Todos los personajes de este fic no me pertenecen, pertenecen a la reina de los vampiros Stephenie Meyer.
En este fic voy a narrar pequeños momentos de la vida de Alice, muchos serán con Jasper y otros no. XD
Espero que os guste. Acepto toda clase de críticas constructivas para mejorar.
No tienes razón, y lo sabes.
Es que no puede ser que no le entre en la cabeza. Él sabrá lo que hace… aunque para mí es muy duro. No creo que sea una buena idea, ya se lo he dicho. Esto acabará por destruirlos a ambos, tarde o temprano o mejor dicho más tarde que temprano. No necesitaba ninguna visión para saberlo. Los conocía muy bien a los dos.
En ese momento, sentada en las escaleras de la que había sido mi casa durante cuatro años, recordé demasiadas cosas.
Todo se había salido de madre. No es que Jazz no tuviera parte de culpa… eso no lo podía negar… pero básicamente la culpa había sido mía por no verlo venir. Si lo hubiera visto… lo podría haber evitado. No, no es que yo tuviera parte de culpa, tenía toda la culpa. Si no hubiera empeñado en celebrar una fiesta… nada de esto hubiera pasado.
Volví atrás en el tiempo, a la fatídica fiesta de cumpleaños un minuto antes de que ocurriera todo, cerré los ojos con fuerza como si eso pudiera borrar lo sucedido:
-Abre ahora el de Edward y el mío- le dije a Bella con voz excitada, mientras le acercaba un paquete pequeño cuadrado y plano. En ese momento me sentía muy feliz, ya que sabía que le encantaría-
Se volvió hacia mi hermano y le dijo:
-Lo prometiste.- mientras lo fulminaba con la mirada-
Antes de que Edward pudiera contestar llegó Emmett y dijo:
-¡Justo a tiempo!- y se colocó al lado de mi Jazz-
-No me he gastado ni un centavo- le aseguró mi hermano a Bella-
Con expresión resignada se volvió hacia mí.
-Dámelo- me pidió y yo se lo di sin esperar ni medio segundo-
En ese momento fue cuando empezó la catástrofe, lo que se me pasó por alto, lo que no perdonaría nunca…
-¡Maldita sea!-dijo mi mejor amiga mientras alzaba el dedo que se había cortado con el papel. No hacía falta que nos enseñara el corte, todos habíamos olido la sangre, aunque una sola gota era soportable… o al menos pensé entonces…-
Todo pasó muy rápido, incluso para un vampiro. Jasper se abalanzó sobre Bella y menos mal que Edward estaba allí para empujarla… entonces Jazz chocó contra Edward y Emmett pudo agarrarlo y pararle los pies a mi marido.
Ahí estaba mi mejor amiga tirada en suelo y sangrando, ahora sí, mucho.
Menos mal que Carlisle conservó la calma, ya estaba en shock. Así que ordenó a Emmett y Rose que se llevaran a Jasper del salón. Emmett estaba muy serio y arrastró a mi marido fuera.
-Vamos, Jasper.- le dijo sin dejar de sujetarlo con todas sus fuerzas-
Después de que salieran Emmett tirando de Jasper y Rose empujándolos por la puerta. Esme también tuvo que marcharse.
-Lo siento tanto, Bella- se disculpó y también se marchó-
-Deja que me acerque Edward- dijo Carlisle, se arrodilló al lado de mi mejor amiga para examinarla-
-Toma, Carlisle- le tendí una toalla para que envolviera la herida del brazo de Bella-
-Hay demasiados cristales dentro de la herida- dijo Carlisle-
Desgarró una tira larga y estrecha del mantel y le enrolló el brazo con ella.
-Bella ¿quieres que te lleve al hospital, o te curo aquí mismo?- le preguntó el doctor-
-Aquí, por favor- le contestó ella-
-¿Cómo te encuentras, Bella?
-Estoy bien- afirmó con voz firme, aunque se estaba poniendo verde por minutos. Era una de esas contradicciones de mi mejor amiga… quería convertirse en un vampiro y le aterrorizaba la sangre-
Me moví rápidamente hacia el despacho de Carlisle y le traje el maletín con todo lo necesario para curar a Bella en casa.
-Sal, Edward- suspiró Bella, sabiendo que olor de su sangre atraía a mi hermano más que a ninguno de nosotros-
-Puedo soportarlo- insistió él, aunque estaba muy tenso, como todos nosotros-
-No tienes que comportarte como un héroe. Carlisle puede curarme sin tu ayuda. Sal a tomar un poco el aire- le pidió ella-
-Me quedaré- dijo mi hermano-
-¿Por qué eres tan masoquista?- masculló Bella-
-Edward, quizás deberías ir a buscar a Jasper antes de que la cosa vaya a más. Estoy seguro de que se sentirá fatal y dudo que esté dispuesto a escuchar a ningún otro que no seas tú en estos momentos- repuso Carlisle-
-Sí- añadió Bella- Ve a buscar a Jasper.
-De ese modo, harías algo útil- añadí yo para reforzar lo que habían dicho-
Edward salió del cuarto.
El olor a sangre empezaba a inundar toda la estancia. Intenté aguantar todo lo que pude mientras Carlisle la curaba, pero al cabo de pocos minutos me rendí. El olor de su sangre estaba por todas partes. Aún estaba bajo control pero no sabía cuando tiempo tardaría en perderlo. Así que esbocé una sonrisa de disculpa y salí antes de que la situación empeorara.
Busqué a los otros. Todos estaban en el jardín aunque a una distancia de seguridad de la casa. Emmett había soltado a Jasper y Edward parecía muy martirizado, aunque no miraba con odio a mi marido.
Me acerqué a ellos y Jazz me abrazó.
-Lo siento, mucho. Yo no quería, de verdad que no, Alice. Soy un ser despreciable, intentar hacerle eso… a tu mejor amiga y a la novia de mi hermano.- dijo Jasper con pesadumbre- No merezco ni que me mires a la cara. Soy el ser más despreciable de todo el universo. Te prometo que jamás me volveré a acercar a ella. Os lo prometo a los dos.
-Tranquilízate, Jazz. Ya ha pasado, yo opino que a mí no me debes ninguna disculpa. Se la debes a Edward y sobre todo a Bella. – le dije, en aquel momento me parecía que no había que echarle más leña al fuego- Con que no vuelva a suceder, ya está. Has de controlarte. Por Edward, por ella y sobre todo por mí.
-Me marcharé ahora mismo, no merezco vuestro perdón- me dijo mi marido-
-Jasper tú no te vas a ninguna parte sin mí. – le dije haciendo destacar cada sílaba- Ytú y yo pertenecemos a esta familia.
-Claro que sí- dijo Esme- Esto ha sido un accidente. Sólo tienes que comprometerte a que no volverá a pasar.
-No me volveré a acercar a Bella, os lo prometo- dijo Jazz-
En ese momento Edward volvió a entrar en casa y yo me llevé a Jazz al bosque para que cazara.
Después de rememorar esto me vino a la mente el siguiente acontecimiento que precipitó las cosas. La discusión con Edward aún retumbaba en mi cabeza. Él había reunido a toda la familia para explicarnos su decisión de dejar a Bella.
-Edward, lo estás a punto de hacer no saldrá bien.-le había gritado yo, en ese momento era la única que se resistía a dejar atrás a Bella-
-Tengo que hacerlo es lo mejor para ella. No puedo ponerla en peligro todo el tiempo, si le pasara algo…-se estremeció sin poder acabar la frase-
-Edward, ha sido un accidente. Sé que Jazz no tiene excusa y créeme cuando te digo que está muy arrepentido. – Jasper asintió para reforzar mis palabras. El pobrecito mío se sentía tan mal. Sabía perfectamente cuanto quería yo a Bella y lo mucho que significaba para mí- No creo que vuelva a pasar jamás. Te prometo que estaré más atenta cuando Jasper y Bella estén en la misma habitación.- le dije intentando persuadirlo en vano-
-Alice, no es eso. Es que Jasper sólo ha precipitado algo que en algún momento sucedería. Además tú no lo entiendes.
-¿Qué no lo entiendo? Bella es mi mejor amiga, en realidad la única amiga que he tenido en toda mi existencia. Créeme cuando te digo que la quiero muchísimo y que haría cualquier cosa para ponerla a salvo. Pero lo que te propones no va a funcionar, tarde o temprano hará alguna tontería y entonces ya no habrá marcha atrás.- de ese estaba segura, la conocía demasiado bien, tarde o temprano haría alguna locura para recuperar a mi hermano-
-¿y tú que sabes? No has visto que ella haga ninguna tontería.- me espetó con ira-
-No lo he visto, pero la conozco. En algún momento se pondrá en peligro. Sin ti no va a querer continuar- le respondí con voz apagada-
-El único peligro que existe aquí para ella somos nosotros, Alice. No hay nada más que le pueda hacer daño. Además tarde o temprano lo superará.
-¿Y qué hay de ti Edward? ¿Qué pasará contigo cuando la dejes? No lo soportarás.- le dije, sabiendo perfectamente que estaba a punto de dejar al amor de su existencia. Si yo tuviera que dejar a Jazz, no creo que pudiera… soy demasiado egoísta para perderle-
-Lo soportaré, será duro pero Bella se merece la oportunidad de ser feliz y sobretodo se merece estar a salvo.
-Edward, puedo ver que lo has decidido. Solo te digo dos cosas más. Primera estoy totalmente en contra de lo que vas a hacer y segunda no saldrá bien. Sólo espero que no tengas que arrepentirte.- le dije, ya que no había manera de convencerlo- Al menos déjame despedirme de ella.
-No, Alice. Lo mejor será que no te vea. Una ruptura limpia le será más fácil de superar.- me dijo Edward-
-No estoy de acuerdo. Yo la quiero y quiero despedirme de ella. No me puedes quitar ese derecho-
-No, Alice. Cuando te digo que no, es que no. Tú harías lo imposible para mantener el contacto con ella y eso le haría aún más daño.- me dijo él, y la verdad es que ahí me había pillado- Tiene que ser lo más limpio posible, le ahorraré todo el sufrimiento que pueda.
