Hola, gracias por entrar a leer~

Disclaimer: los personajes no son de mi propiedad, solo la historia es mía.

Advertencias: posible yaoi (?

Disfruten~


No es una sorpresa saber qué está roto, no es una sorpresa en absoluto. Era un suicida potencial y lo sabía. Karamatsu sabe que algo está mal con él desde hace mucho tiempo. No es que quiera llamar la atención, no tiene nada que ver con eso.

Una vez intentó coquetear con una chica, ella lucía inteligente, tenía una mirada audaz. Ella fue diferente, ella lo vio a los ojos y en vez de despreciarlo le dijo con suavidad "Si necesitas mi ayuda aquí está mi tarjeta". La mujer desapareció de su vista aun luciendo preocupada, la tarjeta decía psicóloga. Él no la llamó, no podía hacerlo, el solo contenido de ese papel le borraba el intento de sonrisa en el rostro.

Tal vez lo peor de todo eso es que no boto la tarjeta porque era el recuerdo de que alguien se había preocupado por él. Así de patético. Estaba llegando a su límite... lo sabía, el reloj marcaba las 2 y algo de la madrugada, pero él estaba fumando en el tejado. Lo único que lo detiene de saltar, son sus hermanos porque quiere creer que les dolerá, también sus padres sufrirían. Esa es la esperanza, una muy insana.

El humo abandona sus labios, juguetea un poco con el cigarro. Sus ojos siguen pintados en rojo, las noches de desvelo y las lágrimas calladas son lo que lo tienen así, luciendo como un despojo. Karamatsu muchas veces cree que es guapo porque son sextillizos y todos tienen el mismo rostro, para él sus hermanos son guapos y por ende él también debe serlo. Algo de ceniza del cigarro le cae sobre un pie, pero no siente nada, solo se queda observando como el rojo pasa a un gris.

Se siente estúpido por las emociones que tiene dentro de él, hay personas que están peor y continúan adelante; sin embargo, la idea de desaparecer para olvidar es tan atrayente. Le quema el corazón. Es casi como el susurro de un demonio, así de dulce y siniestro.

Hay días y noches enteras en que piensa en alguna cuchilla perforando alguna arteria. En cuerdas alrededor de su cuello, en algo roto que no pueda arreglarse. Las cosas se vuelven más inestables y perturbadoras, tanto que él mismo se asusta de la satisfacción que recorre su cuerpo al pensar que ellos sufran. Tal vez... después de eso se den cuenta de todo lo que dolía... Ellos son más dolorosos que él.

El cigarro sigue gastándose y eso le recuerda un poco a él.

En conclusión, Karamatsu es un cigarro fumado a las dos de la madrugada, uno que se apaga por las lágrimas que ya no puede contener más.

Hay un perro que ladra en la lejanía y también hay sollozos que son silenciados por una palma fría. También hay muchos espasmos que sacuden de manera inestable el cuerpo del chico.

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Suzuki observa el espectáculo desde la lejanía.


Gracias por haber leído, aunque sé que no tiene mucho sentido. Solo tengo insomnio y quería escribir algo. Suzuki no es un personaje creado por mí sino que es un personaje de un juego, si adivinan de cuál les doy un premio (? Puse posible yaoi porque no sé si solo los dejaré de amigos, well muchas gracias por haber leído... si alguien lo hizo (?

Nanami off~