- Sinbad x OC

No sabía cuántos años llevaba allí encerrada, Selessie miraba con los ojos casi ciegos la poca luz que entraba en su celda, los años de entrenamiento, la magia que circulaba en su cuerpo, todo eso y más, ya no eran más que fantasmas o ilusiones de una vida que ya no sentía como propia. La ira la hacía reírse a carcajadas de la nada en las noches, sus captores a veces sentían miedo de lo que ella sería capaz de hacerles si es que lograba salir, pero su captor era un mago bastante poderoso, y ella significaba todo un espécimen de investigación.

Los días, las estaciones, los años, eran para ella, pruebas de dolor, tensión, resistencia, fuerza, etc. La sometían a pruebas que para ojos de cualquiera, sólo eran constantes torturas, la electrificaban, la llenaban de agujas en todo su cuerpo, le quemaban la piel, le absorbían el magoi, eran tantas cosas que ya no tenía ganas de vivir ,sin embargo, la ira en su interior la mantuvo de pie, y el recuerdo... el recuerdo de que alguna vez había sido liberada.

Así es, cuando era apenas una niña de 8 años, fue escogida para ser esclava de Madaura , quien al final fue destituida por un chiquillo llamado Sinbad . Selessie si tenía donde volver, así que simplemente se alejó del grupo de niños, sintiéndose infinitamente agradecida de Sinbad, sin embargo, luego de tres años sus padres murieron, y la joven tuvo que vagar para poder sobrevivir, aprendió la manipulación de magoi, y algo de magia, pero todo eso no importó cuando llegó al imperio Kou. A sus 17 años fue capturada, y utilizada como sujeto de pruebas, le decían que era especial, que tenía algo diferente a los demás, y desde ese momento Selessie no pudo ver más la luz del sol vibrar sobre sus ojos.

¿? - He notado algo extraño en su flujo de Rukh...

¿? - ¿Qué cosa has notado?

¿? - Creo que es imposible... Pero creo que ha caído...

- Uno de los sujetos sonrío y se dio vuelta hacia la celda - De todas formas, ya no hay nada más que hacerle, ya no sirve ni para carne impura, aparte con las nuevas leyes de la Alianza de los siete mares... - El sujeto chistó - Tendré que liberarla, seguramente...Morirá.

El hombre abrió la celda de Selessie , esta se encontraba tirada en el suelo, en su mente lo único que anhelaba era la muerte, la cargaron y la llevaron lejos, porque ella simplemente perdió la conciencia.

¿? - Quien será está niña... - Pensó el anciano - Está en muy mal estado, Ey Yoren , ayúdame a cargarla.

Yoren - Pero padre...¿A dónde la llevaremos?

Gabriel - A Sindria, a nuestro hogar, seguramente allí , podrá encontrar un lugar donde vivir, trabajo y tranquilidad, al igual que nosotros.

Yoren - El chico cargo a la muchacha en sus brazos, y le sonrió a su padre, él sabía que este era un tipo de buen corazón, y él se sentía agradecido que así fuese , jamás le había faltado nada, y todo se lo debía a su padre y a Sindria. Así que sin duda, tenía que ayudar a esta desconocida.

Selessie se sentía algo mareada, sus ojos se entreabrieron lentamente, dejando entrar algo de luz que no veía hace mucho tiempo, miró hacia la derecha y la luz del sol le lastimó un poco la vista, pero derepente en su corazón algo se encendió poderosamente. Esta se levantó, y a tras pies casi cayendo al piso, vio por lo que parecía la ventana de una casa , la abrió y sus ojos no lo podían creer, estos ardían un poco y las lágrimas comenzaron a nacer de ellos, los colores...la cantidad exagerada de gente, los olores, todo era un éxtasis para sus sentidos, miró sus manos maltratadas y las llevo a su rostro emocionada. La chica cerró sus ojos y calmo sus emociones, inhalo por primera vez en mucho tiempo el aire puro del exterior, cuando escucho unos golpecitos en la puerta, esta se hincó donde estaba la cama para ocultarse, el joven de cabello castaño, ojos verdes y contextura delgada tan sólo rió al verla.

Yuren - Tranquila, no tienes que temer. - Este venía con una bandeja y algo de comida y agua - Nosotros te rescatamos de donde estabas tirada, has dormido por tres días, mi nombre es Yuren y...

Selessie - ¿Qué? ¿Dónde me encontraron? ¿En Kou? ¿Qué paso con mis captores? ... - Algo atemorizada miraba hacia todas partes mientras sudaba frío, su mirada se nublo un poco y Yuren notó la dificultad que tenía.

Yuren - Tranquila en serio, deberías sentarte en la cama, no sé por lo que has pasado, pero te aseguro que no podrías estar en un lugar mejor que este.

Selessie tomó el cuenta el comentario de Yuren, y se sentó en la cama tapándose hasta la mitad del cuerpo con unas sabanas, miró su atuendo, era aún el vestido blanco harapiento que le habían dado sus captores. Yuren le dejó la comida a un lado y le sonrió amablemente.

Yuren - Come ,no tengas miedo.

La chica prosiguió a comer lo que le habían traído amablemente, al primer bocado no pudo contenerse, comenzó a devorar lo que tenía en frente, no tardo mucho, y al hacerlo bebió agua desesperadamente para luego limpiarse la boca con lágrimas en su rostro.

Selessie - Lo siento yo... hace mucho tiempo no comía algo decente...

Yuren - No te preocupes, no tengo porque juzgarte, disculpa, ¿Cuál es tu nombre? - Yuren se sentó en una silla de la habitación. -

Selessie - Mi nombre es Selessie... - Al momento de pronunciar su propio nombre, la chica miro por la ventana, un grupo de personas venía pasando y se escuchan los murmullos de otras, algunos hacían reverencias , algunos no la dejaban ver...pero ella pudo ver realmente quien venía caminando imponentemente. - Sin...bad. - Dijo la chica.

Yuren se sorprendió al oírla nombrar el nombre del antes proclamado Rey de Sindria y quiso preguntar.

Yuren - ¿Conoces a Sinbad-sama?

Selessie - Impactada por lo que había visto se demoró en responder- Tal vez...