Un Agujero en la Noche
~*~*~*~*~*~*~*~
Disclaimer: Satoshi Hiwatari y Daisuke Niwa no me pertenecen, así como el verso final es de mi poeta favorita.
Notas de la Autora: Bueno, ejem... No tenía en mente hacer este fic, pero ayer por la noche, mientras leía poemas de Alejandra Pizarnik, me dije a mí misma: o lo escribo o exploto. Escogí escribir ^^... No es la gran cosa, pero como expliqué, necesitaba hacerlo.
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Un Agujero en la Noche
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Satoshi se sentó en el alfeizar de la ventana, dejando que sus ojos recorriesen las múltiples y melancólicas luces de la ciudad. Todo estaba tan oscuro, sin embargo. La luna le daba de lleno en su rostro, obsequiándole a su habitual palidez un aspecto lechoso, una imagen de ensueño. Todo estaba tan oscuro, sin embargo. Él mismo, sí, era él mismo el que desparramaba aquellas moribundas sombras por cada rincón de la habitación, era él incluso el que mantenía su propia alma dormida, su mirada azul apagada.
Ya estaba levantándose, desabrochando su camisa para ponerse el pijama, planeando (por quinta, sexta ocasión) lo que haría en el siguiente día, cuando algo llamó su atención y le retuvo un momento más en ese mundo lejano. Había una mancha roja; no, no una mancha, sino una cabellera alborotada, sí, la cabellera de un muchacho que, ahora se daba cuenta, él conocía bien.
Se asomó aún más a la ventana, quizás inconscientemente, pero notando, no sin una notable tristeza, que toda su vida giraba alrededor de aquel jovencito, aquél que ahora se veía tan indefenso, tiritando por el frío, y, no obstante, como encendido, como fuego. No pudo evitar (por más que lo intentara una y mil veces) que sus ojos se fijaran incansables en la cabecita que temblaba, iluminándose para su propia consternación.
Tampoco tuvo su mente participación en los hechos que siguieron. Tan sólo observó. Observó sus manos mientras tomaban una campera. Las observó jalar del picaporte. Las observó buscar el cuerpo cálido de Niwa.
Todo estaba tan oscuro. Pero ya no.
~*~*~*~*~*~*~*~
"un agujero en la noche
súbitamente invadido por un ángel "
25, Árbol de Diana, Alejandra Pizarnik
Notas de la Autora: Espero que les haya gustado ^^... Eso es todo. [Lila Negra, también conocida como Jéssica Eowyn.] 21- 02-2004
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Disclaimer: Satoshi Hiwatari y Daisuke Niwa no me pertenecen, así como el verso final es de mi poeta favorita.
Notas de la Autora: Bueno, ejem... No tenía en mente hacer este fic, pero ayer por la noche, mientras leía poemas de Alejandra Pizarnik, me dije a mí misma: o lo escribo o exploto. Escogí escribir ^^... No es la gran cosa, pero como expliqué, necesitaba hacerlo.
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Un Agujero en la Noche
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Satoshi se sentó en el alfeizar de la ventana, dejando que sus ojos recorriesen las múltiples y melancólicas luces de la ciudad. Todo estaba tan oscuro, sin embargo. La luna le daba de lleno en su rostro, obsequiándole a su habitual palidez un aspecto lechoso, una imagen de ensueño. Todo estaba tan oscuro, sin embargo. Él mismo, sí, era él mismo el que desparramaba aquellas moribundas sombras por cada rincón de la habitación, era él incluso el que mantenía su propia alma dormida, su mirada azul apagada.
Ya estaba levantándose, desabrochando su camisa para ponerse el pijama, planeando (por quinta, sexta ocasión) lo que haría en el siguiente día, cuando algo llamó su atención y le retuvo un momento más en ese mundo lejano. Había una mancha roja; no, no una mancha, sino una cabellera alborotada, sí, la cabellera de un muchacho que, ahora se daba cuenta, él conocía bien.
Se asomó aún más a la ventana, quizás inconscientemente, pero notando, no sin una notable tristeza, que toda su vida giraba alrededor de aquel jovencito, aquél que ahora se veía tan indefenso, tiritando por el frío, y, no obstante, como encendido, como fuego. No pudo evitar (por más que lo intentara una y mil veces) que sus ojos se fijaran incansables en la cabecita que temblaba, iluminándose para su propia consternación.
Tampoco tuvo su mente participación en los hechos que siguieron. Tan sólo observó. Observó sus manos mientras tomaban una campera. Las observó jalar del picaporte. Las observó buscar el cuerpo cálido de Niwa.
Todo estaba tan oscuro. Pero ya no.
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"un agujero en la noche
súbitamente invadido por un ángel "
25, Árbol de Diana, Alejandra Pizarnik
Notas de la Autora: Espero que les haya gustado ^^... Eso es todo. [Lila Negra, también conocida como Jéssica Eowyn.] 21- 02-2004