Amor al primer golpe

Kougyoku caminaba por los pasillos de su secundara sin darle importancia, veía a los demás estudiantes pasar a su lado pero no les prestaba atención, nunca lo hacia su vida en el instituto era muy regular, demasiado regular y ordinaria… rayaba en lo aburrido, pero que más podía pedir… su nivel de inteligencia no superaba al promedio a diferencia de sus hermanos mayores, Koumei y Kouen que ya estaban estudiando en una muy reconocida universidad, muchas de sus compañeras de clase se le burlaban pero ella simplemente las ignoraba increíblemente su medio hermano kouha que también estaba en su clase era de los mejores en su salón, lo cual a veces la enojaba; el no prestaba mucha atención y aun así era de los mejores.

Ella se esforzaba a diario por sacar buenas notas pero debía reconocer que no era una estudiante muy brillante, sus esfuerzos le daban apenas para sacar notas aceptables, admiraba mucho a sus hermanos mayores que a decir verdad también eran medio hermanos, ella era hija ilegítima del hombre que le dio su apellido y solo por eso compartía nombre con ellos, pero aunque su padre había fallecido dejándole una considerable fortuna a ella y su madre, el resto de su familia, los Kou no la aceptaban de hecho no les dirigían la palabra, al menos eso la calmaba, no le agradaba ser ignorada pero pensó que era mejor que ser tratada de una manera humillante.

Vivía sola con su madre, la cual uso parte de su herencia para hacer un negocio propio y no depender más de los Kou, una historia que no quería recordar, bajo los escalones que sin darse cuanta aparecieron frente a ella, para quedar justo enfrente de la tabla de calificaciones, sus notas ni siquiera destacaban, observo los primeros cincuenta lugares, la institución solía premiar a esos primeros puestos, allí y solo allí estaban los mejores estudiantes de todo el plantel, su nombre claro esta no estaba y no tenía esperanzas de estar ahí.

Se acercó a los primeros diez lugares, soñar no cuesta nada pero se imaginó por un momento como sería su vida si ella lograra alguno de esos lugares; en la escuela elemental sus notas eran medio altas, claro está todo era más fácil, pero una vez llego a la escuela media sus notas pasaron a ser una cifra más entre las de sus compañeros, estando por acabar el segundo de sus tres años, ella no quería terminar como una más, quería ser al menos una buena estudiante y llegar a escuela superior y ser de las mejores, apoyo su mano sobre esos primeros diez lugares, el alumno más destacado de toda la escuela era un alumno peor que kouha en cuanto a vagar se refería, Judar, un chico de tercero, lo veía a veces evadiendo clases y aun así cuando llegaba la temporada de exámenes ocupaba el mejor lugar.

Se apartó rápidamente de la hoja con aquellos nombres, recorrió el listado pero no encontró más nombres conocidos, el plantel en si era realmente gigante, una edificación capaz de albergar a más de 800 alumnos, entre básico medio y medio superior, claro está cada nivel de educación separado en diferentes edificaciones, las cuales estaban separas por rejas muy altas, a ella a veces le gustaba acercarse a las rejas de los de nivel superior y observarlos, los uniformes cambian en cada nivel, y le gustaba el de sus superiores. Sonó la campana y dejo de caminar sin rumbo para dirigirse a su casillero tomar algunos de sus apuntes e ir a su última clase del día. Era una clase compartida con los de tercero, la única que compartían.

Siendo una clase extra que ella tomo para mejorar sus notas y por no haber muchos alumnos en esa clase, decidieron unirlos era un refuerzo de ciencias, le gustaba mucho todo ese tema aunque no era muy buena en la práctica; como sea su alegría cuando se inscribió se esfumo al ver quienes más eran sus compañeros, los que estaban allí presentes eran en su mayoría de los primeros cincuenta lugares, exceptuando unos cuantos dé los cuales solo reconoció a cierto chico rubio que también compartía clase con ella; decidió ignorar las seguras buenas notas de aquellos alumnos y se alegró ya que estaba casi segura que con ayuda extra es decir algún tutor enseñándole ella mejoraría

-buenas tardes- entro el profesor de costumbre, llevaba el primer semestre viendo ese refuerzo con el mismo profesor y le alegraba que no lo hubieran cambiado para el segundo trimestre- antes de empezar clases debo hacerles un anuncio- ¿anuncio? Por extraño que le pareció su corazón dio un vuelco, tenía un mal presentimiento- por órdenes del director…- esas palabras comenzaban a asustarle, observo a su alrededor no había nadie más con su expresión todos estaban serios- tendremos dos alumnos más en esta clase, la primera es la señorita Ren Kourin- quedo helada al oír ese nombre, precisamente ella, fuera de sus hermanos mayores tenía una hermana la cual la odiaba y entraba por la puerta de ese salón en ese instante, de tercero- que nos acompañara este trimestre por motivos personales- la observo pero la chica en un tono altivo no dijo nada- y … esta si es una verdadera sorpresa- todos se sorprendieron cuando el profesor dijo eso- Judal- kougyoku casi se levanta de su silla al oír ese nombre, no lo distinguía muy bien pero sabía que una clase extra y más de refuerzo no era para ese chico, al nombrado entro sin muchos ánimos- que está aquí por orden directa…mmm… ¿judal puedo saber el motivo de tu presencia aquí?

-el director me odia- contesto sin dar muchas explicaciones- solo estaré este trimestre

- bien…- fue lo único que el profesor logro decir después de oírlo- bueno jóvenes tomen asiento, busquen lugares- mientras ellos se acomodaban, Kourin al ver a kougyoku le dirigió una sonrisa que claramente decía que la atormentaría por diversión propia, suspiro- para los nuevos mi nombre es Clemens seré su profesor de física este periodo, espero que nos llevemos bien- el profesor no podía ocultar su felicidad, Kourin estaba entre los primero veinte lugares de la educación media, debía ser emocionante enseñar a mentes brillantes, y aunque muchos de los allí presentes también lo eran ninguno estaba entre los primeros puestos, pero su sonrisa era por judal, el primer puesto en esa soñada lista, el cual no encontró otro lugar mejor para ocupar que el que estaba justo al lado de kougyoku.

El apenas se sentó coloco la silla asía atrás y empezó a mecerse en ella, claramente estaba aburrido y las clases ni empezaban, Kogyuku vio su esfuerzo por mejor irse por la ventana justo en la que ella estaba, ocupaba el ultimo asiento al lado de la ventana, ya que no quería que nadie le hablara o se le burlara, pero ahora con un fuerte rival como el que tenía al lado… volvió a suspirar, decidió no rendirse y una vez más vio asía su nuevo compañero que se había colocado audífonos, se enojó por eso ¿Cómo podía tener buenas notas con semejante actitud?

La clase transcurrió normal pero ella no logro concentrarse, su nuevo compañero siempre asía algo que terminaba captando su atención, si no estaba moviendo la silla, estaba "decorando" el escritorio con muchos garabatos o simplemente levantaba un libro para que el profesor no lo viera y poder dormir. Salió furiosa del salón lo odiaba y ni siquiera le había hablado, volvió a suspirar- así que él es judar- continuo su camino a casa, no estaba en ningún club así que no se demoraba en irse, y más ese día que se sentía tan frustrada, le alegro por primera vez desde que se inscribió a ese curso extra el que solo fuera los viernes en la tarde, tendría toda la semana sin tener que verle de nuevo.

Había escuchado ese nombre muchas veces, el plantel se enorgullecía de tenerlo de estudiante por lo que lo enviaban a muchas actividades extras en otros colegios de los cuales siempre regresaba con los primeros puestos, lo había imaginado diferente, como un típico Nerd, es decir de lentes muy gruesos y como un topo, bajo con dientes chuecos y ni siquiera ella sabía porque se los imaginaba así, pero se rio, aunque dejo de reír al recordarlo entrar por esa puerta; un chico alto de cabello largo y oscuro, tenía el típico aspecto de un rebelde y era muy atractivo, volvió a suspirar tenía un largo camino por delante si quería mejorar sus notas, quería que su madre estuviera orgullosa de ella como seguramente lo estaba la madre de Judal.

Llegando a su casa decidió dejar de pensar en él, debía concentrarse en sus estudios, seria de las mejores si o si… y este nuevo semestre debía demostrar todo lo que había estudiado el anterior. Paso el fin de semana sin salir concentrada estudiando, se acercaban las vacaciones de invierno y con ellas las ferias escolares, en la que había una actividad que le gustaba mucho, los proyectos, aunque nunca se había inscrito, tampoco tenía algún nuevo proyecto para inscribirse así que de costumbre solo observaría como los otros años. Pasando el fin de semana regreso a clases feliz y completamente dispuesta a olvidarse de todo lo malo y por malo se refería a la pesadilla de clase el viernes pasado; estando en receso kougyoku caminaba sin un rumbo como de costumbre pero esta vez no sería como siempre, sin saber cómo o de donde sintió un fuerte golpe en su rostro que la envió al piso sin vacilaciones, choco contra el suelo y vio varias gotas de sangre, coloco su mano en su rostro para detenerla, observo aquello que la golpeo y para su sorpresa era un balón

-ups- decía un chico de tercero que se le acerco, -lo siento much…

-deja de disculparte y traer el balón- oyó otra voz detrás, el chico pareció enojarse

-ven tu por el fuiste el que lo golpe muy duro, y mira lo que causaste- kougyoku que observaba el suelo estaba furiosa con esa conversación

-ni que hubiera matado a alguien- la voz del causante resonó en los oídos de la chica, y tuvo un mal presentimiento, levanto el rostro para encontrarse con los ojos rojos de judal que la observaba curioso- vez no la mate- se dirigió al otro que no podía creer su cinismo

-tu…- intento decir pero no pudo, llego una profesora que al ver la escena ordeno a judal llevarla a la enfermería, el después de alegar un rato con ella termino cediendo, levanto de un brazo a kougyoku y comenzó a caminar con ella asía la enfermería; la chica no podía creer su mala suerte, primero su clase extra y ahora la golpeaban, ¿acaso su suerte podría empeorar?

Judal aún le sostenía el brazo, ella quería zafarse pero no supo cómo hacerlo tampoco lo quería de enemigo y menos por algo como eso, aunque el si le debía una disculpa, se sentía extraña, era la primera vez que caminaba al lado de un chico así que se puso nerviosa, sin darse cuenta en que momento, llegaron

-aquí esta- la soltó enfrente de la puerta- la enfermería- se dio la vuelta- adiós

-espera un momento- grito, volvía a estar enojada- ¿no crees que me debes algo?- aún tenía su mano ahora con un pañuelo en su nariz, el medio ladeo la cabeza en dirección a ella con expresión desinteresada

-¿algo?

- si algo

-mmm no nada, no tengo nada tuyo- se volvió a girar

-¡UNA DISCULPA!- grito- fuiste tú el que me golpeo en la cara – esta vez giro completamente así ella

- cierra la boca, si te escuchan pensaran que es cierto

-¿y es que acaso no es cierto?- su semblante se tornaba molesto- con un balón pero me golpeo- kougyoku se sintió intimidada, él se le acerco, ella retrocedió unos pasos pero solo se estrelló con la puerta de la enfermería

- no pienso disculparme- dijo secamente colocando su mano derecha por encima del hombro de ella, apoyándose en la puerta- no es mi culpa que estés en donde nadie te llamo

-e-el pa- patio es de todos- dijo nerviosa, de nuevo era la primera vez que un chico se le acercaba tanto y más uno atractivo y debía reconocer que ese idiota lo era, porque inteligente y todo pero se estaba comportando como un perfecto Idiota

-bien ágamos un trato

-¿trato?

-si trato- se acercó un poco más casi susurrándole al oído- no te me acerques a menos de 20 metros y así evitamos conflictos- kougyoku podía sentir su aroma, era agradable, con esa cercanía muchas emociones comenzaron a invadirla- ¿entendido?- dijo apartándose

-q-que… ¿Qué? Ahora resulta que lo que pasó es mi culpa

-claro- se apartó por completo- es por eso que nunca acepto ninguna invitación- dijo más para sí mismo- mejor no hacer nada- la observo- ahora demuestra ser inteligente y haz caso- se dio la vuelta y empezó a caminar alejándose

-tu…-grito de nuevo saliendo de su estupefacción-¿QUIÉN DEMONIOS TE CREES PARA ORDENARME? – el susodicho ni se inmuto ella solo lo vio desaparecer por el pasillo, se había quitado el pañuelo del rostro de la furia sin darse cuenta, el sangrado se había detenido, observaba ese artículo con furia apretándolo entre sus puños… porque simplemente porque era de judal

Cuando la profesora lo estaba regañando por lo que había causado, el de mala gana saco ese pañuelo y se lo dio, quería evitar llevarla a la enfermería pero no pudo, solo para que la profesora lo dejara en paz termino aceptando; ella no entro en la enfermería, se dirigió asía el baño y allí se lavó la cara, ya había perdido la clase que seguía así que solo se quedó por ahí recorriendo los pasillo, evitando que los profesores la vieron, se sentía extraña evadiendo clases pero no veía sentido ingresar a mitad de una, se recostó contra una pared y recordó la cercanía de judar, no quería pero no podía evitarlo, Suspiro.

Sin saber cómo o porque giro su rostro a otro de los patios del plantel para verlo bajo uno de los arboles allí dormido sin darle importancia a nada; así que una sonrisa maliciosa se dibujó en su rostro, ya que él no se disculpó ella tenía derecho a vengarse, no le rompería la nariz pero si se desquitaría, saco un marcador que casi siempre lleva por si acaso y se le acerco sigilosamente, verifico que estuviera dormido tirando un par de piedritas a su lado, al ver que este no se movió se acercó, inclinándose a su lado saco el marcado y lo destapo acercándolo a su rostro, pero se detuvo… aquellas emociones que la había invadido cuando este se le acerco volvieron, sintió como su rostro se enrojecía, se preguntaba que le pasaba, su mano empezó a temblarle así que la retiro y guardo el marcador, pero no se movió se quedó observándolo… y una vez más suspiro, en verdad es atractivo, pensó.

-me pregunto…-susurro- que clase de chicas te gustan- se inclinó un poco más asía el, el se movió un poco pero no abrió los ojos-judal…- se inclinó un poco más, después de unos segundos se percató que se estaba acercando peligrosamente asía el rostro del chico por lo que se apartó rápidamente colocándose en pie, ¿Por qué estaba ella pensando en eso?, pensó sin dejar de observarlo, desde que recordaba ella no había tenido novio y siempre evadía el tema, era muy enamoradiza pero casi nunca correspondía, además quería que su primer novio fuera alguien especial, quizás pedía mucho, volviendo a suspirar se sentó de nuevo a su lado

-el mejor alumno de todos- dijo en voz baja- no, es imposible que te fijes en mí, seguramente con tu aspecto y tus notas debes tener a muchas detrás de ti- suspiro una vez más- así que…- una loca idea se cruzó por su mente, no podía perder nada así que decidió hacerlo, le robaría un beso, al menos quería poder presumir que beso a alguien popular, además conociéndose sabía que él le gustaba, desde que lo vio.

Tímida pero decidida se inclinó una vez más asía el, nunca antes había besado así que estaba nerviosa pero sabía que esa oportunidad era única, después lo ignoraría como él dijo, aunque los viernes en la tarde le sería imposible evitarlo, pero… no importaba estaba cansada de permanecer siempre al margen, así que se fue acercando a el poco a poco y justo cuando lo tenía a escasos centímetros sonó el timbre para cambiar de clase, se quedó estática, quiso desaparecer pero no se pudo mover, rogaba que judal no despertara, él se volvió a mover y comenzó a desperezarse pero no abrió los ojos, luego se quedó quito, ella sintió alivio y juro que nunca más aria caso a sus impulsos quiso apartarse pero cuando se dio cuenta su rostro estaba unido al del chico en un beso.

Pasaron unos segundos así antes de comprender que había pasado, judal abrió los ojos para encontrarse con los de ella, la cual se aparto rápidamente y salió corriendo lo más rápido que pudo, entro al baño y encerrándose en uno de estos se desvaneció contra la puerta colocando su cabeza entre las piernas, aún no podía creer lo que paso, un beso… lo había pensado pero sabía que nunca será capaz de hacerlo, todo fue porque judal se levantó sin que ella se diera cuenta y con lo cerca que estaba pues terminaron besándose, se llevó los dedos a los labios, esa sensación fue cálida… al instante se sacudió la cabeza y comenzó a golpear las paredes, definitivamente no sabía que hacer a partir de ahí

Quería que la tierra se la tragara, pero no podía recordando el cambio de clase salió rápido del baño y se dirigió a esta rogando por no encorárselo de nuevo, aunque sabía que al acabar la semana tendría que verle de nuevo pero ya inventaría algo, esperaba que el la olvidara en esos días, se detuvo frente al salón- quizás si estoy pidiendo demasiado- susurro y luego entro

Al pasar los días el temido vienes en la tarde al fin llego, Kougyoku dudo en entrar a esa clase pero si quería mejorar notas no debía fallar, así que respirando hondo entro, ya le inventaría algo a Judal por si el preguntaba; como siempre era la primera en llegar después de ella sus compañeros fueron llegando poco a poco, no eran más de veinte en el salón, de ultimas llego Judal en compañía del director, claramente lo obligo a entrar, les dedico a todos una sonrisa y se fue

Judal comenzó a caminar asía su asiento, kougyoku sentía que su corazón comenzaba a palpitar más y más fuerte a cada paso que el daba, pero para su tranquilidad Judal solo se acomodó a su lado sin darle importancia, al parecer su deseo se había cumplido, aunque reconocía que tenía la leve esperanza de que no fuera así, suspiro de nuevo y comenzó a ver por la ventana

-oye-escucho per supuso que no era con ella así que siguió viendo a la nada- oye… volvieron a hablar, también reconoció la voz era de él, separo la vista de la ventana y se quedó observando asía el frente fingiendo que no era con ella. –Oye- la voz de Judal sonaba molesta así que decidió mirarlo, en efecto el la observaba así que si la estaba llamando

-¿q-que?- intento sonar casual

-¿Cómo qué?- definitivamente estaba molesto, kougyoku sintió que su corazón volvía a acelerase- ¿acaso estas sorda?

- no, pero no pensé que me llamara- intento tratarlo distantemente, y volvió su mirada a sus cuadernos-¿Qué quiere?

-en realidad nada- dijo, ella volvió a fijarse en el

-¿entonces porque me habla?

- estoy aburrido y quería saber si…- se detuvo la observo y prosiguió- nada olvídalo- ella no supo qué hacer ante su actitud asique simplemente lo ignoro

-¿eres tú?- volvió a hablar

-¿soy qué?-contesto secamente, estaba molesta

- la del otro día- kougyoku sintió el tiempo a su alrededor detenerse, entonces el si lo recordaba

-¿de qué habla?

-de lo que paso el lunes más o menos

-l-lunes…

-si...lunes

-mmm no sé de qué me habla- abrió uno de sus libros fingiendo interés

- bien entonces no importa- se recostó en su escritorio

- si habla- se apresuró a decir ella, un quería su disculpa- habla del incidente del balón si fui yo- él se giró asía ella- y aun espero una disculpa- él se rio- ¿qué?

- si no me disculpe en ese momento no lo are ahora- ella se volvió a enojar

- bien como guste- apretaba los dientes- espero que nunca llegue a necesitar algo de mi…

-deja de hablar así- interrumpió- parece que no nos hubiéramos besado- dijo sin dar mucha importancia mientras la observaba aun recostado en su escritorio, kougyoku quedo de piedra

- no… no se…mmm… ¿cu-cual beso?

- tu sabes cual, pero si te quieres hacer la desentendida bien- se cubrió la cabeza con el saco que se había quitado

Kougyoku quería decir algo pero no supo que, no se esperaba eso… se arrepintió de sus locos impulsos y ahora debía afrontar su suerte.

Continuara….