¡Hola, ya estoy aquí! Bueno, esta una pequeña historia que tenía en mi libreta vieja, nada del otro mundo. Cuando pueda pasaré otra historia cortita de teen wolf que solo me falta pasar a ordenador. Estoy trabajando en varios one-shots de Gotham y en dos historias Jonnor de la serie the fosters. Espero poder ser más productiva que últimamente... Sin más disfrutar de la historia :)
Si alguien…
Si alguien le hubiera dicho unos meses antes que estaría saliendo con una mujer coyote, la más preciosa que había visto nunca (también la única pero el punto es que era preciosa) le hubiera escupido en la cara por mentiroso.
Si alguien le hubiera dicho que su mejor amiga sería Lydia Martin de la cual llevaba colgado tanto tiempo que ni siquiera recordaba desde cuándo (y que se habían besado una vez) le hubiera disparado en toda la cara por reírse de él. O más bien hubiera usado su bate pues no tenía pistola. Pero la idea se entendía.
Si alguien le hubiera dicho que Scott, su Scott, sería un verdadero alfa (con ojos rojos y todo, de esos que molan y acojonan a la vez) le hubiera pateado el trasero por meterse con su Scotty pues nadie podría habérselo llegado a creer nunca (y solo él se podía meter con su mejor amigo).
Si alguien le hubiera dicho que Derek, el lobo amargado con el que tenía una especie de amistad-odio, se echaría novia (y esta vez no sería una psicópata empedernida, el que no quisiera matarlos a todos era de agradecer) se hubiera reído en su cara pues era prácticamente imposible (nadie podía estar en la misma estancia que ese tipo sin temer por su vida como mínimo una vez cada diez minutos. ¿O era solo él?).
Si alguien le hubiera dicho que tendrían a un nuevo beta en la manada (o más que vetea a un bebé pues en ocasiones parecía un crío, el crío de todos) le habría pegado a Scott por atreverse a convertir a un pobre chico (dadas ciertas circunstancias, todo sea dicho). Y además, Liam tenía suerte de tenerlos a todos, claro que sí.
Si alguien le hubiera dicho que Parrish, ese joven compañero de su padre y que el caía bastante bien (de eso a que lo dejara salir con Lydia había mucho trozo. ¡Eso nunca!) se uniría a su selecto club de bichos raros (del cual él estaba al margen), lo hubiera quemado vivo (y por cierto, que Parrish fuera inmune al fuego era una pasada).
Si alguien le hubiera dicho que Kira estaría en el club de lacrosse le habría dado un ataque (como se le fuera la olla todos en el campo estarían fritos, incluido él mismo).
Si alguien le hubiera dicho que su padre por fin se echaría novia y que sería nada más y nada menos que la señora McCall habría vomitado primero y luego se habría sentido feliz por ellos (solo para después vomitar unas diez veces más).
Si alguien le hubiera dicho que Peter se tranquilizaría y dejaría el mal camino para centrarse en su hija, le hubiera dado el número de Eichen House porque parecía una locura.
Si alguien le hubiera dicho todo aquello le habría dado un patatús al oírlo. Sin embargo, era su vida. Y Stiles no pensaba cambiarla por nada del mundo.
Bueno, quizás por ser Batman. Es que Batman es Batman…
Los reviews se agradecen. ¡Nos leemos!