Completa Felicidad
Me descubrieron!
Habían pasado cuatro años desde que empezó todo, desde que me enteré de que Ichi-nii era un shinigami, que el viejo también lo era, que esa persona que me salvó aquel día en el campo de fútbol era un capitán; tantas cosas de las que me había enterado…
Por supuesto, esa guerra con Aizen había terminado y los shinigamis habían salido victoriosos, ah!, ahora que lo recuerdo en ese tiempo conocí a Shinji-san y a sus amigos que son geniales; y, como era de esperarse, después de aquella guerra Ichi-nii se había ganado su puesto como capitán del quinto escuadrón y como jefe de operaciones en el mundo real, Rukia-chan era su teniente y, claro, como se presentía desde el inicio, su pareja, con lo que ella y su hermano se habían unido a la familia pero Byakuya-san todavía era arrogante y permanecía alejado.
¿Y yo?, Bueno, en mi caso, en ese momento con doce años y después de haber peleado con el viejo pero obteniendo su autorización, conseguí hacerme shinigami como Ichi-nii. Eso me hizo cambiar como persona y me abrió las puertas a un espectacular mundo; la única que faltaba era Yuzu, pero ella había dicho que tenía suficiente con tres shinigamis en casa y que ella no quería una vida tan agitada.
Tantas cosas habían pasado y yo me sentía cada día más feliz, ciertamente me había vuelto más femenina, con el único con el que no era delicada era con el viejo (es que se pone tan pesado ¬¬); sin embargo, sentía que a mi felicidad le faltaba algo, bueno, más bien alguien y estaba segura de que nada pasaría entre él y yo, hasta que ese día llegó…
Si bien era cierto, en todo el Sereitei se sabía que había una buena relación entre el Capitán Hitsugaya y la tercera al mando del quinto escuadrón, es decir, yo, todo gracias a aquel día en el que él me salvó y yo sin querer, sin saber, lo había empezado a tratar de una forma totalmente diferente a lo que él estaba acostumbrado y me lo permitió. Sin embargo, con el paso del tiempo, yo comenzaba a sentir algo más, pero me lo tenía bien guardado porque no quería dañar tan bonita relación sabiendo que él me rechazaría.
Esa mañana Ichi-nii se dio cuenta, diablos! ¿De entre todas las personas tenía que ser él?...
- Karin, deberías hablar con Toushiro, si te sigues guardando eso te harás daño.
- Ichi-nii tonto, ¿cómo crees que le puedo decir algo asi? Además, recuerda nuestros rangos y no, no quiero arruinar la amistad que hemos construido durante estos años.
- Simplemente te digo lo que pasaría, no soy nadie para obligarte a actuar de determinada manera en tu vida privada, sabes que te lo digo porque te quiero, eres mi hermana y es mi deber protegerte.
- Ichi-nii… - esas palabras me habían dejado en shock, Rukia-chan si que lo había hecho cambiar!. Me entró ataque de risa – jajajajajajajajajajaj
- Karin, estoy hablando enserio.
- Lo sé Ichi-nii, gracias, aunque… ¿cómo reaccionarías si Toushiro y yo estuviéramos juntos?
- Mmmm, como te dije, no soy nadie para meterme en tu vida privada, igual él es un buen chico, aunque, claro, como te hiciera sufrir un poco, no me importa si tanto él como yo somos capitanes, se las ve conmigo.
- (o.O) Oooooo, uy Ichi-nii cómo has cambiado!
- Ya, no molestes.
- Bueno, gracias Ichi-nii – y salí a iniciar mis tareas en el escuadrón.
Había terminado el entrenamiento de la mañana y me dirigía al despacho de Rukia-chan para entregar mi primer informe del día cuando Hinamori-san (que ahora era la tercera al mando del décimo escuadrón) me informó que me necesitaban en la oficina del capitán Hitsugaya…
- Karin-san.
- Hinamori-san, te he dicho que por favor me llames "Karin-chan", el "-san" me hace sentir incómoda.
- Ay perdón! Karin-chan jejeje. He venido a decirte que el capitán Hitsugaya te necesita en su oficina.
- Oh, bueno, enseguida voy, gracias Hinamori-san.