Hola, hola, pues aquí estamos, es mi primer fanfic así que espero no haber metido la pata demasiado.

Declaimer: Ninguno de los personajes de Fullmetal alchemist me pertenece (aunque me gustaría mucho un Mustang de verdad), son propiedad de Hiromu Arakawa, yo escribo esto por gusto y sin ningún fin de lucro.

Dedicatoria: Este pequeño fic (espero que de verdad no crezca demasiado) es especialmente para mi Taicho, por sugerir que comenzara con esta historia y darle cuerda a mis ideas, para Eri por ser gran amiga y comenzar a ver anime, para Nee-san por aguantarme diario y para mis amorcitos Fai (gracias por el reloj) y Axel .

Ahora sin más, les dejo la historia.

1.-Adios

Xing es un país enorme, llegar no es complicado, sin embargo llegar es un desafío, pues hay que atravesar el desierto oriental. Pero estar aquí es gratificante, hay distintos paisajes, todos hermosos y agradables., colinas, ríos, todo habitado por animales y plantas que nunca había visto, parece tan mágico.

Nii-san, algún día debes visitar este país.

Por ahora Ling me acepto como invitado en su palacio, hoy mismo le pediré ayuda para encontrar a Mei y así aprender Rentanjutsu, después seguiré con este viaje por el mundo como Papá, aprendiendo y enseñando ¿Qué me cuentas tú? ¿Winry ha terminado de reparar tu auto-mail? ¿Cómo está la abuela Pinako? Te extraño Nii-san, me gustaba viajar contigo, me pregunto quién te sacará de problemas ahora que viajamos separados.

Cuídate Nii-san, nos veremos pronto.

Alphonse.

Hacia frio cuando despertó, sonrió feliz por ello y se puso la ropa de trabajo, gracias a las lluvias de ese año tendrían la mejor cosecha de arroz de su vida y también del país, así que con su mejor disposición dio la bienvenida a la temporada.

-Xiao-mei…es hora de trabajar.

La pequeña panda despertó perezosamente y comenzó a limpiar la habitación (N.A. : Recordemos que son el clan menos influyente por su posición económica) mientras la niña alistaba las herramientas de trabajo y preparaba la comida para todo el día, haciendo lo posible por no despertar a sus padres.

Salieron de casa muy temprano, aun estaba oscuro cuando llegaron al primer sitio de trabajo y comenzaron, Mei cortaba (el proceso en realidad se llama segar) las espigas y Xiao-mai las juntaba para llevarlas a casa…y así pasaron horas hasta que el sol daba plenamente sobre el rostro de ambas teniendo que permanecer con la vista agachada para continuar.

Mai estaba realmente fascinada con su agotadora labor entonando alguna canción de niños típica del país, de pronto se encontró con algo que no era precisamente espigas de arroz si no…

-¿Eh? Etto, lo siento señor estamos trabajando así que debo pedirle que por favo… ¿Qué?

-Hola, Mei ¿Interrumpo? Creo que entonces…. ¿Mei? ¿Mei?

Al. no tenía idea de que hacer, la pequeña parecía haberse desmayado y su mascota estaba histérica, lo cual no ayudaba mucho.

-¿Mmm? Xiao-mei… ¿Qué paso?

-Mai ¿Estás bien? ¿No te duele nada?

-¡Alphonse-sama! ¿Cómo?. . .

-Cálmate, siento haberte asustado, por eso te desmayaste, aunque también creo que está relacionado con que debes llevar todo el día sin probar alimentos o agua ¿Verdad?

-Etto, pronto seria la hora del almuerzo, entonces Xiao-mai y yo comeríamos lo que prepare en casa.

-¿Traías comida?

-Sí, sería tonto ir a cosechar sin llevar comida o agua ¿Por qué la pregunta?

-Cierto… ¿Qué? No, por nada en particular- intentando esconder algo y disimular- entonces creo que deberías desayunar.

-Alphonse-sama ¿Qué es eso?... ¡Oh!-El sonrojo cubrió sus mejillas, pues Al. Había asado pescado para ella.- Gracias, no, no era necesario ¿No va a desayunar también Alphonse-sama?

-No, gracias. Ling no me dejo salir hasta que hube desayunado con él, dijo que sería un día muy pesado y me ha obligado a comer ¿Puedo ayudarte después?

-¿Cómo? ¿A cosechar? ¿Cómo cree?

-Es un intercambio equivalente, vine aquí a pedirte un favor, a cambio te ayudare en todo lo que pueda y si hay algo que pueda mostrarte, lo hare.

-¿Un favor? Cualquier cosa Alphonse-sama.

Desde ese día a la fecha, han pasado un par de años, yo he aprendido la alquimia de Amestris a cambio de mostrarle a Alphonse-sama el rentajutsu de Xing, además intercambiamos nuevas técnicas de combate y algo de cocina (¡No sabía que el supiera cocinar!). Compartimos muchos momentos, pero no habría suficiente espacio donde plasmarlos, sin embargo se que este día quedara grabado en mi memoria tanto como esos, hoy Alphonse-sama se marcha de Xing, recorrerá el mundo como su padre y su hermano, y yo…yo me quedo, no me ha pedido que le acompañe, ni si quiera le ha pasado por la mente.

Todo este tiempo traté de mantener mis emociones a raya, pero he visto que mientras estaban ocultas crecían y crecían, como las raíces de un árbol que se extienden por debajo aunque solo veas en la superficie un pequeño retoño. Alphonse-sama, me pregunto quien llegará a ser la persona especial en tu vida, por la que harías lo mismo que tu hermano ha hecho por Winry-san.

Estas ahora en el umbral de mi puerta, con las maletas en tus manos y una enorme sonrisa en tu rostro, agradeciéndome por todo y asegurando que nos escribirás pronto, a todos. Das media vuelta, tu mano sigue despidiéndose y sé que también sigues sonriendo, pero yo no puedo hacer lo mismo, las lágrimas brotan cuando comienzas a caminar. Me dejas atrás Alphonse-sama, triste y lastimada por mí misma, aunque debería estar contenta, porque estás viviendo tu sueño, porque estas siendo feliz…

-Buena suerte Alphonse-sama, que tengas muchos días felices.

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Pronto subiré el segundo capítulo.