descargo de responsabilidad no soy dueña de los personajes pertenecientes a big time rush! ya quisiera! si fuera por mi kogan seria real!

bueno, esta historia la he estado escribiendo hace mucho tiempo y había dejado de escribir porque me había estancado en esto, así que al fin me ha gustado como termino y al fin aquí esta

este es solo el primer capitulo, así que pueden esperar más

lean, dejen review!

los amo!


Eucalipto

Mi nombre es Kendall

Salí del auto y sentí a Adam hacer exactamente lo mismo

Pronto él bajó mis cosas del auto y me dirigió consigo a la puerta, se volteó a verme, tenía los ojos llenos de decepción, dejó las cosas en el suelo de la puerta cuando alguien vino a abrir la, era una señora de edad mayor, el pelo gris y las gafas de montura lo decían, ella sonrió e intercambió unas palabras con Adam; él cual le entregó unos papeles se volteó a verme, recuerdo que nunca dijo una palabra y depositó un pequeño beso en mi frente; era como si fuera la primera vez que pude haberlo llamado "papá", luego él simplemente se fue, sin decir palabra sin siquiera voltear atrás, ese fue el día en que me despedí de mi antigua vida y lo entendí bien, a pesar de mi corta edad en ese momento pude saber que nunca lo volvería a ver

Nací en un condado de Connecticut, el 20 de enero de 1995 recuerdo una buena infancia, nunca conocí a papá pero en realidad nunca me intereso saberlo, todo cambio un día. Un hombre entró por la puerta y puedo decir que desde ese día todo fue en picada

Mama estaba feliz en un principio y le presentó a aquel hombre como mi padre, no puedo decir que lo recibí con una sonrisa porque seria mentir, en realidad solo subí al cuarto, tenia cinco años, y también supe que en ese momento fue en el que todo comenzó. Recuerdo que había lanzado un comentario sarcástico y agudo hacia ellos, pero ninguno pareció estar muy complacido. Meses después el hombre estaba total y completamente instalado en casa, luego de ello llegaron dos niñas más a casa, ellas decían ser hijas de aquel hombre al que me había negado llamar papá, pues a pesar que de que lo fuera yo solo me había criado con mi madre y la había visto sufrir una y otra vez porque no tenia dinero, o porque un hombre había querido aprovecharse y yo como un niño no había sabido responder e eso, ese hombre no podía decirse padre si nos había dejado a la deriva cuando nací, pero en cambio mamá parecía feliz, la manera en que lo recibía cuando llegaba a casa y como prestaba mas atención a las niñas que a mi, allí empezaron todos y cada uno de los comentario sarcásticos, me volví un bastardo, o por lo menos eso fue lo que gritó Adam, mi padre, en un pelea.

Todo empeoró en la escuela, solía sentarme solo y no tener amigos, en realidad nunca me grado, pues aunque quisiera prácticamente nunca pude detener lo comentarios sarcásticos, y prefería no hablar con nadie que tener que lidiar con el hecho de que se alejaran de mi como mamá lo hizo. El estar solo no solo me trajo algo de tristeza, también acarreó burlas y yo no me pude contener.

En al escuela era solo pela tras pelea, pelea tras pelea, y la verdad llegó un momento en que me dio igual lo que Adam me gritaran por haber sido tan "malo" con esos niños

Tenia ocho años cuando me metí en una "gran pelea" había dañado al niño y por lo que se había tenido varias puntadas de cuando lo arrojé el suelo donde había vidrios, y aunque ese fue el día en que papá me puso por primera vez una mano encima a mamá no le importo, cada vez era más diferente, era como si la estuviera perdiendo y en un momento parecía que ella tenia unos quince años y era un jovencita precoz que no podía ni siquiera controlarse a si misma. Escuché todas y cada una de las peleas que solían tener los dos, me había convertido en un bastardo que no podía controlarse a si mismo, la manera en que golpee a los otros, mis cometarios sarcásticos y dañinos, tenia diez años y tenia la actitud de un bastado de 17, yo mismo me asusté, la manera en que lloré sobre la almohada deseando fuera el hombro de mi madre

Perdí a mi madre un día, estaba en un fiesta, esta tan borracha y un auto la atropello, y Adam se volvió loco, golpe tras golpe por cada uno de mis cometarios, rogué porque parara, porque parara de golpearme porque ni siquiera yo podía controlarme, fue cuando caminé frente a un auto con toda intención, lo había planeado tan bien como un niño de 10 años podía. Todo había sido inútil; de todas formas el auto se había detenido y lo único que me lleve fueron unos golpes y un brazo roto, fue así como el médico le recomendó a Adam que me trajera aquí, es así como terminé en esta institución mental tan llamada "eucalipto".

Puedo decir mínimo que aunque parezca una prisión el nombre le va bien, todos los árboles grandes y viejos de eucalipto son resistentes, pues desde que llegué aquí suelo escalarlos y pasar todo mi tiempo libre allí arriba, donde nadie pueda lastimarme; donde yo no pueda lastimar a nadie, sintiéndome solo un poco más desdichado cada día, mirando hacia abajo y pensado si caer de cabeza desde allí arriba podría matarme y acabar con esto

Tengo diecisiete años, una madre muerta, siete años en un instituto mental y un montón de cometarios sarcásticos

Mi nombre es Kendall…


xoxo