Saludos damas y caballeros, entidades supernaturales, despiadados monstruos del espacio y súper soldados alterados genéticamente.

Antes que nada quisiera hacer públicas mis mas cinceras disculpas por haberme ausentado durante tanto tiempo en la pagina (y en general de internet) y haber dejado tantas cosas pendientes, por eso decidí escribir este fic como muestra de buena voluntad y aplacar los fuegos del averno al que muchos me condenaron; pero es que he de decir que mis razones de peso las tuve.

Y con respecto al fic, no les diré de que se trata, solo diré que es una sorpresa y que espero sea del agrado de todos.

Así que sin mas entretenciones empecemos con esto ¿les parece?

Disclairmer: Invasor Zim no me pertenece, es propiedad del Sr. J. Vasquez y Nickelodeon y este es un humilde intento de fanfic sin animo o intención de lucro alguno.


Capítulo 1: Horrible destino

Era una noche tranquila y perfectamente normal en la ciudad sin nombre; el hermoso brillo de las estrellas era opacado por la contaminación en la atmósfera y las encegecedoras luces artificiales de los edificios; la luna se asomaba de ves en cuando para luego ser ocultada por las sucias nubes repletas de polución y los perros y gatos bramaban eufóricos sus molestos llamados nocturnos sumándose al discorde ruido de los autos, gente gritando, claxons, choques, disparos de armas de fuego, sirenas de ambulancias, gemidos de cerdos y aviones estrellándose que componían la melodía diaria del trafico.

Sip, era una apacible, hermosa y tranquila noche como cualquier otra en este primitivo planeta... pero eso, no duraría mucho.

¡KAAABOOOOOOOOOOM!

El suelo se sacudió en kilómetros a la redonda por una violenta explosión al tiempo que una gigantesca nube radioactiva con forma de hongo se levantó por entre los suburbios; normalmente esto llamaría la atención de cualquier persona inteligente que hubiera cerca, pero como todos sabemos, las personas que habitan esta cuidad no eran precisamente del tipo "inteligentes" y nunca le prestaban la debida atención a las cosas de verdadera relevancia.

Solo un pequeño niño marginado con una enorme cabeza y fama de demente se daba cuenta del constante peligro que amenazaba a la humanidad, y como solo el se daba cuenta, era SU responsabilidad proteger a todos los humanos del horrible monstruo del espacio que acechaba este mundo haciéndose pasar por un perfectamente normal niñito humano ególatra y misógino de piel verde... y sin orejas.

- ¡ZIIIIIIIIIIIIIIIIM! ¡BASURA ESPACIAL NO ESCAPARÁS ESTA VES! - los gritos de Dib resonaban por todo el vecindario.

Al escuchar tal alboroto a esas horas de la noche, un obeso y calvo humano en calzoncillos (impulsado por un raro momento de curiosidad) se asomó por la ventana de su sala y vio a un niño verde correr gritando por la calle con el cabello prendido en fuego y siendo perseguido de cerca por aquel niño loco de los ovnis que estaba usando un ridiculo traje de hombre banana.

- ¡FREEED! ¡¿que es ese escándalo que se escucha afuera?! - el hombre de los calzoncillos gruño al escuchar la carrasposa y molesta voz de su espantosa esposa - ¡Nada mujer! ¡solo son el chico verde y su amigo el loco que juegan al apocalipsis otra ves! - respondió el tipo gritando hacia adentro de la casa y la replica de su esposa no se hizo esperar - ¡pues si no es nada ven a rascarme las estrías de la espalda! ¡TENGO COMEZÓN! - el tipo se estremeció e hizo una mueca de asco de solo imaginar lo que le esperaba.

Mientras tanto, volviendo con el par de locos en la calle.

- ¡Corre mientras puedas Zim! ¡esta ves te atrapare! - Dib podía sentir que la victoria era suya, estaba por alcanzar a su odiado nemesis, solo un par de metros lo separaban del irken que estaba por poner un pie dentro del campo de nomos frente a su base mal disfrazada, pero cuando estiro su mano para tomar al alienígena por el cuello de su camisa fue detenido en seco sintiendo como si alguien le diera con una pala en la cara.

Aun aturdido por el repentino golpe, Dib escucho la burlona carcajada de Zim que estaba de pie a solo 1 metro frente a el con su humeante peluca ya apagada.

- Ahahahaha ¡patetico! ¡patetico humano! hahahaha - Dib se incorporo tan rápido como pudo con su disfraz de banana para luego abalanzarse contra Zim pero nuevamente el humano fue repelido por alguna clase de barrera invisible quedando de nuevo postrado en la banqueta.

- ¡Tonto gusano terrícola! ¡siente el repulsivo poder del campo de fuerza anti-Dib! ¡WAHAHAHAHA! ¡victoria para Zim! - entusiasmado por su éxito, Zim comenzó a hacer su baile de la victoria mofándose en la cara del Dib.

- ¿Campo de fuerza anti-Dib? - el joven se volvió a levantar y acerco cautelosamente su dedo índice hacia Zim, pero en efecto alguna clase de barrera invisible impedía que alcanzara al alíen.

- ¡Pues aun así no importa marcianito! ¡eh destruido tu gorila-androide-mutante Zim! ¡la victoria es mia! - clamo Dib al tiempo que señalaba al irken - esta noche, tu pierdes.

¡Por supuesto que la victoria era suya! nuevamente otro malvado plan de Zim había fracasado gracias a este ignorado salvador de la humanidad y Dib no pudo evitar inflar el pecho con orgullo; el era el protector de este mundo y mientras el siguiera aquí, Zim jamas obtendrá la victoria.

- Estupida larva crédula, eso fue un truco ¡si! ¡UN TRUCO! y ahora que eh comprobado la eficacia de la nueva defensa de mi base puedo iniciar mi verdadero plan de dominación mundial -

Al oír esta nueva ravelacion, Dib arqueo una ceja.

- Espera, ¿dijiste que todo fue un truco? - Dib se detuvo un segundo para analizar la situación - entonces, faltaste una semana a clases, infectaste la ciudad con una plaga de cucarachas carnívoras, destruiste la UNICA fabrica de papas fritas en el país, arrasaste medio vecindario con un mono mecánico gigante... ¡¿SOLO PARA QUE TE PERSIGUIERA Y PUDIERAS COMPROBAR SI EL CAMPO DE FUERZA DE TU BASE REALMENTE FUNCIONABA?! -

- Ingenioso ¿verdad? - dijo Zim con desmedido orgullo.

- Yo diría que fue algo muy estúpido - replicó el chico de gafas, pero su comentario no hizo mella alguna en el enorme ego del alienígena.

- Piensa lo que quieras Dib, pero pronto, en cualquier momento pondré en marcha mi mas nuevo, ingenioso y mas diabólico plan para destruir a la humanidad ¡y no podrás hacer nada! ¡NAA-DAAA! -

Dib: ¿Nada?

Zim: Nada.

Dib: No.

Zim: Ehm.. No.

Dib: ¿No?

Zim: ¡No!

¡NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! - grito finalmente el humano disfrasado de banana arrodillado en el suelo y elevando sus puños al cielo.

Satisfecho con el desgarrador grito de Dib, Zim le dio la espalda y camino hacia la puerta de su casa; su nueva máquina, El Supermegavociferador 3000, ya estaba listo para ser activado y pronto toda la humanidad caería rendida a sus pies, pero antes de hacerlo, debía traer a sus gloriosos lideres para que se azombraran con su increíble genialidad y le dieran el tan merecido reconocimiento que se merecia como el Invasor mas sorprendente de toda la historia.

Pero en cuanto abrio la puerta y puso un pie dentro de su base, un mas que falso llanto de mujer que sonaba exageradamente preocupada y una melodramática musica de fondo capto su total atención.

En el cuarto de cuidados intensivos de un hospital y rodeada por un centenar de extrañas máquinas medicas, una hermosa y voluptuosa fémina vort de ojos color malva, tersa piel rosa y fina cornamenta cubierta por un delicado velo blanco lloraba sin parar sobre la mano de su apuesto y gallardo amado que se hayaba gallardamente postrado inconsciente en la cama del cuarto con varios cables y sondas cerebrales conectados a su cabeza.

- Buaahaahaa ¡Nooo! ¡noooo! ¡POR EL SER SUPREMO! ¡esto no puede estar pasando! - la afligida vort levanta su bello rostro bañado en lágrimas para ver al convaleciente de piel grisácea y mentón cuadrado que seguía sin responder a sus suplicas - ¡Pipino Hernacles! mi amor, ¡por favor despierta! Buaahaahaa -

De pronto, del techo desciende una pequeña plataforma gravitica y entra en escena una vortian alta y larguirucha vistiendo una vata de cientifica; su bien maquillado ojo izquierdo era color verde jade mientras que su ojo derecho estaba cubierto por un parche negro, su brazo izquierdo había sido extirpado y sustituido por uno mecánico que estaba equipado con una motosierra, un taladro y por dedos tenia afilados escarpelos, jeringas y garfios.

- ¡Dra. Necropsianaitor! - exclamó (exageradamente) sorprendida la despampanante vortian al ver a la "respetada" médico.

- Srita. Castania Insolvencia (si, así se llama la protagonista de fantásticas proporciones), ¡le traigo buenas noticias! - respondió la cirugana a la protagonista del drama - después de muchas horrorosas, terribles e innecesariamente dolorosas pruebas, me alegro el poder comunicarle que..

- ¡¿Pipino se va a recuperar?! ¡¿mi amado prometido por fin va a despertar de su inexplicable letargo para poder casarse conmigo?! - cuestiono esperanzada la chica de fina cornamenta al ponerse de pie revelando su muy escotado vestido de novia con una diminuta minifalda que dejaba muy poco a la imaginación.

- ¿Eh? no, claro que no, no diga tonterías Srita. Insolvencia, la buena noticia es que no tengo ni la mas remota idea de lo que padece su novio - respondió emecionada la experta en cirugías de ética cuestionable.

- ¿Y porque esas son buenas noticias? ¡digame Doctora! por favor ¡DIIGAAAMEEEE! - imploro dramáticamente la chica alzando su rostro y manos al techo y haciendo que su generoso busto se sacudiera arriba y abajo por lo repentino de su movimiento.

- Bueno, son buenas noticias porque con lo inexplicable de este caso me da la oportunidad de seguir con ¡AUN MAS HORROROSAS, TERRIBLES E INNECESARIAMENTE DOLOROSAS PRUEBAS SUMAMENTE COSTOSAS!

Wahahahahahah ¡ABRIR! ¡CERCENAR! ¡EXTIRPAR! ¡MAS CIRUGIA! ¡MAAS CIRUGIIAAA! AAHAHAHAHAHA - las crueles risotadas de la perturbada medico aun se podían escuchar por el pasillo al salir de la habitación para ir a preparar su cuarto de tortu.. es decir, quirófano.

Castania Insolvencia se quedó un momento muda para después volter a ver a su amado Pipino - ¡¿Y CON QUE DINEROS VOY A PAGAR POR TODO ESO?! Buaahaahaaa -

Detrás de la puerta que dejo abierta la médico al salir de la habitación, oculto en las sombras, una despreciable y traicionera criatura ataviado con un gran sobretodo y un sombrero de copa esbozo una codiciosa sonrisa al escuchar el llanto de la despampanante vortian.

¡CHAN CHAN CHAAAN!

-¡NOOOOO! ¡PIPINO HERNACLES! ¡TIENES QUE DESPERTAR! ¡CASTANIA TE NECESITA! ¡ELLA TE AAMAAAA!

- ¡Nyaaaa! ¡nyaa! ¡NYYYAAAAAAAA!

Zim entrecerro sus ojos y gruño con fastidio al ver a Minialce y a Gir gritando de rodillas frente a la pantalla de su sala donde se estaba transmitiendo la telenovela vortiana de éxito intergaláctico (y que a Gir le encantaba ver) "Amores Ruinosos".

Pero antes de que pudiera gritarle algo a su defectuoso primer asistente, una gruesa voz llego desde la cocina.

- ¿De que me perdí? ¿de que me perdí? - Zim se quedo boquiabierto al ver al Amo Freidor Sizz-lorr salir de su cocina con una bandeja llena de panquecitos recién horneados.

- ¡Sizz-lorr! - grito asustado Zim cubriéndose la cabeza al ver al robusto irken

- ¡Ziim! - Bramo vengativamente Sizz-lorr al pequeño invasor lanzandole la bandeja de panquesitos a Gir.

- ¡Giiir! - vocifero el androide con un panquesito en cada mano para sumarse a la conversación que no entendía.

- ¡Nyaagaghh! - chillo Minialce al lado de Gir atragantándose con medio panquesito metido en la boca.

- ¿Como eshtan? - saludo el niño viejo que volvió por su frasco de pastillas de opiáceos para las reumas que había dejado olvidado para después salir como si nada.

- ¡Adiooos! - se despidió alegremente Gir para seguir disfrutando de su telenovela favorita y por un segundo la sala se quedó en silencio.

"..."

- ¡¿Que haces aquí Sizz-lorr?! - cuestiono primero el alíen al recordar que Sizz-lorr aun estaba en su sala.

- Pues estaba preparando panquesitos para ver Amores Ruino.. ¡bahh! ¡quiero decir! - reaccionó Sizz-lorr golpeándose la frente con la palma de su mano para luego recomenzar su argumento usando un tono más severo - ¡eh venido para capturarte Zim! ¡si, una ves mas! ¡y esta ves me asegurare de que no vuelvas a escapar de tu exilio en COMIDORTIA! -

Mil y un horribles recuerdos vinieron a la mente de Zim al tan sólo escuchar el nombre de Comidortia; la interminable tarea de trapear los pisos sucios, los detestables clientes a los que tenia que servir, las humillaciones, la botarga del monstruo del sabor llena de aceite hirviendo, ¡mas humillaciones!, el monstruo del escusado y lo peor de todo.. ¡EL HORRIBLE NIÑO GUSANO BURLÁNDOSE DE EL!

- ¡Nooooooooo! ¡nunca me llevaras de vuelta a Comidortia! ¡NUNCAAA! - grito horrorizado Zim retrocediendo hasta topar su Pak con la pared.

- ¿Ah no? ¡Ha! ¿y como piezas impedirlo? - le reto el Amo Freidor.

Zim miro a su alrededor buscando opciones.

- ¡Gir! ¡defiende a tu Amo y Señor! -

- ¡MODO DE ATAQUE MORTAL ACTIVADO! - contesto el pequeño escupiendo un panque con los ojos rojos para después sacar un brazo robotico de su cabeza y darle a Sizz-lorr un delicioso cono de helado de vainilla con chispitas de colores.

- Oh, gracias - agradecio Sizz-lorr degustando el sabroso helado.

- ¡Herr! ¡Minialce! ¡activa tu arma experimental del día del juicio final y destrulle al intruso! - bramo Zim al ver el patético fracaso de su primera opción.

- ¡Nyyaaaaa! - Minialce comenzó a sacudirse furiosamente y emitió un agudo sonido como preparándose para desatar el fin del mundo solo para detenerse abruptamente, ir a la cocina flotando alegremente y traerle a Sizz-lorr una soda bien fría.

- Valla, que amable - dijo el Freidor dando un sorbo a la bebida.

Bien, eso, fue horrible; Zim vio con terror como un amenazante Sizz-lorr comenzó a acercarse cada ves mas a el mientras bebía su soda; era hora de húsar la artillería pesada.

- ¡Robopadres! ¡Protejan a su creador! -

- ¡Hijo hoy es viernes y es la noche especial de tus mecanizados padres! ¡no molestes y ve a jugar en el inodoro! - replico el robopadre desde el interior del armario de la robomadre sin abrir la puerta.

La situación ya era desesperada para Zim; las opciones se le acababan y Sizz-lorr ya estaba a un par de pasos.

- ¡COMPUTADORA! - clamo con desesperacion el irken como si lo hiciera por un milagro.

- ¡No quiero! - respondió la insolente inteligencia artificial.

Ahora Zim se hallaba bajo la sombra de Sizz-lorr sudando frío y en ese momento supo que todo esta perdido.

- Hora de irnos Zim - dijo el irken con sendas hombreras alzando una pequeña jaula para gatos.

* Mientras tanto, afuera en la calle *

- ¡Vamos! (¡tuunk!), ¡vamos! (¡tuunk!), ¡tonto campo de fuerza! (¡tunnk!), ¡dejame entrar! (¡tuunk!), ¡debo detener a Zim! (¡tuunk! ¡tuunk! ¡tuunk!) - afuera de la base, justo en el limite entre el campo de nomos y la banqueta; Dib seguía intentando romper el campo de fuerza anti-Dib al golpearlo brutalmente con un salmón congelado que encontró inexplicablemente en el bolsillo de su disfraz de hombre banana.

Pero cuando estaba a punto de preguntarse el porque habia un salmón congelado en el bolsillo de su disfraz, una enorme nave espacial se posicionó justo sobre la base de Zim.

- ¡Por.. JÚPITER! - exclamo Dib asombrado mientras un centenar de luces multicolores iluminaban todo el vecindario.

Entonces, sin aviso alguno, el techo de la casa de Zim exploto en pedazos y algo salio disparado hacia arriba directo hacia la nave y un segundo después, la embarcación alienígena desapareció en el cielo nocturno con rumbo al espacio exterior.

Y por un largo instante, Dib se quedo estupefacto con la boca bien abierta señalando el cielo hasta que un terrible escalofrío sacudió su columna vertebral con si alguien le hubiera metido cubitos de hielo dentro de los calzoncillos.

- Ya empezó - alcanzo a decir en un hilo de voz - ¡Por Mercurio! ¡Zim ya comenzó con su plan malvado! - y la histeria comenzó a apoderarse de Dib - cuando dijo que pronto comenzaría con su plan no creí que fuera a hacerlo hoy, yo creí que seria mañana durante el almuerzo o tal ves después de clases o tal ves dentro de una semana ¡PERO NO AHORA!... - Dib miro a todas partes como si buscara alguna solución - ¡Tengo que hacer algo! -

Entonces, de otro de los bolsillos de su ridículo disfraz, Dib saco un enorme altoparlante.

- ¡OIGAN! ¡ESCUCHEN! ¡ ESCUCHEN TODOS! ¡TENGO ALGO MUY IMPERTANTE QUE DECIR! - y para sorpresa y asombro de Dib, las luces de las casas cercanas comenzaron a encenderse y alguna somnolientas personas se asomaron por la ventana lo que animo al joven a seguir con su anuncio - ¡ZIM ES UN HORRIBLE MONSTRUO EXTRATERRESTRE! ¡ESTA ES SU BASE SUPERSECRETA! ¡TIENE A DOS ROBOTS QUE OBEDECEN SUS ÓRDENES! ¡HA IDEADO UN NUEVO PLAN MALVADO PARA APODERARSE DE LA TIERRA Y SI NO HACEMOS ALGO TODOS SEREMOS DEDTRUIDOS! - Dib se detuvo un momento para recuperar el aliento! - ¡Y HA CREADO UN CAMPO DE FUERZA QUE NO ME DEJA ENTRAR A SU BAS.. ¡SHPRAP!

De un momento a otro, Dib había sido sepultado con todo y disfraz bajo un moticulo de mayonesa que al parecer alguien le había lanzado para que se callara.

- ¡Bien lo haré yo solo! - grito el chico emergiendo de entre el aderezo - ¡pero algún día todos lamentarían el no haberme escuchado! ¡TODOS LO LAMENTA..¡POR VENUS! ¡CRASSH! - Dib apenas pudo saltar a un lado para evadir el auto compacto que ahora alguien le había lanzado.

Viendo como una ves mas el mundo no lo escuchaba y sintiéndose derrotado; Dib camino por la calle con la idea de volver a casa y quitarse el disfraz de hombre banana que ya apestaba a mayonesa.

- ¡No! - reaccionó repentinamente Dib deteniendo su andar - ¡no puedo marcharme!, ¡Zim ya inicio su plan! ¡no puedo irme ahora! -

El chico se giro para encarar la base de Zim con una firme mirada.

- ¡Mientras yo este aquí no puedo permitir que Zim se salga con la suya! ¡ no mientras aún haya ESPERANZA! - exclamo con fiero orgullo el joven de la enorme cabeza mientras volvía a la banqueta frente a la casa de Zim - ¡yo soy Dib! ¡el salvador de la humanidad! ¡y mientras aun haya esperanza NO ME MOVERE DE AQUI! clamo al tiempo que levantaba el pecho y se llevaba ambos puños a la cintura asumiendo una pose heroica

- ¡¿ME OYES ZIM?!, ¡NO IMPORTA CUANTO TENGA QUE ESPERAR!, ¡NO IMPORTA QUE NIEVE, QUE GRANICE, QUE LLUEVA MONOS-CANGREJO INFECTADOS CON LA PESTE BUBONICA DEL CIELO!¡NOO MEE MOOVEREE DEE AQUIII-GHIAAAARGGAAAR! - grito Dib con una comadreja rabiosa encima de su cara que alguien mas le habia arrojado.

Y mientras Dib intentaba quitarse de encima a la enloquecida comadreja; fuera del planeta tierra, lejos de nuestro sistema solar y de la Vía Láctea (y metido dentro de una pequeña jaula para gatos hecha de hierro y acero) Zim intentaba desplegar sus extremidades bionicas de su Pak, pero por lo apretado que estaba dentro de la caja le era imposible cualquier intento de escape.

- ¡¿Que cree que estas haciendo?! - le inquirió Sizz-lorr levantando la caja a la altura de su rostro para ver de frente al "invasor".

- ¡HIIIISSSSSSSSS! - pero lo único que recibió por respuesta fue un furioso bufido de parte de Zim así como un par de arañazos al aire con la intención de sacarle un ojo al amo Freidor.

- No te molestes en intentar escapar Zim, ¡esa jaula es INDESTRUCTIBLE! - le grito el ancho irken alzando su cara y puño derecho - esta ves tome medidas extras para asegurarme de que no vuelvas a escapar. -

- ¡Ya te derrote una ves Sizz-lorr y lo volveré a hacer! ¡y cuando los Mas Altos se enteren de esto desearás nunca haberte metido CON ZIM! - le amenazo el pequeño irken sacando una de sus brazos por entre las rejillas de la puerta y señalándolo acusadoramente.

Sizz-lorr no se inmuto por la amenaza de Zim y cuando un pitido proveniente de la computadora de la nave llamo su atención, el Amo Freidor esbozo una siniestra sonrisa - parece que ya llegamos. -

Con un fuerte estruendo acompañado cada uno de sus pasos, Sizz-lorr se dirigió hacia el puente de mando de la nave y cuando estuvo frente al cristal de la cabina volvió a alzar la jaula para que Zim contemplara su horrible destino.

Un mundo destinado al consumo frenético de comida chatarra y rodeado por anuncios satelitales megapanoramicos invitando a todos a un festín si fin.

- N-noo - su voz temblaba - ¡noooo! - el miedo se apoderaba de el - ¡NOOOOOO! - estaba condenado.

- ¡COOMIDOOORTIIAAAAAAAAAA! -

Estaba requetefrito.

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Continuara...


Bueno, pues aquí lo tienen, mi primer fic de comedia; no se si salio bien ya que esta es la primera vez que hago algo así y francamente solo me puse a escribir cuanto disparate se me ocurrió.

Reitero; este es un campo nuevo para mi y si les gusto y claro si quieren que siga, por favor no duden en exponerlo.

Así que hasta la próxima y como siempre cualquier duda, queja o sugerencia sera bien recibida.

Ah por cierto, Srita. Lágrimas, espero que esto sea en especial de su agrado.

A sus servicios:

Observador Daam.

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¡COOMIDOORTIIAAAAAAAAAAA!

A pesar de la gran distancia que los separaba, aquel grito lleno de desesperación llego hasta las antenas de cierta irken sacándola de su profunda meditación.

- Ya esta aquí - se dijo a si misma recostándose complacida en su "trono" y levantando la vista hacía la tintineante luminaria que pobremente iluminaba la oscura cámara.

Y con una malsana sonrisa en su rostro, aquella irken de oscura mirada dio rienda suelta a su inspiracion al reconocer al dueño de aquel agónico grito, dejando que aflorara un sentimiento desde lo mas profundo de su squeedly-spooch

- Pena, dolor y sufrimiento

son cosas que TU me diste a MI.

Pero escucha mis palabras

cual oscuro portento que..

Toc, toc, toc.

Unos tímidos golpesitos en la delgada puerta cortaron su momento de inspiración.

- ¡QUIEN ES! - ladro la fémina con furia al haber sido interrumpida en tan intima situación.

- T-tak d-disculpa, pero ya casi es hora de habrir las puertas .. y, y Tenn dice que te necesita en la caja registradora - la mas que temerosa voz de Skuudge, ex Invasor del Imperio Irken y conquistador de Blorch se oyó del otro lado de la puerta del baño para empleados de Shloogorg's.

- ¡Con un demonio Skuudge acabo de entrar al sanitario! ¡¿no puedes hacerte cargo tu?! - Bramo Tak colérica cubriéndose la cara con sus garras y con un fuerte sonrojo violeta en sus mejillas por semejante importunio.

- Pero Tenn me dijo que me hiciera cargo de la cocina, Sizz-lorr aun no llega - le respondió el rechoncho irken transpirando de miedo por la posible represaría de Tak por haberla molestado en su "momento privado".

- Dile que estaré ahí en 2 minutos - bufo molesta la fémina.

Este era el único momento del día que tenia para ella sola, su único pedazo de cielo en este chiquero y ya había sido arruinado.

- Pero no importa - dijo la irken del lunar en la mejilla - pronto estarás aquí y haré de tu vida un autentico infierno - sentencio Tak al causante de todos sus problemas -

- Ehm, Tak ¿me hablas a mi? - pregunto Skuudge aun desde el otro lado de la puerta.

- ¡YA LARGATE SKUUDGE! -

¡Flushh!

Era hora de volver a su penuria, es decir trabajo.

- Pronto nos veremos Zim -

- ¿Segura que no me hablas a..

- ¡QUE TE LARGES SKUUDGE! -