El secreto de los Malfoy
Lucius Malfoy tenía una máscara de indiferencia que ocultaba su sufrimiento, había un secreto que ocultaba del mundo e inclusive de su heredero pero nunca de su esposa Narcissa.
Narcissa siempre oculta de su esposo e hijo se encerraba en uno de los cuartos de la mansión y miraba aquella fotografía que le traía recuerdos dulces y amargos.
Ambos Malfoy ocultan algo referente a Draco e intentarían irse a la tumba con ello.
Disclaimer: Todos los personajes pertenecen a J.K Rowling.
Advertencia: estoy segura que me fume algo cuando escribí esto, sin más que decir los invito a que lean esto.
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Lucius Malfoy observo a su esposa y a su hijo respectivamente, los tres se encontraban sentados en el comedor de Malfoy Manor. Después de la guerra las cosas para su familia no habrían resultado muy favorables si no fuera porque El-niño-que-vivió-y-venció Harry Potter y el sobreviviente hombre lobo Remus Lupin abogaron a su favor.
Harry Potter abogo a favor de su familia por la deuda de vida que tenía con su esposa Narcissa, por su parte el hombre lobo ㅡque quedo viudo por culpa de la loca de su cuñadaㅡ expuso no solo cosas lógicas y si no también recuerdos en lo que su esposa y el decidieron trabajar como espías para Dumbledore y llevaban información junto al fallecido Severus. El ministerio de Magia que quería echarle mano a su fortunaㅡ Y no pudiendo lograrloㅡ los absolvió de toda culpa y una de las cosas que no quería salió a la luz.
"Fue un espía y trabajo para el loca cabra de Dumbledore"
Siempre tuvo la certeza de haberle lanzado un obliviate a Lupin hace varios años pero al parecer los efectos surgieron un poco extraños.
Su esposa y el recibieron una orden de Merlín, segunda clase por su participación en la guerra como espías al igual que Severus. Parte de su máscara cayo y aquellos que los despreciaron y decidieron dejar de hacer negocios con ellos, hipócritamente le mandaron cartas de invitaciones a bailes y cenas; rechazaron las invitaciones educadamente como lo hacía un verdadero Malfoy y se encerraron en Malfoy Manor mientras su hijo Draco ingresaba a terminar sus estudios en Hogwarts, aunque Draco le perdió un poco el respeto al ocultarle la verdad.
Narcissa intentándole devolver el favor a Lupin siempre se encargaba de enviarles las pociones para su problema peludo como lo habían apodado hace años aunque era posible que Lupin no recordara mucho sobre aquelloㅡGracias a Salazarㅡ y logro hacer las paces con su hermana Andrómeda. Draco al ingresar a estudiar nuevamente fue premio anual junto a Grangerㅡ nada sorprendente a decir verdadㅡ y cierta relación amistosa se formo entre ellosㅡ Algo que le dejaba una jaqueca horrible al pensarlo detenidamente lo parecido que es su hijo a elㅡ Narcissa siempre fruncía el ceño al escuchar a Draco hablar de Granger incluso el se ponía verde al escucharlo.
Tomo un sorbo de su whisky de fuego y miro a su extraña familia susurrar tensamente ignorando su presencia, el vaso de vidrio que contenía su bebida cayó al suelo cuando escucho a su hijo decir esa frase deliberadamente. El ruido asusto a ambos pero el todavía se encontraba en un shock.
ㅡ ¿Draco… dime que lo que escuche no es cierto? ㅡpregunto vacilante al borde de un colapso viendo como Narcisa se tensaba deliberadamente y Draco lo miraba burlonamente.
No era que lo haya sorprendido ya lo sospechaba pero escucharlo decirlo fue solo una razón más para saber que Draco Malfoy efectivamente era su hijo.
ㅡSi padre… yo tu único hijo estoy enamorado Granger una hija de Muggles y no solo eso quiero casarme con ella y seré el primer Malfoy en romper las tradiciones familiaresㅡ Narcissa lo observaba seriamente pero su miraba estaba posada en su único hijo que lo miraba burlonamente intentando sacarlo de sus casillas ㅡ algo que solo habría logrado hacer una personaㅡ y negó con la cabeza mordiéndose la lengua para no decir algo hiriente contra su hijo.
¿Dónde carajos había sacado ese lado tan Gryffindor?
ㅡQué descarado de tu parteㅡ recrimino su estúpida conciencia.
Vamos Lucius eres un Slytherin piensa detenidamente lo que vayas a decir, no querrás que nos termine de perder el poco de respeto que nos tiene.
ㅡ ¿Y qué harás con Potter y Weasley? ¿Puede que ambos estén enamorados de Granger? ㅡse sorprendió escuchar su voz tranquilamente y también a Draco y a Narcissa.
ㅡ No tengo ni la menor pero algo lograre ㅡpuso los ojos en blanco al escuchar su respuesta.
¿Aquel era el lado Gryffindor de Draco que estaba oculto?
A veces los Gryffindor eran tan idiotas intenta lograr algo sin tener un estúpido plan, el los vio muchas veces en Potter, Black, Lupin y Ella.
ㅡMe tengo que marchar… quede en reunirme con Potter, Granger y los Weasleyㅡ Observo con un tic nervioso en el ojo derecho como su hijo sonreía no como un Malfoy como él le había enseñado sino como ella, cuando lo vio darle un beso a Narcissa de despedida y perderse por la sala.
Narcisa lo observo contrariada por la noticia y negó con la cabeza parándose de la silla y colocándose detrás de el.
ㅡLa sangre llama a la sangreㅡ no le importo que usara un refrán muggle pero ver sus ojos azules mirarlo tristemente le impulso a morderse el labio como lo hacia ella alguna vez.
Narcissa desapareció de su vista y quitándosele el poco apetito que tenia marcho hacia su despacho sacando una botella de whisky de fuego, el cuadro de su padre Abraxas Malfoy lo miro desdeñosamente y tomando un trago se preparo para el sermón.
ㅡ¿Casarse con una sangre sucia? Es una desgracia y vergüenza para nuestra familia que el heredero piense de esa forma… ㅡpuso los ojos en blanco y pensó que faltaba poco para el 31 de octubre. Siempre al llegar esa fecha se ponía melancólico y le daba por beber hasta levantarse sin recordar nada, aunque esperaba que esta vez fuera diferente.ㅡNo se podía esperar más del hijo de una ramera…ㅡ
Se levanto abruptamente de donde estaba sentado y hechizo al cuadro para que se callara de una vez por todas. Insultar a la madre de Draco era algo que nunca le perdonaría a alguien, en especial a su padre.
La sangre llama a la sangre.
Era como lo había llamado Narcissa y lo corroboraba fielmente, se acerco a la pequeña biblioteca ubicada a la derecha del despacho y agarrando el libro con el nombre de los hermanos Grimm escucho la pared hacer click y el compartimiento secreto del despacho quedo al descubierto.
Allí no había papeles importantes ni libros de magia negra, solo era un cuadro adornando el lugar secreto, tomando otro trago se acerco y la sonrisa del cuadro lo recibió cálidamente. Lagrimas se deslizaron por sus mejillas y aunque le había dicho a su hijo una vez que los Malfoy no lloraban no pudo evitar el sollozo que salió de sus labios.
Acerco su mano vacilante al retrato acariciando tiernamente el rostro de la mujer pintada. Lucius lo recordaba perfectamente, el cabello rojo y largo que le caía como cascada por su espalda hasta llegar a su cintura, su nariz pequeña y respingona, su encantadora sonrisa y lo que más le atrajo desde la primera vez que la vio sus cautivadores ojos verdes esmeralda, aquellos que veía en Harry Potter y de los que privo a su hijo Draco.
La imagen de Lily Potter Evans le sonreía encantadoramente y aunque sabía que su padre lo veía no le impido mostrarse débil y llorar fuertemente por la partida de su pelirroja. El dolor que sintió hace dieciocho años cuando escucho a Severus decirle que Lily había sido asesinada por el hombre al que un día ciego admiro volvió a él.
Puede que la comunidad mágica ignorara aquella verdad pero él y su esposa lo recordaban firmemente como si no hubieran pasado los años. Aunque muchos ignoraran Draco Malfoy compartía ciertas similitudes con Lily. Tenía una vena Gryffindor latiendo en él como Lily, había heredado morderse el labio como alguna vez lo hizo ella y no menos importante el color de sus ojos era igual de verdes como los de ella pero lo ocultaba bajo un hechizo de glamour que le coloco cuando ella murió.
Y es que cuando Draco le dijo que estaba enamorado de Granger fue como volver a años atrás cuando les dijo a sus padres que le gustaba Lily Potter.
Pensaba llevarse esa verdad a la tumba, no le diría nunca a su hijo que Lily Potter era su madre biológica. Recordó que Draco quería ser el primero en romper las tradiciones sonrió tomando otro trago, era de un poco tarde el ya las había roto y no se arrepentía.
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Draco Malfoy observo a el trió de oro, la Weasley y Lovegood desde lejos, aun estaba un poco sorprendido por la actitud de sus padres en especial de Lucius, cuando le comento aquello pensó que le gritaría y lo iba a desheredar pero su pregunta lo dejo boqueando un poco.
Aun estaba un poco enojado con ellos por haberle ocultado que eran espías de la orden y haberle hecho pasar el sufrimiento de convivir con el sin nariz mestizo, Harry Potter reparo en su presencia y le sonrió invitándolo a acercarse donde se encontraba sus amigos, sintió algo cálido al ver aquella sonrisa dirigida a él, no era amor.
Era un cariño familiar como el que sentía con sus padres y su padrino, como el que seguro sentiría si tuviera un hermano. Intento no pensar mucho el ello y acercándose ignoro esa sensación que le decía que no se equivocaba.
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Narcissa Malfoy se encerró en aquella habitación donde ocultaba su preciada fotografía de ojos curiosos, el refrán muggle rondaba su cabeza y les daba totalmente la razón. Recordaba como al salir de Malfoy Manor se encontró con Lupin y el pequeño Teddy en el callejón Diagon sintió la sangre Black llamarla súbitamente a él que era su sobrino nieto.
También estaba Draco que aunque era un sangre pura y lo llevo nueve meses en su vientre eso no podría borrar la huella de que era hijo de Lily Potter. Aunque le pusiera un encantamiento en sus ojos el niño irremediablemente tenia ciertas similitudes que el ignoraba.
La sangre Evans que recorría por sus venas lo llamaba a encontrarse con su medio hermano Harry Potter, ella lo sabía muy bien, cuando era pequeño Draco hablaba mucho sobre conocer a Potter e incluso cuando entro a Hogwarts no paraba de parlotear lo malo que había sido al rechazar su amistad y cuando el trió de oro fue llevado a la mansión, el lazo de sangre que los unía y ambos ignoraban hizo mentir a Draco de que aquel no era Harry Potter.
Observo la foto y sollozo levemente, ella lo entendía, lo mismo le pasaba con Andromeda cuando se marcho de la familia y cortaron lazos, porque aunque no era su hijo, lo quería como si fuera suyo. Le debía a Lily Potter darle la oportunidad de ser madre y es algo que le etaria agradecida toda la vida.