KIDO
PROLOGO
Una sombra se movía entre los árboles a gran velocidad, parecia cansado por una larga marcha pero no disminuía en ningún momento el paso. Tenia el pelo negro peinado de forma que recordaba a una cacatúa, ojos negros, llevaba un kimono violáceo muy típico de la aldea oculta del país del fuego.
Ninjas de Konoha le perseguían, los temidos ninjas de Konoha. Todas las restantes villas temblaban al oír su nombre, la gente la pedía misiones para que esta no hiciese avanzadillas para asesinar a la gente de las aldeas. Pero el nombre mas temido era sin duda el de Yondaime Hokage, Orochimaru.
La sombra buscaba desesperadamente un lugar donde esconderse para poder ir seguro hasta su próximo objetivo, el campamento de caravanas negro noche que se asentaba no muy lejos de su posición. Después de mucho esfuerzo, había descubierto la verdad del pequeño grupo y también encontrado al fin su vía de escape.
Esta cayo al suelo, cuando el símbolo que llevaba en el cuello empezó a escocerle. Se quedo detrás de un arbusto, con un chakra mínimo debido a que había gastado gran parte de este en aumentar su velocidad. Noto como sus perseguidores se paraban, todo mientras controlaba un grito de dolor.
- Le hemos perdido, es inútil seguir buscando si su chakra esta tan bajo como diría que esta, seria imposible detectarle. Vamonos, Arche –Dijo una voz femenina proveniente de una chica de largo pelo negro que hace unos momentos perseguía al chico-.
- Si, Kuro –Dijo la supuesta Arche, una chica pálida de cabello castaño a su compañera-.
Después de aquello, Kuro y Arche desparecieron en dirección a su aldea. El chico tembló al darse cuenta de que Orochimaru había enviado a dos de las mejores ninjas de Konoha a por el. Después de eso ando con cuidado, hasta que por fin, ya llegando el amanecer diviso las negras sombras del campamento de Kido, un grupo de feriantes con mas de un secreto.
Akai salía de una de las caravanas pintadas de color negro del grupo de feriantes Kido. La fogata que el día anterior había ardido en medio del campamento actualmente solo era un montón de leños quemados y ceniza, el cielo todavía no aclaraba, hoy tenían que llegar a la próxima aldea y habían acordado despertarse a una hora inhumana. Estaba colocándose la tela color arena sobre su pelo de color rubio de forma que lo tapase sin deshacerse y un poco de esta cayese por la espalda hasta poco mas del hombro. Se ato la cinta blanco hueso ciñendo la chaqueta del mismo color de la tela por la cintura, con unos pantalones levemente bombachos del mismo color que la cinta y unas sandalias de madera.
Por mucho que prefiriese el color naranja, era obligado a llevar ese traje en Kido, al igual que todos sus miembros. Mientras se lavaba la cara en un cubo previamente llenado con ese fin, observo en su reflejo los ojos azules y sus característicos tres bigotitos en cada mejilla antes de colocarse aquella capa que tenia un cuello que perfectamente servia de bufanda y realmente recordaba a una, la cual escondía parte de su cara para un mejor camuflaje.
Se dirigió inmediatamente a su caravana para despertarlos a todos, siempre le tocaba a dos, un chico y una chica, despertar al resto de las caravanas y ese era su turno. Avanzo con pesadez hacia su caravana mientras veía como Chie, una hermosa chica de ojos verdes y cabello rosa del que asomaban dos mechones por debajo de la tela del mismo color arena y llevando el mismo traje que el, se lavaba para ir inmediatamente a despertar a las chicas.
-¡Hola, Chie-chan! –Dijo el rubio alegremente a la chica-
-Hola, Akai. Venga, ve a despertar a todos, que ya sabes que algunos chicos, como Kage, son demasiado complicados de despertar –Respondió la chica con una leve sonrisa y con una voz autoritaria en su ultima frase-.
-je je, con suerte estará despierto quejándose de lo problemática que es la vida –Después de soltar eso entro en su caravana para observar la escena-.
Dos literas de dos camas se veían, cada una personalizada como el usuario quería, por lo demas no habia mucho mas, dos arcones bajo la litera inferior a cada lado y las paredes eran de un blanco inmaculado. Akai se apoyo en su cama naranja chillón para ascender a que había arriba, de color azul y con dibujos de nubecitas. Observo como curiosamente su predicción se había echo realidad, Kage estaba despierto y categorizando de problemático y rollo a todo lo que se le podía ocurrir. Tenia unos ojos negros pequeños, y el pelo negro, largo y que contradicciendo las leyes de la gravedad, solia llevar colocado en una coleta que se quedaba misteriosamente de punta.
-¡Te pille! –Dijo el rubio mientras sonreía infantilmente- Ahora no podrás negarte a salir de la cama.
Seguidamente fue a la cama inferior del otro lado, que era marron, en la que un chico de curiosas marchas puntiagudas rojas con un gigantesco perro blanco durmiendo cerca de la cama dormía apacible, acaricio a Garu mientras miraba divertido a Inu, su cara durmiendo merecía ser recordada. Después miro hacia arriba para comprobar que otra vez Suna no había dormido en su cama de color rojo, como solía ser costumbre del chico pelirrojo. Después de despertar a gritos a Inu y sacar a tirones de la cama a Kage, Akai salió para proseguir su transito por las caravanas. Fue entonces, con el negro del cielo transformándose en azul, cuando vio a aquel chico de pelo negro caer desfallecido frente al campamento.
Chie y el se dirigieron corriendo hacia el chico, cuyas apariencias mostraban que era un ninja de Konoha. Con recelo lo ataron y lo llevaron a la caravana vacía que siempre había para sucesos que se estilasen. Rápidamente se encargaron de despertar al resto y avisar de la presencia indeseada en la ultima caravana.
Todos los chicos mas jóvenes en mutuo acuerdo, mientras los adultos se preparaban para partir, se presentaron alli para hablar con el chico. Todos asegurándose de taparse bien con la capa y algunos de ocultar su pelo bajo la tela. Los ojos de este se abrieron y vio a los aproximadamente doce muchachos y muchachas que le observaban con gravedad.
-¿Qué pretendes? –dijo Mirai, cuyo cabello castaño oscuro caía por su espalda y sus ojos grises miraban con frialdad al extraño, aunque mas de uno sospechaba que ese no era su color de ojos natural.
-Quiero unirme a vosotros, se quienes sois –dijo el muchacho con frialdad mientras miraba asesino a todos los presentes-.
-¿Por qué deberíamos aceptarte? ¿Cómo sabemos que no eres un espía de Orochimaru para descubrir las identidades de los que están aquí? A muchos de nosotros nos busca para matarnos y lo sabes perfectamente si de verdad conoces el propósito de este grupo – Intervino de nuevo Mirai, no quitando los ojos de encima del que tenia enfrente-.
-Vengo por esa razón. Quiero escapar de Orochimaru, así que soy uno mas, concuerdo con vuestros requisitos de entrada: Ser buscado por Orochimaru o por Akatsuki, pero no por nada bueno. Querrá venganza por mi escapada –dijo con seguridad-.
-Muy bien, te dejaremos estar. Pero debido a las condiciones en las que has aparecido nos vemos obligados a tenerte vigilado de cerca, ten la ropa. Y elige tu nombre para mañana, hoy estarás encerrado aquí –Hana hablo con la máxima indiferencia que pudo, pues es sus ojos azules se podía ver que estaba histérica por el nuevo chico y que este ya tenia una acosadora. Una mirada parecida se podía observar en Chie. Los chicos cerraron la puerta, permitiendo al nuevo colocarse las ropas típicas de Kido con una sonrisa de triunfo. Las ropas que llevo hasta ese momento fueron quemadas pocas horas después bajo la mano de los restantes feriantes, aunque realmente de feriantes solo tenían el nombre.
Continuara...
Bienvenidos a Kido, un fanfic por ahora confuso, opero prometo que en el próximo capitulo se aclara. Respecto a las dos ninjas del principio, no son anda importante, simplemente quizá aparezcan muy de vez en cuando para dar algún toque de humor o porque sea necesario poner a ninjas. Tienen su origen en una historia de una amiga y mía, estas por diversas razones acabaron del lado de Orochimaru con Sasuke, así que ahí deben estar.
Cualquier cosa que quieran decirme en los rewiev sin cortarse ni un pelo, como si quieren asesinarme por poner un fic tan malo. Acepto rewievs anónimos así que esos fantasmas que se que existen y no dejan rewiev pueden dejar su granito de arena a que la autora sea feliz.
