Disclaimer: Boku Wa Imōuto Ni Koi o Soru y sus personajes son propiedad de Kotomi Aoki.

Nota: Se sitúa en la partida de Yori.


Lazos

¿Por qué no pudiste ser la vecina? La chica de la panadería. La chica de la tienda. Otra chica simplemente. ¿Por qué tuviste que ser mi hermana? Mi hermosa hermana. Mi querida e inocente Iku.

Eras tú, fuiste tú, siempre eres tú.

Te vi de niña, te vi crecer, te vi ser.

Te descubrí como mujer.

Tus ojos vidriosos hacen que mi pecho arda. Pero tengo que irme, tengo que hacer esto. Te he corrompido tanto, te he arrebatado tanto. Tengo que parar, Iku. Tengo que.

No pudimos contra ello. Sucumbimos a ese anhelante sentimiento que nos acechaba.

Nuestros besos y caricias. No podré borrarlas de mi mente, de mí. Ni siquiera podré intentarlo, lo sé. Por eso me alejo. Por eso me voy.

Tus mejillas estaban sonrosadas, tu corazón latía al mismo ritmo que el mío, nuestros alientos se entremezclaban. Y tú, tan tierna, dulce y preciosa. Tan suave y pequeña. Y ahí, en ese momento, supe sin ninguna duda de que ambos éramos la perdición del otro, y tan irónico y malditamente paradójico, la vida y la felicidad también.

Ese momento en que tomé tu virginidad y al mismo tiempo tu corazón.

Deseo, amor.

Y luego otra vez, otra vez, otra vez y otra vez. Aún te llevo impregnada en mí, así como tú todavía lo estás de mí.

¿Por qué tuvimos que tener los mismo padres?

Malditos lazos consanguíneos. Maldita sociedad, maldición...

Voy hacia ti, a actuar ante mis padres con este «abrazo fraternal» que no es otro más que una despedida de amantes. Dos que no pueden juntos estar, pero que sin embargo se pueden amar. Pero yo te amo como mujer, no como mi hermana. Y al carajo todo porque así fue, así es, así será.

Nos rodeamos con todo lo que podemos y me gustaría poder sostenerte así por siempre. Cómo me gustaría.

Finalmente arribo el tren y me llevo tu corazón conmigo mientras que tú te quedas con el mío.


FIN


Muchas gracias por leer.

Saluda,

Gene.