

Dejo caer la toalla al suelo sin importarle su desnudes, se miro al espejo de cuerpo entero contemplándose, tomo la crema con olor a cereza que estaba sobre su tocador mientras se aplicaba con cuidado por toda su piel, se perfumo, se coloco ropa interior y un camisón, cambio las sabanas y se metió en las nuevas perdiéndose en los brazos de Morfeo.

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Entro con cuidado por la ventana con el sigilo que solo el poseía para no ser detectado.

Paso dentro de su cuarto que aun contenía el aroma que ella se había colocado por toda su piel, se acerco a la cama, donde la contemplo un momento, le quito la sabana que la cubria y sin perder el tiempo se coloco sobre ella poniendo sus antebrazos a cada lado de su cuerpo para no aplastarla, se acerco a su oído y le susurro- Sakura- mientras mordía el lóbulo de su oreja.

La pelirosa aun en sueños soltó un jadeo.

- Sakura- susurro de nuevo el joven azabache de nuevo en su oído.

La chica pelirosa abrió los ojos- Sasuke-kun- exclamo aun medio dormida...

El se aproximo a su boca sin perder el tiempo y la devoro, introdujo su lengua en aquella calida cavidad aprovechando que ella había abierto la boca para hablarle.

La pelirosa no sabia que estaba pasando, esto esta pasando en verdad, se preguntaba, pero la verdad era que no se lo creía, además esto ya había pasado en otras ocasiones, es decir ya había soñado antes sus fantasías con el moreno, pero esta vez se sentía tan real que podría jurar.

- No- se dijo- estoy soñando, simple y sencillamente eso- correspondió al beso del Uchiha con ansiedad.

El moreno deshizo el beso bruscamente y bajo a la zona del cuello el cual fue victima de la impaciencia del chico.

- Sasuke-kun- gimió la pelirosa, al sentirlo tomar sus pechos aun cubiertos sobre el camisón- esto es un sueño cierto- pregunto.

El pelinegro al momento se detuvo, abrió los ojos el sharingan aun seguía en ellos, la miro y luego volvió a su boca sin contestar lo que ella había pedido.

La presiono contra la cama mientras tomaba sus manos, las colocaba sobre su cabeza y seguía explorando aquel cuerpo tan delicioso que tenia bajo el.

Le subió con impaciencia el camisón, casi rompiéndolo al sacárselo.

Sakura solo lo observaba con los ojos entrecerrados por la excitación, lo sentía temblar sobre ella, lo hizo reincorporarse y ella también lo hizo, apartándolo de ella y sentándose sobre el.

El se iba acercar a su boca pero ella negó con la cabeza- Shhh Sasuke-kun- susurro mientras sus manos se dirigían a su cintura y levantaba pausadamente su camisa hasta sacarsela, justo como hacia siempre, en sus sueños y este no seria distinto.

Se acerco a su boca, coquetamente, seduciéndolo, tentándolo con su lengua que acariciaba su labio inferior.

- Sakura- jadeo el en su boca, la tomo del rostro y estrello sus labios contra los de ella, aferrándola contra su cuerpo mientras bajaba las manos por su espalda y ella suspiraba su nombre entre besos.

Se separaron por falta de aire, respirando agitadamente.

Sasuke sentía como la ropa que aun llevaba puesta empezaba a estorbar, le dolía la erección y la deseaba a "ella" como nunca lo imagino.

Sakura como entendiendo lo que ocurría se dirigió al botón de su pantalón con la mirada de Sasuke puesta en cada acción que hacia, eso era tan real seguía pensando ella pero lo aparto de su mente eso seria imposible se dijo, luego apartando los bóxer que la separaban de su objetivo lo miro a los ojos con picardía, cuando tuvo su miembro entre sus manos comenzó a acariciarlo y apretarlo mientras observaba las reacciones del moreno que había cerrado los ojos, un tímido sonrojo se había apoderado de sus pálidas mejillas y entreabría la boca en busca de aire.

La pelirosa se sentía una experta, de algo servían las lecturas que había estado teniendo desde hacia mucho.

Tan concentrada estaba en complacer a su pelinegro que no se dio cuenta hasta que el aparto sus manos de su miembro, la tumbo en la cama fuera de control y se coloco de nuevo sobre ella, luego tomo un pecho con su boca y el otro lo acario con la mano, enviándole escalofríos a la pelirosa quien no tardo en reaccionar ante las caricias.

Cuando se sintió satisfecho bajo por su cintura hasta llegar a su ombligo en el cual repartió besos haciendo que ella se arqueara, mientras retiraba su pant y sus manos se encargaban de prepararla para el mientras la acariciaban profundamente.

Cuando la sintió preparada, se deshizo del restante de su ropa y se coloco sobre ella, entre sus piernas, frotando su miembro contra la húmeda extremidad de la chica de ojos verdes, la cual estaba desesperada por ser poseída y el moreno temblaba por poseerla también.

- Sakura- la llamo, ella lo miro asintiendo, entro en ella con impaciencia, quería enterrarse en ella sin piedad, pero al empujar un poco mas, se dio cuenta que había una barrera que aun lo separaba de ella y entonces lo comprendió, ella se quejo un poco, Sasuke sonrió de medio lado y se preparo para hacer suya completamente a aquella mujer.

La pelirosa grito cuando el traspaso aquella barrera y se sintió extraña, cada vez que lo hacían en sueños ella no sentía aquello, que estaba pasando, el dolor descomunal que sentía la obligaba a querer apartarlo de ella, pero el no se lo permitía, las lagrimas se hicieron presentes y el la beso tratando de calmarla.

Cuando ella apasiono el beso, el moreno se dio cuenta que ella ya estaba lista y comenzó a embestirla intercalando la velocidad a veces rápido y otras tan lento que la chica de ojos verdes se desesperaba agónicamente, el dolor se habia convertido en placer.

Los gemidos y suspiros que compartían era todo lo que se escuchaba en la habitación, ella le llamaba y el de vez en cuando, cuando la razón ya estaba perdida susurraba su nombre casi en silencio pero ella lograba escucharlo, mientras el acometía mas fuerte y mas rápido.

Sakura lo tomo del rostro y lo beso con fuerza mientras sentía como su cuerpo comenzaba a tensarse, el moreno lo sentía también sabia que pronto llegarían, acelero el ritmo y con dos embestidas mas, se vació dentro de ella mientras ella gritaba su nombre y se arqueaba contra el.

Sasuke cayo sobre ella, exhausto, respirando desigualmente, con el seño fruncido, jamás había experimentado nada como aquello.

Sakura abrió los ojos, con el aun encima de ella, pensando que había sido el mejor sueño que había tenido sin darse cuenta de la magnitud que aquello significaria para los dos.

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Fin del primer capi.

Si crees que vale la pena tomarte un momento de tu tiempo para hacerle saber a esta humilde escritora tu opinión sobre el fic, le regalas un review por favor.